Capitulo 19
- "Sí, sí sé lo que te estoy pidiendo, te estoy pidiendo
que lo detengas... Deberías tratar de pensar de la forma en la que él
hubiese visto esto, ¿crees que le agradaría verse convertido en
esa criatura sin alma?..." - Son Gohan
Todo era tan frío y tan oscuro, pero a la vez
tan acogedor, fuese en donde fuese en el que se encontrara el dolor se había
ido por completo, pero aun así sentía una gran desesperación.
De pronto sintió algo en el aire, una cálida presencia se aproxima
llamando su atención, pero siendo incapaz de abrir sus ojos. Aquella
calidez lo había rodeado, sintiendo un par de ligeras caricias, una suave
mano rozó su mejilla dándole una extraña sensación
de alivio.
- "Todo estará bien, ya lo veras"- susurro una voz como
el viento.
Esa voz... no es la primera vez que escucha esa voz... ¿quién
es?
- "No es momento para decaer... animo Cort lo harás bien, lo
harás muy bien"
- Cort... Cort ¿me escuchas?- una segunda persona lo estaba llamando,
se escuchaba desesperada.
- "La decisión que tomes será la correcta... no lo dudes...
Cort"- esa voz... esa voz y esa sensación, no es la primera vez
que la escucha o la siente, era tan reconfortante y tan cálida...
- Vamos, solo come esto por favor... Cort, Cort!
Nuevamente el dolor se hizo presente en todo su cuerpo
al sentir como algo paso por su garganta, pero poco a poco iba disminuyendo.
Todo era ciertamente confuso, aquel repentino despertar al dolor lo asusto un
poco.
- Tranquilo, tranquilo, todo esta bien- dijo la joven quien estaba a su lado.
Cort: ... D- Da.. na?...- preguntó al no reconocerla por aquella falta
de visión momentánea.
Dana: Sí, soy yo, será mejor que te tomes un minuto o dos.
Cort: ¿Qué... fue lo que paso?- preguntó. Repentinamente
se irguió y noto como es que había un agujero en su armadura en
uno de sus costados pero por lo demás todo estaba bien. Desvió
su mirada al suelo y observó los rastros de sangre, de su sangre, sus
vestimentas de igual forma presentaban rastros de ella ya seca.
Dana: Te di una semilla del ermitaño- respondió al ver la expresión
de dudas de su acompañante.
Cort: ¿Una semilla? Pero si pense que...
Dana: Era la que tu me diste lo recuerdas? La traía conmigo, pero decidí
no utilizarla a menos que fuese algo necesario... y creo que esto fue una emergencia.
Cort: ¿Pero... donde están los demás?... ¿dónde
estamos?- se preguntó al observar a su alrededor, definitivamente ya
no se encontraban donde hace minutos, había enormes arboles, césped
en el suelo, arbustos con diversas flores...
Dana: Ni siquiera me preguntes... cuando desperté yo estaba más
allá- dijo apuntando hacia una dirección- Pero también
el señor Gohan y Vejita están aquí.
Cort: ¿Dónde?
Dana: Están bien dentro de lo que cabe, sus heridas son serias pero tu
necesitabas más la semilla, hubiese muerto de no ser por ella. Están
descansando pero... Vejita esta perdiendo demasiada sangre y Gohan esta adolorido.
Cort: ¿Y tu, como te sientes?
Dana: Creo que soy la que mejor salió librada... Después de aquella
explosión que nos cubrió... no recuerdo que paso para que llegáramos
aquí.
Cort: Nos preocuparemos por ello después, ahora debemos preocuparnos
de Gohan y Vejita, necesitan atención medica. Buscare algún poblado
cercano y a la vez averiguare donde estamos, tu quédate y recobra tus
energías- dijo al momento de ponerse de pie.
Dana: Suenas como todo un líder ¿lo sabias?
Cort: Por cierto Dana... Muchas gracias- agregó antes de comenzar a levitar.
Aquella imagen... ese momento comenzaba a repetirse una
y otra vez en la mente del saiya, en como es que ese guerrero atravesó
su cuerpo de lado a lado sin piedad alguna... De no ser por esa semilla ahora
estuviese muerto... hubiese muerto a manos de él, aun le costaba asimilar
lo que había ocurrido. Su ahora enemigo no dudaría ni un segundo
en eliminarlo si volviese a enfrentarlo estaba seguro, pero él aun titubeaba
al respecto... Era algo que lo enfurecía!! No saber que es lo que debía
hacer! ¿Cómo es que podría pensar si quiera en eliminarlo?
Pero a la vez no podía permitir que lo matara... Maldición! ¿Qué
es lo que debía hacer?!! En decisiones tan drásticas siempre con
el consejo de él... pero ahora...
¿Dónde rayos estaban? Se preguntaba volando sin rumbo aparente,
lo ultimo que recordaba fue aquel momento y después... todo era confuso.
Fuese donde fuese este lugar no sentía su presencia por ninguna parte,
tal vez ni se encontraban en el mismo planeta. El lugar se le hacia sumamente
familiar... han sido tantos los paisajes de diferentes planetas que había
visto que no le resultaba nada fácil reconocerlo, y menos con una maraña
de pensamientos rondando su cabeza.
Sintió unos diminutos ki que se movían, no estaba lejos de alguna
comunidad. Finalmente sobrevoló sobre una pequeña población,
con construcciones muy sencillas y tecnología por demás escasa,
sin embargo reconoció el lugar: por alguna razón había
sido trasladados al planeta Kelbo.
°°°°°°
En el planeta Sagrado en donde residen los Kaiohsamas, Kaiohshin Kai.
Tenemos al más sabio y antiguo de los Kaiohsamas
hojeando una revista más que entretenida para él... mientras un
pequeño tocadiscos le ofrecía una alegre y movida melodía.
Esta por demás despreocupado.
Repentinamente escuchó un fuerte estruendo, como si algo pesado hubiese
caído sobre las ramas del árbol en la que se encontraba descansando
el anciano, hasta caer finalmente al suelo.
Ro Kaioh Shin dirigió una mirada al cuerpo desparramado a unos cuantos
centímetros de él.
- "Muchacho, a tu edad y aun no eres capaz de medir bien tus aterrizajes?"-
pregunto al ver como es que el más joven de los Supremos Kaiohsamas había
caído de narices otra vez al teletransportarse.
- "Lo siento ancestro, pero con las prisas me es muy difícil concéntrame"-
se defendió.
- "Y dime ¿cómo te fue?"- pregunto el anciano volviendo
su atención al contenido de su lectura.
- "Justo a tiempo, no hay que preocuparse por ellos."
- "Me alegra escuchar eso"
- "¿Y ahora que?"- pregunto el mas joven e inexperto.
- "Esperar"
- "!Esperar?! Pero Supremo Kaiohsama ¿cómo puede estar tan
tranquilo sabiendo de la aparición de ese nuevo guerrero?! ¿No
cree que si nadie lo detiene sería un catástrofe?"
- "Por supuesto que lo sé, pero no resuelvo nada preocupándome"-
dijo indiferente el viejo.
- "Me gustaría escucharlo alguna vez con un poco más de sensibilidad
a lo que esta ocurriendo"
- "Mira hijo, te seré franco, lo que esta sucediendo esta fuera
de nuestra jurisdicción, hay fuerzas que están trabajando en esto
y no podemos hacer mas de lo que ya hiciste... por lo menos aun no es el momento"-
agregó el anciano despreocupado.
- "Pero de verdad cree que esos muchachos sean capaz de hacerlo solos?
Es decir, son muy jóvenes"
- "La edad no tiene nada que ver en estas cuestiones. Olvidas como es que
Gohan a su corta edad ya era todo un guerrero? Así que despreocúpate,
las Fuerzas Superiores tienen esperanzas en ellos"
- "Supremo KaiohSama me gustaría saber lo que usted sabe para poder
estar más tranquilo"
- "Aun no es el momento hijo, pero te prometo que algún día
lo sabrás"
- "Es por ese muchacho ¿verdad?"- pregunto el más joven
más no recibió una respuesta- "Usted cree en su capacidad
porque es descendiente del Señor Goku no es cierto?"
- "Veo que te estas haciendo cada vez más observador"- agregó
el anciano mostrándose indiferente al tema.
- "¿Sabe que es muy egoísta al no decirme lo que sabe respecto
a ello? Sé que sabe más de lo que aparenta saber, si tantos años
de estar con usted me han enseñado algo es que siempre sabe más
de la cuenta"- añadió el joven Supremo Kaiohsama.
- "Mira muchacho si estuviera en mi poder decírtelo lo haría
pero aun no es el momento, cuando ese joven este listo todo saldrá a
la luz, te lo garantizo, así lo requerirán las Fuerzas.
°°°°°°
En el Planeta Kelbo.
Los aldeanos reconocieron rápidamente al joven
saiyajin y la ayuda fue instantánea. Era en momentos como esos en los
que agradecía tener diversas amistades en diferentes planetas, uno nunca
sabía cuando podría necesitar de la ayuda de los amigos.
- "Cort, me alegro mucho de verte!"- una mujer su acerco rápidamente
al saiya y le proporciono un tierno abrazo.
- "Has crecido tanto... ¿cuántos años han pasado?
¿Tres? ¿Cuatro?
Cort: Realmente son cinco años...- corrigió apenado.
- "Pero si ya eres todo un hombre, es bueno volver a verte después
de tanto"
Cort: También me alegra verte de nuevo Lemu, pero me hubiese gustado
que fuera bajo otras circunstancias.
Lemu: Me dijeron el estado de tus amigos... ¿pero que fue lo que paso?-
pregunto preocupada ante aquella mirada que reflejaba el joven.
Cort: Primero me gustaría saber como están ellos.
Lemu: No te preocupes, según me informaron se repondrán, el shaman
de la aldea es un excelente medico.
Cort: Es bueno escuchar eso. Bueno... lo que sucedió es que...
- ¡Cort! Tanto tiempo sin verte!!- exclamo alguien que entro a la habitación
como rayo y ya se encontraba adherida al cuello del saiya.
Cort: ... Navi... tan efusiva como siempre- trato de decir más los brazos
de la joven le obstaculizaban la respiración.
Navi: Eres un desconsiderado, cinco años sin aparecerte por aquí-
frunció el ceño un poco disgustada.
Cort: Lo siento, pero tenia muchas cosas que hacer... Vaya veo que has cambiado
mucho- dijo al notar la esbelta y delgada figura con la que contaba la joven
de cabello negro que se encontraba recogido, contando con un par de ojos marrones
muy expresivos.
Navi: Puedo decir lo mismo de ti, te has convertido en un chico muy apuesto!
Aunque siempre lo has sido!- dijo al tomar su mano enguantada, notando en ella
rastros de sangre seca- ¿Pero que fue lo que paso, que les paso a ti
y a tus amigos?
Cort: Es una larga historia... y me gustaría ver a los demás.
Lemu: Por supuesto, Navi porque no lo acompañas.
Navi: Será un placer, vamos Cort yo te guiare- dijo al sujetarse de su
brazo.
Cort: Navi ¿cuántas veces te he dicho que no te me pegues tanto?!
Navi: Muchas, pero eso no me importa.
Al salir, muchos de los aldeanos se fijaban en aquella
pareja, desde pequeños los habían visto juntos y esperanzaban
que algún día se formalizara una relación, por supuesto
que Cort jamas ha pensado en algo como el matrimonio y mucho menos con Navi,
pero ella era tan terca... aunque tal vez solo lo haga para hacerlo enojar.
Se acercaron a una construcción y de ella salió la joven de cabellos
violetas, observando la comprometedora situación en la que observó
a su hermano.
Dana: Oh vaya vaya vaya que es lo que tenemos aquí?- preguntó
pícaramente- Te lo tenias muy bien escondido ¿eh Cort?
Cort: Por favor Dana, no es lo que crees.
Navi: ¿No me vas a presentar?
Cort: Navi, ella es Dana. Dana ella es Navi, una Ami...
Navi: Soy su prometida- agrego interrumpiendo.
Cort: Eso no es cierto!- exclamo sonrojado.
Navi: No le hagas caso, lo que pasa es que es muy tímido para admitirlo.
Dana: Hahaha debo admitir que hacen una linda pareja- dijo sarcásticamente.
Cort: No ayudas mucho sabes?- añadió molesto.
- "¿Qué es lo que pasa aquí?"- preguntó
alguien saliendo de la pequeña construcción.
Cort: Señor Gohan ¿cómo se siente?
Gohan: Un poco adolorido para ya me siento mejor que antes- respondió
al acercarse a los jóvenes.
Dana: Vejita necesita un poco más de tiempo en reponerse- explicó-
Por lo que ¿me puedes decir que es este lugar?
Cort: Al igual que ustedes no sé como es que llegamos hasta aquí
pero ya no nos encontramos en el planeta Tierra, este es el planeta Kelbo.
Gohan: ¿El planeta Kelbo? Según recuerdo Pan menciono que habían
llegado a este planeta durante aquel viaje que hizo junto con mi padre- pensó.
Dana: ¿Y esta muy lejos de la Tierra?
Cort: Bastante.
Dana: ¿Y como se supone que vamos a regresar? El planeta entero peligro
si él se quedo en ese lugar!
Gohan: No olvidemos que en la Tierra se encuentra mi hermano, Uub, tu padre,
Trunks, el señor Vegeta y Pan, no creo que este tan desprotegidos como
tu crees.
Dana: Pero de verdad crees que puedan ellos con él? No lo creo.
Gohan: No nos queda más que confiar en su fortaleza si la situación
allá empeora.
Cort: En eso tiene razón.
Dana: ¿Habrá una forma en la que podamos regresar?
Cort: No lo creo, aquí la tecnología no es muy avanzada por si
ya se dieron cuenta, sin ofender Navi, por lo que alguna nave será imposible
de conseguir.
Dana: Entonces nos encontramos varados en este lugar- agregó un poco
molesta.
Gohan: Eso parece. Pero debe haber algo que podamos hacer para regresar.
Lemu: ¿Por qué no consultan a nuestra Sacerdotisa?- sugirió
al momento de acercarse.
Dana: ¿Sacerdotisa?
Lemu: Ella es una persona muy sabia, protectora de este planeta, seguramente
ella podrá ayudarlos.
Cort: Jamas había escuchado que existiera.
Navi: Es porque los saiyajins jamas creen que existan fuerzas superiores que
resguardan a los demás, no tenía caso decirte.
Gohan: Es una clase de diosa?
Lemu: Podría decirse, ella solo es una representante de las fuerzas del
bien del otro mundo en estas tierras.
Gohan: Así como los Kamisamas.
Dana: Esa Sacerdotisa de la que hablan debe ser lo equivalente al Kamisama de
la Tierra.
Cort: ¿Cómo podemos verla?
Lemu: Bueno... nadie la ha visto desde hace décadas, pero se dice que
vive en un templo en algún lugar del planeta, pero exactamente no lo
sé, lo siento.
Gohan: No tiene porque disculparse, creo que no perdemos nada con intentar buscarla.
Dana: Es verdad, aunque no creo que podamos hacerlo en la oscuridad, esta oscureciendo.
Lemu: Lo más conveniente es que esperaran hasta mañana, tal vez
pueda consultar a los ancianos para saber si saben la localización exacta.
Cort: Esta bien, eso haremos.
Lemu: Navi, ¿por qué no organizas todo para la estadía
de nuestro invitados esta noche?
Navi: Por supuesto mamá, ya veras Cort te preparare una gran cena, hecha
solo por mi, pero vaya cocinar para cuatro saiyajins será todo un reto,
creo que necesitaremos mucha ayuda.
Gohan: Espero y no sea una molestia.
Lemu: Por supuesto que no, ya a los saiyajins les debemos mucho, no nos molesta
en absoluto ser ahora nosotros los que podamos ayudarlos, con su permiso, Navi
ven conmigo.
Navi: Sí mamá, yo los buscare cuando todo este listo- dijo al
marcharse junto con su madre.
Lemu: ¿A que se refería con que les deben mucho a los saiyajins?
Cort: Según escuche, aproximadamente veinte años, esta aldea se
vio en serios problemas por una criatura llamada Zhunamer, la cual amenazaba
a todos con provocar grandes sismos si no le daban lo que él pedía,
y así estuvieron mucho tiempo obedeciendo las ordenes dadas por él,
y un día pidió a Lemu para que fuese su esposa.
Dana: Oh vaya.
Cort: Pero ese mismo día, tres saiyajins como nosotros llegaron a este
planeta en busca de...
Gohan: Una esfera del dragón- interrumpió.
Cort: Exactamente.
Dana: ¿Cómo es que lo sabe?
Gohan: Es porque esos tres saiyajins fueron Trunks, Pan y mi padre.
Cort: Eso no lo sabía.
Dana: Pero que paso después?- preguntó intrigada.
Cort: Bueno, Lemu poseía esa esfera y se las daría con la condición
de que los ayudaran deteniendo a Zhunamer, según esto sus bigotes eran
los que tenían el poder para hacer vibrar la tierra, por lo que lo que
harían serian cortarlos, así construyeron un plan por lo que uno
de ellos se tuvo que hacer pasar por Lemu...
Gohan: Sí, recuerdo esa parte, Trunks fue el desafortunado.
- "¿Qué mi padre que?!"- escucharon desde el interior
de la construcción de la que instantes después emergió
Vejita.
Cort: A Vejita veo que ya te sientes mejor.
Vejita: Puedes repetir aquello que dijiste?- preguntó no de muy buena
manera.
Cort: Bueno yo solo estoy relatando los hechos a como me lo relataron, si fue
tu padre quien se disfrazo de mujer no es mi culpa- agregó con una enorme
gota de sudor resbalando por su cara.
Vejita: No puedo creer que eso sea cierto, pense que como venía de Pan
solo era una broma.
Cort: Pero déjame decirte que se convirtió en toda una historia,
tu padre es un héroe para muchos aquí.
Vejita: Cierra la boa que no estoy de buen humor para tus payasadas.
Gohan: Jóvenes tranquilos- intento intervenir el único adulto
del grupo.
Dana: No puedo imaginar a tu papá vestido de mujer hahahaha- comenzó
a reír- Pero que paso después?
Cort: El principio todo resulto como se planeo, al infiltrarse en su escondite
lograron cortar un bigote, pero se dio cuenta del truco por lo que el segundo
fue imposible, pero no tenían que temer ya que solo era una mentira de
Zhunamer que él era capaz de producir sismos, lo que sus bigotes solo
hacían era sentir cuando se aproximaba uno, por lo que los de este pueblo
le sirvieron engañados por mucho tiempo.
Dana: Vaya que historia.
Cort: Pero a fin de cuentas perdonaron a Zhunamer y trabaja muy duro para recompensar
lo que hizo desde entonces.
Cort observaba atentamente el panorama nocturno que el
cielo en Kelbo proporcionaba, no era muy diferente al de la Tierra. No podía
apartar de su cabeza el hecho de volver a tener que luchar contra él,
su oponente pelearía con todo pero él no, no podía hacerlo!
Por más que su orgullo de saiyajin le pidiera pelear sus sentimientos
lo traicionaban, no le iban a permitir hacerlo. Fueron numerosas veces las que
titubeo teniendo una buena oportunidad, pero su enemigo no desperdicio ninguna
si eliminarlo estaba en juego. Era algo muy injusto a su parecer!! Es capaz
de cargar con el conocimiento que para nacer él su madre dio al vida,
siempre ha pensando en que ha sido su culpa, y por más que Sett le decía
que no debía hacerlo él era incapaz de asimilar que no había
sido su responsabilidad... Y ahora... y ahora estaba siendo empujado a que debía
quitar la vida a otra persona a la cual quería, ya lo ha hizo una vez
inconscientemente, ahora le pedían que lo hiciera de nuevo consciente
de ello. No! debía haber otra forma! Una maldita forma de hacerlo reaccionar!...
pero lo intentó y no lo logro, no dio señas de que él estuviese
ahí... de que aun existiera debajo de aquella nueva imagen que posee
ahora.
Sintió que alguien coloco su mano sobre su hombro, esperaba con ansias
de que no se tratara de Navi ya que no sentía la paciencia necesaria
como para escuchar sus disparates.
Para su buena suerte se trataba de Gohan.
Gohan: Sucede algo malo?- preguntó.
Cort: No... yo solo estaba pensando en lo ocurrido...
Gohan: Dana me lo explico todo- añadió.
Cort: ¿Puedo preguntarle algo?
Gohan: Por supuesto.
Cort: ¿Por qué fue en nuestra ayuda? Es decir, me desconcierta
el que usted no posea amplias habilidades como para poder enfrentarse a él...
no estoy diciendo que no sea fuerte pero...
Gohan: Si entiendo, pero no te preocupes yo lo sé mejor que nadie. No
soy tan joven como solía ser hace años y mis aptitudes como guerrero
decayeron mucho desde lo que había sido el combate contra los dragones
malignos, pero a diferencia de los saiyajins puros como tu, nosotros los descendientes
de humanos y saiyajins no poseemos ese alto deseo de luchar... solo lo hacemos
cuando la situación lo amerita, pero había pasado tanto tiempo
que ninguno de nosotros pensó en que algo así volvería
a ocurrir, que de nueva cuenta necesitaríamos volver a ser guerreros,
es por ello que no estamos capacitados para luchar directamente en esta batalla.
Cort: Pero, Sus hijos muestran tener muchos deseos de volverse más fuertes...
Tenemos a Vejita como ejemplo, también Dario y en determinado caso a
Pan y a Dana de igual forma.
Gohan: Es verdad, me he dado cuenta que la primera generación de hijos
de padres saiyajins y de madres terrícolas no somos muy amantes a las
peleas, preferimos tener una vida normal que pelear, pero cuando esa generación
volvió a tener descendencia con humanos emergió una que posee
el mismo orgullo de guerrero, pelear y entrenar era para lo único que
vivían, Pan desde muy pequeña despertó ese lado, ella fue
la primera de esa generación y los demás le siguieron también,
tal parece que mientras más diluida esta la sangre saiyajin con la humana
más hábiles surgen en el combate... o por lo menos eso creo.
Cort: Puede tener razón.
Gohan: Yo sentí como es que ustedes estaban luchando, y aunque mi sentido
común me mantenía apartado de esa batalla, mi instinto de guerrero
me pidió que fuese, no importa si no soy tan joven como antes, mis deseos
de luchar me impulsaron a ir, llegando justo a tiempo para ayudar aunque fuese
muy poco. No puedo negar que por mi sangre no corre sangre de saiyajin... cuando
una batalla comienza deseo estar involucrado a pesar de que parezca una locura,
pero si en mi estaba poder ayudar aunque fuese un poco estoy satisfecho.
Cort: Y vaya que ayudo, de no ser por su intervención tal vez hubiese
muerto ante tal ataque. Me alegra que haya hecho a un lado su sentido común.
Gohan: Sé que debe ser muy duro para ti esto que
esta pasando- dijo de pronto pero sin recibir respuesta.
Cort: ¿Cómo es que puede saberlo?- preguntó indiferente-
No creo que usted jamas haya pasado por algo así.
Gohan: Te equivocas, pase por algo similar cuando era un niño, cuando
mi maestro y todos mis amigos se volvieron demonios gracias a la neblina Aqua
que esparció un sujeto llamado Garlick Junior. Me vi obligado a luchar
contra ellos.
Cort: ¿Y me vas a decir que te resultó fácil?
Gohan: No, fue una de mis mayores pruebas en mi vida. No sabía que es
lo que debía hacer... debía pasar primero sobre ellos para poder
destruir al verdadero enemigo, no era capaz de levantar mis puños contra
aquella persona que me educo como guerrero a mi corta edad, a quien respetaba
tanto como respetaba a mi padre.
Cort se extrañó al escuchar aquello puesto a que le sonaba bastante
parecido si lo comparaba con su vida y con este momento por el que pasaba.
Gohan: Tenía que defender mi vida de él, luche con él pero
aun así era incapaz de desear hacerle daño... Yo esperaba que
lograse escucharme, hacerlo entrar en razón, pero no lo logre... Pero
he aquí en donde deja de ser parecido a lo que sucede, él solo
estaba fingiendo estar bajo el control de Garlick Junior, no sabes como me sorprendí
al saberlo, pero todo era parte de un plan para volver a todos los humanos a
la normalidad- explicó.
Cort: Pero en este caso él no esta fingiendo... no dudo que el planeta
Tierra ya no exista para estos momentos.
Gohan: Puede ser... pero siempre uno tiene que abrigar esperanzas. Ahora sé
que es difícil pero si vuelves a enfrentarte a él ¿qué
es lo que harás?
Cort: ¿Qué es lo que se supone que debo hacer?- preguntó
seriamente.
Gohan: ¿Vas a luchar o dejaras que siga como esta?
Cort: ... Si lucho, sería como estar obligado a matarlo.
Gohan: Y si no luchas muchos morirán.
Cort: No tienes ni la menor idea de lo que me estas pidiendo!!
Gohan: Si, si sé lo que te estoy pidiendo, te estoy pidiendo que lo detengas,
¿de verdad crees que a él le hubiese gustado ser el ser que termine
con miles de vidas, con la tuya? Deberías tratar de pensar de la forma
en la que él hubiese visto esto, ¿crees que le agradaría
verse convertido en esa criatura sin alma? No lo creo... Creo que hubiese preferido
morir mil veces antes de convertirse en lo que es ahora y creo que el que tiene
que hacerlo eres tu! Por favor, no pienses que soy insensible ante esto pero
no creo que haya otra salida- añadió duramente.
Cort: Tu no lo conociste! ¿Cómo rayos sabes que es lo que él
querría?
Gohan: Lo conocí hace tiempo te lo dije, y aunque no lo conozca tan bien
como tú, él lleva células de mi padre, de Vegeta, mías,
de Trunks y si realmente se parece en algo a nosotros creo que estaría
de acuerdo con lo que te estoy diciendo.- explicó.
Cort permaneció en silencio observando la mirada dura de aquel hombre
que le había hablado tan abiertamente y sin titubear, de esa misma manera
tan cruda le hubiese hablando él en un momento como este.
Ver a Gohan tan de cerca lo hacían notar lo cuan parecidos eran físicamente,
y de igual forma él lo hacia. Pero no solo su apariencia era lo que se
asimilaba entre ellos...
Gohan se había lanzado inconscientemente a la batalla a su parecer, pero
no había duda que "la sangre llama" en estos casos.
Gohan: Él no titubeo ni un instante en acabar contigo... ten en mente
eso.
Una silueta sombría y solitaria permanecía inerte en el techo
de un enorme rascacielos, el más alto de aquella ciudad en el planeta
Plant. De pie, con sus ojos cerrados y brazos cruzados aquella criatura parecía
meditar en medio de la superficie.
Al fusionarse dos entidades, su conciencia y conocimientos tienden a asimilarse
entre ambas, pero esta vez este nuevo guerrero solo había asimilado su
fuerza, no necesitaba el conocimiento de una criatura que considero inferior,
solo su fuerza y habilidad era lo que le servía, sin embargo había
cierta confusión en su cabeza... ¿quién era? Definitivamente
ya no era lo que al principio fue, Alessa lo llamaba "Sett", pero
al fusionarse con sus poderes ese nombre no le satisfacía, le parecía
vacío y sin valor alguno; era incapaz de darse el lujo de autonombrarse
alguno... Era como si lo supiera pero a la vez no... como si supiera que su
nombre se encontraba en algún lugar de su mente pero era incapaz de encontrarlo.
Repentinamente su agudo sentido del oído le hizo percatarse de algo diferente
al bullicio de aquella ciudad, tenia compañía. Permaneció
en su lugar, como si no le importase quien fuese.
- "Veo que te estas acercando a lo que realmente eres"- le habló,
una voz le había dirigido la palabra como si lo conociera desde hacia
ya mucho tiempo.
- "Aunque todavía te falta un largo camino que recorrer para que
lo recuerdes... No sé como es que el amo este tan interesado en ti"-
escuchaba atentamente pero no lograba entender a lo que se refería. Por
el sonido de sus pasos se daba cuenta que caminaba en círculos alrededor
de él.
La criatura abrió lentamente su fría mirada, observando a un hombre
alto de cabellos oscuros y ojos de un color verde, vistiendo ropas bastante
peculiares, sin muchos detalles, una capa larga de color vino lo cubría.
- "Se puede saber ¿quién rayos eres tu?- preguntó
seriamente.
- "Oh vaya, pense que al fusionarte con Alessa tendrías los conocimientos
y recuerdos que ella posee, pero veo que fuiste capaz de elegir que es lo que
querías y no querías obtener de ella"- dijo aquel hombre-
"Y creo que por ti mismo no me recuerdas... claro después de todo
a los Kaiohsamas aun no les conviene ¿verdad?"
- "No entiendo absolutamente nada de lo que dices"- agregó
no muy paciente.
- "No, por supuesto que no... Entonces permíteme presentarme, mi
nombre es Ansalon."- se presentó.
- "¿Y exactamente ese nombre que debe significar para mi?"
Ansalon: Soy a quien le debes lo que eres ahora- explicó arrogantemente.
- "¿En serio? No eres el primero que me dice esa clase de estupideces,
Alessa lo hizo y eso no me impidió desaparecerla"
Ansalon: Pero Alessa solo era una pequeña marioneta, de la cual yo era
quien jalaba los hilos.
- "¿Y quien jala de los tuyos?"- preguntó.
Ansalon: Aun no es momento de que lo sepas, créeme, el conocimiento llegara
a ti pronto, no debes ser impaciente.
- "¿Y que es lo que haces aquí?"
Ansalon: Cuidando de los intereses del espectador principal- dijo enigmáticamente-
Pero eso no importa ahora, lo que importa es que termines con tu desarrollo
lo antes posible"
- "¿Quién eres tu para darme ordenes?"- preguntó
desafiantemente.
Ansalon: Alguien que daría lo que fuera para quitarte del camino...-
musitó al tenerlo frente a frente- Sé que no entiendes nada de
lo que te estoy diciendo, pero lo harás cuando termines lo que empece
al traerte a Alessa a este tiempo.
- "¿Tu fuiste quien la trajo hasta aquí?"
Ansalon: La creamos solo para que llegase este día, ella fue el conducto
que necesitabas para ser como eres ahora... ¿Acaso no te agrada ese maravilloso
poder y sensación de libertad al estar protegido por las energías
negativas?- preguntó sarcásticamente- Lo que no entiendo es el
hecho de como no te has marchado de este sistema solar, tienes algo que hacer
¿lo olvidas?
- "En eso me encontraba cuando llegaste a fastidiarme!"
Ansalon: Solo aproveche la oportunidad para hacerme notar... ya hablaremos después
más a fondo- dijo al pasar por un lado de la criatura- Tengo ciertos
asuntos que arreglar, pero estaré al pendiente de lo que hagas.
Su presencia desapareció como si hubiese sido
un fantasma. No poseía un ki común y corriente de eso era seguro.
Le había hablado como si lo conociera ya pero él era incapaz de
recordarlo, pero ciertamente le resultaba familiar...
Aunque hubiese querido lanzarse sobre él, ciertamente su cuerpo y sus
deseos se contuvieron de hacerlo, como si una fuerza extraña lo hubiese
obligado a permanecer estático... ¿o habría sido su sentido
común al sentir aquella extraña energía provenir de él?
Fuese como fuese lo había dejado con muchas dudas... pero las averiguaría
después, ahora debía concentrarse en encontrarlo...