Prisioneros del Destino. Capitulo 7 'La Encomienda' Capitulo 7
* La Encomienda.

Después de tanto tiempo, tanta búsqueda... tanto sufrimiento, finalmente sería capaz de encontrar el sentido, la razón por la cual sobre ella se habían impuesto tales responsabilidades.
Frente a ella finalmente estaban las respuestas que con tanto ahínco a buscado... Pero algo era claro, tenía un mal presentimiento de todo esto, sabía que posiblemente el conocimiento solo traería consigo más dolor...
- "Lo que están por presenciar, son eventos los cuales han sido restringidos de toda mente humana. Hechos, imágenes sobre lo que ocurrió hace más de 500 años en este planeta del Sistema Solar. Conocimiento que ha sido guardado hasta hoy solo para ti Yakumo"- dijo el guardián al darle las espalda a ambos 'mortales' quienes observaron con atención el espacio que había comenzado a distorcionarse en ondas que simulaban el movimiento de las aguas, en el cual la imagen de la Tierra había aparecido.
- "Desde los inicios del Tiempo, nosotros los Guardianes Celestiales, hemos velado por la seguridad y bienestar del universo entero. A cada uno de nosotros se nos brinda una galaxia o sistema determinado al cual debemos proteger. Todos nosotros juramos en llevar a cabo nuestra misión respecto a nuestras leyes, sin embargo en toda cosecha siempre existe un fruto podrido y en nuestra caso no fue la excepción..."
La imagen que mostraba la Tierra fue suplantada por la de un extraño ser. Uno el cual poseía una gran estatura, estaba cubierto completamente por una armadura de colores púrpura, una capa corta se ondeaba a sus espaldas, y un casco que cubría por completo su rostro, solo sus llameantes ojos rojizos sobresaltaban de aquel espacio de oscuridad de la mascara.
- "Entre nosotros se encontraba un Guardián de nombre Lanancuras, él era el protector de la Vía Láctea y de todo planeta que en ella habitase. Sin embargo, incluso nuestras almas inmortales pueden ser contaminadas o inducidas al mal por pensamientos tan impuros como la avaricia por el deseo exagerado de poder... poder absoluto que Lanancuras deseaba aspirar.
Cort: ¿Donde habré escuchado historia parecida?- murmuró sarcástico.
- "Intentó que todos nosotros nos pusieras de su lado y comenzásemos a ver la situación como él la veía. Él no encontraba ninguna satisfacción al proteger el Universo sin recibir nada a cambio, creía que con el poder que poseemos debíamos darnos a conocer, tomar lo que nos correspondía, obtener el poder que según en su mente torcida merecíamos al ser omnipotentes... Sus palabras llegaron hasta los corazones de tres de nuestros más jóvenes guardianes, aun guardianes de menor rango, y al ver que la mayoría de nosotros desaprobábamos sus ideas, se volvió contra nosotros, por lo que fue exiliado junto a sus aliados... Por este hecho, dejo de ser un Guardián y esto permitió que pudiese actuar directamente sobre la vida en el Universo, comenzando así a formar su propio imperio el cual llamo 'El Imperio Cardian'"
Cort: ¿Tiene alguna relación con un tal 'Imperio Sirois'?- interrumpió.
- "Buena pregunta... pero creo que tendrás que esperar para la respuesta joven... Bien, Lanancuras aun poseía los poderes que como guardián le pertenecían, por lo que fue capaz de integrar su imperio con los seres que él creyese mejor, así es como creo a los Cardians, seres que poseían ciertas características similares a la de un Enterrícola, sin embargo la diferencia de poderes era mayor... Los tres guardianes menores que lo siguieron al exilio fueron sus generales principales, ellos eran quienes encabezaban las invasiones a cada uno de los planetas que Lanancuras deseaba tomar como su Territorio."
- "Fue una época oscura para el Universo... Lanancuras y su Imperio desolaron planetas, galaxias enteras..."
Yakumo: Pero ¿por qué... por qué no hicieron nada para detenerlo?
Cort: Es verdad, se supone que ustedes son los 'Guardianes' de este universo, era su responsabilidad... Aunque si se parecen a los Kaiohsamas de mi mundo... creo que es comprensible que no hayan hecho nada...
- "Me temo que hay una gran diferencia entre los Kaiohsamas con nosotros. Nosotros nos regimos por ciertas leyes, una de ellas, es el no actuar directamente sobre la vida de los seres vivos, y otra de ellas es que no podíamos atacar a Lanancuras mientras él estuviese en algún planeta, debía acceder a nuestro plano existencial, a este al que los trajimos a ustedes."- explicó.
- "Y así como lo hicimos con ustedes, le hicimos a Lanancuras cuando el siguiente planeta por conquistar fue el planeta Tierra... Su ejercito con sus generales arribaron hace más de 500 años, sin embargo en ese tiempo existían guerreros terrestres que lucharían por defender su planeta, entre ellos se encontraban divinidades con las cuales pudimos tener contacto, logrando así advertirles de lo que les deparaba con la llegada de los guerreros Cardians."
Las imágenes mostraron escenas de guerra, en donde seres humanos, cardians, muchos otros seres combatían.
- "Se desarrollaron terribles batallas, infinidad de ellas, muchas bajas, muchos amigos y aliados murieron en los campos de batalla... Pero el sacrificio de todos ellos nos dio la oportunidad que buscábamos, obligar a Lanancuras a acceder a este plano de existencia, en el cual no era inmune para nosotros, sin embargo, aun así, él poseía grandes habilidades, pero cada una de ellas estaba respaldada por la maldad, el odio y el rencor contra nosotros, eso lo hacía más fuerte... Sin embargo, todos nosotros creímos aquella vez que había posibilidades de qué nuestro antiguo compañero entrase en razón... por lo que decidimos confinarlo a una prisión, una prisión hecha con los residuos materiales de planetas cercanos que destruyó a su paso, prisión que deambularía en el espacio hasta que su mente enfermiza encontrase nuevamente el balance... Nos equivocamos...- murmuró apenado- Como defensores del bien, creíamos ciegamente que entraría en razón, que se reformaría y fue por ello que el más valiente de nosotros se presto a hacer 'el sacrificio máximo' para lograr sellar a Lanancuras en esa prisión de piedra, le brindamos nuestros poderes, y nuestro más joven guardián accedió ciegamente a sacrificarse por confinar a nuestro antiguo compañero..."
- "Ante lo sucedido con su líder, el más fuerte de sus tres generales accedió al mando, y no desistió en conquistar la Tierra para él, aquello se había vuelto ya un reto mas que una guerra. Fue entonces en que uno de lo pocos guerreros de la Tierra que quedaban en pie, al ser portador de un milagroso cristal y utilizando la luz que aun le quedaba de vida, logró finalmente detener a los Cardians... No encontró otra manera que no fuese el confinamiento, el poder de ese cristal mantendría el sello eternamente. Se nos brindó ese cristal para que lo protegiéramos, evitar que cállese en malas manos ya que aquello representaba la llave que guardaba bajo llave la prisión de los Cardians, pero también representaba su llave de liberación, por lo que lo destruimos."
Yakumo: Lo que ha dicho... suena muy increíble, y si no lo estuviese viendo con mis propios ojos jamas lo hubiese creído...- murmuró anonadada.
Cort: ¿Y qué tiene que ver esto con Yakumo?- preguntó con un gesto serio.
- "Todo.- respondió secamente al volverse a la joven- Verán... Después de lo ocurrido en la Tierra, la situación se torno difícil para el humano, el mismo miedo les impedía salir a delante, pero nos fue permitido borrar todo recuerdo de los Cardians de la mente de los humanos sobrevivientes... Al hacerlo la humanidad continuo el mismo ritmo de vida el cual había sido interrumpido por esta guerra... Décadas después, fue cuando la tecnología del hombre le permitió crear vida, seres dotados con habilidades mejoradas o de las que carecía el humano normal... Vinieron años de prosperidad en el planeta, y los enterrícolas y humanos coexistieron en paz hasta que 'Los Reyes Negros' comenzaron una rebelión, en la cual levantaron a todos sus hermanos enterrícolas a exterminar a los humanos, haciéndoles ver que la raza humana era la peste del planeta, que debían tomar lo que les pertenecía por ser los más fuertes y capaces..."
Yakumo: ... Y fue así como comenzó todo...- murmuró al recordar pequeñas imágenes de su infancia.
- "Eras muy pequeña cuando sucedió todo esto Yakumo, pero en ese entonces ya habías sido elegida por nosotros mucho antes de que esto ocurriera"
Yakumo: Pero ¿por qué?! ¿Por qué yo?!- preguntó.
- "Fue durante esta nueva guerra, entre humanos y enterrícolas, en la que un meteorito entro en la órbita de la Tierra, siendo atraído por la atmósfera, obligándolo a estrellarse en el planeta, esto ocasiono la muerte de miles, humanos y enterricolas por igual, pero este hecho no logró que los enterrícolas desistieran del exterminio de los humanos"- explicaba conforme las imágenes aparecían ayudando al entendimiento del relato.
- "No le tomaron mucha importancia, pero este meteorito, es la prisión que mantiene al mismo Lanancuras en su confinamiento..."
Yakumo: No puede ser...
- "La colisión, solo logró que las barreras de la prisión se debilitaran al momento en que dos trozos de este meteorito se desprendieron, llevando consigo parte de nuestro propio poder. Un fragmento llego hasta ti Yakumo, es así como se te brindo los poderes que has venido desarrollando desde el inicio de tu viaje..."
Cort: Ahora todo tiene sentido... Ya decía yo que una humano normal no podía poseer esos poderes por naturaleza... Son poderes que les brindaron estas divinidades- pensó al escuchar las palabras del guardián.
- "El segundo fragmento tenía un propósito, llegar hasta Mushrambo, brindarle nuestro poder para que en un futuro fuese tu protector incondicional Yakumo, sin embargo, Lanancuras fue muy listo, no quería perder a alguien como Mushrambo para sus propósitos por lo que logró contaminar con una fracción de su propio poder y maldad aquel fragmento que se introdujo en él."
Yakumo: Todo esto es tan confuso...- susurró al sentirse muy desconcertada ante lo que estaba escuchando.
- "Lo sé, pero ahora debemos continuar, es de vital importancia para el futuro que tengas conocimiento de esto... te aseguro que algún día todo será más claro para ti. Con Lanancuras en la Tierra, aun le era imposible salir de su confinamiento, por lo que prefirió actuar de una manera indirecta, a través de Mushrambo y los demás Reyes, Lanancuras sabía que tú representarías algún día su mayor obstáculo, por lo que sin que ellos se diesen cuenta, Los 7 Reyes de Enterra solo le servían a él y su propósito de eliminarte antes de que tuvieses consciencia de todo esto...
Yakumo: ¿Siempre a sido él quien ha querido eliminarme?
- "Así es... Pero hemos tratado de hacer todo lo posible para tu seguridad, te dotamos de tres guardianes, tres enterricolas, te entregamos al mismo Mushrambo para que te cuidase..."
- "Has pasado por tanto, pero te aseguramos que fue necesario... Tu pelea con los Reyes de Enterra logró lo que esperábamos, que el Mushrambo que convirtió Lanancuras en maligno tuviese la oportunidad de renacer así podríamos lograr colocarlo de nuestro lado... Sin embargo Mushrambo siempre tendría consigo aquella misma frialdad y violencia en su alma que sería muy difícil que pudiésemos llevarlo a ti y que le enseñases que podía enfocar todos sus instintos de guerrero a buenos propósitos, al bien... Es por ello que cuando el maligno Mushrambo murió separamos su esencia en tres cristales, cada uno de ellos se les fue brindado a tres pequeños enterricolas que tuviste la oportunidad de conocer.
Yakumo: Mushra, Saago y Kutal...
- "Efectivamente. Al dividir la esencia de Mushrambo en tres seres creímos que sería lo mejor, a cada uno de los portadores de las gemas inconsciente transmitiste nuestros deseos, que te protegiesen, y todo fue gracias a tu gracia y a tu noble corazón, tu inocencia pura, los cautivaste con tus enseñanzas y les brindaste lo necesario para darse cuenta que es a través de ti de quien este mundo podría salvarse... Ellos te amaron Yakumo, los enseñaste a amar, algo que logro que esencia de Lanancuras que habitaba en sus almas fuese desplazada por el amor que te tuvieron...
Yakumo: Ustedes nos escogieron, nos han visto luchar... ustedes nos han impuesto todo el sufrimiento por el que hemos pasado... ¿que derecho tenían?!- preguntó mientras ligeras lagrimas se deslizaban por sus mejillas.
- "Es lógico que lo tomes así pequeña... Pero sabemos que algún día comprenderás todo esto... Jamas te hemos dejado sola.
Yakumo: Mienten... Me han dejado sola mucho tiempo... Me quitaron a mis padres... me quitaron el derecho de ser un chica normal... me dieron maravillosos amigos para solo quitármelos de nuevo... Ustedes no me han dado nada a excepción de sufrimiento y dolor...
- "Tal pareciese que no tuviésemos excusa... No sabes cuanto deseaba, pero a la vez temíamos finalmente el presentarnos ante ti.... Sabíamos que esto podría pasar y comprendemos lo que estas diciendo... Así también sabemos que no bastaría con una disculpa... Pero Yakumo, muchas veces algunos debe sacrificar su destino para que muchos otros tengan la oportunidad de ejercerlo libremente... Por ti sola has traído esperanza a tu mundo y a los tuyos, tu viaje te ha llevado darles una segunda oportunidad para vivir ¿o no? Fue gracias a ti y al nuevo Mushrambo por el que pudieron cambiar el pasado y así se llevo a cabo parte de lo que nosotros esperábamos, cambiaron parte del pasado pero solo el de los humanos con respecto al exterminio, sin embrago la amenaza que aún representa Lanancuras aun se encuentra vigente en la Tierra."
Yakumo: ¿Y qué es lo que esperan de mi? ¿Qué esperan que yo haga?
- "Que lo detengas."
Yakumo: ¿Yo? ¿Pero cómo? Yo... yo no soy alguna clase de guerrera...
- "Pero posees nuestros poderes, estas impregnada de ellos, y los has desarrollado tal y como esperábamos que lo hicieses... sin embargo a sido un proceso demasiado lento, mas del que previmos"
Cort: Lamento interrumpir, pero después de todo esto y antes de que prosiga, sería tan amable de explicarme ¿que rayos tengo que ver yo en todo esto? No creo que me hayan traído aquí sin una razón...
- "Los de tu clase, siempre han sido personas muy impacientes, por lo que responderé a tu duda. No creímos que fuese necesario apresurar lo que planeamos en un principio, lo que habíamos previsto, sin embargo la situación tomó un rumbo distinto, no contábamos con la aparición de los Sirois... En estos momentos ellos tienen una idea errónea sobre todo lo que esta ocurriendo y todo lo que sucederá, no contábamos con su intervención. Yakumo no contaba con alguien que la protegiese por el momento, y sus habilidades aun no habían madurado lo suficiente... Fue cuando decidimos, traerte a ti... Estabamos conscientes que existía una dimensión en donde guerreros como tu serían de mucha ayuda para nosotros, es por ello que con el permiso previo de los Kaiohsamas pudimos traerte hasta aquí."
Cort: Entonces la otra presencia que sentí que me 'arrastro' hasta esta dimensión... fueron ustedes...
- "Lamentamos no haber pedido tu opinión en un principio"
Cort: no me sorprende viniendo de ustedes, por todo lo que he escuchado...- murmuró.
- "Merecemos que nos juzguen de ese modo... pero les aseguro que esto es por el bien de todos, tiene razón y algún día y sobre todo tu Yakumo, se darán cuenta que esto era necesario."
- "Otra de las razones por las que te escogimos a ti, fue con el propósito de que entrenases a nuestra elegida..."

°°°°°°°°°°°

Aquella tormenta blanquecina había desistido finalmente, justo cuando el sol había sucumbido ante la noche. Los pequeños copos caían uno tras otro, pero el cielo aquella noche se encontraba despejado, el manto celeste estrellado resplandecía y era un paisaje que resultaba hermoso para cualquier observador.
Dos siluetas se encontraban inertes en el suelo de la única construcción que se encontraba en medio de aquel mar de nieve. Sus rostros no reflejaban nada que no fuese pasar por un sueño tranquilo, pero lo ultimo que han de hacer estos dos individuos es embarcarse en algún hermoso o tranquilo sueño.
Lentamente una de ellas comenzó a presentar signos de conciencia. Los ojos del saiyajin se abrieron lentamente, solo para encontrarse con el frío suelo tan de cerca. Se encontraba un poco mareado por alguna razón...
Desvió levemente su mirada hacia un lado, y ahí observo a la joven humana que se encontraba a su lado, quien yacía inconsciente en el suelo, bajo su brazo.
Levantó lentamente su espalda y la contemplo por unos instantes, mientras ella aun se encontraba sumergida en aquel extraño trance al cual habían sido inducidos por aquellas extrañas deidades. Le preocupaba que aun estuviese sin despertar, y observó nuevamente con curiosidad aquella joya que presentaba en sus ropas la cual se reflejaban una combinación de todos los colores claros por haber, eso solo indicaba que los guardianes aún no habían terminado las indicaciones para ella.
Tan cerca de ella finalmente era capaz de darse cuenta de su esplendorosa belleza. Jamas había conocido a mujer más hermosa como ella y era la primera por la cual sentía una extraña atracción...
¿Qué es lo que lograba una humana como ella para que se sintiese de esa manera con tan solo mirarla? Sería tal vez aquel espíritu inquebrantable que ella poseía pese a poseer tan inocente alma?
Por todo lo que había escuchado... no sabía que es lo que debía sentir por ella; admiración, porque siendo tan joven había aceptado tales responsabilidades que están más allá de su comprensión humana, o sentir lastima porque prácticamente su vida completa había sido preparada, encaminada a propósitos que esa deidades querían desde antes que su vida misma comenzase... Debía ser muy duro darse cuenta que tu vida ya tenia un propósito mucho antes de nacer, y por ese propósito debiste haber pasado por tanto sufrimiento y dolor así como sacrificar todo y no poder dar marcha atrás, no poder decir NO a lo que se le fue impuesto.

Inconscientemente, el saiya paso su mano por los lacios cabellos de la joven, apartando los que recaían sobre su rostro. Fue en ese justo momento en que los ojos de Yakumo se abrieron lentamente, la luz natural del exterior aquella noche le permitió ver con claridad.
Ambos se miraron en silencio por unos instantes, tratando de asimilar lo que había sucedido, y no solo me refiero por la situación tan comprometedora en la que ambos se encontraba, sino por el hecho de todo lo que había sucedido.
Yakumo observaba tranquilamente al saiyajin, y al tenerlo nuevamente podía sentir como es que algo palpitaba muy vivamente en su pecho, pero al darse cuenta de que ella estaba debajo de él logró que sus mejillas presentaran un ligero rubor y más aun cuando el saiya le sonrió levemente al ver que finalmente había vuelto.
Cort: ¿Estas bien?- preguntó casi en un susurro sin apresurarse a levantarse.
Yakumo tardó unos momentos en asimilar la pregunta, y simplemente cabeceo, asintiendo.
Cort: ... Así que... deberé entrenarte- murmuró al romper el silencio.
Yakumo: ... Sí...
Cort lentamente se levantó, ayudando a la humano a levantarse, quien tardo un poco en decidirse en darle la mano.
Ambos observaron el lugar en penumbras, eso solo significaba que su charla con los Guardianes se había extendido más de lo que ellos imaginaron que había durado.
Yakumo tomó asiento en uno de los escalones de la habitación, abrazándose así misma en un estado que reflejaba su tristeza... más bien, desilusión o indecisión a lo que debía hacer ahora...
Cort encendió las luces del lugar, y al observar el estado de la humana prefirió no hablar del tema y guardando su distancia. Se volvió hacia la ventana más cercana y concentro su mirar en el espectáculo que la naturaleza les brindaban aquella noche... más bien, que los guardianes les brindaban...

Todo este tiempo, ellos había preparado todo para que llegase hasta aquí, y continuarían haciéndolo hasta que se logre lo que ellos creen lo mejor... ¿Qué es lo mejor para esas deidades? ...Evitar el despertar de ese tal Lanancuras, y en dado caso que suceda, derrotarlo... Todo esto para salvaguardar la vida de cientos, miles de seres vivos... Tal vez a ellos no les importaba sacrificar una vida, SU vida para poder salvar así la vida de miles, la vida de sus amigos... Ellos también habían pasado a ser solo títeres de los guardianes... En esos momentos lo único que podía pensar es que para los guardianes, ellos solo eran piezas las cuales jugándolas correctamente los llevaran ha cumplir con su cometido...
No podía pensar de otra manera en esos momentos, no después de enterarse que es culpa de ellos todo esto que ha pasado durante su vida completa. Todo estaba ya predestinado para ella, predestinado por ellos, quienes sin pedir su aprobación la habían hecho partidaria de todo esto.

Cort desvió ligeramente su vista al cielo, solo para encontrarse con aquella esfera brillante que surcaba en el cielo, rápida fue su reacción para discretamente apartarse lo más posible de la ventana y de los rayos de la luna.
Le molestaba que un guerrero como él se viese temeroso ante aquel significante astro en el cielo... Pero por muy insignificante que pudiese ser, representaba un gran peligro, y más si algún saiyajin la mirase.
Nuevamente su mirada se concentro en la joven humana quien continuaba en aquel mismo estado de seriedad. Pensar que de igual forma se ve en las circunstancias de servir en los propósitos de esos guardianes... El propósito de el paseo que en un principio le dieron era con el único propósito de que sirviese de protector de la humana y que la enseñase a controlar los poderes que se les fueron brindados y aun dormían en su interior. No le agradaba para nada servir como títere para ningún deidad, sin embargo, al parecer no le quedaba otra más que aceptar lo pedido...
Le resultaba extraño que los Supremos Kaiohsamas hubiesen aceptado esto. Estaba en las normas de los guardianes, pedir previamente un permiso a las deidades correspondientes en otros mundos para solicitar la ayuda de alguno de los miembros de dicho universo... Pero deberían pedir primero la autorización de a quienes escogen... Ah pero las deidades eran todo un misterio, y no quería ocupar su cabeza tratando de entender la manera en la que ellos pensaban o actuaban.
Se había dicho tanto allá... los guardianes habían revelado tanto, esos acontecimientos los cuales logró entender con precisión pese a no ser originario de este mundo.
Se le había encomendado la seguridad de su elegida... vaya jamas creyó que se vería algún día en una situación como esta, y más aun es su sorpresa al decirle que debía entrenarla, instruirla en el uso de sus poderes, en el uso del ki y que aprendiese a manifestarlo y controlarlo... Fueron específicos con lo que debían hacer de ahora en adelante. Debían continuar hasta que el mar se les interponga en el camino, ahí es donde deberían comenzar con el entrenamiento y permanecer hasta 'nueva orden'. Maldición! algo que sin duda alguna le desagradaba a un saiyajin era que le diesen ordenes! Pero no lo hacia porque ellos tuviesen el completo control de él sino porque quería estar del lado de Yakumo, sabía que lo necesitaba, necesitaba que alguien estuviese de su lado. Creía de buena fe que aprendiendo a controlar sus poderes, ella podría hacer mucho más, independizarse por lo menos un poco de esos guardianes...
Pero ¿Yakumo estaría lo suficientemente capacitada para aprender? o él estaría lo suficiente capacitado para enseñar?
Él conocía el método de entrenamiento 'rudo' por el cual se a y a sido entrenado desde que tiene memoria... No creía poder utilizar ese mismo método con ella...

Yakumo: ... Lo siento... de verdad lo siento- murmuró rompiendo el silencio de aquella habitación- ... Por mi culpa ahora tú también te has envuelto en todo esto... Y no espero que cumplas con los que ellos te pidieron, después de todo no estas obligado a nada...
Cort: No digas eso- dijo al acercarse e inclinarse un poco frente a ella para estar a su nivel- No quiero que pienses que voy a seguir contigo solo porque ellos lo pidieron... Además, yo te prometí que iba a protegerte mucho antes de que esos sujetos aparecieran ¿lo recuerdas?- preguntó al levantar ligeramente su barbilla para que lo mirase a los ojos- No me importa lo que esos sujetos me hubiesen dicho, pienso cumplir con lo que te prometí.
Yakumo: No tienes porque cumplir con lo que pidieron... este no es tu mundo, ¿por que debería importante?- preguntó.
Cort: Si la única manera en la que puedo seguir a tu lado es seguir el 'juego' de los guardianes, pues aceptare ser una de sus piezas de 'ajedrez'.
Yakumo: ¿Por qué quieres permanecer a mi lado? Todos los que lo hacen terminan mal... tal pareciese que a todos los que mis ojos ven están condenados a ser participes en toda esta locura... ¿Por qué quieres permanecer conmigo, ayudarme?- preguntó con una mirada seria.
Cort: ... No quisiera faltar a la promesa que te hice, ¿la recuerdas? La palabra de un saiyajin vale como no tienes idea- ... Quiero ayudarte, desde un inicio lo quise, créeme que no lo hago porque esas deidades me lo hayan pedido sino por ti, sinceramente quiero ayudarte, mereces ayuda- murmuró.
La humana observó la intensa mirada de su acompañante, en la cual era clara su sinceridad, de verdad quería ayudarle... y su forma de hablarle le recordaba mucho a Mushra, siempre le transmitía esa sensación de confianza, en que podía estar tranquila ante sus palabras, creer y tomar valor de ellas, pero las palabras de ese joven frente a ella llegaban a otro lado... Un lugar que al llegar a él, lograba que aquel rubor apareciese en sus mejillas.
Cort: Espero que aun quieras aceptar mi ayuda...
Yakumo: ... Sí... sí la quiero...- murmuró.
Cort: Entonces, permíteme ver esos ánimos tuyos, en ese estado tan serio te desconozco por completo- agregó sonriente.
Yakumo no pudo evitar sonreír ante el comentario.
Cort: Así esta mejor... Ahora, ¿en qué nos quedamos antes de que todo esto pasara?- preguntó alegremente.
Yakumo: ... Yo... había pensado en que podríamos preparar algo para la cena... Pero creo que ya es un poco tarde para eso- murmuró apenada al notar que la hora normal de la cena habían pasado.
Cort: Nunca es muy tarde para comer ^.^- agregó al tomarla de la mano y animarla a levantarse- Vamos a inspeccionar la cocina, espero que haya algo.
Yakumo: Por lo que vi, hay suficiente para alimentar a un ejercito- explicó en el camino.
Cort: Eso suena estupendo para mi. ¿Sabes cocinar?
Yakumo: ... Sí- dijo.
Cort: Perfecto, así terminaremos más rápido, y después podremos descansar ¿ya escogiste habitación?
Yakumo: No...
Cort: Para que veas que no soy malo te permitiré escoger- agregó.
Tal pareciese que la conversación pudiese ser muy simple, pero lo que el saiya buscaba era tratar de lograr que Yakumo olvidase por lo menos por unas horas lo que había sucedido con los guardianes, entretenerla en lo que fuese y la cocina le pareció perfecta.

Yakumo era ciertamente diestra en el arte culinaria, sin embargo ella parecía extrañada por el hecho de que Cort supiese cocinar... No es que lo viese mal, pero no creía que un guerrero supiese hacerlo o que hubiese tenido tiempo de aprender...
Yakumo: ¿Puedo preguntar algo?- pregunto al encontrarse pelando una patata.
Cort: Dime- dijo al estar al pendiente de las varias vasijas en la estufa mientras cortaba una la cabeza de una lechuga completa en un instante.
Yakumo: ¿Cómo es que sabes cocinar?- preguntó apenada.
Cort: ¿Tiene algo de malo?
Yakumo: No, es solo que... por lo que me has relatado sobre ti, entre entrenamientos y demás no veo como es que pudiste aprender algo como esto...
Cort: Bueno, la palabra 'entrenamiento' no se refiere simplemente a los oficios de guerrero, mi tutor quería que aprendiese diferentes cosas aparte de pelear, entre ellas el saber leer, escribir, otros idiomas, claro que, el aprender a cocinar tuvo que ser por mi cuenta, ya que... él jamas ha sabido cocinar bien ^^| o en definitiva no le agradaba por lo que muchas veces me veía en la necesidad de preparar mis propios alimentos y con la practica diaria aprendí lo suficiente- explicó.
Yakumo: Ya veo.
Cort: ¿Y tú como es que aprendiste?- devolvió la pregunta.
Yakumo: Digamos que, uno de mis amigos me enseñó lo suficiente- aclaró- ... Mañana... ¿qué es lo que haremos?- preguntó de pronto.
Cort: ¿A qué te refieres exactamente?- dijo como si no hubiese entendido.
Yakumo: ... ¿Haremos lo que ellos nos dijeron?
Cort: Sí crees que estas preparada o tienes los suficientes ánimos...
Yakumo: Mientras más rápido sea mejor- interrumpió rápidamente.
Cort: Esta bien, será como tu quieras... Mañana partiremos y nos instalaremos en donde ellos dijeron...

La cena fue algo silenciosa, tal pareciese que Yakumo se encontraba pensando demasiado en lo mismo... no la culpaba y lo consideraba normal, pero no le agradaba verla de esa forma tan melancólica.
Después de haber terminado, ambos se dirigieron a sus respectivas habitaciones.
Yakumo había tomado la que poseía tal vez la mejor vista ya que podía observar la bien delineada silueta de la luna en el cielo... le extraño que Cort le pidiese tan insistentemente que la tomara... La inspeccionó con mucho más cuidado ahora que era la inquilina oficial.
Inspeccionó los cajones de la cómoda y para su sorpresa o fortuna encontró algunas prendas de vestir. Este lugar estaba equipado con todo...

La noche paso tranquilamente, para placer de Yakumo, ningún sueño irrumpió su tranquilidad aquella noche... Sin embargo, las ultimas palabras que los guardianes le dijeron la mantenían consternada...
- "No debes temer hacia lo que sientes por él"
No sabía a lo que se referían ante aquello... ¿Se referían a él, a Cort?... Y si así fuera ¿Qué es lo que sentía por él?... Si lo pensaba, no era capaz de responderse... ¿Por qué era tan difícil? Podía decir 'una sincera amistad' pero... no creía que esa fuese la respuesta real... Pero no sabía como dominar aquello que sentía, era algo diferente, algo tan grande y que jamas había tenido la oportunidad de sentir recorrer su cuerpo... ¿Cómo se llamaría esto que sentía con tan solo mirarlo?...
Ante sus ojos, tenía a un hombre gentil, amable, ciertamente 'lindo' y que le transmitía una inmensa confianza, una gran seguridad con tan solo tenerlo a su lado... Al momento en que por su cabeza pasaban esta clase de pensamientos, repasando las cualidades de su acompañante, lograba sentir 'extrañas' sensaciones en su estomago, como si miles de mariposas revolotearan en su interior... Como deseaba saber qué es lo que estaba pasando con ella...

Esta vez, quien había pasado la noche en vela había sido Cort. Desde que entro a su habitación solo se dejo caer en la cama boca arriba con la manos extendidas y mirando el techo mientras le permitía a su cola tambalearse libremente en el aire.
De todos los miles de guerreros que pudiesen haber elegido ¿por qué él? Vaya que el destino resultaba 'curioso' si lo pensaba con detenimiento... Pero no podía quejarse, su destino no se encontraba tan bien trazado como lo es el de Yakumo... Por lo menos eso creía...
No podía dejar de pensar que esa existencia era ciertamente desafortunada... Que otras personas ya hubiese preparado tu vida completa antes de ni si quiera nacer, y no poder encontrar una salida, simplemente aceptarlo...

Penso un momento en lo que se había dicho allá... Los guardianes no esperaban la intervención del Imperio Sirois en la Tierra, ni mucho menos que intentasen intervenir en lo que ellos tienen preparado, algo que ni a Yakumo explicaron aun, solo dijeron que todo a su tiempo se revelaría, cuando estuviese lo suficientemente preparada...
Lo único claro que él tenía en estos momentos eran dos cosas: Una, y tal vez la más importante, proteger a la humana de ellos o de cualquier peligro: y dos, tal vez la más complicada, instruirla en el uso de sus poderes... ¿Pero qué clase de poderes ella poseía? No lo sabía con exactitud, por lo que ella le ha dicho, nunca recuerda nada una vez que los usa, ella misma no sabía cómo aquello sucedía... Pero tal vez el androide si supiese. Bueno eso sería lo primero que haría antes de comenzar con el 'entrenamiento'.

La mañana llego rápidamente. Al mirar al exterior ningún rastro de nieve había por ningún lado, vaya que los guardianes tenían una extraña manera de trabajar...
Desde muy temprano el saiya entablo una conversación con Hakuba quien le relato a como él registró las veces en los que Yakumo hacía uso de sus poderes, muy pocas realmente...
De igual forma el saiya relató al robot lo que había sucedido ayer a sus expensas, pero el robot no mostró ninguna clase de reacción que dejase ver su asombro... lo tomó muy normal... ¿Acaso él ya lo sabía de antemano?

Yakumo despertó un poco después de que el sol emergiera completamente. Se alisto al tomar 'prestadas' un par de prendas que encontró en los cajones y para su suerte le quedaban muy bien... un poco largas de las mangas pero eso no importaba. Abrió la ventana dejando que el viento fresco corriese por la habitación, cuando un 'Buenos días' la sorprendió.
Yakumo: Me asustaste- dijo al joven quien había aparecido prácticamente de la nada frente a ella.
Cort: Lo siento- agregó- ¿Estas lista para partir?- preguntó a lo que Yakumo asintió- No debes preocuparte, ya verifique y el mar solo esta a 20- 25 kilómetros de aquí.
Yakumo: ¿Quieres decir que ya fuiste y viniste?- preguntó como no creyendo lo que escuchaba.
Cort: Así es.
Yakumo: Vaya que haces cosas que me sorprenden...
Cort: Y no has visto nada- agregó- Por cierto, te vez muy bien con esas ropas- dijo refiriéndose a la blusa de manga larga de color anaranjado muy tenue y lo que parecía un pantalón de color blanco.
Yakumo: ¿De verdad tu crees?- preguntó apenada, no estaba acostumbrada que alguien le dijese esas clase de detalles.
Cort: Veo que esta casa cuenta con todo, por lo menos por ropa ya no tendremos que preocuparnos- dijo- Bien, si ya estas lista será mejor que nos marchemos.
Yakumo: Esta bien, en un momento saldré.

La humana se preguntaba lo qué harían con esa casa ahora, pero solo basto con que el saiya oprimiera un pequeño botón para que volviese a ser una cápsula. Aun le era difícil asimilar que aquello se debía a tecnología y no a alguna clase de magia o hechizo...
Yakumo: ... ¿Dónde esta Hakuba?- preguntó al no ver al robot por ningún lado.
Cort: Él ya se encuentra en el punto acordado- dijo.
Yakumo: ¿Qué?!
Cort: Aproveche para llevarlo de una vez y no retrasarnos demasiado.
Yakumo: ¿Lo llevaste... volando, lo cargaste?
Cort: Sí... ¿algún problema?
Yakumo: OO| No, no, ninguno... es solo que... ¿cómo pudiste? estaba muy pesado...
Cort: Eh cargado cosas más pesadas...
Yakumo: ¿Y cómo se supone que voy a viajar yo?
Cort: Yo te llevare- dijo al acercársele y tomarla por la cintura.
Yakumo: ¿Volando?- preguntó temerosa por la respuesta.
Cort: Podría ser corriendo... pero es mejor volando- agregó al comenzar el ascenso, por lo que Yakumo se aferro fuertemente a su cuello- No tienes porque temer ¿de verdad crees que yo te dejaría caer?
Yakumo: No pero... jamas me han gustado mucho las alturas...
Cort: No temas, ya veras que algún día tu lo harás por ti sola y no podrás parar. Lista o no, allá vamos- dijo al comenzar a volar a una velocidad considerable.

Yakumo cerro sus ojos al observar lo lejos que se encontraba de la superficie.
Cort: Abre los ojos, no es tan malo cuando uno se acostumbra- agregó animándola a que mirase hacia el frente.
Los cabellos cobrizos de Yakumo se ondeaban al compás del viento, tuvo que apartarlo un poco para que no le estorbase y poder mirar hacia el frente. Frente así tenia un gran paisaje muy bello, sin mencionar que la sensación que producía el constante choque del viento sobre sus mejillas le resultó muy tranquilizante.
Yakumo: ¿De verdad crees que lo logremos?- preguntó al volver su rostro hacia el saiya.
Cort: ¿Logremos qué?
Yakumo: ... Realizar nuestra encomienda... ¿de verdad crees que yo pueda aprender lo que los guardianes esperan de mi?- preguntó seriamente.
Cort: Te creo una chica muy capaz... para ser humana- agregó en tono de broma- Pero a decir verdad, yo creo que puedes eso y más, todo radica en que tu realmente lo desees y pongas de tu parte... Además, aprendí yo, no creo que tu no puedas- dijo sonriente.
Yakumo: ... Gracias- murmuró volviendo nuevamente la vista hacia el frente.
Cort: ¿A qué viene eso?
Yakumo: ... Muchas gracias por confiar en mi... de creer en mi Cort... Te prometo que no voy a fallarte...

-Fin del Capitulo 7-

Aclaraciones de Ulti_SG:
Para los que ya conocen la serie: solo me queda aclararles que la historia que se echaron los guardianes yo me tome la libertad de agregarles detalles como han de notar para que se apegara a lo que tengo planeado para este fic, espero no haya reproches, pero en los fics, uno puede agregar o modificar ligeramente las tramas de los animes, así como ustedes debieron notarlo.
Para los que NO conocen la serie: espero sinceramente que le vayan entendiendo, como ya dije renglones arriba, modifique y agregue algunas cosas a la trama original, así le damos un poco de coherencia a lo que trato de poner en este fic =p.
La verdad es que yo creo sinceramente que Yakumo tuvo que haber pasado por muchas otras cosas antes de que la segunda temporada comenzase, incluso ella se veía mucho más madura, sabia y es esta idea fue la que me impulso a hacer este fic a como lo están leyendo.
No se me desesperen lectores, yo aclare muy bien "Esta es una fic con trama sencilla" me ha tocado muchos reclamos de parte de algunos lectores; pero no se preocupen amantes de la sangre y tranquizas este fic tendrá eso pero más adelante! no sean impacientes!

Regresar"

Anterior"

Siguiente"