Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!

   

   

  AMAR A DIOS Y AL PRÓJIMO, UNA CUESTIÓN INSEPARABLE

(1 Juan 4:20-21)

El amor es el corazón del evangelio y es el distintivo de los hijos de Dios. Este pasaje nos confronta con una verdad fundamental: no podemos decir que amamos a Dios si no mostramos amor genuino hacia nuestro prójimo. Este sermón explorará tres puntos claves: la incoherencia de un amor dividido, la prueba visible del amor a Dios, y la obediencia al mandamiento del amor.

1. La incoherencia de un amor dividido (v. 20)

"Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso."

  • Declaraciones vacías: Es fácil proclamar amor por Dios, mucha gente lo hace, pero nuestras acciones hacia los demás son la verdadera prueba.
  • El problema del odio: Aborrecer a nuestro hermano (tener rencor, desprecio o falta de perdón) es incompatible con el amor que Dios nos ha mostrado.
  • La mentira espiritual: No podemos separar el amor a Dios del amor al prójimo. Nuestra relación vertical con Dios está reflejada en nuestras relaciones horizontales con los demás.

2. El amor como evidencia visible (v. 20b)

"Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?"

¿Cómo estamos mostrando amor a los demás? Pensemos en maneras concretas de servir, perdonar y cuidar a las personas cercanas a nosotros.

3. El mandamiento del amor (v. 21)

"Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano."

¿Estamos obedeciendo este mandamiento? Pidamos a Dios que renueve nuestra capacidad de amar incluso en circunstancias difíciles.

Este pasaje bíblico nos da a entender que el amor no es simplemente un sentimiento, sino una acción que refleja la obra de Dios en nuestras vidas. Si decimos amar a Dios, debemos amar a quienes nos rodean. No podemos separar estas dos cosas, porque el amor a Dios se hace visible en el amor al prójimo.

De ahí que, sería bueno examinar nuestro corazón. Pidamos a Dios que nos revele áreas donde necesitamos crecer en amor. Perdonemos a quienes nos han herido, sirvamos con humildad, y demostremos al mundo el amor transformador de Cristo.

Versículo clave: "El que no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es amor." (1 Juan 4:8).

Rev. Lic. Jorge Bravo C.

 

                                 


Copyright © 2025 Rev. Lic. Jorge Bravo-Caballero. Todos los derechos reservados.