Chocó 7 días

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Mi utopía

El desarrollo se mide por el nivel de vida de la gente

Higinio Mosquera Lozano

No se registra un episodio en la historia de la humanidad que tenga en su interior tantas contradicciones, dramatismo e injusticia como la del Chocó. "Región biodiversa, pluricultural, pluriétnica, enclave de dos mares, puertos naturales de aguas profundas en el Pacífico, ingentes y variados recursos hidrobiológicos, maderables, petróleo, nódulos polimétalicos, bancos de medicina natural en su selva tropical húmeda, floricultura y fruticultura exótica, 12 mil milímetros cúbicos anual de precipitaciones pluviométricas, canal interoceánico a nivel y biotipo especial para el deporte".

En contraposición, una pobreza entronizada por un Estado centralista, neoliberal, inclemente y corrupto, con aumento permanente de la violencia que cada día nos asfixia y con unas autoridades locales protervas, permisivas y proclives a la corrupción y el desgreño administrativo.

Este Chocó descoyuntado amerita un tratamiento especial, una profilaxis profunda, una generación comprometida, con autoestima y sentido de pertenencia, no permisiva a los ismos, sin amiguismos excluyentes.

En este desastre ha habido falla humana, que consiste en no haber realizado con sindéresis y honestidad acciones progresistas que tuvieran como meta primordial el bienestar del Chocó.

El problema es de educar hombres comprometidos con fe y esperanza en un Chocó productivo, que sean vigías para indicar caminos que guíen a las generaciones presentes y futuras.

Mi propuesta para corregir estos desequilibrios se basa en: La pavimentación del anillo vial La Manza -Quibdó-La Ye-Ánimas-Santa Cecilia; Las Ánimas-Istmina.

Construcción de una central hidroeléctrica: se construyen sobre zonas desérticas cuando el Chocó tiene los ríos más caudalosos del mundo.

Creación del instituto de investigaciones de enfermedades tropicales del Chocó biogeográfico, que nos permita estudiar todas las riquezas de la medicina natural de nuestros bosques.

Crear el conservatorio de música, cultura y bellas artes del Chocó y una villa olímpica.

Como decía Ramón Lozano Garcés, la opinión pública es un producto social que puede menospreciarse, pero nunca destruirse. He ahí la razón de fortalecer nuestra Universidad y convocar a quienes aquí interactúan, ellas son la razón central del desarrollo de los pueblos, convocar a sus estamentos y dirigentes para que se inserten en el torrente del desarrollo del Chocó, porque su población estudiantil es el sustento del cambio generacional que se requiere.

Dijo White la mayor necesidad del mundo es la de hombres que no se vendan ni se compren; hombres que sean sinceros y honrados en lo más intimo de sus almas; hombres con el talante suficiente para destronar las injusticias, hombres que se mantengan de parte de la justicia aunque se desplomen los cielos.

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