"La Pesadilla Regresa"
Por Saav
INTRODUCCION
Para poder realiza este fic he decidido reescribir lo finales de
la saga de Kioto y de Shimabara.
Saga de Kioto.
En el monte Hiei, la batalla
final entre Shishio y Kenshin esta por llegar a su fin. Himura ha conseguido
golpear a su oponente con su Amakakeru. Al ver esto, Yumi intenta interponerse
entre Shishio y Kenshin, pero Hoji la detiene y le dice que si va solo estorbara
en la pelea. Sorpresivamente Shishio se recupera y consigue herir a Kenshin en
un costado. Himura cae al suelo y se encuentra muy dŽbil por las heridas. Se
siente cerca de la muerte y la acepta resignado, pues piensa que ya ha cumplido
con su deber de proteger al Jap—n. Repentinamente la imagen de Kaoru llega a su
mente y vuelve a ponerse de pie para enfrentarse una vez m‡s a Shishio.
La
batalla entre Kenshin y Shishio continua, Himura, haciendo un esfuerzo
sobrehumano va gan‡ndole terreno a su rival. El combate entre ambos rivales
continua y se torna cada vez m‡s y m‡s fuerte, de pronto Shishio comienza a
arder en llamas, al parecer por el esfuerzo realizado. Ante tal espect‡culo Yumi
se desmaya y Hoji entra en histeria y sale corriendo de la habitaci—n.
Sanosuke
se acerca a Kenshin para auxiliarlo, pero este le pide que ayude a Yumi.
Inesperadamente, Anji llega con Kenshin y los dem‡s y les dice que no se
preocupen, que se har‡ cargo de Yumi. Dicho esto, y tras el aparente sacrificio
de Saito, salen de la guarida y unos instantes despuŽs Sanosuke y Aoshi pueden
ver como esta arde.
Mientras tanto en otro lugar, Anji a partido rumbo a la
polic’a acompa–ado de Hoji dejando a Soujiro con Yumi. Cuando la mujer recupera
el conocimiento y se entera de lo que sucedi— con Shishio decide quitarse la
vida con el peque–o cuchillo que llevaba consigo, pero Soujiro la detiene y le
pide que no lo haga y mejor lo acompa–e en su viaje. Por unos momentos Yumi esta
indecisa, pero al ver en los ojos del chico acepta, ya que se ha dado cuenta de
que Soujiro es lo śnico que le queda.
Por otro lado. Kenshin y los dem‡s
regresan a Kioto, en donde son recibidos por sus amigos y atendidos de sus
heridas. Transcurrido un tiempo, Kenshin se recupera y regresa a Tokio con los
dem‡s.
Saga de Shimabara
El tiempo pasa y Kenshin tiene que enfrentarse a un
nuevo oponente, Shougo Amakusa. mientras su combate se desarrolla, Sanosuke
trata de llevar a Sayo con el doctor Eltsen. En su camino se encuentran con el
carruaje que transporta al holandŽs, este los ve y baja de su carruaje para
examinar a Sayo. No se da cuenta de que su mano derecha saca una pistola para
dispararle por la espalda. Sanosuke se percata y se lanza contra el traidor al
cual se le sale el tiro y roza el hombro del guerrero, quien r‡pidamente
despacha a Santo. El acompa–ante de este ve lo sucedido y se lanza contra Sano,
que a pesar de su hombro lastimado tambiŽn lo deja fuera de combate. DespuŽs de
salir de su sorpresa, Eltsen le pide a Sanosuke que lleve a la cristiana al
hospital, Sayo se niega y le pide al doctor que ayude a su hermano. El holandŽs
la tranquiliza y le dice que todo saldr‡ bien. Entonces Eltsen sube de nuevo a
su carruaje y Sano toma el caballo
del acompa–ante de Santo. El doctor parte
donde Kenshin y Sano al hospital. Mientras tanto, Himura ya se hab’a encargado
de derrotar a Shougo.
Los d’as pasan y Sano permanece con Sayo en el hospital y
al igual que Shougo, la cristiana es frecuentemente visitada por Kaoru. Por fin
Shougo sale de prisi—n y mientras espera a su hermana en el muelle puede ver que
esta viene acompa–ada de Sanosuke tomada de la mano de este, la cristiana no
quiere irse, pues se ha dado cuenta de que se ha enamorado de Sanosuke, pero
sabe que no puede hacer nada.
Una vez reunidos, los cristianos se despiden de
Kenshin y C’a. y suben al barco. Mientras este zarpa Sanosuke y Sayo se
despiden, Shougo puede confirmar sus sospechas acerca de su hermana y Sano, pero
sab’a que era casi imposible que volvieran a Jap—n, algo que tambiŽn sab’a el
sobreviviente del Sekihotai.
Ya han pasado tres a–os desde que Kenshin derroto
a Shishio y ahora vive en paz, pero pronto tendr‡ que hacer frente a un nuevo
enemigo relacionado con uno de sus antiguos oponentes.
En Tokio, un sujeto se
encuentra comiendo en el Akabeko. Viste un ge de un azul m‡s oscuro que el que
usar‡ Soujiro, y al igual que este usa una camisa de un tono gris oscuro debajo,
en lugar de sandalias calza unas botas negras que le llegan casi a la rodilla.
Su cabello y ojos son de un color casta–o oscuro. Tras pagar la cuenta sale del
Akabeko, y pide instrucciones para llegar al dojo Kamiya, una vez informado se
monta en un caballo negro y parte hacia su destino.