En un pastizal a unos cuantos kilómetros de la ciudad de Kahome, un hombre con una vestimenta de color verde oscuro, el cual podría confundirse con negro, cabello corto oscuro el cual al brillar por la luz de la tenue luna parecería verde, y unos ojos de un color extrañamente rojizos caminaba entre las altas hierbas que tenían una altura de un poco mas de medio metro.
Su caminar era firme y de cierta manera imponente. Finalmente llego a un claro en donde lo que quedaba del tronco de un árbol estaba en medio. Se detuvo en seco y tomo asiento en el tronco caído del árbol marchito y contemplo aquella luna llena que adornaba esa noche despejada son su mirada seria y tan peculiar.
Como salida de la nada observo un ave surcando los cielos esa noche interponiendose entre su mirada. Al agudizar su vista se dio cuenta de que se trataba de un halcón y no uno ordinario, uno muy hermoso y majestuoso, sus alas extendidas brillaban al reflejarse la luz de la luna llena en ellas, sonrió levemente al verlo, entonces fue cuando escucho un ligero ruido entre la hierba alta, volteo su cabeza hacia atrás y pudo distinguir una silueta que caminaba cerca del terreno, sus ojos desprendían un amenazante color dorado.
- "Escuchamos que necesitabas de nuestros servicios"- escucho proveniente de su izquierda.
Volteo lentamente la mirada y observo a alguien mas ahí, cubierto por las ropas de la noche en su totalidad. Repentinamente el halcón que anteriormente había visto se postro en el hombro derecho de aquel sujeto. Sin duda alguna aquel ave era majestuosa, sus alas eran de un color negro brillante y al extender sus alas, las plumas de su pecho eran de un hermoso color azul que podrían confundirse con plateado al postrarse la luz sobre ellas, un perfil imponente adornaba su pico y un singular color de ojos, eran de un rojizo muy claro que le daban un toque de singularidad e imponencia.
- "Ya era hora que llegaran, pense por un momento que no vendrían"- dijo el hombre permaneciendo sentado.
- "Tú fuiste quien llegaste retrasado... nosotros estuvimos aquí todo el tiempo"- dijo otra voz a sus espaldas.
Volteo lentamente su mirada hacia atrás y observo a otro sujeto mas, también ungido con las ropas de la noche en su totalidad, acompañado de un majestuoso espécimen a su lado. Un hermoso lobo de pelaje oscuro que con el brillo de la luna parecía de un color metálico y unos ojos de color café que parecían dorados que lo hacían verse imponente y peligroso, con un hocico fino y delgado.
- "Me alegra que siempre hayan decidido a venir... Aquila"- miro al hombre con el halcón sobre su hombro- "Y Zeta"- observando al hombre con el lobo a su lado.
Aquila: Hacia bastante tiempo que no necesitabas de nuestros servicios Cell.
Zeta: Fue una gran sorpresa para nosotros- comento.
Cell: Bueno, es que algo nuevo se ha presentado y no es algo ordinario de realizar,... fue entonces cuando pense en ustedes dos... estoy seguro que se divertirán ambos.
Zeta: ¿En serio? Sabes que no nos agradan las misiones aburridas y sencillas.
Cell: He he no han cambiado en lo absoluto, y es por eso que se que lo harán muy bien.
Aquila: ¿Y bien, de que se trata?- pregunto.
Cell: Tal vez no lo sepan aun pero es una noticia que se regara por todos lados así que se los informare de una buena vez. Tal parece que tanto la Dinastía del Fénix y la nuestra piensan fusionarse.
Zeta: Esa si es una sorpresa.
Aquila: Imagino como pretenden hacer algo así... solo con la unión de los dos herederos al trono ¿verdad?
Cell: Efectivamente... nuestro príncipe Vejita y la princesa de la dinastía del Fénix desde hoy están comprometidos, y una fusión de las dos dinastías es algo que no se apega a ciertos puntos que tengo planeado para futuro.
Zeta: Entonces...
Aquila: lo que quieres es que nos deshagamos de alguno de los dos ¿no es cierto?- interrumpió.
Cell: Precisamente. Y su blanco caballeros, si aceptan por supuesto es asesinar a la princesa de la dinastía del Fénix.
Zeta: Vaya vaya es un trabajo bastante interesante y difícil de rechazar verdad Aquila?
Aquila: Esta vez si que me dejaste sorprendido, jamas pense que quisieran provocar a la dinastía del Fénix.
Cell: No pretendemos una guerra si eso es a lo que te refieres, espero que les quede claro. Esta misión es sumamente delicada y no deben dejar ningún pista visible, recuerden que estamos trabajando a espaldas del emperador Vejita Ou.- dijo al momento de levantarse de golpe.
Zeta: ¿Qué dices hermano? ¿aceptamos?
Aquila guardo silencio unos momentos y acaricio levemente el mentón del halcón.
Aquila: Sabes que no trabajamos gratis Cell- añadió.
Cell: Por supuesto que lo se, en parte es mi culpa por haberlos malcriado de esa manera.- sonrió levemente- Y por supuesto que se les pagara y una suma bastante aceptable, financiada por el consejero Kareonte.
Aquila: En ese caso... creo que aceptamos el trato ¿verdad Zeta?
Zeta: Efectivamente, hemos estado sin acción por bastante tiempo y hasta creo que he olvidado como manejar una espada.
Aquila: Tampoco tienes que ser tan exagerado. Pero...- miro seriamente a Cell- Sabes como trabajamos verdad?
Cell: Si y me parece muy precavido y eso es lo que me gusta de ustedes dos, confío plenamente en su éxito- saco una pequeña bolsa de entre sus ropas.- Esto es para comenzar- la arrojo hacia Aquila quien la tomo sin mucho esfuerzo, y después la tanteo.- Creo que es suficiente para cubrir los gastos del viaje a Himura ¿verdad?
Aquila: No podremos viajar en primera clase... pero es aceptable.
Cell: Recuerden que se les paga en cuanto hayan cumplido su parte así que esfuércense.- aclaro.
Zeta: No tienes que decirnos eso, siempre te hemos cumplido bien ¿no es así?
Cell levanto la mirada hacia la luna de nueva cuenta.
Cell: Siempre hay una vez para todo mi estimado Zeta.
Aquila: Te mantendremos informado.
Cell: Esperare noticias suyas con impa...- se detuvo al momento de bajar la mirada y no ver rastro de nadie mas que él en la redonda.- Ese par... siempre me dejan hablando solo.- sonrió levemente- "Aquila y Zeta... unos de mis grandes hombres a mi disposición. Durante años nos han servido fielmente y sin ningún fracaso, pero a decir verdad ahora que lo pienso... jamas he visto sus rostros detrás de sus mascaras, no es que me importe pero... a veces la curiosidad puede ser muy tentadora- pensaba mientras caminaba fuera del claro y caminaba de nueva cuenta por la hierba alta.
Cerca de ahí había un par de arboles con enormes copas adornando sus ramas, en ese lugar dos figuras observan a Cell con detenimiento.
Aquila: Al parecer a Kareonte esta novedosa noticia lo tiene bastante activo ¿no crees?- comento al momento de darle de comer un pedazo de carne seca a su halcón.- Mi fiel Sett- dirigiéndose al animal- Tu también estas ansioso por comenzar ¿cierto?
Y como si el ave hubiese entendido levanto y agito un poco sus enormes alas.
Zeta: Nunca he visitado Himura... ¿tu sí?
Aquila: Mmm una vez... con nuestro padre, pero fue hace tiempo y no recuerdo mucho- comento.
Zeta: Bien, creo que es hora de irnos- dijo al levantarse sobre la rama- ¿Dónde se habrá metido Dante?- pregunto al observar a su alrededor.
Aquila: Seguramente debió regresar a casa como es de costumbre- añadió- no te preocupes, él sabe el camino mejor que nosotros.
Zeta: Tienes razón, pero nunca me espera ese tonto.
Aquila: Es porque no lo has sabido entrenar como es debido, y será mejor irnos ya que mañana tenemos un largo camino hacia Himura.
Zeta: Tienes razón...
Un nuevo día comenzó en la Imperio de la dinastía del Fénix. Como es de costumbre hay mucho movimiento entre sus calles y locales públicos; también en el castillo hay mucho movimiento, como de costumbre.
La princesa de la dinastía del Fénix se encontraba en sus aposentos, observando su reflejo en el espejo de su tocador, mientras que Chichi la ayudaba a peinar su hermoso cabello de color azul.
Bulma no prestaba mucha atención a lo que su dama de compañía le estaba platicando, ella se encontraba dentro de sus propios pensamientos. Penso en lo que sucedió la noche anterior, fue algo sorpresivo, Randel, un completo desconocido, líder de una banda, la había besado... si lo pensaba ahora si ella hubiese querido pudo haber llamado la atención de algunos guardias del palacio para que lo apresaran, pero no lo hizo, y no sabia porque. También le perturbaba la pregunta de "Por que lo haría?" una y otra vez en su cabeza; pero no podía mentirse a si misma ese suceso no le fue del todo desagradable. Bulma se sonrojo un poco solo al recordarlo y Chichi se dio cuenta de ese rubor en las mejillas de la joven.
Chichi: ¿Te sucede algo Bulma?- pregunto.
Bulma: ¿Qué? No nada.
Chichi: Bueno, es que me pareció extraño que de repente te sonrojaras y no creo haber dicho nada para que lo hicieras.
Bulma: ¿Qué?!! No en serio no es nada!!- dijo un poco exaltada y aquel rubor se intensifico.- Estas imaginando cosas Chichi.
Chichi: amos, puedes ser sincera conmigo somos amigas desde hace mucho tiempo ¿no?.
Bulma: Si pero... te aseguro que es tu imaginación.
Chichi: Bueno, bueno, no es para que te exaltes tampoco- se disculpo.
Bulma: Por cierto Chichi, ¿no has visto a Goku esta mañana? Es extraño que no venga a "reportarse" como lo hace de costumbre conmigo ¿no crees?
Chichi: No creo que venga por lo menos en toda la mañana- sonrió levemente.
Bulma: ¿Por qué no? ¿Esta bien, le sucedió algo?- pregunto preocupada.
Chichi: No, no es eso es solo que... fue a visitar a mi hermana- respondió.
Bulma: ¿A tú...? Ah ya entiendo, disculpa por esa pregunta estúpida es solo que no recordaba que precisamente este día todos los años Goku va a verla.
Chichi: Descuide no hay problema.
Bulma: ¿Y tu ya fuiste a visitarla?
Chichi: Si, antes de que llegara el alba, como es de costumbre- añadió.
Son Goku estaba frente a una pequeña lapida de piedra. Cada año, este mismo día viene a este lugar, olvidándose por completo de que es un Samurai de la dinastía del Fénix, guardián de la princesa de esta y de todos sus problemas y preocupaciones en su actual vida, y por solo este día vuelve a ser el hombre que años atrás fue; este día es cuando se priva de su vestimenta de samurai y se viste con un kimono común y corriente.
Sonrió levemente al ver que ya había un ramo de flores adornando aquella lapida, supo rápidamente que Chichi había venido antes que él. Se inclino un poco dejo un par de flores de color blanco sobre ella, aun lado de las demás, después dirigió la mirada hacia su izquierda y observo otra lapida, mas pequeña que la anterior con un adorno floral parecido al anterior, Goku se acerco a esta y dejo otro par de flores de color blanco sobre esa también.
Fue entonces cuando se arrodillo frente a ambas y coloco sus manos juntas frente a su rostro para comenzar a hacer una pequeña oración por las dos almas que descansaban ahí, cerro sus ojos lentamente y vinieron a él un sin fin de recuerdos e imágenes; una linda joven de cabello negro largo y de ojos oscuros se dibujo en su mente, era idéntica a Chichi, y no era de mas, se trataba de la hermana mayor de esta, Milk.
Desde su infancia la familia Son era muy apegada a la familia de Chichi y Milk, tenían fuertes lazos de amistad y ambos jefes de familia deseaban que algún día sus hijos mayores contrajeran matrimonio, claro que esto no era muy agradable para los dos chiquillos que eran entonces.
Pero los años pasaron y tanto Milk como Goku lograron construir un fuerte lazo entre ambos, hasta que un día, hace 8 años mas o menos, ambos contrajeron matrimonio, algo que a las dos familias lleno de alegría.
Goku tenia apenas 18 años en ese entonces, ya había demostrado tener cualidades para llegar a ser un samurai reconocido y rápidamente lo asignaron a ser el protector de la princesa.
Son Goku recordó aquellos momentos tan felices que paso con Milk, claro que su esposa tenia una personalidad dulce y tierna pero a la vez era experta en el arte de combate y podía llegar a ser tan ruda como cualquier varón si la situación lo ameritaba, sin mencionar que era una gran y experta cocinera y ama de casa.
Un año después llego su primer hijo, al cual llamaron Son Gohan, en honor al abuelo de Goku. A la llegada de este primer hijo su vida se vio mucho mas completa y dichosa que nunca.
El pequeño Gohan creció bastante rápido para los ojos de Goku, admiraba mucho a su padre y no había una cosa en el mundo que lo persuadiera de querer a llegar a ser como su padre.
Por supuesto que Milk no compartía ese detalle con su hijo, ella soñaba con que se convirtiera en un gran investigador o que estudiara para llegar a ser un gran doctor.
Goku sonrió levemente al recordar esto mientras oraba, la verdad es que momentos como aquellos, con su familia, esposa e hijos no podían ser remplazados por nada o nadie en su corazón.
Pero un día toda esa vida se vino a bajo de un solo golpe. Este mismo día hace 3 años fue cuando perdió a los dos. Aquel día había llegado mas tarde que de costumbre a su hogar y al llegar, esperanzado de ver a su esposa y que esta le llamara la atención por llegar tan tarde, se encontró con un gran desastre, todo indicaba que había habido una gran riña o persecución por todo el lugar, al llegar vio sangre en el suelo y en las paredes estaban escritas las letras "FC" con sangre en varias ocasiones. Fue entonces cuando encontró a su mujer e hijo asesinados brutalmente en la sala, esa escena lo seguiría los tres años siguientes durante su vida.
Jamas se averiguo quienes o quien fue el causante de aquello, pero Goku juro por su honor que algún día lo descubriría y que no tendría misericordia del causante de esa desgracia.
Recordó que en aquellos días muchas veces deseo morir el también, estaba destrozado y no era capaz de sobreponerse, por mas disciplina que tuviera como samurai el dolor no podía desaparecerlo.
Pero cuando consiguió apaciguarse un poco fue cuando juro que el o los culpables pagarían algún día, no importaba cuanto le tomara, los haría pagar con el propio filo de su espada, sabiendo aun que los samurais tenían prohibido el matar bajo ciertos puntos, pero estaba seguro que del honor era de lo ultimo que se acordaría al momento de encontrar al culpable.
Goku bajo sus manos y las apoyo sobre sus piernas, permaneciendo aun hincado, abrió sus ojos y contemplo de nueva cuenta las dos lapidas, donde es el ultimo lugar de descanso de su esposa e hijo y en cierta manera algún día esperaba reunirse con ellos, pero ahora no, no podría hacerlo en paz hasta no cumplir con la Dinastía, que en estos momentos era en los que mas lo necesitaba y tampoco sin encontrar "justicia" bajo su propia mano, tal vez después de haber cumplido con esas dos cosas podría morir tranquilo y reunirse con ellos.
Claro que esta clase de pensamientos jamas los comentaba con nadie, aunque tuviera una personalidad alegre, amable y pasiva debajo de aquella imagen podía llegar a ser una persona melancólica tan cruel y agresivo como algún asesino, por supuesto que esa personalidad suya jamas se la ha demostrado a nadie y esperaba de cierto modo que jamas sucediese.
Dio un ligero suspiro y se puso de pie de nueva cuenta, sonrió levemente y después giro sobre sus talones dándole la espalda a las dos lapidas y comenzando a alejarse de ellas y si tenia suerte el próximo año volvería.
La princesa recibía todas las mañanas sus lecciones, en ocasiones variaban, podría ser a manos del profesor Brief, quien le hablaba de su país de origen, Inglaterra y de los demás países y regiones del Occidente, sus costumbres y avances tecnológicos, también sobre la colonización del Nuevo Mundo. También podía tener sus lecciones de modales a cargo de una de las Geishas de la dinastía. Pero este día ninguna de ellas le pareció interesante como lo hace comúnmente, esta mañana había estado muy distraída.
Bulma tomo una flor de las tantas que había en el jardín del palacio, había ido ahí después de sus lecciones matutinas y había pedido estar unos momentos a solas, sin que Chichi o algún guardia la acompañase.
La joven aun pensaba en Randel y estaba un poco confundida por aquel beso, en toda su vida jamas había experimentado algo así, sus labios habían sido vírgenes hasta entonces, y pensaba que cuando recibiera su primer beso sentiría algo especial, algo único pero... no sintió nada de eso, fue sorpresivo, no podía negarlo, pero no fue como ella esperaba que fuera.
Por otra parte, muy cerca de ahí alguien observaba con mucha atención a la joven entre las sombras de las copas de los majestuosos abetos que había cerca de los jardines.
Randel la observaba con mucha atención a Bulma, ahí entre aquellas flores, no podía negar que se veía hermosa rodeada de todas ellas, durante una segundo recordó una imagen similar pero otra chica ocupaba el lugar de la princesa, fue una imagen rápida y que Randel saco de sus pensamientos rápidamente.
También él estaba confundido, no supo porque razón había venido hasta aquí ayer y por la cual estaba ahora ahí de nueva cuenta, gracias a su experiencia como bandalo pudo entrar sin ser detectado por nadie.
¿Por qué la había besado? También circulaba esa pregunta en su cabeza, una extraña necesidad de verla lo invadía, y no sabia porque, era extraño, por alguna razón se sentía atraído por ella.
Ella de alguna manera había podido "ver" dentro de su alma.
Le parecía una joven bella, de carácter fuerte y orgulloso, algo no muy común entre las chicas tanto comunes como las de la realeza, Randel no podía negar que le atraía pero no estaba muy seguro de esto que sentía, todo le es bastante prematuro, ayer la conoció y ¿ya siente algo hacia ella? Definitivamente su cabeza era un mar de sentimientos confusos, y no había cosa que mas le desesperase que no estar seguro de sus acciones o sentimientos.
Bulma dio un suspiro y dejo caer la flor que tenia en su mano sobre el césped.
Bulma: Randel...- susurro el nombre del joven.
- "¿Me llamaste?"- escucho detrás suyo.
La princesa se estremeció al escuchar aquella voz y volteo lentamente, y observo a Randel sujetando aquella flor que había dejado caer.
Bulma: ¿Q-que estas haciendo aquí? ¿Cómo es que andas muy tranquilo merodeando en el palacio?- pregunto con aparentes nervios y alejándose un poco del joven.
Randel: Ja los samurais pueden tener una reputación de grandes guerreros pero no son muy atentos en su trabajo, créeme que años de practica me ayuda para lograr esto- comento.
Bulma: ¿Sabes que solo bastaría un grito mío para que algún guardia viniera y te apresara? Eres un hombre imagino que buscado y además te atreviste a secuestrarme- comento.
Randel: Eso no es cierto, yo no fui quien lo hizo, fue uno de mis hombres es cierto, pero tenia meses sin hacer algún acto ilícito, así que de cierta manera creo que se olvidaron de nuestra existencia.- añadió- Además, si quisieras hacer eso créeme que ya lo hubieras hecho ¿o me equivoco?- pregunto.
Bulma: Pues... este...
Randel: Solo te gusta alardear, eso es todo- dijo sarcásticamente.
Bulma: Grrr ¿cómo te atreves a hablarme así?- pregunto exaltada.
Randel: Esa no es la manera de hablar de una princesa.
Bulma: Yo no me tomo muy enserio mi papel de la realeza- añadió- Randel quiero que me contestes el porque me estas siguiendo... y porque tú me...
Randel: Ni siquiera yo lo se créeme- interrumpió- Es solo que me pareces una chica interesante- dijo en voz baja al momento de darle la espalda- Y Fascinante.
Bulma se sonrojo ante aquello.
Bulma: No digas disparates por favor- dijo al momento de dar la espalda a Randel también.
Randel: Pero- volteo lentamente- Si de verdad te molesta que me presente... te prometo que ya no lo haré.
Bulma: No! no, es eso es solo que...- se detuvo al momento de voltear y ver a Randel muy cerca de ella.
Hubo un silencio incomodo entre ellos y su alrededor, por unos momentos Bulma solo podía escuchar el sonido de la brisa moviendo las hojas de los arbustos y también el como su corazón latía estrepitosamente al observar los ojos del joven.
Randel: es una locura que tenga la desfachatez de venir a verte después de lo de ayer, lo sé, pero no me importa, solo me basta con ver tú mirada para saber que valió la pena el riesgo.- coloco suavemente la flor que recogió entre los cabellos azules de la princesa.- Me molesta el no saber que es lo que me pasa y porque hago todo esto... ¿a ti no te pasa lo mismo?- le pregunto.
Bulma solo asintió levemente.
Randel: Por lo menos se que no es que me este volviendo loco- bromeo.
Bulma iba a decir algo cuando escucho la voz de Chichi llamándola a su espalda. La joven Volteo solamente por un segundo para comprobar que se trataba de ella y al momento de voltear de nueva cuenta hacia el joven este ya no estaba.
Chichi: Oye Bulma ¿no quieres almorzar de una buena vez?- fue lo que pregunto al momento de llegar hasta donde estaba la joven con la mirada perdida en donde minutos antes estaba el joven.
Chichi: ¿Princesa?- pregunto al no escuchar respuesta.
Bulma: Te dije claramente que no me molestaran!- dijo un poco enfadada.
Chichi: Lo siento, pero pense que...
Bulma: No vuelvas a desobedecer una orden mía Chichi, serás mi amiga pero aun así debes obedecer mis ordenes!- dijo enfadada al momento de dirigirse al palacio.
Chichi: ¿Y ahora que hice?- se pregunto al de verla partir.
Llego la noche, lo cual le pareció eterno a la princesa, ahora estaba en su alcoba observando desde la terraza de esta con una flor en su mano, esperanzada de que Randel se apareciera, no sabia porque pero quería verlo por alguna extraña razón para ella, pero no, por mas que espero no se apareció, dio un gran suspiro y se alejo de la terraza, cerrando las puertas de estas al entrar, observo la flor con detenimiento "¿Pero que es lo que me pasa?" se pregunto en voz alta, camino hasta su tocador y la dejo sobre el. Se dejo caer en su suave cama boca abajo y suspiro de nueva cuenta - "Acaso ¿Randel me...? Nah, eso no puede ser"- dijo en voz baja. Giro sobre la cama y se coloco boca arriba fue entonces cuando observo dos puntos brillando sobre el techo de la habitación oscura, se trataba de un par de ojos que la miraban detenidamente.
La joven se levanto lo mas rápido que pudo y al momento de hacerlo un hombre cubierto con ropa oscura salto del techo a la cama, Bulma trato de salir de la habitación cuando otro hombre salió de la nada y la sujeto por la espalda cubriendo su boca para evitar que gritase.
- "Sssshh no quisiera que llamaras la atención de ninguno de los samurais"- susurro el hombre que la tenia sujeta al oído de la joven- No sabes lo difícil que fue entrar aquí sin ser vistos y no quisiera que lo arruinaras".
- "Creo que ya debemos irnos, antes de que suceda algo imprevisto compañero"- dijo el otro al acercarse a la puerta de la terraza.
- "Iremos a dar un pequeño paseo princesa"- susurro de nueva cuenta a Bulma quien intentaba safarse de aquel hombre quien la tenia bien sujeta.
- "Vamonos de una buena vez"- dijo el otro al momento de abrir la ventana, cuando de pronto este salió volando y cayo sobre la cama de la habitación.
- "¿Pero que rayos te sucede?"- pregunto a su compañero que rápidamente se recupero.
- "Alguien me golpeo"- contesto el otro.
- "Lo siento amigos, pero en este territorio los secuestros son solo míos y de los Tsukibanshu"- dijo el hombre recién aparecido en la terraza, alguien a quien Bulma reconoció rápidamente.
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Bulma: ¡¡¡Randel!!!- grito Bulma al zafarse unos momentos del abrazo del hombre
· Estúpido mocoso ¿cómo te atreves a meterte en nuestro camino?
Randel.- Como les he dicho este es mi territorio, así que no me agrada que ningún patán aficionado intente imitarnos
· Deshazte de él- dijo el hombre que tenia aprisionada a Bulma
En ese momento el sujeto saco una daga y se arrojo hacia Randel, el esquivo el ataque con facilidad.
Randel.- eres muy malo sabías- dijo al momento en que lo pateo en él estomago y este hombre calló al suelo
· Desgraciado
Grito el otro al momento que soltaba a Bulma y se arrojaba hacia el Tsukibanshu, este hombre era aun más hábil que el otro y al momento de tomar la daga de su compañero herido logro rasgar la ropa del muchacho quien quedo sorprendido de su velocidad.
· Je je, ahora veras niñito
Randel por su lado no podía creer su velocidad, había logrado hacerle una herida en el pecho se había confiado demasiado pero ya no lo haría no otra ves debía proteger a Bulma y si era posible lo haría a costa de su vida.
· ¿Qué pasa niño? ¿Dónde esta la valentía que tenias hace unos momentos?
El joven lo miro unos momentos y luego a Bulma quien estaba aterrorizada tanto que no podía gritar, nuevamente este hombre ataco a Randel y este apenas pudo sacar las espada cuando este le hizo una herida muy profunda en el brazo izquierdo.
Bulma.- ¡¡RANDEL!!-grito Bulma por fin
Randel estaba en problemas y muy serios la herida en el brazo sangraba mucho y dolía demasiado como para como para moverla.
· Jum, eres solo un hablador niño
Randel.- No me conoces en lo más mínimo- susurro mientras lo miraba desafiante-
Fue entonces cuando se movió con mucha rapidez tanta que su oponente no lo vio, entonces Randel salto tras su espada y lo golpeo en la cabeza con todas sus fuerzas.
Cuando este callo al suelo Randel suspiro aliviado
Bulma.- ¿estas bien?- cometo Bulma quién lo veía con preocupación
Randel.- si no te preocupes
Bulma.- Oh dios mío estas sangrando- dijo cuando vio la herida del brazo-
Randel.- no es nada
Bulma.- ¿cómo que nada? Si sigues sangrando así puedes morir.
Randel.- No yo..
Bulma.- Nada de peros- Bulma se agacho y rasgo una parte de la tela de su kimono- Si no te cuidas, ¿cómo esperas que uno se quede tranquilo sin hacer nada?- Bulma se acerco y comenzó a vendar su herida
· ¡¡PRINCESA!!- gritaron desde afuera
· ¡¡¡¿Estas Bien Bulma?!!!
Randel.- ya vienen a rescatarte, cuídate Bulma
En ese momento Randel se fue por la ventana.
Bulma.- ¡Espera!
La puerta de la princesa se hizo pedazos, en ese momento Goku y Crono salieron armados y alarmados ante el escándalo de la habitación
Crono.- ¡¿Qué diantres paso aquí?! ¿Quiénes son estos sujetos?
Goku.- Bulma ¿estas bien?
Bulma.- si- susurro mientras miraba la ventana-
Goku.- ¿qué paso aquí?
Bulma.-...
Crono.- llévenselos
· ¡¡SI, SEÑOR!!- Gritaron al unísono otro grupo de Samurai de quizás rango menor al de Crono
Crono.- ¿qué fue lo que paso aquí alteza?
Bulma.- Ehh- exclamo despertando un poco- ahh pues es que vinieron a secuestrarme
Goku.- pero ¿quién los detuvo?
Bulma.- Ahh, pues yo ¡¡Por supuesto!!-Crono y Goku se vieron uno al otro confundidos- Vaya creo que desde que me enseñan Karate hace una semana, me he hecho muy fuerte ja ja ja ja - Esa ni se la creyó ella-
Después de eso en la mañana siguiente en una de las recamaras del castillo, Crono dormía tranquilamente cuando despertó vio a Chichi a su lado mirándolo fijamente con su desayuno listo.
Chichi.- buenos días Querido - Exclamo mientras le ponía el desayuno en las rodillas
Crono.- Ehh, b-buenos días Chichi, ¿pero que haces aquí?
Chichi.- pues a traerte el desayuno tontito ¿qué más?, Ahh o es acaso que quieres que té de un masaje.
Crono.- No bueno es que.
Chichi.- OH ¿quizás...?- Chichi se arrojo a sus brazos-
Crono.- No Chichi cálmate yo no creo que sea prudente que tu y yo este...
Chichi.- no seas tímido mi amor- Crono se puso aun más nervioso cuando
Crono.- ¡¡¡Ahhhhhhhhh!!!
Grito levantándose rápidamente de la cama afortunadamente solo era un sueño.
No es que no le gustara Chichi, pensaba, lo que sucedía es que era muy tímido en ese aspecto, de hecho esa era la razón por la cual no le había pedido matrimonio, a pesar de ser novios de tantos años, también había algo más que lo intrigaba, la muerte de Milk hacia 3 años, no sabía por que pero temía por la vida de Chichi, él y Goku tenían un fuerte lazo de amistad y había vivido la mayor parte de su vida juntos así que si fue por venganza la muerte de Milk no dudaba que a el le tenían deparada la misma suerte o a Chichi y no quería que algo horrible le sucediera ya que después de tantos años Chichi se había vuelto una parte importante para él.
Se preparo y fue hacia el cuarto del Emperador puesto que este ya no podía salir de allí a causa de su delicada situación, ya que lo había llamado para dar reporte del intento de secuestro de la princesa, él toco la puerta y una voz le dijo que pasara.
Crono.- ¿para que me quería hoy en su presencia mi señor?- pregunto Crono haciendo una reverencia
Sutsuke.- Gracias por venir, Crono. ¿Cuáles son las noticias sobre lo que sucedió ayer?
Crono.- las investigaciones, han concluido mi señor, pero no sabemos de donde vienen estos sujetos, se han negado a contestar quién fue quien los envio.
Sutsuke.- ya veo.
Crono.- también hay indicios de que esto volverá a ocurrir así que e ordenado doblar la vigilancia del castillo
Sutsuke.- sí, ¿y del sujeto que salvo a mi hija?
Crono.- no lo sabemos, la princesa no ha dicho nada y es más confiesa que fue ella quién los venció
Sutsuke.- JA JA JA JA JA, vaya Bulma si que se esmero esta vez JA JA. ¿Dime hay algo más?
Crono.- Por ahora no señor
Sutsuke.- Bien, puedes retirarte
Crono.- sí
Sutsuke.- ah, espera Crono, Tu ha sido uno de mis sirvientes más leales, al igual que Goku
Crono.- Gracias Alteza
Sutsuke.- Por eso quiero que acompañes a Goku a Kahome para que ambos escolten a Bulma.
Crono.- ¿Escoltar a la princesa a Kahome?- se hizo el ignorante
Sutsuke.- no creas que no lo sé muchacho, este noticia sé a esparcido a todo palacio y también sé que tú lo sabes
Crono.- lo siento señor
Sutsuke.- no te preocupes, eres un excelente guerrero y sé que ayudaras a Goku con esta difícil tarea, este asunto del secuestro me preocupa y Bulma puede correr peligro, por ello quiero que los acompañes.
Crono.- pero Majestad
Sutsuke.- se que quieres ayudar a Goku, siempre has estado con el en grandes batallas, y no te perderias la oportunidad de acompañarlo, además no hay de que preocuparse por mi mis dias ya están contados, y no quiero que Bulma corra peligro, por eso quiero que esten los dos, mis guerreros más fuertes y leales protegiéndola.
Crono.- sí. Majestad
Sutsuke.- se que es lo mejor.
En las afueras del majestuoso palacio del la dinastía Dragón, una hermosa princesa camina por el jardín de flores silvestres, Nirva la hija más pequeña del emperador Vejita, a ella le gustaba caminar entre las flores del jardín de palacio la hacia sentir mejor desde que era niña desde que perdió a su madre.
Por otro lado adentro del castillo se escuchaba tremendos gritos de batalla, Cross y Vejita entrenaba como era sus costumbres todos los días claro Cross ya sé había recuperado de los Golpes que Vejita le había dado hacia algunos días, siempre cuando entrenaban peleaban de una manera ruda y violenta, desde niños su padre que debían ser fuertes en todo en inclusive en carácter por ello los costaba quizás demostrar compasión hacia alguien y eran muy orgullosos de su fuerza tanto que no permitían que alguien fuera más fuerte que ellos.
Mientras ellos peleaban eran observados por un Ninja se cubría en la oscuridad, sin embargo no se daban cuenta ya que estaban más concentrados en el entrenamiento y atacar a su oponente que en otra cosa.
Al terminar la pelea teniendo como ganador a Vejita nuevamente, fueron a darse un merecido baño, el individuo estaba cerca ellos como si los estuviera analizando
Finalmente entrenaron al baño...
Cross.- Arg!!- se quejo por un golpe en el brazo- Otra vez
Vejita.- tu tienes la culpa por ser tan distraído niño
Cross.- no digas estupideces tu siempre usas más fuerza de la que necesitas
Vejita.- ja, no finjas la verdad es que eres un debilucho.
Cross.- Grr No vuelvas a decirme así- renegó al momento que se despojaba del traje real al igual que Vejita y se metían en la bañera.
El espía tenia los ojos cerrados quizás por la exhibición que había visto y decidió mejor a salir del lugar desgraciadamente para él hizo un ruido que no paso por desapercibido para los príncipes.
Cross.- ningún sirviente nos molesta durante el baño. Alguien anda a hurtadillas, estoy de mal humor de lo advierto.-Dijo Cross con confianza mientras disfrutaba del baño.
El espía al verse descubierto trato de escapar por la puerta cuando Vejita le arrojo una pequeña cubeta que golpeo la cabeza del extraño y callo inconsciente.
Cuando este despertó vio a los príncipes cubiertos con una toalla que lo miraban muy molestos.
Vejita.- ¿quién eres tu? ¿Y por que nos has espiado desde la mañana?
· "......"- el no respondió
Cross.- Vamos a ver quién eres- Cross jalo de la mascara- ¿una mujer?
Era una mujer de cabello negro ojos del mismo color muy hermosa, quién para poder escapar le quito la toalla a Cross
· "AHHHHHHH ¡¡¡PERVERTIDO!!!"
Cross.- ¡¿A quien le dices pervertido?!- Grito Cross mientras trataba de cubrirse
La chica al ver la oportunidad escapo por la puerta mientras Cross la siguió con su traje de Adán, al estar afuera del baño escucho más gritos de varias sirvientas que estaban atrás de el algunas tapándose los ojos avergonzadas y otras mirando todo lo que podían, mientras de Cross tan rojo que un tomate se metió al baño mientras Vejita lo miraba con sorpresa haciendo un gesto muy chistoso.
Crono estaba en la cocina esperando que Chichi le sirviera de comer, mientras que Goku comía todo lo que podía, Crono estaba muy distraído desde que el emperador le había pedido ir con Goku a Kahome.
Goku.- Hmm delicioso -exclamo contento-
Chichi.- ¡Qué bueno que te guste Goku!
Goku.- si, serás muy buena esposa Chichi, ¿verdad Crono?
Crono.- Aja.-exclamo sin poner ningún tipo de atención a lo que dijo Goku
Chichi.- OH Gracias Crono, si cuando estemos casados te preparare deliciosos platillos, sé que te van a encantar
Crono y Chichi estaban disfrutando de un día de campo Crono terminaba su ultimo bocado.
Chichi.- ¿te gusto la comida que hice para ti este día Crono?
Crono.- fue un manjar en verdad- comento mientras limpiaba su boca las moronas y la miraba como galán de una novela
Chichi.- ¿deseas algún postre?-Crono se levanto y abrazo a Chichi
Crono.- no, para mi solo hay algo bueno para el postre y esos son tus labios
Chichi.- Crono... -Susurro al momento que le ofrecía sus labios- Ohhh, Crono aquí no debemos hacerlo pueden vernos ¡¡AHHH!!
Goku.- ·_· ¿qué le pasa? -exclamo Goku mientras veía a Chichi abrazar un costal de harina
Crono.- aja
Goku.- Crono- Chichi paro al momento que Crono no mostraba ninguna reacción
Chichi.- ¿Crono? ¡¡¡¡CRONO!!!!
Crono.- ah, ¿qué?
Chichi.- ni siquiera me hiciste caso verdad
Crono.- ah... este... bueno... lo siento, si, quiero postre n_n
Goku y Chichi.- ·_· ¡¡PUM!!- desmayo
Nirva camino hacia al castillo cuando se encontró con Kareonte
Kareonte.- Princesa, que bueno que estas por aquí.
Nirva.- ¿qué desea señor Kareonte?
Kareonte.- ¿señor?, vaya tantos años y aun me llamas tan formal
Nirva.- así debo llamar al consejero real.
Kareonte.- bueno quizás eso no sea por mucho tiempo- comento mientras se acercaba a ella-
Nirva.- Disculpe no me gusta que este tan cerca- exclamo la princesa nerviosa por como la miraba
Kareonte.- ¿por qué tan nerviosa Nirva? ¿Temes que te muerda?-susurro acercando su rostro al de ella
Nirva- no se me acerque o le diré a mi padre
Kareonte.- Su padre no me importa, los reyes vienen y van.
· ¡¡NIRVA!!- Kareonte paro y se alejo de ella
Nirva.- ¡¡CROSS!!
Kareonte.- je, no te fíes mucho de tu padre o hermanos-dijo al momento que se iba
Nirva corrió hacia el palacio y en la puerta estaba Cross quien la buscaba desde hacia minutos
Cross.- ¿qué tienes? Estas asustada
Nirva.- Nada
Cross la miro, estaba mintiendo algo estaba pasando, mientras Nirva estaba preocupada por lo que dijo Kareonte.