Yussi Johana Rentería Vidal, Niña Chocó 2004-2005 obtuvo el título de segunda princesa en el concurso Niña Colombia que se realizó ayer en la capital del país. Entre 26 participantes de todo Colombia, nuestra niña Chocó se destacó por su originalidad y espontaneidad a la hora de responder al jurado calificador. La niña Chocó, acompañará a la niña Colombia a todos los eventos que ésta realize como representante de la niñez en Colombia. Desde Bogotá Yussi Johana, dedicó este triunfo a los niños del Chocó y a su familia.

Con un desfile por las calles de Quibdó, se inició formalmente la segunda temporada de arte y teatro en Quibdó. Grupos de diferentes partes del país se presentarán en diferentes escenarios como la casa de la Cultura, el auditorio de la universidad Antonio Nariño, entre otros. El costo de la entrada es de sólo $1.000 y los asistentes podrán disfrutar de la creatividad y majestuosidad del arte y la cultura en las tablas.

La oficina de Cultura y Turismo del Chocó y el Consejo departamental de artes visuales, inaugurarán esta noche, en el auditorio del convento de Quibdó, la segunda muestra de pinturas realizadas por artistas de nuestra región. El evento será inaugurado por la directora de la oficina de cultura y turismo a las 8 de la noche y las pinturas estarán expuestas hasta el 23 de diciembre.

Por considerar que es un grupo que se ha proyectado, el canal regional Teleantioquia, invitó para hoy a los integrantes del grupo Fusión Perreo. A las 11 de la mañana los integrantes de esta agrupación chocoana, entregarán un amplio repertorio a los televidentes que a esa hora los ven por este canal.

La diócesis de Quibdó en coordinación con otras entidades de nuestro departamento, realizará las ya tradicionales novenas navideñas en el malecón de Quibdó. Dulces y regalos les serán entregados a los niños que del 16 al 24 de diciembre se presenten en el nuevo malecón de Quibdó. La distribución para rezar las novenas estará a cargo de las diferentes entidades participantes.

DE LA LITERATURA CHOCOANA

Por Ely Gómez Ortega

Antonio Romero Parra -Pbro.

En esta edición el autor nos ofrece una nueva panorámica de la Diócesis Istmina-Tadó, enfocando de manera puntual la magnífica obra de Monseñor Gustavo Posada Peláez (q.e.p.d), obispo emérito en toda su jurisdicción, que dirigió 40 años. Hay composiciones en Acróstico, de los párrocos, lo mismo que del señor Obispo actual S.E. Llano Ruiz (Pag. 10).

"Bajo el cielo de nubes y de lluvias,

A la luz de la luna y aun del sol,

A la orilla del mar y de la selva

han nacido los salmos del Chocó

"En la frágil canoa de los ríos

Del San Juan, del San Pablo y Baudó.

Como historia sagrada de esta tierra, Han nacido los salmos del Chocó"

Sin embargo como ya lo comentamos, este tomo hace énfasis en el primer obispo, para decir entre tantas cosas, lo que nos parece un acertado criterio plasmado en el decreto de honores póstumos 649 del 8 de diciembre de 1999, expedido por el alcalde municipal de Istmina (E), Gabriel Asprilla Murillo, donde expresa:

"Que Monseñor Gustavo Posada Peláez, fue para el Chocó como un sueño de Dios entregado a esta región como conductor y guía, puesto que sus ejecutorias espirituales y materiales son innumerables..."

El acto administrativo menciona al seminario San Pío X, expansión del barrio Cubis, el Ancianato, los planteles de bachillerato, la promoción a los indígenas, creación del municipio del Litoral del San Juan (Capital Santa Genoveva de Docordó), y mil obras más, que marcaron un hito en el progreso de la ciudad de Istmina, en particular, que realmente fue la más beneficiada con el reinado de Monseñor Posada Peláez. Pareciera que el prelado quiso prolongar en hechos aquellas frases de su paisano, el entonces presidente de la República Marco Fidel Suárez, cuando ese 24 de abril de 1920 - poniéndose de pie en la canoa que lo arribaba exclamó entusiasmado: "Istmina, ciudad amable" en respuesta al recibimiento apoteósico que le brindó la capital del San Juan.

Eramos estudiantes de la escuela de Artes y Oficios, cuando a finales de mayo de 1953, Monseñor Posada Peláez hizo su entrada triunfal al Chocó, empezándola por el aeropuerto de Condoto, amenizada por el banda del glorioso "Colegio Carrasquilla"; lo mismo que los planteles de Nóvita, Andagoya y delegaciones que de todas partes acudieron al aeropuerto.

Entró por breves momentos a Condoto, bajó a Andagoya por carretera y llegó a Istmina, donde fue sencillamente grandioso el recibimiento. Todos los estratos se dieron cita en la "Boca de la quebrada". Se declaró día cívico, y entre los oradores recuerdo al doctor Neftalí Mosquera, juez promiscuo del circuito, quien dijo unas palabras en latín muy ponderado, cuyo texto se nos olvidó, pero significaba la bienvenida al Pastor Salvador de las almas, desde tan alta jerarquía que por generosidad del Papa, había elevado a la categoría de Vicariato la provincia con jurisdicción en Baudó y la Costa Pacifica. De verdad que Istmina de hoy, le debe mucho a Monseñor Posada Peláez. Su obra durante 40 años, será un gran reto para superar. Hay istmineños que afirman que Istmina no supo agradecer lo suficiente a Monseñor Posada Peláez.

De otra parte, no queremos concluir estos plumazos, sin felicitar al Pbro. Romero Parra por su trabajo constante, pues dentro de su misión sacerdotal, ha sabido combinar excelentemente el periodismo, la literatura y el servicio social como Apostol de Cristo en los tiempos modernos.