Era una mañana clara y hermosa, fue un día muy ajetreado para
ella, no podía dormir aun pensaba en la reunión que sus amigos y sus dos madres habían organizado, había
sido extenuante y difícil para ella
aparentar tranquilidad y felicidad, para que
las personas que amaba no se
diera cuanta de el dolor que aun tenia
en su alma, a pesar del tiempo que habia transcurrido desde el día en que lo
habia dejado en ese hospital. Solo una persona pudo notar el dolor que Candy
tenia dentro, Albert, su protector y amigo
la persona que habia estado con ella aconsejándola y cuidándola, Su
Príncipe de l a colina al que acababa de descubrir solo él sé habia percatado de esto así que
decidió hablar con ella y contarle algo
que había sucedido un tiempo atrás, algo que a el le hacia sentir culpable y que sabía que tarde o temprano ella se
enteraría:
b
Candy quisiera hablar contigo -dijo Albert en un tono serio
b
Claro dime-miro intrigada
b
Esto no es fácil y la verdad no se como lo llegues a tomar pero
en ese momento creí que era lo mejor para ti
b
Albert me estas asustando que pasa
b
El vino a buscarte... –dijo Albert esperando la reacción de
Candy-Terry vino a buscarte
b
¡¿Qué’!
b
si vino hace un tiempo lo encontré en un estado... bueno, lo encontré en un bar bastante ebrio
b
...-candy no pudo decir nada
b
Si candy el habia venido a buscarte y bueno yo le pedí que te
dejara que tu tratabas de ser feliz y que debería de hacer lo mismo con su vida
que no te buscara y regresara a New York.
b
Pero Albert ¿por qué no me lo dijiste?
b
Creí que lo habías empezado a olvidar y no quería
interrumpir ese proceso, yo...
Candy se había levantado abruptamente, no dejaba de pensar en lo
que acababa de oír, él la había venido a buscar y ni siquiera tuvo lo
oportunidad de verlo otra vez, aunque sabía que si lo hubiera hecho jamás lo
hubiera dejado ir.
b
Candy podrías ser capaz de perdonarme por esta intromisión por
parte mía nunca quise lastimarte
b
No esta bien –interrumpió Candy pensativa junto a la ventana de
la sala- fue lo mejor para ambos el
debe cumplir su deber con Susana... lo prometió... y bueno, además yo lo he
empezado a olvidar-dijo Candy en un tono sombrío y triste.
b
Pequeña no te engañes, sabes que eso no es cierto-Albert se
levanto y sé dirigió a donde estaba Candy-
Mírame a los ojos y dime que lo has empezado a olvidar que realmente ya
no lo amas- hizo que Candy lo mirara a sus profundos ojos azules-dime que no lo
has extrañado todo este tiempo y que no estas arrepentida de lo que
hiciste cuando se separaron, dímelo
Candy
Candy al verse en los ojos de Albert, empezó a recordar las
cosas que había pasado con él desde él día que lo conoció en la colina de Pony
hasta el día en que supo que él era el famoso Tío Abuelo, en ese momento supo
que no podía mentirle no a él:
b
Yo... yo... ¡¡OH Albert aún lo amo no he dejado de hacerlo!!-
dijo sintiendo que las lagrimas corrían por su mejilla- pero él tiene un deber
que cumplir él le debe su vida, debe estar con ella y hacerla feliz.
b
Pero Candy, alguna vez pensaste en su felicidad, en tu
felicidad- le dijo mientras la miraba con ternura- pensaste que esta viviendo
lo mismo que su padre vivo que por honor dejo ir el amor, pensaste que él será
infeliz estando casado por una obligación y no por que estar profundamente enamorado, como lo está
de ti.
b
Albert... yo- dijo sollozando entendiendo lo que pasaba- ¡¡nunca
quise hacerle daño, nunca!!
b
Lo sé Candy pero ahora los dos han cometido el error más grande
de su vida, tú al no darle opción y él al no seguir su corazón ahora ambos
tendrán que buscar la manera de enmendar ese error.
b
No se como hacerlo... -dijo ella aún sollozando
b
No será fácil pequeña, pero sé que lo lograras eres una mujer
fuerte e independiente sé que es difícil pero lo harás además-se detuvo un
momento
b
Además que Albert-dijo ella un poco más tranquila
b
Bueno te quería además hablar de otra cosa-dijo arqueando una
ceja- es sobre la familia
b
Que pasa con los Andley-lo miro curiosa
b
Quisiera saber si... estas en tu derecho si no aceptas-miro
indeciso- te quería pedir que te fueras a vivir a Lakewood conmigo por una temporada, sería solo
mientras me acostumbro ha esta atareada
vida que me toca.
b
Albert no lo sé, yo...
b
Te lo pido como un favor, sabes que no soy muy bueno en esto
además no quiero ir solo a esas reuniones
donde miles de mujeres te asedian con solo saber que eres dueño de una gran fortuna, no me puedes
dejar morir solo-la miro con un cara de
ruego-te prometo que solo será por un tiempo y podrás seguir trabajando y
visitando el Hogar de Pony.
b
Albert no lo sé
b
Vamos Candy quiero que
estés conmigo como mi hermana y amiga imagina que estas representando a Stear y
Anthony y si te preocupa contratare a una persona que te ayude a refinar tus
modales y a alguien que sea como tu
dama de compañía por ejemplo Dorothy si
así lo deseas además con tu naturalidad y encanto estoy seguro que mucha gente
te admirara, vamos Candy, además te servirá para cambiar de ambiente.
b
Déjame pensarlo esta bien, pero a la Tía Abuela no le molestara
que viva con ustedes.
b
No lo creo ella decidió irse una temporada a escocia él medico
le pidió que descansara por un tiempo
b
Entiendo bueno lo pensare y te comunicare mañana mi
decisión esta bien
b
Hazlo y recuerda que siempre contaras con mi apoyo- dijo con una
sonrisa Albert- además eres una Andley,
y como mi protegida te prometo que tratare de hacerte feliz y respetar tus decisiones.
b
Gracias Albert-dijo Candy visiblemente más calmada- por estar
siempre que te necesito, pero debo pedirte que no le digas nada a nadie acerca de lo que me has dicho acerca de
Terry no quisiera preocuparlos
b
No te preocupes pero dime que harás con respecto a ese asunto
b
No lo sé, quisiera no pensar
más en eso él esta comprometido
y bueno veremos que pasa
b
No lo dejes así pequeña, encuentra una solución a eso que
sientes pero esta bien no tocare mas el tema, pero por hoy me retirare y bueno
vendré mañana para que almorcemos juntos esta bien
b
Si Albert te acompañare a la puerta...
Candy seguía pensando en la proposición de Albert tal vez era
una buena oportunidad para despejar su
mente además pasaría mas tiempo
con Annie y Archie,
también habría la oportunidad de buscar gente que quiera dar donativos al hogar
y adoptar niños, además no perdería del todo su independencia y sin la Tía Abuela
cerca los Leegan sé mantendrían alejados de ella después de todo lo que paso
con Neil. Tomaría la decisión mañana en la mañana y se la comunicaría a Albert en la tarde. Después de esto se fue
a dormir pensando en que Terry el hombre que le había robado el corazón había
ido por ella y quizá Albert tenía razón
habían cometido un error pero no había nada que hacer y quizá ya la había
olvidado, quizá ya no la amaba pero una voz
interior le dijo en un susurro “ no es así el aún te ama” y después de
este pensamiento se quedo profundamente dormida.
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Mientras tanto en New York ese mismo día unos ojos azul verdoso
miraban melancólicos hacia la nada, habían pasado unos meses desde que la dejo
ir y desde entonces no se ha dejado de reprochar:
b
¿Por qué le dejaste ir?. ¿Por qué lo hiciste? ¿No la amabas lo
suficiente?-le decía su voz interior- si la amo por eso lo hice ella
me hizo prometerle que cuidaría de Susana y así lo haré, aunque allá firmado mi
sentencia de muerte con esto.
Después de haberse ido de Chicago Terry regreso a New York al
lado de Susana la cual lo recibió pensando que quizá se había dado cuenta que
su felicidad estaba con ella, pero con el tiempo se dio cuenta de que jamás sería así, Terry estaba trabajando en
la compañía de teatro con Robert
Hattaway, esté la había permitido regresar a trabajar pero empezaría con otros
papeles mas chicos aún así el trabajaba duro y seguía cautivando con sus
actuaciones. Seguía manteniendo amistad con Albert con cartas debes en cuando pero nunca se
mencionaba el nombre de Candy y el no se atrevía a preguntar por el temor de
que ella lo hubiera olvidado y de que realmente estuviera comprometida, eso no
lo podrá resistir.
De repente una voz lo saco de sus pensamientos
b
Terry- dijo la voz de Susana- creo que es tiempo de que
hablemos.
b
Sobre que quieres hablar Susana-dijo Terry en un tono frió pero
tratando de ser amable- te dije cuando regrese que nos casaremos en cuanto
acabe la temporada de teatro.
b
No es eso-dijo Susana tratando de mantener la calma- creo que...
no me queda el tiempo suficiente para eso así que he tomado una decisión
b
¿De que hablas Susana? Te dije que nos casaríamos te di mi
palabra no es así-dijo Terry con un tono de enojo
b
Lo se aceptaste esto por ella-dijo con tristeza- por que te hizo
prometer que me cuidarías... por que te ama tanto que pudo dejarte ir... pero
en este tiempo que te fuiste hasta hoy
he pensado muchas cosas y creo que... no podemos seguir así, se que nunca me
llegaras amar y que me tienes solo rencor y lastima-dijo empezando a sentir que
su voz se quebraba-creí que con el tempo me llegarías amar pero me he dado
cuento que nunca sucederá, ella está en tu mente y en tu corazón y quizá nunca
salga de ahí.
b
Susana he tratado de amarte y no te tengo rencor o lastima, yo
solo...
b
No digas nada, es mejor así. Cuando te fuiste tuve tiempo para
pensar y vi que no era justo para ti, para ella y para mí el que nos casáramos,
solo seríamos infelices y tanto tu como yo merecemos felicidad-dijo mientras
ponía su silla junto a Terry
b
¿Qué quieres decir?-dijo con un gesto de curiosidad
b
Quiero decir que me voy, mi tren parte en unos días y he querido
arreglar las cosas contigo cara a cara, quiero pedirte perdón por el daño que
te he hecho, espero que algún día me llegues a perdonar todo lo que te hice sufrir.
b
¿De verdad te vas?, Y ¿a dónde y tu madre que ha dicho de todo
esto?-dijo aún sorprendido con la noticia
b
Si Terry me marcho, a mi madre no le ha quedado otra opción más
que aceptar ya que le he dicho que si no se iba conmigo me iría sola, ella se
ha adelantado a California con mis Tíos ellos han aceptado que nos quedemos con
ellos y bueno ahí comenzare mi rehabilitación y quizá estudie algo o de clases
de actuación no lo se aún
Terry no lo podía creer le estaba diciendo que se iba que le
regresaba la libertad “pero ¿para qué? Ella probablemente me ha olvidado “ y
este pensamiento hizo que sintiera una punzada en el corazón
b
Me alegro por ti Susana, espero que llegues hacer feliz –le dijo
mientras le daba la mano- y perdóname tu por nos poder amarte te aseguro que
por mi parte todo está olvidado
b
Gracias pero no podía
obligarte a amarme eso se da solo, además tu corazón está ocupado por alguien
más y bueno también te quería decir que
me quedare en un hotel mientras me voy uno de mis primos ha venido para
llevarme.
b
Realmente espero que te
vaya bien, y ojalá algún día encuentres alguien que te valore y te ame como lo
mereces
b
Gracias bueno ahora me retiro, mi primo espera afuera y tenemos un compromiso, pero entes quiero que
me hagas un último favor
b
Sí claro
b
Búscala por favor ve con ella
no dejes ir tu felicidad una vez más y entrégale esta carta en donde le
pido perdón y le doy las gracias por salvarme la vida y por haberme querido
ceder su lugar, y de verdad espero que sean felices, adiós Terry-dijo mientras
salía del cuarto.
b
Adiós Susana-dijo mientras volteaba de nuevo a la ventana y oía
como la puerta sé cerraba-gracias por la libertad, pero para que me sirve si no
la puedo tener a ella ahora esta
comprometida y quizá pronto sé casara-avanzaba hacía su escritorio mientras
decía esto.
Terry tomo un libro con una cubierta de piel negra que estaba encima de su escritorio, lo
abrió y empezó a buscar un ahoja en blanco, él había empezado a escribir una
especie de diario desde que ella se fue
había pasado noches en vela escribiendo todo lo que sentía, desahogando
sus frustraciones. A veces le escribía
cartas a Candy pero nunca había tenido el valor de mandarlas y tan solo las
había guardado junto con dos recortes uno
del aviso de la presentación del Tío abuelo de la familia Andley con una
invitación que el mismo Albert le había mandado para que lo acompañara ese día
y el otro recorte era el que le había dado la muerte era la noticia de que
Candy estaba comprometida, leyó una vez más el recorte u empezó a escribir:
10 de Abril de 1915
Mi Pecosa:
Hoy Susana me ha dado mi
libertad, se ha ido y me ha pedido que regrese contigo, a ti, pero como hacerlo
cuando sé que estás comprometida con otro que no soy yo, sé que me he vuelto un
cobarde he cambiado ya no soy el mismo, desde que te fuiste me volví una
persona sombría y sin esperanza, cualquiera creería que con lo que paso estaría
feliz e iría a buscarte pero no puedo perturbar tu paz.
Sabes que te amo más que a nada nunca pensé llegar amar así a
alguien, sabes que no miento ojalá pudieras ver como me siento por dentro
cariño, tu estas haciendo tu propio camino, y quizá estés mejor ahora yo
tratare de vivir y esperare a que la luz matinal llegué a mi
vida.
No quiero llorar esta noche, pero no lo puedo evitar me haces
mucha falta, te he imaginado viniendo a verme sobre un cielo estrellado pero es
solo eso un sueño.
Esa noche cuando te fuiste sabía que no te vería otra vez, ahora
que haré de mi vida, solo puedo dedicarme en alma y cuerpo al teatro sé que te
enojarías si me oyeras hablar así pero que más puedo hacer por lo pronto veré a
mi madre quizá pase una temporada en su casa, sabes que ha admitido que soy su
hijo es increíble me siento feliz por que cuento con su apoyo, pero en fin
empezare a empacar nos han dado una semana de descanso y bueno me iré con ella
quizá me sirve distraerme.
Espero que seas feliz y
me tengas al menos como un bello recuerdo por que yo te recordare como lo que
eres el AMOR DE MI VIDA.
Tuyo
Eternamente
Terry
Después de esto Terry se fue a recostar, paso el resto de la
noche pensando que haría, después de todo debía empezar hacer algo “¿quizá...”
pensó y trato de dormir un rato ya que al otro día debía ir temprano con su
madre.
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Sabes- se oyó una voz en el portal de las rosas- a veces los
humanos nos complicamos demasiado la vida ¿no lo crees?
Si- contesto alguien más- damos tantas vueltas a lo problemas
que no tenemos el valor para enfrentarlos
¿Crees que debamos ayudarlos?-siguió lo primera voz- tu sabes
hacer algo para abrirles los ojos
No lo sé, a ambos se les han abierto los ojos, ya les han dicho
que deberían hacer pero el miedo de no saber que es lo que siente el otro es
más grande y probablemente no se den
cuenta de las cosas hasta que sea demasiado tarde
Pues yo creo que no solo ellos dos necesitan ayuda, Patty,
Archie, Annie, Albert también la necesitaran.
Sí lo sé necesitaran mucha ayuda-decía la segunda voz mientras
tomaba una Dulce Candy en sus manos- pero solo intervendremos cuando sea
necesario que te parece si solo le damos por lo pronto algo de calma a Candy y a Terry quizá eso los ayude
Tal vez, gracias a Dios la Tía Elroy no estará por acá espero
que eso nos evite más problemas ¿no lo crees?
Si la Tía no es mala solo que no ha visto como son en realidad las cosas
Bueno vamos a empezar con esto
Esta bien
Y de repente las dos figuras que paseaban por el jardín
desaparecieron con la aurora.