Chocó 7 días

Secciones

 

 

 

El lenguaje de los politiqueros

Fabio Teolindo Perea H.

La cultura político- electoral ha generado en el Chocó un lenguaje peculiar que simboliza la corrupción. Los términos están cargados de intencionalidad de latrocinio que muchos profesionales y dirigentes politiqueros han creado como medio de comunicación de la red burocrática. Conozcamos algunos de los términos del lenguaje politiquero. 

Paquete. Referido a la persona que hace parte del grupo del jefe político. Se escucha: "Hago parte del paquete" o "Tiburcio es del paquete". Este vocablo sustituyó a "rosca política".

Torcido. Concepto que se opone al anterior; se tipifica al individuo ex militante de un grupo que por inconformidad se ubica en otro sector. (Entre los cordobistas se escucha con frecuencia). 

Voy por lo mío. Concepción de muchos universitarios y dirigentes electorales que aspiran a ocupar puestos de orden financiero y administrativo para asegurar su futuro (al final muchos terminan en la cárcel). 

Como voy. Expresión usada por funcionarios involucrados en los procesos de contratación y de compras, y por otros que ejercen control fiscal, disciplinario, policivo y judicial. 

Te copio. Palabra que se está generalizando por los usuarios electorales; es como una clave de afirmación al mensaje enviado por el copartidario o jefe político: "Fulano de tal no me copió, por eso no se pudo amarrar la vaina". 

Tramando algo. Cuando varios activistas electorales están reunidos en sitios estratégicos y existe la perspectiva de algo (un contrato, nombramiento, pago, etc.). El torcido o no torcido muy preocupado comenta: "Allá se está tramando algo".

Se me apareció la virgencita. Hace referencia a la oportunidad inesperada o el chance  de administrar algo bueno y sacarle partida en el breve tiempo. Con las destituciones de directores, alcaldes y gobernadores se les ha presentando la virgencita a decenas de chocoanos. 

Pobrecito. Expresión de solidaridad utilizado por seguidores de un alcalde cuando es tutelado, suspendido, destituido o encarcelado. Dentro de los valores invertidos, se escucha: "Pobrecito mi jefe, lo encarcelaron solo por persecución política". En esta tragicomedia (recordemos la obra de Rivas Lara) quien lesiona los intereses del tesoro público es convertido en víctima, el pobrecito. 

Verrugoso y fiduciario. Es un caso especial de Tadó. Se han conformado dos sectores irreconciliables: los verrugosos corresponden al movimiento liderado por el conservatismo oficial y los fiduciarios los liderados por el cordobismo. 

Mordelón. La persona favorecida en las administraciones, que monopoliza contratos o servicios. 

Aval. Respaldo político que da el jefe para que se proceda de inmediato a resolver la situación. "Señor pagador, mi cuenta ya tiene con el aval del jefe". 

Embargo. Para negar el pago de una cuenta a un torcido u opositor muchos alcaldes inventan: "La cuenta está embargada". 

Faltan otros términos, pero lo importante es evitar que este lenguaje se convierta en una práctica e identidad de los chocoanos. 

© 2005 Chocó 7 días
http://www.choco7dias.vze.com