El silbido de la cafetera sacó a Silvia del mesmerismo en que se encontraba, volviéndola de nuevo a la realidad.
Fue a la cocina y apagó el fuego.
Luego se dirigió al baño, después de secarse la cara y peinarse frente al espejo, notó que su físico cambiaba notablemente, el paso de los años iba dejando huellas imborrables difíciles de ocultar, especialmente en el rostro.- Su cutis ahora lucía más seco, las comisuras eran más notorias, así como los prematuros hilos de plata esparcidos en la cabellera.
Permaneció por un momento frente al espejo, silenciosa, con una mirada inquisitiva, mirándose el dorso de las manos, las cuales habían perdido aquella frescura y suavidad propia de la juventud; se tocaba el rostro, el cabello, minuciosamente se observaba el cuello en busca de arrugas.
Después de un encogimiento de hombros y de un profundo suspiro de resignación, se dirigió de nuevo a la cocina se sirvió la taza de café y se sentó contiguo a la ventana... a cavilar.

La fecha era Abril 15, día de su cumpleaños.
Precisamente en esa fecha cumplía treinta años.- Aquella cifra numérica de pronto la asustó, un pánico aterrador inundó todo su ser, lo cual la hizo exclamar: ¡Dios mío!, ¿dónde he estado y qué he estado haciendo todo este tiempo que no he podido percatar la prisa con que han pasado los años?.

Si parecía que había sido ayer, cuando en una noche primaveral, en un baile de graduación de una de sus amigas, había conocido a Lautaro Landa Cacho, el ahora su esposo.
De pronto sintió sumirse en un estado de incertidumbre y preocupación, rodeada de silencio y de pensamientos endebles que le nublaban el pensamiento y le aletargaban el corazón, y empezó a recordar frases que había leído en algunos libros, unas con sentido metafórico, otras de contenido filosófico, tales como: Nacer es morir.- Cuando no se satisface una necesidad ocurre la frustración.- El secreto de la felicidad está en admirar sin envidiar.- Lo positivo de la vida está en nosotros mismos, depende únicamente del enfoque que le demos.- Frases de guía y orientación que invitaban a la reflexión, a meditar, a interpretar el contenido intrínseco que contenían.

Eran ya diez años de casada, con un hombre amable que la había hecho feliz al complacerla con sus antojos, deseos y caprichos a la vez, y al cual le guardaba un cariño especial, sobre todo por la franqueza de haberle confesado cuando eran novios, de su posible esterilidad, todo causado por un accidente que tuvo cuando niño al ser atropellado junto con su compañero de escuela por un automóvil, y del cual él salió mejor librado, -el compañero no sobrevivió el incidente-, y los doctores con el objeto de salvarle la vida, tuvieron que operar en unos de sus órganos vitales, incluyendo los reproductores, lo cual a juicio de los mismos probablemente lo privarían de poder engendrar hijos

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