En la picota

Alfonso Areiza Lozano

Desde hace muchos años le reclamamos al Gobierno Nacional la construcción del acueducto y alcantarillado para Quibdó, y por la maldita amnesia chocoanista ya nos olvidamos de la información dada el 24 de abril del 2004, en el Consejo comunal, por Planeación Nacional, del giro de un billón cuatrocientos mil millones de pesos en los últimos diez años para estos programas. Es decir, nos contestaron: Nosotros ya les mandamos la plata; muestren ustedes las obras.

Como hemos padecido esta infame calamidad, RCN televisión vino hasta el Haití San Pachero, con el periodista Richard Fredy Muñoz y sus colaborados, y toda la comunidad en coro le informó de la corrupción con los recursos estatales por parte de algunos funcionarios inescrupulosos, incrementando injustificadamente su patrimonio particular. Aquí perfectamente encaja la paradoja: En el esplendoroso río Atrato sobra el agua y en el remedo de ciudad, ni una gota con abundante hediondez. Obliga esta situación a agradecerle a Colanta de Medellín por habernos auxiliado, trayéndonos agua pura; con razón un niño burlón anotaba: ¿Tu sabes cuál es el colmo de la negra? Llamarse Blanca Nieves. En Quibdó el colmo es el abuso de los recursos transferidos al municipio con los cuales se pudieron construir diez acueductos y alcantarillados de excelentes condiciones; pero los "honestos del poder" lo han impedido y por esta perversidad nos consideran los más pícaros del país.

El premio Nobel de paz Norman Borlaug, en 1970 afirmó:

"Donde no hay infraestructura, hay hambre, miseria y pobreza, como sucede en los países africanos. Esta situación es la cuna y semilla del terrorismo". Nosotros padecemos todos estos males, por la deshonestidad y falta de servicios adecuados de salud, y por supuesto, indignidad humana y no considerarnos personas sino cerdos calzados o gallinazos defecados, vestidos con ropa de marca.

Sobre la intervención de la empresa pestilente de Quibdó (EPQ), la Superintendencia también está comprometida con el desgreño, porque de tiempo atrás conoce de la rampante corrupción y sólo ahora por la presión de la comunidad y el periodismo revocó el mandato al actual alcalde, para montar otra Dispac. Ojalá construyan los dos servicios y a los trabajadores no les den consomé de conejo, hervido con agua podrida, como la suministrada al 30% de la ciudad más inmunda de Colombia.

El trabajo de RCN televisión amerita premio nacional por el objetivo logrado; nunca alcanzado por la clase politiquera del Chocó, ya que pasó de la conjetura y la suposición como hipótesis de la imaginación, al terreno de la prueba plena, destapando la olla podrida y el enriquecimiento ilícito de los atracadores del erario y por esa conducta denigrante y punible, los bandidos quedaron en la picota.

Ñingrí: En el barrio Santa Ana de Quibdó no hay acueducto ni alcantarillado. Los desechos sólidos y líquidos van a la quebrada Monte Frío ¿Qué dice Codechocó? ¿Del billón de pesos no quedó un solo centavo para estas obras? No coman solitos.