"La Mitad de un Ser"
Por Ulti_SG

Durante toda su vida había tendido a negar sus orígenes. No deseaba que su pasado, su origen, interviniera en su vida, la vida de terrícola que había escogido y con la cual había forjado su existencia entera.

Este individuo le debe tanto a su identidad terrícola, con ella había forjado una gran familia y un sólido bienestar... Pero ¿y el saiyajin que habita en él?... ¿Compartía los mismos gustos que el terrícola? ¿Estaba conforme con el tipo de vida que el terrícola había escogido y a la cual no le quedaba mas que aceptarla?

Durante toda su vida, su identidad saiyajin había pasado a un plano en donde permanecía latente en su subconsciente, reprimido por su identidad terrícola de una manera inconsciente al luchar para no dejarlo salir, para que no rompiese el 'equilibrio' que había logrado en este planeta que adopto como su único y autentico hogar.
El saiyajin en él, solo lograba manifestarse en ciertas situaciones, la mayoría de ellas ante el jubilo o excitación de la batalla, el gozo de la pelea y la adrenalina del combate; ante estas situaciones es cuando el saiyajin se desplaza en su subconsciente y lograba tomar el control aunque fuese solo por unos momentos, para después ser suplantado nuevamente.

Pensar que todo esto, esta división de identidades se debe a un solo golpe en la cabeza... un 'accidente' que logro formar dos seres diferentes dentro de aquel cuerpo, siendo una la que reprima a la otra, casi hasta extinguirla por completo.

Su identidad como saiyajin había quedado prácticamente en el olvido de su memoria, pero el destino lo había llevado a toparse con miembros de su misma raza, quienes ciertamente 'despertaron' al saiyajin en él, aunque el terrícola se resistiera inconscientemente.
Cuando escuchaba que lo nombraban por su nombre saiyajin, Kakarotto, aunque el terrícola le desagradara, al saiyajin le daba gusto el saber que alguien se percataba de su existencia... Pero Son Goku era demasiado testarudo al no aceptar la realidad de su origen y más aun al darse cuenta de lo despiadado que los de su raza eran... Él no deseaba convertirse en alguien como ellos... Mil veces ser un terrícola que volver a ser un saiyajin... Sin embargo no todos los saiyajins cuentan con el mismo estereotipo... Por lo menos ya no...

Conforme paso el tiempo, y enemigos más fuertes entre sí aparecían, más era la necesidad de acudir a las habilidades que su origen le brindaba, alcanzando niveles muy elevados, hasta que finalmente, gracias a un arranque de furia, el saiyajin dentro de él logro despertar, al revelarse a si mismo como el Legendario Super Saiyajin.
Fue un cambio de existencia que él había adquirido desde entonces, su identidad saiyajin había logrado manifestarse como nunca antes...
Inconscientemente, se había vuelto más feroz en el combate, pero aun así, su lado terrícola lograba que tuviese cierto control sobre sus feroces instintos...

Era difícil, era muy difícil para él contener los instintos bestiales que al acceder a sus transformaciones se presentaban en su mente... y cada vez era peor, conforme el nivel requerido ascendía... Super Saiyajin 1, 2, 3 y finalmente 4... en esta ultima resaltaba su apariencia 'primitiva', muy similar a la de sus antepasados... Todos los miraban y creían que era algo fácil mantenerse tan tranquilo... pero que equivocados están, es todo un reto utilizar esa transformación sin que el Ohzaru que habita en cada saiyajin no tomase el control...

Pero poco a poco, Kakarotto comenzó a controlarlo a voluntad... El Super Saiyajin 4, inconscientemente lo llevaba a pensar como todo un saiyajin, tal vez esta transformación era la manifestación de su identidad reprimida...

Son Goku había logrado tanto... mientras que el saiyajin dentro de él no poseía nada... de eso estaba consciente en estos momentos...
En este momento tan crucial en donde se encontraba al lado de una hembra de su propia y genuina especie.

Por juegos del destino, Son Goku/Kakarotto, había tenido la oportunidad de conocer el lugar en donde los saiyajins habían logrado sobrevivir a su extinción... en donde el estereotipo que él tenia en su mente con respecto a los de su raza cambio por completo viendo su error al ver como todos ellos eran diferentes a como él los había catalogado...
Estos saiyajins poseían el mismo espíritu guerrero, sin embargo, la diferencia estaba en su comportamiento y en la manera de ejercer sus habilidades hacia los demás, ya que ninguno se dedicaba al extermino o conquista planetaria.

Este planeta, logró que Kakarotto se sintiese como nunca antes... ... En cuanto había pisado este lugar, una increíble nostalgia lo invadió, así como también un desconcertante sentimiento de dicha... Dándose cuenta como es aquel sentimiento de sentirse en 'casa', por lo menos para su lado saiyajin...

Durante su estadía, comprendió lo que era ser uno de ellos... Comportarse como lo que era, un saiyajin. El estar en contacto con los de su raza ayudo a que se percatara inconscientemente de lo diferente que es Son Goku de él... El terrícola era quien lo tenía todo, mientras que él debía permanecer aparte...

Esa era su realidad, y solo en este lugar podía ser lo que en la Tierra no tenía permitido ser o hacer. Después de tanto tiempo... en estos momentos, hubiese deseado jamas haber perdido su identidad como saiyajin, así jamas hubiese existido esa separación de entidades y solo sería un saiyajin...

En este planeta se había encontrado consigo mismo... Había encontrado lo que pudo haber sido su vida si hubiese permanecido siendo simplemente Kakarotto... Había experimentado tanto... Encontrado tanto, para tener que dejarlo ir...

°°°°°°°°°°°°

Los ojos ambarinos de Kakarotto se mantenían firmes ante la presencia de la oscuridad que cubría aquella habitación.
Su cuerpo descansaba sobre una cómoda estructura mientras sutilmente sujetaba la fina y delgada mano de su compañera...
Dirigió su intensa mirada sobre ella, mirándola en silencio mientras ella dormía en su regazo. Su belleza era incapaz de ser opacada por la oscuridad, él podía observarla perfectamente, le resultaba curioso que pese a ella tener un carácter tan fuerte pareciese la criatura más frágil del mundo mientras dormía.

Ese rostro tan angelical... pese a apenas conocer a la portadora de aquel bello semblante, podría jurar que la conocía de toda la vida...
Su esbelta figura se encontraba celosamente cubierta por una delgada sabana, cubriendo su desnudez.

Todo pareciese que había ocurrido demasiado rápido... Pero en estos momentos ningún remordimiento rondaba por la mente del saiyajin, no iba a estropear este instante con remordimientos de ninguna clase... Estaba perfectamente consciente de lo que hacia y no se arrepentía, puesto a que estos momentos eran los más felices que durante su vida, Kakarotto había tenido, había sido libre para escoger a una mujer, a su compañera a voluntad y que experimentara sentimientos que nacieron solo gracias a ella y solo para ella.

Había sido una increíble experiencia... Kakarotto jamas había tenido la oportunidad de experimentar algo parecido como lo que había ocurrido en esta habitación, y simplemente al recordarlos lograron que sus labios se curvearan un poco.

Era incapaz de apartar sus ojos color ámbar de aquella mujer tan fascinante... Acariciaba su mano con dulzura mientras ella parecía encontrarse entre hermosos sueños.
Lentamente el saiyajin aparto con cuidado los cabellos oscuros que descansaban sobre el rostro de su compañera, solo para admirarla mejor, su semblante mostraba una inmensa tranquilidad y a la vez trasmitía 'felicidad'.

No era capaz de atreverse a cerrar su ojos.... Si lo hacia más pronto llegaría el sol, suplantando esta oscuridad tal y como sucederá en su interior... Estaba consciente que Son Goku tenía que regresar y él aceptar su llegada tal y como la noche debía sucumbir ante la llegada de cada amanecer... Ese hecho lograba que se sintiese melancólico e impotente...

Ante este conocimiento, abrazó con dulzura a su compañera, como si quisiera de ella poder aferrarse para no tener que partir. Con su mano, cuidadosamente delineo la espalda de ella en una caricia, cuando su tacto sintió algo húmedo que recorría su suave piel, subiendo un poco más, sus dedos llegaron detrás de la nuca, en donde la textura de una herida se encontraba. El rostro de su mujer reflejo cierta incomodidad el haber tocado la sensible herida.

Intuitivamente, llevo su propia mano a su cuello, notando la misma marca en su nuca... Este hecho le desconcertó un poco, pero después de un momento recordó como es que él había sido el autor de aquella pequeña herida en la nuca de su compañera, así como recordar que ella había hecho lo mismo con él...
Este hecho se debía a algo simple, era la forma en la que los de su raza 'marcaban' a quienes escogían a su pareja, y él lo había hecho de una manera inconsciente en ella...

Bueno, no era algo de lo cual debía preocuparse, por lo que le permitió a su cabeza descansar nuevamente en la cómoda almohada mientras sus ojos ambarinos ser perdían en la oscuridad, aún sin ceder a cerrarse.

Su cola de mono se encontraba enroscada alrededor de la de su compañera, como si ambas poseyeran alguna clase de conciencia aparte...

La mujer dejo escapar un ligero suspiro entre sueños, para después lentamente sus ojos claros comenzaran a abrirse. Todo se encontraba en penumbras...
Al sentir como unos fuertes y protectores brazos la rodeaban, se dio cuenta que había sido real... que no había sido ningún sueño...
No estaba segura si su compañero estuviese despierto o no, por lo que permaneció en silencio, con sus ojos atentos al subir y bajar del pecho de él al respirar...
Todo había sido tan rápido... Pero a la vez tan hermoso, había logrado manifestar finalmente aquellos sentimientos que habían nacido para él y solo para él, a través de sus besos y caricias y se alegraba que fuese él a quien le entregó su cuerpo y su alma sin esperar nada a cambio... Ella estaba consciente de la realidad... Él no le pertenecía, no pertenecía aquí... por lo menos no completamente...

Lo abrazó con gentileza, como si tratara de aferrarse a él que no se marchara, que no la dejara, no después de lo que ocurrió... Había sido tan hermoso... Como si se hubiese tratado de un sueño... pero como todo sueño, este siempre debe terminar cuando sale el sol que es el símbolo para que todos volviesen a la realidad al despertar de sus sueños... Y es lo mismo que ocurriría cuando el sol apareciese... ambos deberían volver a la realidad y aparentar que nada de esto sucedió... Aunque esto le entristecía, no iba tratar de cambiar la realidad de ambos, este hombre tenía que volver de donde vino y ella tenía que dejarlo ir...

Inconscientemente un par de lagrimas se resbalaron por sus mejillas al estar consciente de todo aquello, que esto jamas debió haber ocurrido... Había tratado de ser firme, pero no pudo, su voluntad no pudo más que sus deseos... Y el precio de esa muestra de debilidad sería bastante alto: Tener la oportunidad de haberlo tenido junto a ella y después verse obligada a dejarlo partir... Pero no dejaría que ello la destrozara de esa manera, siempre había sido una guerrera fuerte y firme en todas sus decisiones, y estaba vez debía ser igual.

Colocó sutilmente su mano sobre el pecho de su compañero, siendo capaz de sentir el ritmo de su corazón. Dulcemente comenzó a delinear aquellos músculos tan bien marcados con los que su fornido cuerpo contaba.
- "Definitivamente Kakarotto... eres el hombre al que he amado toda mi vida... y al cual amare hasta el fin de mis días"- murmuró la mujer para si misma.
Sin esperárselo la firme mano de su compañero sujeto la suya con delicadeza. La saiyajin levantó su mirada, solo para sostener la intensa mirada de Kakarotto. Su semblante irradiaba seriedad, algo no muy común en él, pero ella estaba segura que se debía a las preocupaciones que a ambos les aquejaban...

Permanecieron en silencio, simplemente sosteniendo la mirada del otro, para ser ella quien la desviara primero, al recargar con cuidado su cabeza nuevamente en el regazo de su compañero.
- "Pense que estarías dormido..."- murmuró nuevamente.
- "No deseo hacerlo... el tiempo se iría mucho más rápido si durmiese..."- dijo él de la misma forma.
- "El tiempo es el mismo duermas o no"- contrarresto ella.
- "No para mí... Si durmiera, cuando amaneciera deberé decirte adiós... Prefiero permanecer despierto, atento a todo movimiento que tu hagas, a tus delicados movimientos... como si fuese la ultima vez que te viera..." "Además, he estado pensando..."
- "¿En qué?"
- "En todo lo que a ocurrido... en mi vida completa... No, más bien, en la vida que poseo como Son Goku... Siempre odie ser llamado saiyajin o que me llamaran Kakarotto, pero ahora todo es diferente... Este es el lugar al que siempre debí pertenecer, y tal vez era contigo con quien debía estar..." "En este planeta, me encontré conmigo mismo o más bien con quien debí ser... Me alegra mucho haberte conocido, siento como si con esto que ocurrió entre nosotros mi vida estuviese completa..."
- "No hemos hecho algo... por lo que debamos sentirnos orgullosos... y lo sabes ¿verdad?... Sin embargo, eso no me importa... no mientras estés aquí conmigo"- comentó ella.
- "¿Y que sucederá cuando yo no este aquí?...
La saiya permaneció en silencio ante la pregunta. Levantó su cabeza y se volvió a mirarlo con firmeza.
- "Durante toda mi vida, siempre creí que en algún lugar se encontraba el hombre que amaría con todas mis fuerzas... Pero siempre temí que cuando lo encontrase... él sería incapaz de corresponder mis sentimientos hacia él... Por ello siempre evite el sentir algo por algún hombre... Sin embargo tú fuiste capaz de entrar aquí"- dijo al colocar su mano sobre su pecho- "Tan siquiera con mirarte la primera vez hace ya tanto tiempo, fui incapaz de evitar que entrases a mi corazón y en mis pensamientos... Siempre creía que era una estupidez... ¿cómo podía amarte de esa manera sin si quiera conocerte o haber hablado contigo una sola vez? Trate desaparecer esos sentimientos que creía erróneos pero.... no pude... Esto fue más fuerte que yo o que cualquier oponente con el que haya peleado alguna vez"- murmuró al desviar su vista al sentirse ciertamente apenada, pero con un ligero movimiento de la mano de su compañero, la obligo a girar gentilmente su rostro hacia él nuevamente.
- " Siempre he sentido como si mi corazón estuviese dividido en dos, un lado, ha latido desde siempre por todos mis seres queridos allá en la Tierra... y la otra mitad a comenzado a latir solo por ti... Pero en estos momentos... mi corazón es todo tuyo" "Eh estado dando vueltas a lo mismo desde hace horas y... lamento tanto no haber podido conocerte antes, no haber podido encontrarte antes... el tenerte en estos momentos aquí conmigo, definitivamente me hace pensar que tu eres la saiyajin que fue hecha solo para mí... tal vez si era mi destino estar contigo..."- acarició gentilmente el rostro de ella mientras una solitaria lagrima se había desprendido de sus ojos claros.
- "Pero no fue así... y yo lo entiendo..."- murmuró- "Entiendo más de lo que tu crees Kakarotto... Y sé perfectamente que antes de todo, debes pensar en lo que tienes en tu hogar, en la Tierra..."
- "Ya nada será igual... no después de lo que he experimentado gracias a ti... No podría volver a ser el mismo..."
- "Pero tampoco puedes quedarte"
- "Eso es algo que soy yo quien debería decidir ¿no crees?"
- "Kakarotto, no creo que sea la correcto..."
- "No me importa que es lo correcto o no... No pienso darle la espalda a todo lo que ha sucedido aquí, como si jamas hubiese ocurrido, no podría... no sería justo..."
- "Esto no se trata de lo que es justo o injusto, sino lo que es correcto... Además, tampoco podrías darle la espalda a todos tus seres queridos en la Tierra.. no después de que es con ellos con quienes has forjado tu vida completa... Yo jamas, debía haberme presentado contigo... no debía hacerlo..."
- "No digas eso... Las coincidencias no existen en esta vida... Además, daría mi vida entera y todo este poder que poseo por la oportunidad de poder permanecer contigo..."- se irguió levemente para nivelar miradas con su compañera quien lo miraba bastante confundida.
- "... No ayudas a que esto sea algo fácil..."- murmuró al momento en que sus brazos rodearon el cuello del saiyajin, abrazándolo efusivamente- "¿De verdad crees que yo quiero que te vayas?... ¿De verdad crees que yo no tengo corazón y que no me es difícil pedirte que te alejes de mi?"
- "Entonces no me lo pidas..."- murmuró al corresponder el abrazo.
- "... Kakarotto... de verdad, yo también, daría mi vida entera para que el tiempo pudiese detenerse en este momento y poder permanecer así, de esta manera, a tu lado... Eres el hombre más excepcional que he conocido... lograste que te amara de esta manera... Pero tu no me perteneces... no perteneces aquí, sino en la Tierra... Aun tienes mucho que hacer allá..."
- "... La verdad es que... me siento muy confundido... Es la primera vez en la que no estoy seguro que es lo que debo hacer... Jamas me había sentido de esta manera...."
- "Te comprendo... yo lo comprendo..."- murmuraba tratando de tranquilizarlo- "Tal vez, nuestro destino era conocernos de esta manera tan fugaz... Pero créeme que esto que sucedió entre nosotros, es para mi equivalente a toda una vida... No me hubiese gustado morir algún día sin antes haber tenido la oportunidad de conocerte de esta manera... y que fueses mío... y yo haber sido tuya..."
- "No me hubiese perdonado el no haberte conocido... No me arrepiento de lo que sucedió... Fue hermoso... ¿Ezined?"
Ella se separo un poco para sostener su mirada nuevamente.
- "Sí?"- preguntó.
- "De verdad... te amo... Tal vez no tenga ningún derecho de decirlo porque puede resultar bastante extraño, pero te amo es como si...."
- "¿Me conocieses de toda la vida?"
- "Sí..."
- "Así que, tu también lo sientes..."- sonrió débilmente.
- "Siento como si, el conocerte hubiese despertado en mi, algo que desconocía por completo... no sé exactamente que es pero... El tan solo pensar que tendré que separarme de ti, y darle la espalda a todo lo que en este lugar e encontrado logra que me siente tan impotente y tan infeliz... Es como si, presintiera que si me marcho perdería todo lo que he vivido en este lugar.... Pensar que, solo fue un sueño y nada más que eso"
- "Los sueños... siempre tienen que terminar alguna vez... deben irse con la noche misma... Y el soñador debe volver a la realidad... Eso es lo que nosotros debemos hacer..."
- "Pero...."- sus palabras se vieron obstruidas cuando la saiyajin interpuso sus dedos sobre sus labios.
- "No podemos hacer nada más... y debes aceptarlo... Simplemente, guardar estos recuerdos recelosamente en nuestras memorias y en nuestros corazones, los recuerdos serán lo único que nos hagan saber que esto no fue ningún sueño..." "El amanecer se aproxima, y con él el adiós ¿esta bien?"- preguntó tranquilamente.
Kakarotto permaneció en silencio ante las palabras de la mujer cuando su mano ya no cubría su boca.
- "Pero, aun faltan algunas horas antes de que eso suceda... No quisiera desperdiciarlos discutiendo"- dijo ella al delinear los labios del saiya con su dedo índice.
- "Igual yo..."- concordó.
Recibió un ligero beso en sus labios, en el cual pudo sentir toda la tristeza que su compañera sentía, de alguna manera sus caricias estaban transmitiéndole el dolor que sentía ante lo cual estaba por suceder dentro de escasas horas.
- "No importa, que es lo que suceda a partir de mañana, siempre te considerare mi único amor.... mi único consorte..."-murmuró ella dulcemente mientras las suaves caricias delineaban cada rincón de su figura a través se las sabanas.
Gentilmente ambos volvieron a recostarse, explorando a través de su tacto al otro con extrema delicadeza.
Kakarotto recorría aquel cuerpo como si estuviese hecho del material más delicado del universo, con anterioridad ya había tenido la oportunidad de probar su capacidad de resistencia, pero esta vez prefería explorarlo con ternura, mientras de igual forma sentía las dulces caricias de su compañera, jamas había sentido algo parecido y ahora más que nunca sabía que jamas iba a arrepentirse de esto y aunque ella tuviese razón, no sería capaz de arrancar estos momentos de sus pensamientos y de su corazón, no estaba dispuesto a permitir que esto quedase en el olvido...

Ella se estremeció levemente, al sentirlo nuevamente, aquel sentimiento y emoción que resultaba al momento en que dos seres, hombre y mujer, por algunos instantes se unían en una sola carne. Ahora más que nunca se alegraba que fuese él con quien compartiera estos momentos y que fuese él quien le haya mostrado esa misma sensación, seguramente no hubiese sentido lo mismo si se hubiese tratado de otra persona...
Ella se mostraba ciertamente agotada, pero sabía que esto jamas iba a volver a repetirse, por lo que no se permitía llegar al limite, más sin embargo su amante ya se había percatado de ello, por lo que se detuvo y simplemente se concentro en admirarla. No hubiese querido estropear aquellos momentos con ninguna clase de ruido, interrumpir la musicalidad de aquel hermoso silencio en el que ambos se veían envueltos...
Ella tomo el rostro de su compañero entre sus dos delgadas manos, acariciándola dulcemente para después proporcionarle un delicado pero prolongado beso.
- "Jamas pienso olvidar esto.... nunca, lo llevare siempre conmigo hasta el fin de mis días, y más allá..."- murmuró él.
- "¿Cómo poder olvidar al primer y único hombre que ha logrado hacerme sentir como mujer?.... Lo único que nos unirá, será ello, el recuerdo de lo que sucedió esta noche, y no pienso romper ese vinculo mientras viva... Y jamas me cansare de repetir lo mucho te amo..."
- "Su pudiese hacer algo más... si hubiese algo más que pudiese hacer..."- nuevamente la mano de su compañera se interpuso ante sus palabras.
- "Ssssh, no insistas con ellos.... por favor, tu y yo siempre hemos sabido lo que mejor se tiene que hacer... y esta vez no será la excepción..." "Ahora mi valiente guerrero... abrázame... abrázame y dame fuerzas para... poder mañana darte... la espalda y a todo lo que siento por ti"- susurró débilmente al abrazarlo en busca de la fortaleza que necesitara.
Kakarotto correspondió aquel abrazo.
- "Bríndame de igual forma el, valor suficiente para poder lograrlo..."-murmuró él al estrechar a su compañera entre sus brazos.
Delgadas y cristalinas lagrimas recorrieron sus mejillas una vez más, pero esta debía ser la ultima vez en que lo hiciese... jamas a sido partidaria de manifestar sus emociones de esa manera, y estaba decidida a intentar a cualquier forma volver a ser la misma en cuanto tuviese que dejarlo ir.... aunque resultase algo imposible...
Kakarotto no estaba muy convencido de lo que debía hacer... es la primera vez que se enfrentaba a algo como esto y ya no sabía lo que era correcto o no... Si se marchaba ciertamente sería lo más correcto para todos, pero no para él, no podía engañar a su corazón y el escuchar los ligeros sollozos de ella lograban que se sintiese muy infeliz y miserable... Él había dado todo muchas veces por el bienestar de todos sin esperar nada a cambio, pero esta vez sus pensamientos se mostraban algo egoísta y con justa razón, él como saiyajin no tenía nada, simplemente una acumulación de triunfos en sus anteriores combates, pero nada como esto... ¿Cómo Son Goku podía sentirse tan satisfecho por lo que tenía en la Tierra y él como saiyajin se sentía tan infeliz e insatisfecho?...
No conocía las respuestas de esas preguntas, pero poco a poco sintió la necesidad de dormir... sus párpados se cerraban sin su consentimiento, pero su cansancio era tal que sus deseos era lo ultimo que su cuerpo tomaba en cuenta... Cuando despertara, sabía lo que iba a pasar... pero por lo menos, lo ultimo que vería antes de regresar a la 'realidad' será a ella y el conocimiento de todo lo que sucedió entre ellos siempre estaría en sus pensamientos...

°°°°°°°°

Ezined empapó su rostro con agua recién salida del grifo, levantó un poco su rostro, solo para encontrarse con su reflejo en el espejo que se encontraba frente a ella, observando atentamente como el agua escurría por su rostro y parte de sus cabellos.
Con el constante sonido del agua cayendo, recordaba lo que había vivido hace algunas horas, había despertado y había logrado retener el conocimiento de que todo había sido real, aunque de cierta forma también un sueño, del cual había tenido que despertar y al que pronto debería darle la espalda.
Cerró rápidamente la llave del agua, secando su rostro con la toalla que se encontraba a su alcance.
Tomó los guantes blancos que siempre suele usar, y los colocó debidamente en sus manos. Se observó una ultima vez en aquel espejo, y ante sus ojos era la misma saiyajin de siempre, pero solo ella sabía que eso era solo la imagen que quería dar... no iba a poder ser la misma... no después de que él se marchase...

Salió del cuarto de baño, vestida y lista para salir de este lugar...
Sus ojos no fueron capaces de evitar no dirigirse hacia donde él aun se encontraba.
Se acercó lentamente hacia él, deteniéndose a un lado de la cama en donde él aun dormía. Él ahora poseía nuevamente aquella apariencia 'infantil' con la que por accidente el dios dragón le cedió, al haber terminado con sus reservas de energía, el Super Saiyajin 4 tuvo que sucumbir ante esa apariencia tan inofensiva. Lo observo con detenimiento, debajo de las sabanas, se encontraba roncando con algo de fuerza. Parecía solo un niño durmiendo mientras su cola de saiya se agitaba levemente por encima de las sabanas, pero ayer le había demostrado que no importaba que se encontrase bajo esa apariencia, el hombre que realmente es seguía aun ahí, y sonrió al saber que había sido para si sola, por lo menos una vez.
Entre sueños, lograba balbucear algo, lo máximo que llego a entender fue algo respecto a la comida y como es que repitió su nombre un par de veces.
Con cuidado se sentó al borde de la cama más cercana a donde él se encontraba, observándolo tiernamente. La cola de Kakarotto se había encontrado nuevamente con la cola de ella, Ezined permitió que por una ultima vez ambas se encontraran.
Paso suavemente su mano enguantada por los cabellos enmarañados del saiyajin, tratando de acomodarlos un poco, acariciando levemente su cabeza, algo que logró que él dejase de roncar, su tan solo contacto logró que él dejase de hacerlo, le resulto curioso.
- "Bien... es aquí en donde deberemos dejar todo lo sucedido atrás... solo estas paredes, aparte de nosotros, serán conocedoras de nuestro secreto..."- murmuró ella.
- "Jamas pienso olvidarte Kakarotto... Eres el único hombre a quien realmente he amado y me lo has demostrado... No sabes lo que significo para mi el que hayas insinuado la posibilidades de quedarte conmigo... qué más hubiese querido que haber dicho 'si'.... Pero no pude... No dejare que mi corazón traicione mi razón... ya no más"- se agachó lentamente hacia él proporcionándole un dulce beso en la frente.
- "Adiós mi gran amor... siempre estarás en mi corazón... espero yo poder permanecer en el tuyo de igual forma... ser parte de ti, ya que tu has sido parte de mi desde hace ya mucho tiempo.... eres la mitad de mi ser...."

Se levantó procurando no despertarlo, enroscando su cola de mono alrededor de su esbelta cintura, dispuesta a salir, de volver a la cruda realidad. Llevó la punta de sus dedos a su labios proporcionando un ligero beso en ellos, para después colocarlos sobre los labios de él, siendo su mano quien transmitiera el adiós.
Firmemente, camino hacia la puerta de salida y sin titubear la abrió y salió, no sin antes tomar fuerzas de la atmósfera que aun rodeaba aquella habitación, impregnada de emociones y sentimientos fuera de control, y el recuerdo de ellos sería lo único que les daría fortaleza a ambos.

Tal vez pensasen que solo sus recuerdos los mantendrían únicos... sin embargo ellos aun no saben que crearon un vinculo más grande... algo que los unirá para siempre en vida... alguien que resulto de esa magnifica unión de almas; dos seres habían logrado formar un solo ser... y ese ser, algún día deberá luchar por comprender y perdonar lo que sus padres hicieron... o más bien, lo que no se atrevieron hacer...

FIN


Lo siento mucho a todos los fans de la pareja Goku/Milk pero... bueno, véanlo de este modo, yo siempre he creído en la idea que Kakarotto y Son Goku son dos entes muy diferentes, podrán ser el 'mismo' pero, yo creo que existe mucha diferencia si se le hubiese dado la oportunidad, por lo que también en este fic plasmo esa idea.
Dudas, comentarios, información de donde encontrar la fic de donde se desprende este sidehistory y sus respectivas continuaciones a mi correo ulti_sg@hotmail.com

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