I & J(Ikki & Jabu)
Por AKA Bronze Eidos
"Hola mi nombre es Jabu y en toda mi vida nunca he tenido suerte, me considero un perdedor pero hace 2 meses mi suerte comenzó a cambiar aunque al verme aquí no lo crean"
Jabu se encuentra en una pequeña celda dentro de una estación de policía donde un guardia los vigila a el y a su compañero. Su compañero es Ikki que esta sentado en una de las camas de la celda y voltea a ver a Jabu con furia mientras este solo cruza los brazos y se recarga contra la pared. "Por cierto mi compañero de celda se llama Ikki y el es una persona que de normal no estaría aquí y menos con migo. Claro a menos que algo muy raro haya sucedido como lo que paso hace 2 meses. Les contare que antes de aquel Domingo nuestras vidas eran más que miserables y tal vez lo seguirían siendo de no ser por mi y una loca idea que se me ocurrió"
"Eran las 10 de la noche y como era usual todos en la mansión Kido se habían reunido en el bosque aledaño a la mansión a celebrar alrededor de una fogata. Claro que no alrededor de la misma fogata. Yo y mis compañeros de menor rango hicimos una al norte mientras que Sahori su novio Julián y sus caballeros favoritos hicieron una al Sur. Les contare que la noche paso sin novedad hasta que Ichi y el caballero del lobo se empezaron a poner románticos al igual que el lobo y el león y ¿yo? Bien gracias. Solo como todas las noches. Tome una botella de cerveza y me fui a esconder con ella dentro del bosque para ahogar mis penas
Lo que yo no sabía era que alguien más se sentía fuera de lugar. Al sur de nuestra fogata Ikki no se estaba sintiendo nada bien. Su hermano pequeño se empezaba a dar besos que parecían más mordiscos con Hyoga y Seiya ya estaba sobre Shiryu besándole el cuello y metiéndole las manos en le pantalón. Mientras Sahori y Julián ya se habían ido a su habitación así que Ikki hizo lo mismo que yo y se fue a esconder al bosque con una botella de cerveza.
Mientras
estaba solo en el bosque miles de ideas vinieron a mi mente en primera ¿Como
era que Ichi siendo el caballero más feo tuviera alguien que lo amara y yo no?
¿Como era posible que después de servirle fielmente e incluso humillarme a
Sahori ella me hubiera olvidado? Era como si yo ya no existiera para el mundo,
mis amigos estaban felices amándose entre ellos y ni siquiera notaban que yo no
estaba ahí. Yo estaba solo y olvidado y ni siquiera tenia una armadura de oro.
Llegue a la conclusión de que mi vida era una broma cruel que alguien
seguramente a Seiya le gustaba contar. Decepcionado como estaba me levante y
camine solo hasta mi cuarto. El perfecto final para la peor noche de mi vida.
Mientras caminaba y pensaba en mi miseria no me di cuenta por donde caminaba y
tropecé con alguien sentado. Caí al suelo y el otro hombre se levanto
rápidamente y me reclamo
"Oye imbécil fíjate por donde caminas" grito Ikki
Me levante y vi que quien me gritaba con tanta furia era Ikki caballero del Fénix ahora de Leo. Se veía enfadado pero por lo menos el tenía una armadura de oro.
"Lo siento su majestad. Perdóneme por no haberlo notado pense que era otro perdedor ebrio tirado en el bosque. Dije tratando de ser gracioso o mas bien de molestarlo para que se sintiera tan mal como yo.
"¿Qué dijiste? ¿A quien llamas perdedor? Ebrio estúpido. Dijo Ikki bastante irritado
"Pues a ti, a quien más ¿ves a alguien más? No solo nosotros, un par de perdedores sin nadie que los quiera y que se preocupe por ellos, estamos aquí." Dije mientras el alcohol hablaba por mí.
"No me compares contigo Jabu. Yo soy el poderoso caballero del Fénix" dijo Ikki
"Si, si claro el poderoso caballero Fénix. Dime poderoso caballero si eres tan grande por que estás solo en esta hermosa noche. ¿A caso no hay nadie a quien le interese estar con el poderoso Caballero Fénix? ¿EH? ¿Dime Ikki? ¿A caso tu hermano por el que tantas veces has dado la vida le importa si te mueres solo aquí de frío? ¡Claro que no! A el no le importa, solo le importa que no lo molestes mientras esta en los brazos de Hyoga. Dije enfadado.
"¡Eso no es cierto!" grito Ikki
"Tu sabes que lo es, a tu hermano solo le importa que vengas a salvarlo como a Sahori solo le interesa que cumpla sus malditos caprichos. A ninguno de los dos le importamos, solo quieren que hagamos su voluntad. Piénsalo Ikki para Shun tu eras alguien cuando estaba en peligro y solo. Ahora ni siquiera se da cuenta que existes. Antes de que Seiya llegara yo era alguien para Sahori. Ahora ni siquiera recuerda mi nombre. Es triste pero cierto, ellos solo nos usaron. Dije con más tristeza que amargura.
"Nadie me usa a mi. Yo soy el Fénix puedo elegir mi destino e ir a donde yo quiera" dijo Ikki con rabia
"¿Cuándo te vas a dar cuenta Ikki? Tú no tienes libertad de elegir ni tu destino ni tu vida. Aunque intentes ser libre siempre tendrás que volver para luchar por Atena y salvar a Shun. Que por cierto es lo que ambos quieren. Solo vuelves, solo peleas para hacer la voluntad de ambos. La libertad del Fénix no existe al igual que la mía. Solo estamos aquí para hacer lo que ellos quieren. Si tan solo pudiera ser libre. Dije decepcionado.
"Y porque no puedes. Tu dices que no le importas a nadie. Puedes huir cuando quieras a nadie le importaría" Dijo Ikki
"Sabes que, pues creo que lo hare. Me ire esta misma noche y haré mi propia vida. Lejos de todos estos mentirosos que dijeron ser mis amigos y lejos de perdedores como tu que no se pueden dar cuanta que nadie los aprecia." Dije furioso y me fui antes que Ikki decidiera darme una golpiza.
Después de que deje solo a Ikki el volvió a la fogata y se quedo parado ahí viendo como sus amigos se iban a dormir. Seiya cubría Shiryu con una manta mientras Hyoga y Shun caminaban tomados de la mano. Todos pasaron junto a le y ni cuenta se dieron de su presencia.
Ikki se quedo parado ahí mirándolos sin decir nada y claro sintiéndose el ser más miserable del planeta. Mientras yo me puse mi pijama y me dispuse a dormir. La verdad no pensaba irme. Tenía miedo nunca había vivido fuera de la Mansión excepto cuando fui a entrenar para ganar la armadura del Unicornio pero eso fue hace tanto tiempo.
Ahora solo quería dormir y olvidarme de lo miserable que era pero justo cuando cerré los ojos alguien toco a mi puerta. Me levante sumamente molesto. Pense que era Ichi quien había venido a pedirme crema o aceite. A veces lo hacia y curiosamente a altas horas de la noche. Nunca quiso decirme para que era, la verdad prefería no saberlo aunque algo me imaginaba. Pero prefiero no pensar en eso ahora. Me dirigí a la puerta y ala abrirla me quede boquiabierto al ver que se trataba de Ikki quien sin duda venia a darme una paliza por lo que había dicho.
"Pense que ya te habías ido" Dijo Ikki levantando una ceja
No supe que contestar, le había dicho que me iría y estaba todavía en pijama.
"Si ya me iba solo estaba fingiendo que me dormido por si Ichi aparecía. A veces viene a pedirme cosas a media noche y no quería que sospechara" dije sorprendiéndome a mi mismo de mi ingenio
"Bien parece que tienes todo bien planeado. Supongo que no te importara si te acompaño." Dijo Ikki
No pude creer lo que escuchaba Ikki creía que yo me iba a fugar y quería acompañarme. Me preocupe bastante porque ahora sin duda tendría que realmente fugarme.
"Si no hay problema. Ve por tus cosas, nos veremos aquí en 20 minutos" le dije y empece a cambiarme
Me quite la camisa de la pijama y los pantalones y me puse mi camiseta morada mientras el me observaba. Quería que me creyera y me puse algo nervioso por la manera en que me miro. Cuando voltee a verlo el se sonrojo no se porque y salió de ahí. No supe que le había pasado, de hecho estaba más que preocupado por lo que haríamos esa noche.
Empece a empacar mis cosas mientras Ikki regresaba a su cuarto que para su mala suerte estaba después del de Seiya y Shun los cuales ambos estaban ocupando en ese momento. Ikki trato de pasar lo más rápido posible pero la puerta del cuarto de Shun estaba entre abierta y podía escuchar los gemidos de Hyoga y su pequeño hermano. Por lo que Ikki corrió a su habitación y con más decisión que nunca en su vida empezó a empacar. Yo había acabado antes de los 20 minutos. La verdad es que no tenía gran cosa que llevarme. Así que tome mi maleta y me dirigí al cuarto de Ikki. Yo también tuve que pasar por las habitaciones de Seiya y Shun por lo que corrí y entre al cuarto de Ikki azotando la puerta.
"¿Jabu que haces aquí. Pense que nos veríamos en tu cuarto en 10 minutos? Dijo Ikki
"Cambio de planes nos iremos ahora que están distraídos." Dije para calmarlo
La verdad estaba improvisando más de lo que debía. Mire afuera antes de que ambos saliéramos y bajáramos las escaleras hasta la puerta entonces se me ocurrió una idea.
"Espera Ikki. Vamos al estudio del señor Kido" Dije
"¿Qué? Pense que ya nos íbamos. Para que quieres ir ahí" dijo Ikki bastante enojado
"Ya deja de preguntar. Tu sígueme" le dije para inspirarle confianza
Entramos al estudio del señor Kido y prendí una lampara. Me acerque a su enorme retrato que estaba detrás del escritorio que era ahora de Sahori y lo quite. Atrás como lo suponía estaba la bóveda de la mansión. Me subi en una silla y empece a buscar la combinación.
"Jabu ¿qué demonios crees que haces? Dijo Ikki bastante molesto
"¿Qué parece que hago? Voy abrir la bóveda. Le dije
"¿Qué? Le vas a robar a Sahori." Dijo Ikki sorprendido
"¿Si y que? Ella nos debe mucho Ikki y ya es tiempo de que empiece a pagar. Además ella tiene mucho dinero. Lo que le quitemos no le hará falta." Dije
"¿Y has hecho esto antes?" Ikki pregunto preocupado
"No, pero he visto cientos de veces como Sahori abre esta bóveda. Es pan comido" Le dije
Lo que no le dije a Ikki era que solo había visto a Sahori abrir la bóveda una sola vez en todo el tiempo que estuve en la mansión y la verdadera razón por la que lo hacia era para lastimar a Sahori. Realmente quería que ella me extrañara y no se me ocurrió otra forma de hacerlo que llevándome algo suyo conmigo para que me buscara.
Si, se lo que piensan es patético pero ¿Que otra cosa iba a hacer? Ikki se iba ir en cuanto se diera cuenta que no sabía lo que hacia y seguramente para mañana o no habríamos salido de aquí o ya nos habrían encontrado. Yo no tenía suerte y era obvio para mi que esto ya estaba por terminar entonces escuche un "click" y la bóveda se abrió.
Fue entonces cuando sentí que finalmente la suerte me había tocado y realmente pense que lo íbamos a lograr.
Tome un puñado de billetes y empece a llenar mis bolsillos con ellos.
"Ikki ve al escritorio y toma nuestros pasaportes" le Dije
"Esta bien" dijo Ikki
Me sorprendió mucho que Ikki hiciera lo que le pedía sin protestar. Parece que sabia lo que yo planeaba. O tal vez era que odiaba tanto a Sahori que deseaba hacer algo que realmente le molestara. Aunque la verdad creo que mas bien lo hizo para llamar la atención de Shun. Suena inusual para Ikki incluso patético pero en los últimos 3 meses Shun y Hyoga habían estado tan juntos como una pareja de recién casados. Shun estaba tan enamorado de Hyoga que incluso se había olvidado del hermano que había sido un padre para él. De él hombre que salvo tantas veces su vida y había aceptado vivir un infierno por él. Si Ikki había dado hasta su felicidad por el y todo ¿para qué? Para ser olvidado como un trapo viejo. Si por otro lado Shun tenía derecho a vivir su vida es decir no le pertenecía a Ikki como los hijos no pertenecen a sus padres. Ikki solo había sido el estúpido que le dio todo para acabar sin nada.
Suena cruel pero esa es la verdad. Shun no tenía la culpa de ser un ingrato porque el no le pidió a Ikki hacer ese sacrificio. Él fue quien pidió hacerlo. Y al final quien era el que tenía él ¿Noble corazón y quien el de demonio? Ikki o Shun "Rey Hades". Claro pero como Ikki era el guerrero cruel sin sentimientos. Quien iba dudar que Shun era un ángel. Y hablando de sentimientos estoy seguro que Ikki quería ser "el guerrero sin corazón que decían" así no podía sentir el dolor y la traición que le hizo seguirme. ¿Y se preguntan como sé tanto? Digamos que he tenido tiempo libre para observar a todos y además quien si no el chico más presuntuoso orgulloso y sin sentimientos podría entender al demonio de corazón de piedra. Si éramos dos parias.
Mientras pensaba vi como Ikki metía los documentos en su maleta cuando ambos fuimos interrumpidos por el ruido de pisadas. Inmediatamente tome más billetes que metí en mis bolsillos, salte de la silla y vi justo sobre el escritorio un par de llaves de un automóvil. Sin duda las del nuevo Lamborgini Diablo que Julián le regalo a Sahori. Así que hice lo que mi corazón me pidió y las tome. ¿Por qué? Porque Sahori me hizo sufrir con su desprecio y ahora la iba a ser pagar. Pagar por toda la humillación y el dolor e iba a empezar ahora mismo. El auto no tenía valor para mi solo era valioso porque para ella lo era. Fuera de eso no me interesaba.
Tome rápidamente las llaves y entramos a la habitación contigua cerrando la puerta detrás de nosotros y seguimos corriendo hasta llegar al Garage.
"Ikki abre la puerta" le dije mientras buscaba el auto
"¿Para que? Nos descubrirán si abro es a puerta" dijo Ikki
"Tu solo has lo que te digo" le conteste
"Esta bien pero esto nos va costar. No se como me convenciste de venir contigo" Dijo Ikki
"Deja de quejarte y abre la puerta" le grite lo que no debí hacer
Ikki me lanzo una mirada de furia pero abrió la puerta y entonces yo encendí el auto lo ilumine con los faros. Debieron ver la cara de sorpresa que tenía.
Yo arranque el auto y me le acerque.
"Vamos Sube" le dije
"Es el auto de Sahori. ¿Estas loco?" Dijo Ikki
"dime algo que no sepa. Vamos sube antes de que alguien nos detenga" le Dije
Ikki tiro su maleta en el asiento de atrás y subió de mala gana. Entonces acelere lo más que pude, cruce le patio de la mansión y salí de ahí derribando la cerca dé enfrente. Claro que esto causo que las luces de la mansión se prendieran y la alarma empezara a sonar.
Entonces con la emoción que recorría mis venas supe que mi vida no estaba acabando como yo suponía estaba empezando. Lejos de Seiya, Sahori y Shun.