Perdimos Pero no perdimos en las urnas electorales Perdimos Al haber puesto nuestra esperanza en manos de los Adecos Y de los dinosaurios de la izquierda venezolana De haber creído que Enrique Mendoza es un gran líder O que los niños de primera Justicia tienen cojones y proyectos De creer que viejos como Teodoro, Pompeyo o Tejera Paris Son el futuro de la Nación Perdimos Porque avalamos errores tan graves como el paro petrolero O los monigotes de Altamira Perdimos Cuando aplaudimos a un personaje nefasto y corrupto como Henry Ramos Allup O pensamos que los Observadores Internacionales estaban con la Oposición Perdimos Cuando no nos damos cuenta que no somos ciudadanos sino un charco lleno de petróleo para los ojos del mundo Perdimos Por subestimar a los Chavistas Por subestimar a Hugo Rafael Por creer que es posible jugar democráticamente con él Perdimos Porque Hugo Chávez esta allí por nosotros Porque hace seis años traicionamos el sistema democrático Apostando a un militar golpista y primitivo como salvador de la nación Perdimos Cuando aceptamos que no iba el consultivo Cuando firmamos y reafirmamos Cuando permitimos esas maquinitas de lotería para votar Perdimos Por creer que la guarimba es un metodo arrecho de lucha civil Perdimos Cuando el No era primero que el SI en la pantalla Y nos pareció un hecho anecdótico Perdimos Cuando no salimos a la calle el 12 de abril para que Chávez no regresará Y aceptamos su regreso con toda naturalidad Perdimos Los pendejos siempre pierden Los ingenuos siempre pierden Los tontos siempre pierden Perdimos Al creer en el fondo que iban a llegar los marines gringos a salvarnos Al creer que el Cuervo aparecía con un ejercito vengador y nos rescataba del dictador. Al pensar que la reunión de Carter, Cisneros y Chávez fue por el bien de la nación Perdimos esta vez Pero el país es eterno Y esta generación de idiotas y débiles A la cual me tocó pertenecer Morirá y le dará paso A otros venezolanos Y a otro pensamiento Por ahora La Venezuela primitiva y bananera Tiene la palabra Que mis hijos y nietos me perdonen, porque yo no puedo...