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   JESÚS EL PAN DE VIDA

(Juan 6:24-35)

Este pasaje de Juan 6:24-35, es parte del discurso de Jesús sobre el Pan de Vida. En él, Jesús explica que Él es el verdadero pan que da vida, contrastando con el pan temporal que da solo saciedad física. Jesús, después de alimentar a los cinco mil, se retira y la multitud lo sigue, buscando más de lo que Él les había dado. Jesús les enseña una lección sobre la verdadera comida y bebida que sustenta la vida eterna. Este mensaje nos debe llevar a explorar cómo Jesús es el Pan de Vida y cómo encontrar en Él una satisfacción que va más allá de las necesidades físicas.

El pasaje bíblico podemos analizarlo y reflexionar de la siguiente manera:

1. La Búsqueda de lo Temporal (Juan 6:24-27). Aquí podemos ver que la multitud busca a Jesús porque vieron los milagros y recibieron alimento. Están interesados solo en las bendiciones temporales. Muchas veces, las personas buscan a Dios por lo que pueden obtener de Él en lugar de buscar a Dios mismo. Y esta situación nos debe llevar a reflexionar sobre nuestras propias motivaciones y deseos, que casi siempre son circunstanciales, temporales. Debemos buscar una satisfacción que va más allá de las necesidades físicas y transitorias. Y ésta solo la puede dar el Señor Jesús.

2. El Llamado a lo Espiritual (Juan 6:28-29). La multitud pregunta qué deben hacer para trabajar las obras de Dios. Jesús responde que la obra de Dios es creer en el que Él ha enviado. Eso significa tener fe en Jesús como el enviado de Dios y que es la base de la verdadera obediencia y relación con Dios. No se trata de obras externas, sino de una fe auténtica en Cristo. En otras palabras, es pasar a la dimensión espiritual.

3. El Pan que da Vida (Juan 6:30-33). Aquí la multitud menciona el maná en el desierto y pregunta por un signo. Jesús les dice que el verdadero pan es el que viene del cielo y da vida al mundo. En este caso, el maná era una provisión temporal que Dios había provisto; de ahí que, Jesús es ahora el Pan de Vida que satisface las necesidades eternas. Esto nos debe llevar a reflexionar sobre cómo Jesús es esencial para nuestra vida espiritual. La fe en Él tiene un lugar muy importante en nuestra espiritualidad.

4. La Promesa de Satisfacción Eterna (Juan 6:34-35). La multitud pide siempre de este pan, ignora que Jesús es el Pan de Vida. De ahí que, Jesús les declara que Él es el Pan de Vida y que el que viene a Él no tendrá hambre ni sed. Una gran verdad que siempre debemos tener en cuenta, es que en Cristo encontramos una satisfacción plena y duradera para todas nuestras necesidades. Es por eso, que no debemos buscar la satisfacción de nuestras necesidades, solo en la vida, sino, acudir a Jesús para encontrar la verdadera plenitud en esta vida terrenal y en la vida eterna.

La lección de este pasaje bíblico es que Jesús ofrece algo más que pan temporal; Él es el Pan de Vida que da satisfacción eterna. Por eso, debemos buscar a Jesús no solo por lo que puede dar, sino por quien Él es. En Él encontraremos la verdadera satisfacción, que solo Él puede ofrecer. Además, recordar que Jesús dijo: "Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios." (Mateo 4:4).

Oremos a Dios para que siempre encontremos la verdadera satisfacción a nuestras necesidades, en Cristo Jesús. Amén.

Rev. Lic. Jorge Bravo C.

 

                                 


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