LA CALABAZA DE JACK-O-LANTERN
Cuando los irlandeses llegaron a EE.UU. e introdujeron la fiesta de la
Noche de las Brujas, también se llevaron consigo lo que sería el símbolo más
famoso de la noche de Halloween: la Jack-o-lantern (la calabaza hueca con una
vela dentro).
Esta tradición viene de una leyenda irlandesa: Un tal Jack se muere y de tan
malo que era ve como se le prohibe la entrada tanto al Cielo como al Infierno.
Desde entonces es condenado a vagar por el mundo buscando una entrada a
uno de los dos sitios con la única ayuda de un repollo con una vela dentro.
Los irlandeses americanos cambiaron el repollo por la calabaza (mucho más común
en su nueva tierra) y, emulando al pobre Jack el de la Linterna, hicieron
nacer el mito de la calabaza de Halloween. Un mito que a su vez hizo crecer
toda una gastronomía con el anaranjado fruto como protagonista...
¿POR QUÉ LOS DISFRACES?
La tradición de "disfrazarse" en Halloween es relativamente reciente. Dicen que
nació en Francia entre los siglos XIV y XV, durante la celebración de la "Fiesta
de Todos los Santos" cuando Europa estaba azotada por la peste bubónica.
La plaga provocó entre los católicos un gran miedo a la muerte y, de rebote,
exaltó su creatividad.
Las "misas" en la fiesta de los "Difuntos" se multiplicaron y nacieron muchas
representaciones artísticas que le recordaban a la gente su propia mortalidad.
Estas representaciones eran conocidas como la "Danza de la Muerte" y con el
tiempo dieron lugar a una auténtica "fiesta de disfraces" con la muerte como
denominador común.
EL ORIGEN DEL "TRICK OR TREAT"
Otra tradición muy arraigada en EEUU es la que se conoce como "dulce o
travesura" (Trick or Treat). Como es sabido, en la noche de Halloween los niños
americanos se disfrazan de seres monstruosos y llaman a las puertas de los
vecinos dándoles a elegir entre entregar un dulce o recibir un susto.
Esta costumbre debe su origen a la persecución de los protestantes contra los
católicos en la Inglaterra de los siglos XVI y XVII. Producto de esta
persecución, el rey protestante Jaime I y su Parlamento fueron víctimas de un
intento de atentado pero el plan fue descubierto cuando un tal Guy Fawkes se fue
de la lengua.
Esto generó una fiesta burolona en que bandas de protestantes ocultos con
máscaras celebraban la fecha visitando a los católicos y exigiéndoles cerveza y
pasteles. La amenza: "Trick or Treat", "Dulce o Treta". De esta manera el "Día
de Guy Fawkes" llegó a América con los primeros colonos, se trasladó al
31 de octubre y se unió con la fiesta de Halloween.
LOS DULCES
Otra costumbre muy arraigada en Halloween es la de pedir y comer dulces. Según
parece la tradición comenzó en Europa en el siglo IX cuando, cada 2 de
noviembre, los cristianos iban de pueblo en pueblo pidiendo "tortas de alma"
(pedazos de pan dulce). Cuantas más recibían, más prometían rezar por la paz de
los parientes muertos de los donantes. Con el tiempo esta costumbre se fue
fusionando con la fiesta de Halloween hasta convertirse en otro rasgo típico de
la celebración.
LA NOCHE DE LAS BRUJAS
Según dice la leyenda las brujas se reunían dos veces al año: el 30 de abril
(víspera de mayo) y el 31 de octubre (víspera de "Todos los Santos" y festividad
de Halloween). Convocadas por el diablo, llegaban en sus escobas para
participar en los aquelarres y aprender nuevos hechizos.
Hoy en día la noche de Halloween es reconocida por todos los satanistas,
ocultistas y adoradores del diablo como víspera del año nuevo para la brujería.
Para muchos, es la noche en que los poderes satánicos y de brujería están
en su nivel de potencia más alto. Es lógico pues que sus ritos se hayan ido
mezclando con la celebración actual del Halloween.
Por cierto, los entendidos aseguran que basta con ponerse la ropa al revés y
caminar hacia atrás la noche de Halloween para que se te aparezca una bruja.
LOS GATOS NEGROS
Se dice que los gatos negros es un disfraz que utilizan las mismas brujas para
pasearse tranquilamente por la ciudad. Por eso una de las tradiciones de
Halloween advierte que si un gato negro se te cruza por delante en esta noche
la mala suerte caerá sin remedio sobre tu cabeza. ¿Sin remedio? Noooo, hay
un antídoto: cuando te pase eso da inmediatamente siete pasos hacia atrás y
¡maldición conjurada! ;-P