El beatito Henry

...orando en voz alta

Ay Diosito, ¡qué cansado que estoy hoy día y qué dolor de cabeza tengo!. Claro pues, ¿quién me manda a creerme súper Henry?... solamente a mí se me ocurre celebrar doce misas en un solo día. Eso sí, pienso recordar las cosas que pasaron para que después no anden diciendo cosas que no son (Tú sabes pues, cómo es la gente de chismosa ¿no?)... en la celebración de la misa número once, después de sus respectivas diez bien servidas copas de borgoña semi-seco y del accidente con la Biblia, no me quedó otra que improvisar y contar a los ancianitos del asilo aquel pasaje en el que Jesús sana al paralítico. Fue conforme avanzaba mi reflexión que viendo a los ancianitos tan emocionados, contagiado por su emoción se me ocurrió imitarte y les dije ¡levántense y anden!... Yo no sé por qué las enfermeras hicieron tanto escándalo cuando vieron a todos los viejitos tirados en el suelo y a sus dientes postizos volando por todo el salón (total, ¿quién no se ha caído cuando empieza a caminar?).

Pero como Tú has dicho que cuando nos maldigan o persigan por causa tuya seremos bienaventurados yo interpreté los gritos de las enfermeras como una prueba más y fue así que, renovadas mis fuerzas con tu palabra, decidí que tenía que terminar con lo ofrecido y me dirigí a mi siguiente destino. Y aunque tengo que admitir que corriendo en mi scooter a 15 Km. por hora el viento me molestaba un poco, al llegar a mi destino me sentía tan "in heaven" que celebré la misa en "latín-quechua"... ¡just for cool people! y causé sensación entre los asistentes... En verdad, cómo me habrá ido de regio que al final los encargados del hospital psiquiátrico no me querían dejar ir por ningún motivo...

En fin Diosito, creo que ya estuvo bien de recuerdos ¿no?. Además, si sigo contándote, después vas a pensar que soy un vanidoso y que siempre te saco en cara las cosas que hago por Ti, así que mejor volvamos a lo más importante que es pensar en otro ofrecimiento por todas aquellas personas que están siendo víctimas de la guerra (doce misas diarias es muy agotador). Porque la verdad es que cada vez que me acuerdo de la famosa Libertad "Duradera" (Ex "Justicia Infinita") se me viene el calambre a la retina que ya creía curado. Y es que si bien las personas y los Estados tienen derecho a su legítima defensa y, por tanto, a exigir una reparación por parte de quién los agreda, tampoco podemos perder de vista que, a veces, esta reparación se convierte en una excusa para expresar nuestra cólera e imponer una venganza que puede ser peor que la agresión inicial.

Por eso yo te pido que nos ayudes a no generar más violencia... que no veamos ciudades destruidas, poblaciones exterminadas o culturas pérdidas a causa del odio. Te pido ahora más que nunca que prime entre nosotros la caridad, la justicia y el perdón. Además te pido que todas las personas y Estados que hacen mal a la humanidad y faltan a valores tan primordiales como el respeto a la vida y a la libertad vean su error y se arrepientan. Bueno Diosito, creo que con el calambre no voy a poder pensar bien en el ofrecimiento, así que mejor me acuesto que ya mañana se me ocurrirá algo.

Amén