El invierno comienza a retroceder, aunque en este año el frío en nuestras tierras ha sido extremo. La nieve aún baña el suelo de casi todas las tierras de Rokugan, e incluso el mar se ha congelado cerca de algunos pueblos costeros.

No es un buen augurio. Aún no sabemos si las cosechas sufrirán este año...

La afamada corte de invierno se ha celebrado en los notorios palacios del Escorpión, entre las suntuosas salas de Kyuden Bayushi. Los Grandes Señores de Rokugan y el mismo Emperador aguardan impacientes la llegada del mes del Tigre para comenzar el camino de regreso a sus tierras. Y los cortesanos siguen entregados a sus intrigas, cuchicheando tras sus abanicos y comentando los rumores que corren acerca de la hermosa Doji Masahime, una de las más bellas mujeres del Imperio, y el mismo Emperador. Dicen que tras la muerte de su amada Hochiahime hace cuatro años, nunca se había visto al Hantei en compañía constante de una dama.

Pero no todo, por desgracia, son buenas noticias, y todo aquel que no se cubre la cara con un abanico tiene la vista fija sobre un único lugar en el Imperio; Toshi Ranbo (lugar #81 en el Mapa de Rokugan).

Al este de Otosan Uchi se extienden las afamadas y extensas tierras del León. Al norte de sus provincias se encuentra la fortaleza grulla de Toshi Ranbo, punto de contención eterno entre los dos clanes desde que, hace dos años, el General Doji Senzo desalojara a sus ocupantes León en una hábil maniobra.

Desde entonces, León y Grulla mantienen una tensa discusión acerca de la propiedad del castillo y la provincia de Toshi Ranbo. Mientras Akodo Toturi, bajo instrucciones del Emperador, mantiene la paz con la Grulla en torno a éste castillo, Matsu Tsuko parece obsesionada con la caída de la fortaleza a manos del León. Un grupo de diplomáticos lleva embarcado en continuas negociaciones y desplegando todo tipo de esfuerzos para mantener la situación bajo control.

En la Corte la tensión entre Grulla y León ha sido evidente. Varias veces ha amenazado la guerra. Pero el Emperador y su Campeón Esmeralda, Doji Satsume, han prohibido terminantemente el que ocurra una guerra en Toshi Ranbo.

(Comienzo de la Campaña: Negociaciones en Toshi Ranbo El diplomático del León Matsu Agame, junto a su hijo Izedan y el Shikken imperial Tankenka encabezan una delegación ante Doji Senzo, señor de Toshi Ranbo. Parece que la tensión entre Grulla y León alrededor de este enclave comienza a amainar a raíz de las buenas relaciones entre éstos samurai y los diplomáticos Grulla presentes, los jóvenes Doji Atemi, sobrino de Senzo, y Asahina Denosei, ambos discípulos de Tankenka.

Y mientras tanto, una importante amistad parece haberse forjado entre Ide Tadaji, el embajador del Unicornio, y Doji Shizue, una cortesana de la Grulla. Han pasado largo tiempo juntos, paseando entre los jardines del Palacio Bayushi y a veces en compañía del embajador Escorpión Shosuro Taberu. Nadie sabe las extrañas alianzas que pueden haberse forjado en éste invierno.

En la sede del Escorpión, el tema más candente aparte de la posible guerra ha sido la negociación de ciertas rutas de abastecimiento entre el Fénix y el Clan Menor del Mantis. El irascible Yoritomo, daimyo del Clan, ha mantenido acaloradas discusiones con Isawa Kaede, la Acolita del Vacío sobre estos derechos comerciales. El Escorpión ha intercedido varias veces mediante la Dama Kachiko, y el Emperador parece fijarse cada vez más en las habilidades de la joven esposa de Shoju.

Kyuden Bayushi ha sido también el lugar elegido para las celebraciones del decimosegundo cumpleaños del joven heredero imperial Sotorii. Al amanecer de tan celebrado día una extraña estrella roja brillaba en los cielos como un rubí, y Asahina Hiro, el venerable astrólogo de la Grulla, lo interpretó como un portento de dificultad para el imperio, y una próxima era de tinieblas para Rokugan. Algunos han aprovechado tan nefasto signo para insinuar que esta señal marca el descontento de la Madre Amaterasu con el heredero imperial, que siente que no es digno del linaje al que pertenece. Por supuesto, nadie ha osado decir esto abiertamente.

Un representante de un Clan Menor, Toritaka Tsimari, ha traído curiosos rumores de gigantescas serpientes aterrorizando sus pueblos en sus tierras cerca del bosque Shinomen. Kuni Atushi, primo de Yori y Gran Maestre de la Hermandad de los Tsukai-Sagasu ha mandado a un grupo de Cazadores de Brujas a investigar.

(Módulo; Honor de Ocaso) En la Muralla del Carpintero, el alineamiento de las estrellas del Tejedor y Kappa traen portentos de un alzamiento en las Tierras Sombrías. Efectivamente, al amanecer el Castillo Kuni está a punto de caer por la extraña incompetencia de Hiruma Makasu, general de la fortaleza.

Los samurai que luego fueron personalmente recibidos por Hida Yakamo, hijo del Gran Oso, pronto se dan cuenta de que sus destinos están atados. Los hermanos Hiruma Mha e Hiruma Matsuda fueron estacionados allí bajo el mando de Hida Shiroi. El ronin Mirumoto Takashi había llegado a la Muralla en el transcurso de sus viajes buscando la sabiduría junto a su amigo Akodo Norifume de la Casa del León. Doji Atemi, atendido por Shiba Nagaso, un Fénix que se había educado en el Dojo de los Kakita y que se había criado junto a Atemi, atendía a su boda con Hida O-Ishiko, hermana a su vez de Hiruma Mha y Matsuda.

(Enlace de Doji Atemi con Hiruma O-Ishioko) La boda transcurre con normalidad y Doji Atemi recibe el feudo que tradicionalmente se entrega a los hijos menos influyentes de su familia: la Provincia del Trueno sobre el Agua. Bajo jurisdicción del Cangrejo pero controlada por un administrador Grulla, el lugar pronto se convierte en un difícil desafío para Doji Atemi. Hiruma Mha permanece en la muralla, pero su hermano Matsuda parte a la provincia para servir de general al joven Doji, junto Takashi, su fiel amigo y ahora aceptado en la familia Hida por su valeroso comportamiento. Akodo Norifume regresa a tierras del León para reclamar el daisho y la armadura de su padre.

El mismo Hida Kisada reconoce la Gloria de estos héroes y les concede una provincia al norte de las Tierras del Cangrejo; Dashita no Heigen. El Campeón Esmeralda en persona bendecirá a los nuevos terratenientes en Otosan Uchi, donde recibirán la posesión de Tierras de parte del Emperador.

1123: Corte de Invierno de Kyuden Seppun

En el mes del Dragón un gran ejército de 1800 bushi del Escorpión liderados por el general Bayushi Tomaru, avanzan sobre la Llanura de la Batalla de los Siete Días y asedia el Castillo Usagi bajo el pretexto del asesinato del Magistrado Soshi Yukio en la Corte de Invierno, del que acusan a Usagi Ozaki, hijo del daimyo del Clan de la Liebre. Sorprendentemente, la presencia de los heraldos Miya y una pequeña compañía de Miharu (Guardia Imperial) muestra el beneplácito del Emperador ante esta escaramuza.

(Módulo: Los Colmillos de la Liebre) Los Usagi consiguen aguantar el asedio gracias a la ayuda de un grupo de viajeros endeudados con Ozaki. Con la llegada del Campeón Esmeralda Doji Satsume, que declara que la Liebre ha mostrado su inocencia a través de la Gloria de sus guerreros, el Escorpión se retira, pero recordará sin duda a estos guerreros entrometidos. El Clan de la Liebre les jurará eterno apoyo por su inestimable ayuda.

En Toshi Ranbo, la tensión aumenta. Un ejército dirigido por Matsu Tsuko se dirige al castillo amenazando el proceso de paz que el Shikken imperial Tankenka y su grupo de asistentes (Asahina Denosei y Doji Atemi) mantienen a través de su mediación entre el daimyo de Toshi Ranbo (Doji Senzo) y los diplomáticos del León Matsu Agame y su hijo Izedan.

Corren rumores de una inmensa roca que ha caído del cielo sobre tierras del Fénix. Nadie sabe con certeza si son tan solo cuentos de viejas o un verdadero misterio.

El mes de la Serpiente trae extrañas historias de una plaga de nezumi en tierras de los Daidoji. La Grulla parece tranquila al respecto, y ha rechazado las ofertas de ayuda del Cangrejo.

Las nieves causan que la cosecha de primavera sea bastante deficiente. A pesar de esto, no se registran grandes problemas entre el campesinado.

Verano; La Furia de Amaterasu: Una ola de calor sacude Rokugan con la entrada del verano. Muchos dicen que Amaterasu está descontenta con el Imperio Esmeralda y advierte a sus hijos que su camino no es de su agrado.

Las provincias se hallan tranquilas, sus daimyos gobiernan en paz en la mayoría de ellas y no hay noticias alarmantes. Matsu Tsuko ha retirado sus ejércitos de Toshi Ranbo y las tensiones entre Grulla y León parecen tranquilizarse... por el momento. El verano jamás ha sido una buena temporada para hacer la guerra.

Sin embargo, hay una provincia en particular que ve como ocurren una serie de acontecimientos extraños y bastante seguidos dentro de sus tierras; Dashita no Heigen.

(Módulo: La Senda del Daimyo) Doji Atemi se encuentra con un ejército de unos 1000 bushi del Cangrejo liderado por el mismo hermano del Gran Oso, Hida Tsuru, que avanza hacia sus tierras con la intención de utilizar su provincia como base para su campaña contra el Halcón. Aparte de las evidentes tensiones entre el Cangrejo y el Grulla, Atemi deberá manejar con cuidado sus relaciones con el Halcón.

En el mes de la Cabra Tsuru lanza un ataque contra un pequeño pueblo en tierras del Halcón. Su excusa es la de "proteger" a los Campesinos ya que el Halcón ha demostrado ser incapaz de esto. Luego deja al daimyo de Dashita no Heigen a cargo de todo, ordenándole que mantenga la provincia a toda costa.

Otoño; El Espectro de la Guerra: El otoño trae menos calor al Imperio Esmeralda, y los primeros rumores de guerra.

(Módulo: La Sombra del Prestamista) En el mes del Mono la provincia de Dashita no Heigen parece volverse el foco de pequeños eventos que más tarde serán de tremenda importancia. Aparte de la evidente tensión entre el daimyo local y el Clan del Halcón, una caravana del Unicornio es emboscada en las inmediaciones de un pequeño pueblo de la provincia llamado Nagano, a orillas del Río de Oro. El cargamento es de arroz y grano, y entre otras cosas los magistrados descubren un pequeño palanquín en cuyo interior yace un Otomo. Rodeando el palanquín, y si los magistrados registran los cadáveres, descubrirán que entre los guardias hay Miharu- guardia Imperial. Entre los ropajes del Otomo hay un papiro codificado- una carta del misterioso Prestamista al mismo Emperador.

En el mes del Gallo,de camino a la Corte de Invierno de Kyuden Seppun, el embajador Matsu Kiare es asaltado aparentemente por un grupo de guardias Daidoji. La tensión entre Grulla y León escala una vez más. Los ejércitos del León vuelven a armarse, listos para marchar.

(Módulo: Guerra u Honor) Los diplomáticos en Toshi Ranbo intentan solucionar el conflicto por todos los medios. El Shikken reúne a todos los involucrados en el proceso de paz en la fortaleza de la Grulla. Los Héroes de la Canción atienden a la llamada del Shikken Tankenka.

A finales del mes del Perro, durante el Festival Bon, Hida Kisada y Bayushi Shoju se reúnen en el palacio Bayushi. Comienzan a urdir el plan que destronará al Hantei tras descubrir una oscura profecía en las bibliotecas del Fénix que declaran que Hantei XXXVIII será poseído por el espíritu del mismo Fu Leng.

Invierno; Singoku Jidai: La llegada de los nobles a Kyuden Seppun, ciudad Imperial, indica el comienzo de esta compleja Corte de Invierno. Este año ha vuelto a nevar y las tierras de Otosan Uchi se muestran particularmente hermosas gracias a la nieve. Sin embargo, en las montañas de la Espina del Mundo muchos pasos han sido cortados por avalanchas y derrumbamientos, y los únicos puntos de comunicación son el Paso Beidén y el paso cercano a Soshi no Shiro. El Clan del Mantis ha puesto también una flota en el Pueblo de las Montañas Sobre el Océano y la Ciudad de la Playa Solitaria para transportar gente al puerto de Otosan Uchi por las rutas comerciales del Mantis.

A principios del mes del Jabalí, un agotado Hiruma llega a la Corte del Emperador portando una carta de parte del Gran Oso. El emisario del Cangrejo, Kuni Yori, llega escasos días después.

En la Corte, una vez los nobles han llegado, se desata el caos. Problema tras problema parecen acercar al imperio al borde de múltiples guerras.

Principalmente, el Emperador vuelve a recalcar que la paz debe permanecer entre el León y la Grulla. Sin embargo, la tensión entre el Cangrejo y el Clan del Halcón no pasa inadvertida. El Cangrejo presenta sus explicaciones ante una corte algo escéptica, pero Kuni Yori queda sorprendido cuando Ide Tadaji, emisario del Unicornio, declara que la familia Moto de su Clan está dispuesto a defender las tierras del Halcón si el Cangrejo no abandona inmediatamente el pueblo conquistado. Confusos y furiosos, los enviados del Cangrejo regresan de inmediato a sus tierras para consultar a su daimyo. Kuni Yori, sin embargo, se queda en la Corte Imperial.

El León ha acusado abiertamente a la Grulla del ataque sobre su embajador. Además, acusan a los Iuchi de no haber completado su parte del trato comercial, ya que un cargamento de arroz jamás llegó a su destino. Los Iuchi insisten que no ha sido culpa suya, y buscan desesperadamente ayuda para apaciguar al León. Ide Tadaji ha intentado conseguir el arroz de la Grulla, diciendo que es para suministrar al Halcón durante estos meses. Si la Grulla se llegara a enterar de que los Unicornio están abasteciendo al León, sin duda habría más problemas.

El mes de la Rata prosigue en la corte mientras que Rokugan se parapeta contra el duro invierno.

(Continuación del Módulo: Guerra u Honor) En Toshi Ranbo, la situación empeora dramáticamente con los acontecimientos en torno a las relaciones entre los diplomáticos. Finalmente, a principios del mes del Buey, y tras años de delicada diplomacia y paz, Matsu Tsuko, daimyo de la familia Matsu del León, precipita una crisis diplomática que desemboca en una guerra contra la Grulla. Mientras las fuerzas de Matsu Tsuko se preparan para la guerra, Akodo Toturi, como Campeón del Clan, le ordena que se retire y acude a Otosan Uchi para presentar la situación al Emperador. Hantei XXXVIII desautoriza el ataque, pero a los cuatro días de lucha el cuerpo de Doji Senzo es expuesto en la muralla y dejado a pudrir como un perro. Toshi Ranbo vuelve a manos del León, y los diplomáticos supervivientes regresan a sus tierras, incluyendo a Doji Atemi y su séquito que regresan a la provincia del Trueno sobre el Agua.

Como consecuencia de la crisis de Toshi Ranbo, la Casa del León se polariza entre los Akodo y los Matsu hasta el punto de que una guerra civil parece inminente.

El Emperador comienza a ausentarse cada vez más durante las reuniones de la Corte. Corren rumores que su concubina Doji Masahime está gravemente enferma, pero que una anciana llamada Moto Yaeko, sacerdotisa de los Servidores del Firmamento (un culto bien establecido en Otosan Uchi al que pertenecen muchos honorables Señores de Rokugan) tiene los remedios que pueden reducir su mal. Las malas lenguas hablan de una plaga que pronto se apoderará de la Corte.

En el mes del Tigre los asuntos imperiales son delegados directamente a Kakita Yoshi y el Campeón Esmeralda Doji Satsume. Bayushi Kachiko, sin la benevolente atención del Emperador, pierde mucho peso político en la Corte Esmeralda.

(Módulo: El Regreso de los Naga) En Dashita no Heigen, los Héroes encuentran una nueva amenaza en las entrañas del bosque Shinomen. Las Naga aparecen por primera vez en masa en Rokugan desde el fin de su Gran Sueño, y atacan una población humana en esta provincia. Tras una expedición al bosque Shinomen, los Héroes oyen por primera vez la leyenda de las Lágrimas de Amaterasu.

El final del invierno trae consigo el fin de las nieves y el principio de la Gran Guerra de los Clanes; Singoku Jidai, la Época del País en Guerra.

1124: Corte de Invierno de Kyuden Akodo

Ante esta amenaza, la Grulla ha desplegado la mayoría de su ejército, irrisorio en comparación con la inmensidad del poder del León. El mismo Campeón Esmeralda se encuentra en la frontera, asegurándose que ninguno de los dos bandos quiebra la paz del Emperador.

Al Este, las huestes montadas del Unicornio cabalgan hacia la provincia de Dashita no Heigen. A su cabeza, un escuadrón de Guardia Imperial y heraldos Miya que indican el permiso del Emperador para resolver el conflicto mediante la guerra. Al mismo tiempo, el ejército de Bayushi Tomaru arrasa el castillo de la liebre, destruyendo el Clan y no dejando ni una piedra de la fortaleza sobre otra.

(Módulo: La Ira del Unicornio) El mando del Cangrejo no logra entender las razones que el Unicornio puede tener en apoyar la causa del Halcón, ni tampoco como el Emperador ha decidido permitir su intervención. Aún así, preparan su defensa mientras aguardan refuerzos. Hida Tsuru cae en una de las primeras batallas al frente de su unidad de caballería, a manos de Shinjo Hanari. Es sustituido en el mando del ejército por Hida Shiroi, su hijo mayor.

Al mismo tiempo, comienzan los rumores de que el Hantei ha caído enfermo. Algunos cortesanos aseguran que Sotorii, su hijo mayor, ha sido enviado al Castillo del Campeón Esmeralda para evitar un contagio. Dicen también que el Imperio está ahora en manos de Kakita Yoshi y el Campeón Esmeralda.

La cosecha este año vuelve a ser mala, y el hambre comienza a extenderse por las tierras de Rokugan. Numerosas revueltas del campesinado asolan las provincias, y los samurai llegan a creer por un momento que el Orden Celestial se está tambaleando. Los Ronin y los bandidos aumentan dramáticamente sus actividades a lo largo y ancho de Rokugan.

Verano; El Emperador Enclaustrado: Con el Verano, la condición de la enfermedad del Emperador es ya ampliamente conocida entre la nobleza de Rokugan. Los cortesanos imperiales han comenzado a referirse al Hantei como el Emperador Enclaustrado, pues tan sólo sus más leales servidores (Bayushi Kachiko y Doji Satsume) son admitidos en su presencia.

Sotorii visita varias veces y en secreto los Palacios del Escorpión durante el verano. Hay rumores de que se ha reunido con los daimyos del Cangrejo, del Dragón y el Escorpión. El misterioso Isawa Tadaka le ha acompañado.

Espías Daidoji consiguen descubrir los tratos del Unicornio con el León, y amenazan con cobrar sus deudas si el Unicornio no deja de suministrar al Clan del León. En la Corte Imperial, Ide Tadaji anuncia esto a Matsu Kiare que, enfurecido, declara su apoyo al Cangrejo en la guerra del Clan del Halcón.

(Módulo: El Final de una Guerra) En el caluroso mes de la Cabra, exploradores del Señor de Dashita no Heigen avistan las banderas del León avanzando por la llanura del Trueno, hacia las provincias del Halcón. El ejército, una fuerza compuesta por miembros de la familia Ikoma del León, al mando de Akodo Norifume, avanza a través del frente del Halcón para enfrentarse al Unicornio. Ante las fuerzas combinadas del Cangrejo y el León, el Unicornio retrocede y abandona el asedio del Castillo de la Luciérnaga. El Clan del Halcón queda sólo ante Hida Shiroi, que bajo ordenes del Gran Oso arrasa las tierras de la familia Toritaka, ejecutando a la familia y efectivamente destruyendo al Clan Menor del Halcón. Los ejércitos de los Ikoma regresan con el final del verano a sus tierras.

Otoño; Paz Engañosa: El mes del mono trae una repentina tranquilidad a Rokugan. Tras el fin de la tensión entre el Unicornio y el Cangrejo, el Este del Imperio regresa a la normalidad y los daimyo pueden encargarse de pacificar sus provincias. A pesar de las rebeliones de campesinos, la estabilidad que proporciona el final de la guerra facilita inmensamente la pacificación del campesinado.

Un año más, los Cortesanos se preparan y se embarcan en sus viajes a la Corte de Invierno. Este año se celebrará en el Palacio Akodo, por decreto imperial. Sin embargo, la Dama Kachiko informa que el Emperador se encuentra demasiado enfermo como para asistir, y envía al Campeón Esmeralda junto al heredero Sotorii en su nombre. El León no parece demasiado contento con las noticias, pues una Corte de Invierno sin Emperador es como un gempukku sin samurai.

(Módulo: Un Viaje Inesperado) El Señor de Dashita no Heigen recibe una invitación para atender a la Corte de Invierno de éste año. Llegará al Palacio Akodo a finales del mes del Perro, poco antes del Festival Bon.

Este invierno se presenta menos crudo que los anteriores, y los Señores de Rokugan esperan una cosecha próspera. Tan sólo nieva al norte del Imperio, y los pasos permanecerán abiertos durante la temporada, facilitando el comercio y el mantenimiento de la Ley.

Invierno; Preludios de Sangre: La Corte de Kyuden Akodo se celebra en el antaño glorioso palacio de la familia ancestral del León. Las amplias estancias y el lujo conservador y sencillo del castillo se reconocen rápidamente, al mismo tiempo que conserva sin lugar a dudas su función como fortaleza en tiempos de guerra. La Corte se lleva bajo el más rígido protocolo, presidida por el Príncipe Hantei Sotorii, el Campeón Esmeralda y Akodo Toturi.

En la ausencia del Emperador, la Corte de Invierno de Kyuden Akodo se convierte rápidamente en un hervidero de conspiraciones y rumores acerca del destino de Rokugan. Algunos dicen que el Emperador ha muerto y que Kachiko dirige el rumbo del Imperio, mientras que otros miran al Clan de la Grulla con una mezcla entre sospecha y respeto, temiendo un golpe de estado.

Gran parte de las discusiones enfrentan una vez más a la Grulla y al León. Por otro lado, el Clan del Mantis muestra su furia ante el Escorpión por un turbio negocio entre Kachiko, el Clan del Fénix y Yoritomo. El Clan Menor amenaza con la guerra si no se les restituyen las pérdidas de inmediato.

Otaku Kamoko tiene un furioso intercambio con ;atsu Tsuko que culmina en un duelo entre Matsu Tsuko y la daimyo de las Damas Otaku. A pesar de los intentos de Ide Tadaji y Matsu Hokitare, a mediados del mes del Buey, ante un increíble número de personas, las daimyos de la familia Matsu y Otaku se enfrentan en un jardín cubierto de nieve. Dos gritos interrumpen la mañana, y la imponente figura de Matsu Tsuko se yergue victoriosa ante la Dama de Batalla Otaku.

Numerosos duelos entre cortesanos menores salpican la nieve bajo el castillo Akodo. parece como que, en ausencia del Emperador, los Clanes encuentran luz verde para destruirse los unos a los otros. Tan sólo la próxima cooperación entre Akodo Toturi y Doji Hoturi consigue evitar que la violencia ascienda a limites intolerables.

Con el final de esta tensa Corte de Invierno los Señores del Imperio parecen incluso ansiosos de regresar a sus hogares. Esta vez, las nieves no les impiden el marcharse el día después del año nuevo, como es costumbre desde tiempos ancestrales.

1125: Corte de Invierno de Kyuden Miya

En un intento de mantener la normalidad, el Campeón Esmeralda atiende personalmente junto con un grupo de guardia imperial y heraldos Miya a la zona de guerra. Kakita no Shiro no tarda en caer ante la furia de los Matsu. Akodo Toturi apela directamente al Emperador, pero no recibe respuesta. Matsu Tsuko simplemente dice que no aceptará ninguna orden que no venga del Emperador en persona, ya que Toturi se ha convertido "en una marioneta de la Grulla."

Un grupo de influyentes daimyos y generales de los Akodo organiza una reunión con las principales líderes de la familia Matsu, durante la cual son asesinadas. Después cometen Seppuku con la esperanza de salvar a sus familias.

Ante la noticia Matsu Gohei, lugarteniente de Tsuko, se dirige al sur, encabezando una fuerza de élite Matsu y desembarca- se dice que con ayuda de los barcos-tortuga Cangrejo o incluso por la Mantis- por sorpresa en las provincias Asahina, destruyendo los templos y masacrando a los pacíficos Shugenja de la Grulla, y ganándose el sobrenombre de "El Carnicero".

La imágen del Emperador se ve gravemente debilitada por la desobediencia de los Matsu, y ordena que la familia entera se disuelva mediante honorable seppukku o uniéndose a los Ikoma. La mayoría toma la primera opción: algunos la segunda. Matsu Gohei y su ejército del sur, que se han hecho fuertes en el Pueblo de la Muralla sobre el Océano, convenientemente juran lealtad a los Ikoma y se fortifican en su cabeza de puente.

Viendo que sus tierras están en peligro, la Grulla comienza a recaudar favores.

La Grulla exije que Toshi Ranbo y el Pueblo de la Muralla sobre el Oceano les sean devueltas, pero Akodo Toturi se ve obligado por un juramento que tomó cuando su hermano Arasou cayó frente a sus murallas a no ceder, aunque promete devolver el Pueblo de la Muralla en cuanto pueda transmitir sus ordenes a Ikoma Gohei.

Los ejércitos de la Grulla se masifican en la franja norte y sur de sus territorios. La guerra parece inevitable. Entre las unidades de la Grulla, los exploradores del León ven penchos del Clan menor de la Mantis entre ellos.

En un acto de desesperación Hantei XXXVIII anuncia el Edicto de Otosan Uchi para poner fin a un enfrentamiento que puede dividir el Imperio Esmeralda para siempre; en él, dicta que las fronteras establecidas en ese momento son inviolables por ley imperial. El León por tanto se queda con ambos territorios, y la Grulla recibe un golpe terrible a su economía y a su honor.

(Módulo: La Tumba del Profeta Loco) Akodo Norifume, Doji Atemi, Hiruma Matsuda, Hida Takashi y Shiba Nagaso descubren por accidente al profeta loco Hu-Xieng en un pantano y le dan muerte. Tras internarse en un laberinto encuentran la tumba del Durmiente, que les revela la Profecía. Descubren también la jarra de jade de las Lágrimas de Amaterasu. Mientras tanto, una terrible Peste se desata en Tierras del Fénix. De sus provincias llegan noticias de que una terrible peste se extiende por sus tierras, matando a cientos. Se rumorea que los Maestros Elementales, en su eterna búsqueda de sabiduría, han liberado algo que no pueden controlar.

Simultáneamente, un verano particularmente seco y caluroso trae numerosos incendios y afecta la agricultura de tal manera que hay una hambruna generalizada por todo Rokugan y que afecta con particular dureza a las tierras de la franja sur de las Montañas de la Espina del Mundo.

1126: Corte de Invierno de Kyuden Miya

Se producen pequeños enfrentamientos entre tropas del Cangrejo y los Unicornio en la frontera al sur del Lago de Pétalos de Crisántemo. El odio entre el general Hida Shiroi, sobrino de Kisada y Maestro de Caballería del Cangrejo, y Shinjo Hanari, general de los arqueros montados del Unicornio, hace que éste conflicto se prolongue y cause más de una ruptura entre los Hiruma y los Shinjo, tradicionalmente aliados.

En la Corte de Invierno de Kyuden Miya el Clan del Fénix, azotado por la peste, anuncia el cierre sus fronteras y no permite la entrada ni la salida de nadie en sus provincias. Los samurai del Fénix que han sido dejados fuera de sus tierras comienzan a dirigirse a la Provincia del Trueno sobre el Agua.

Con el Verano, la condición de la enfermedad del Emperador es ya ampliamente conocida entre la nobleza de Rokugan. Los cortesanos imperiales han comenzado a referirse al Hantei como el Emperador Enclaustrado, pues tan sólo sus más leales servidores (Bayushi Kachiko y Doji Satsume) son admitidos en su presencia.

Kuni Yori llega a la Corte Imperial para entregar en mano una declaración de guerra sobre el Hantei. Hida Kisada, Señor del Cangrejo, declara que el será el próximo Emperador de Rokugan ya que el Hantei en su debilidad está dejando que el Imperio se desintegre. Los Clanes se preparan para la guerra.

El Emperador, a través de su consejera Bayushi Kachiko y el Campeón Esmeralda Doji Satsume, convoca a los Clanes a la Capital Resplandeciente para la Corte de Invierno. Sin embargo, ya es demasiado tarde; los ejércitos del Gran Oso avanzan ya desde el sur, por tierra, liderados por el mismísimo Kuni Yori. SIn embargo, las fuerzas del Cangrejo fueron paradas momentáneamente por el Escorpión y el Fénix en la batalla de la Linde del Shinomen, dándole al resto del Imperio tiempo para reaccionar.

Sin embargo, por mar, una amenaza oculta se cernía sobre el Imperio. En secreto, y sin el conocimiento de nadie, los pecios metálicos del Cangrejo navegaban hacia Otosan Uchi, cargados de tropas y dispuestos a desembarcar en la misma Capital Imperial.

Mientras tanto, la familia Yasuki del Cangrejo enviaba embajadores a la Corte Imperial y a la Grulla, desvinculándose de la decisión de Hida Kisada y pidiendo protección a la casa de la Grulla. Necesitada de fondos, la Grulla aceptó gustosamente a pesar de las reservas de la familia Daidoji.

Pero a pesar de todos los esfuerzos, las noticias de la traición del Cangrejo dejó al Emperador sin fuerzas. Hantei XXXVIII, predilecto de Amaterasu, prefirió la muerte antes que ver con sus propios ojos cómo otro de sus hermanos le traicionaba. Mientras las legiones del Cangrejo intentaban abrirse paso por el sur, el Emperador fue llevado al regazo de Amaterasu. Fué un día terrible, lleno de portentos, tanto aciagos como esperanzadores. La Madre Amaterasu vertió lágrimas de Jade ante la muerte de su hijo predilecto. Las nubes se cerraron sobre las filas negras y grises del Cangrejo, descargando su terrible furia sobre sus traidoras cabezas.

Sin embargo, en el mar, el avance de la armada del Cangrejo era imparable. Sin duda, Otosan Uchi hubiera sido sitiada si no hubiera sido por la intervención de Bayushi Shoju, daimyo del Escorpión y Señor de los Secretos, y Yoritomo, el Hijo de las Tormentas, Señor del Clan de la Mantis. Bayushi Shoju consiguió averiguar que una gran flota del Cangrejo avanzaba hacia la capital, e informó de ello al Campeón Esmeralda. Los defensores del Imperio se apresuraron a contactar con el taciturno señor de la Mantis, Yoritomo, para que su flota interceptara a los traidores. Los ligeros y maniobrables barcos de los marinos Mantis cayeron sobre la flota Cangrejo y la hundieron hasta el último barco, mandando a todos los traidores al fondo del mar a ser devorados por Kumo no Nagare Kyodai, la gran araña oni de las profundidades.

1127: La Guerra de los Clanes

Aunque el golpe de estado de Kisada fracasó, la inestabilidad que produjo causó más guerra a lo largo del año del Golpe y el siguiente. La muerte del Hantei dejó a muchos de los Grandes Señores de Rokugan sin dirección ni criterio. Las viejas rencillas se convirtieron pronto en abismos infranqueables que sólo podrían ser cerrados mediante la sangre.

El León había salido recientemente de una guerra civil entre las familias Matsu y Akodo. La consolidación del poder de los Akodo sobre su Clan les permitió responder con contundencia ante el asesinato de uno de sus embajadores a manos de la Grulla unos años antes. Las legiones del León asaltaron Toshi Ranbo y tomaron la fortaleza tras días de batalla. Hantei XXXIX aún no se encontraba en una posición fuerte y no pudo impedirlo. Mientras, al sur de las tierras de la Grulla, un ejército liderado por Akodo Gohei que había desembarcado en las provincias Asahina para ayudar a contener al Cangrejo se volvía contra la Grulla. Durante semanas, las legiones del León marcharon sobre los pacíficos Templos de la Mañana, prendiendo fuego y saqueándolo todo a su paso, y masacrando a los Asahina sin que nadie les opusiera resistencia. La guerra entre el León y la Grulla se extendió a la frontera del norte, donde Kosaten Shiro, la fortaleza milenaria de los Daidoji, caía bajo la zarpa del León.

1128: El Fin de la Guerra y los Edictos de Hantei XXXIX

Tan sólo la ayuda de la Mantis, el Unicornio y la familia Yasuki pudo salvar a la Grulla. Los cortesanos Doji consiguieron llegar a un acuerdo por el cual los tres Clanes liquidarían todos sus koku del León. Los Señores del León, obligados por su honor a pagar sus deudas, no se dieron cuenta de la maniobra hasta que no fue demasiado tarde. Los comerciantes Mantis y Yasuki drenaron una importante cantidad de forma prácticamente indetectable; el mazazo vino después, por parte de los Señores Caravaneros de la familia Shinjo. Sin suministros de arroz, ni tan siquiera sus ricas praderas podían abastecer a un ejército en una campaña abierta a tres frentes.

La maquinaria del León lentamente se paró. En cuestión de unas semanas, la Guerra había terminado.

Con el final de la guerra, el Hijo del Cielo se apresuró a intentar devolver la normalidad al Imperio lo más rápido posible. Ante la estupefacción de la Grulla, desposó a una cortesana del Escorpión, la hermosa Bayushi Arimahime, sobrina de Shoju. Por primera vez en la historia de Rokugan, el Emperador se casaba fuera del linaje de los Doji.

Inmediatamente después, el Hantei declaró los Edictos de Otosan Uchi. Ante la imposibilidad de que los embajadores en la capital se pusieran de acuerdo, y con la intención de evitar otra guerra civil a toda costa, el Hijo del Cielo ordenó que todo se quedaria exáctamente como había quedado tras el fin de la guerra de los Clanes. Las fronteras quedaban así fijadas legalmente en ese instante, sin permitir a ninguno de los Grandes Señores ningún márgen de maniobra, ninguna treta que pudiera traer nuevas discordias. Los Grandes Clanes, dijo, deberán aprender a vivir con sus diferencias de hoy para no olvidar la lección en el día de mañana.

Asimismo, también declaró el Edicto de los Mil y Un Días. Ordenó al Gran Oso que se hiciera seppuku para borrar la mancha de su traición que su levantamiento había traído sobre su honorable linaje. Una semana después, armado tan sólo con un tetsubo y vestido con una túnica blanca, Hida Kisada, el legendario Gran Oso, se adentraba sólo en las Tierras Sombrías en busca de Hida, para no volver jamás.

Y para asegurar que el Cangrejo regresaba a sus deberes sobre la Muralla Kaiu, Hantei prohibió la salida de sus fronteras a todos los miembros de este Clan durante mil y un días. Tan sólo los embajadores acreditados por el mismo Emperador podrían salir de las tierras del Cangrejo.

Hantei XXXIX prosiguió a premiar a aquellos que habían demostrado su valía. El año 1127 vió la creación de una nueva familia del Clan del Fénix, los Nagaso, y la casa de Yoritomo fue ascendida a Gran Clan. La Grulla le entregó al Hijo de las Tormentas un castillo y una parte de la provincia de la familia Gyousha, al sur. Los Unicornio solicitaron permiso imperial para recibir a unos monjes gai-jin en sus tierras, y el Hantei accedió.

A lo largo de los dos años de guerra, los Clanes del Dragón y el Fénix parecían haber enmudecido. Una terrible peste se había extendido por las tierras del Fénix, diezmando a los samurai y campesinos. Togashi, el Campeón del Dragón, había desaparecido.

Esa terrible plaga pronto llegaría a la Corte Imperial.

1128: Despertares

La paz pareció reinar durante 1128, pero la juventud del Emperador y su inexperiencia se verían reflejadas en algunos eventos a lo largo de éste período.

En tierras del Cangrejo, un viejo espíritu maligno había despertado en las Montañas del Crepúsculo. El Cangrejo comenzó una campaña que duraría años, intentando llegar a la antigua fortaleza del desaparecido Clan del Jabalí, sin éxito y con grandes pérdidas. Sin embargo, al sur, la muralla parecía mantenerse segura.

En tierras del Fénix, la peste asolaba a los hijos de Shiba sin piedad. Los Fénix que habían quedado fuera de sus tierras recibieron la orden de viajar a la provincia de la familia Nagaso, que se convirtió en el centro del Clan ante el bloqueo total de sus fronteras por las Legiones Imperiales.

El Emperador caía gravemente enfermo. La peste de las tierras Fénix había llegado también a la Capital Imperial a través de los embajadores. La Emperatriz Arimahime pasó a controlar el acceso al Emperador, y los roces entre ella y el Campeón Esmeralda comenzaron a ser pronunciados.

Nadie, sin embargo, estaba preparado para lo que ocurrió a continuación. En otoño los bushi de la familia Mirumoto descendieron de sus fortalezas en las altas montañas del norte y cayeron sobre las tierras del Fénix como un viento de venganza. Durante varias semanas, los Mirumoto pasaron por la antorcha a todo ser viviente en su camino, hasta arrasar Kyuden Isawa. Los Embajadores de los clanes y los Heraldos Miya que viajaron hasta las tierras del Dragón para buscar una explicación no pudieron pasar más allá de Kyuden Tonbo.

La razón, tras la masacre perpetrada por los Mirumoto, fue revelada a la Corte Imperial por Hitomi, daimyo de la familia, y el mismo Togashi. El Consejo Elemental había sido corrompido desde dentro, y todos sus miembros habían sucumbido bajo el influjo de Aquel que no se debe nombrar. El Dragón había descubierto esto a través de un oráculo, y no encontró otra solución que la destrucción total de los Isawa infectados. La mayor familia de shugenja del Imperio quedaba así reducida a aquellos pocos que se hallaban fuera de sus provincias cuando estalló la plaga.

En el sur de las Montañas de la Espina del Mundo, un ambicioso general de la familia Kakita llamado Toranaga amenazaría con desequilibrar la delicada paz entre los Clanes. Una campaña de expansión que duraría dos años consiguió extender de forma considerable las tierras de los Kakita, pero a costa de un enfrentamiento entre la Grulla, el Escorpión, y la familia Nagaso del Clan del Fénix. Tan sólo con la muerte de Toranaga en un duelo se cerró la crisis, aunque no de la forma que se hubiera esperado. Sin duda bajo la perniciosa influencia del Campeón Esmeralda, el Emperador decretó que, siguiendo la tradición del Edicto de Otosan Uchi, las conquistas de Toranaga quedarían consagradas como nuevas fronteras imperiales. Adicionalmente, Satsume, en nombre del Emperador y con una autorización con su sello, otorgó nombre familiar a la hija del general, Kakita Ochiba, y el permiso para establecerse en la franja recientemente conquistada. Los Grandes Señores de Rokugan comenzaban a sentirse inquietos.

1129: Sengoku Jidai (El País en Guerra)

A principios del año, a pesar de su enfermedad y estado de debilidad, el Emperador había conseguido dejar a su esposa embarazada. La Emperatriz esperaba un hijo. El Trono Esmeralda estaba, por el momento, seguro. Sin embargo, el embarazo de la Emperatriz pronto la dejó apartada de la Corte Imperial. Para su propia protección, y para asegurar que el heredero al trono estaba seguro, Doji Satsume trasladó en secreto a la Emperatriz a Yogasha Shiro, la fortaleza del Campeón Esmeralda.

El futuro Shogun había movido sus primeras piezas. Ahora tan sólo él controlaba el acceso a la Presencia Imperial.

A finales de año la Emperatriz Arimahime dió a luz. Los emisarios, expectantes ante las puertas del Claustro de Jade, se arrodillaron en silencio cuando el Campeón Esmeralda emergió. Con semblante sereno, anunció que la Emperatriz había alumbrado a una niña.

La conmoción resultante fue la más grande jamás vivida en la Sala de Corte de Otosan Uchi. Los emisarios imperiales palidecieron ante la confirmación de sus peores temores.

Una semana después, la salud del Emperador empeoró aún más. Nuestro único consuelo es que pudo ver a su hija unos días.

Hantei XXXIX, el Emperador Enclaustrado, se unió a Amaterasu unos meses después.

Al día siguiente de la muerte de Hantei XXXIX, Doji Satsume, Campeón Esmeralda, apareció ante la Corte Imperial y convocó a los Campeones de los Clanes Mayores y Menores, asi como a los daimyo de todas las familias, a su fortaleza.

La mayoría de los Campeones sabían lo que esto significaba. La ley de Rokugan no acepta a una mujer en el trono esmeralda; el linaje de Hantei se transmite a través del varón. La única opción posible era la de poner en el trono a Otomo Taneji, el anciano pero aún avispado hermanastro del Emperador Hantei XXXVIII. Si el Campeón Esmeralda convocaba a los demás Grandes Señores, sólo podía ser para una cosa; proponer una alternativa. Era bien sabido que había una inmensa enemistad entre Taneji y Satsume. Los más optimistas pensaban que quizá Satsume había optado por retirarse honorablemente de su puesto. El puesto de Campeón Esmeralda jamás había sido abandonado por su titular de forma voluntaria. Los más escépticos dudaban que el aguerrido Satsume fuera a asentar tal precedente.

Y así fue. La reunión fue breve, y más bien fue una declaración más que un debate. El Campeón Esmeralda, esgrimiendo el argumento de que se veía obligado a proteger la integridad del imperio ante la toma del trono imperial por un anciano, se declaró sei-i taishogun, general de todos los ejércitos, y solicitó el apoyo de los Clanes.

Las familias de la Grulla y sus aliados familiares del Clan del Zorro y la Casa de Yoritomo le juraron lealtad inmediata, asi como los clanes menores del Gorrión y la Avispa. El daimyo del Unicornio, Shinjo Yokatsu, no había acudido al consejo debido a problemas internos del Clan. Su enviado, Ide Tadaji, dijo que el Unicornio apoyaría al Shogun. Shiba Nagaso, en representación del Fénix, también se unió a la causa de Satsume.

Un enfurecido Akodo Toturi y el imperturbable Señor de los Secretos, Bayushi Shoju, abandonaron el palacio del Campeón Esmeralda sin mediar palabra. Hida Yakamo, señor del Cangrejo, espetó que antes preferiría servir a Fu Leng que a un usurpador Grulla. Mirumoto Daini, en representación del Dragón, dijo que Togashi honraría su promesa milenaria de protección al Hantei... fuera éste el que fuera. Las familias Imperiales dejaron claro que apoyarían a Otomo Taneji como legítimo heredero.

Los daimyo abandonaron la fortaleza sin oposición. El futuro de Rokugan se decidiría sobre la llanura de los Ronin, en una batalla de dimensiones jamás vistas.

Sekigahara: En un frente, los mon de las familias de la Grulla, el Zorro, la Mantis, los mercenarios de la Avispa, la familia Suzume y la Legión Esmeralda ondeaban al viento. Del Unicornio, tan sólo la familia Naoko de los Otaku y los jinetes Moto se habían presentado a la batalla. Los estandartes de los Ide y los Shinjo ondeaban al otro lado del campo de batalla.

Otomo Taneji, a lomos de un corcel blanco, miraba a su enemigo Satsume mientras las legiones imperiales formaban a su alrededor. Bayushi Shoju, también a caballo, se erguía a su lado con el tessen de mando. Las banderas rojas y negras del Escorpión parecían gotas de lluvia entre un mar de ocres y marrones del impresionante pero debilitado ejército del León. A su lado, las negras y grises armaduras pesadas de los pocos Cangrejo que habían podido ser relevados de la muralla brillaban como caparazones bajo el sol. El púrpura de los jinetes Shinjo y la pequeña familia de los Ide casi pasó desapercibido.

A pesar de la promesa de Mirumoto Daini, el Dragón no apareció en el campo de batalla. Sí lo hizo Mirumoto Daini, fiel a su palabra, con un grupo de samurai fieles a él. Sin embargo, la gloria no aguardaba al valiente y noble hermano de Hitomi. Una flecha Avispa le atravesó el cuello en mitad de la batalla. Dicen los que lo vieron caer que tuvo una muerte lenta y horrible.

Dicen que ese día, Jigoku cerró sus puertas al atardecer porque no cabía el alma de un sólo samurai más. Cuando cayó la noche, casi doscientos mil cadáveres yacían sobre la llanura. Los shugenja habían luchado por dominar a los elementos a su favor y la tierra yacía calcinada y abierta, los árboles y arbustos aplastados junto a los muertos por vientos sobrenaturales que se habían levantado. Hoy, cientos de templetes y memoriales se levantan en la llanura de Sekigahara, antes la Llanura de los Ronin. Yelmos y kabuto sobre pequeños pilares se iluminan por la noche cuando los descendientes de los caídos bajan a la llanura cada año, el primer día de verano, a honrar a los que cayeron encendiendo una vela en su memoria.

El Shogun había ganado. La victoria había sido ajustada, pero finalmente Bayushi Shoju ordenó la retirada. Haciéndose fuertes en el Paso Beiden, Akodo Toturi y Shoju mantuvieron un acalorado debate acerca de hacerse fuertes allí o rendirse a Satsume. La mayoría de los samurai de la alianza imperial se preparaban para años de campaña.

Para la sorpresa de casi todos, Akodo Toturi y Shoju negociaron una paz incondicional. Otomo Taneji era entregado al Campeón Esmeralda, que lo instaló en el Claustro de Jade como invitado de honor. Los Clanes intercambiaron rehenes entre ellos.

La Paz de Beiden inauguraba el Shogunato. La batalla de Sekigahara entró en los anales de la historia como la mayor confrontación jamás vista en el Imperio, y la participación de los samurai en uno y otro bando sería motivo de orgullo, vergüenza y disputa aún cientos de años después.

1130: El Primer Shogunato

Doji Satsume se alzaba como gobernante indiscutible, custodio de la Emperatriz, su hija, y el último Hantei. Como Shogun, tendría que dejar libre la posición de Campeón Esmeralda y convocar un torneo para elegir a un sucesor.

La cuestión de quién sería finalmente el sucesor imperial al que él estaría teóricamente protegiendo tampoco parecía muy clara. El vacío de poder estaba empezando a agrietar la delicada coalición que le había apoyado en Sekigahara.

La primera voz discordante fué la de los Unicornio que le apoyaron. Desde el oeste, llegaban inquietantes noticias. El daimyo de los Moto, Chagatai, se había casado con la daimyo de la pequeña familia vasalla Otaku de los Naoko. Un emisario suyo ante el Shogun había traído misivas desde las llanuras que ahora gobernaban estos jinetes. Chagatai renunciaba a todos sus títulos y se proclamaba Khan de los Ujuk-hai, renegando de su herencia rokuganí y a sus vínculos con la kami del Unicornio. Los shugenja de los Iuchi habían abandonado sus tierras para unirse a él. Los Shinjo, en declive, junto a la pacífica y pequeña familia de los Ide, eran lo único que quedaba del Pueblo del Viento. La pequeña familia vasalla de los Horiuchi, alumnos de los Iuchi, preservaron la magia del Unicornio desde las abandonadas tierras de los Iuchi. Y la pequeña y siniestra familia de los Kataki, vasallos de los Moto y descendientes directos del corrompido Moto Tsume y sus jinetes perdidos, también habian jurado lealtad a los Shinjo y no habían acompañado a sus distantes hermanos a las llanuras al sur.

El Clan del Unicornio se había desmembrado. Y una horda de gai-jin parecía haber emergido, repentinamente, en el interior del Imperio.

Mientras tanto, al norte, el Clan del Fénix se recomponía. El Consejo Elemental había desaparecido, pero Shiba Ujimitsu convocaba a todos los shugenja del Clan de vuelta a sus provincias para organizar la Casa Isawa. La Inquisición sería el órgano donde se centrarían los esfuerzos arcanos del Fénix a partir de ahora.

Desde las montañas del Dragón también llegaban noticias inquietantes. Los Mirumoto y Togashi parecían estar en un estado de gran tensión. Mirumoto Hitomi estaba furiosa por la muerte de su hermano en Sekigahara. Dice que no descansará hasta ver al último miembro de la familia Tsuruchi colgado de las murallas de Kyuden Mirumoto. Las malas lenguas dicen que muy pronto, los estandártes del Dragón descenderán de nuevo desde la montaña, esta vez hacia Kyuden Asahinagabachi, hogar del Clan de la Avispa.

1131: El Golpe del Escorpión

El Shogunato había triunfado tras Sekigahara, y Doji Satsume trató a toda costa de traer nuevo órden al imperio. Uno de sus primeros gestos fue el convocar el Torneo Esmeralda, para elegir a un nuevo Campeón Esmeralda. Muchos vieron en esta acción una maniobra política de secuestro; el Torneo obligaría, por honor, a que todos los daimyos familiares de Rokugan asistieran a la capital. Satsume no encontraría muchas dificultades a la hora de retenerlos ahí.

Pero si había alguna trama del Shogun, no llegó nunca a completarse. Tras varios meses de festividades en la Capital Resplandeciente, y en la primera jornada de torneo, una fuerza de Escorpiones tomaban el distrito noble de la Capital, aislando entre sus murallas a las delegaciones de los Grandes Clanes y al Shogun. El mismo Bayushi Shoju encabezó un ataque sobre la Ciudad Prohibida para liberar a Otomo Taneji, hasta entonces "custodiado" por el Shogun en el Palacio Imperial.

El caos se adueñó de Otosan Uchi. Las embajadas de los Clanes sirvieron como fortificaciones temporales mientras los daimyos familiares, aislados de los de los Grandes Clanes y unos de otros, se veían obligados a decidirse a la hora de apoyar una causa. Durante días, patrullas Escorpión y samurai de otros clanes y familias se enfrentaron en numerosas escaramuzas y pequeñas batallas en las calles del Distrito Noble. Los Grandes Clanes, lejos de la Capital y sin sus daimyos, tardaron en reaccionar.

El asedio de Otosan Uchi duró casi dos meses. Finalmente, los guardias Grulla y sus aliados tuvieron que capitular. El Palacio Imperial caía, y Otomo Taneji era coronado Hantei XXXX.