Site hosted by Angelfire.com: Build your free website today!
contador de visitas
Visitas

ELECTRONICA

 

Galería de recuerdos y proyectos que he hecho:

Primeros proyectos

 

Este fue mi primer transmisor RF-FM. Estaba basado en un oscilador Colpitts muy básico. La portadora era cercana a los 100MHz, pero con bastantes armónicos parásitos. Se modulaba con una pequeña corriente aplicada a la base del transistor 2N3904.

 

El diseño del circuito fue algo casi heroico, con pistas muy irregulares y una que otra corrección por ahí. Gastaba bastante corriente, y era muy sensible a movimientos o a la cercanía de la antena a objetos conductores.

Así y todo, podía transmitir una señal hasta 50mts en línea recta, y si se sintonizaba con cuidado, algún armónico alcanzaba la banda de UHF que usan las alarmas de autos, y se convertía en un UHF-jammer, bloqueando las señales del transmisor, jeje.

Este fue mi primer Receptor PLC (Power Line Carrier) para aplicaciones de control doméstico. Estaba basado en un IC decodificador de tonos que rastreaba señales cercanas a los 100KHz en el circuito de 220VAC, y un microcontrolador que interpretaba las secuencias de tonos para decidir si debía activar el relay.

El módulo era multiprotocolo, pero decidí usar X-10 porque estaba bien documentado en la red, y además ya había conseguido un par de módulos comerciales X-10 para mi Examen de Grado.

El diseño tenía algunos defectos: la alimentación estaba basada en un circuito RC y diodos, lo que absorbía parte de las señales y sobrecalentaba la tarjeta. Además, usé transformadores de FI, de sintonía muy inestable y errática.

La discriminación de señales era en gran parte analógica, por ende muy sujeta a una calibración de ‘relojería’ y a la temperatura ambiente. A veces, cuando había mucho ruido en la línea (aspiradoras, taladros, etc.) se activaba solo, jeje

 

Diseñar Circuitos Impresos

 

De todas maneras, este proyecto fue una buena cancha de entrenamiento para aprender a trabajar en Protel, un software de diseño electrónico que he utilizado hace varios años.

Mis primeros proyectos estaban fabricados de manera bastante bizarra y hasta cómica. Recuerdo alguna vez haber hecho una tarjeta para una fuente de poder con un cuchillo cartonero. Me dediqué a trazar y cortar las pistas y áreas de cobre, para después despegar el cobre faltante con alicate. Algo desesperado.

 

Cuando descubrí el ácido, empecé a usar lápices de tinta permanente y bandas de scotch para enmascarar las áreas donde quería conservar el cobre.

El proceso era bastante sucio y me recordaba los primeros tiempos de la fotografía, además las tarjetas seguían mostrando signos ‘artesanales’: se adivinaban las pistas dibujadas a pulso, y los bordes corroídos por exceso de baño en ácido.

Ahora uso Protel para diseñar el overlay, y el archivo de salida es procesado por un corto programa que hice en C, que convierte todas las figuras del archivo (pads, pistas, planos, etc.) a trazos de lápiz, que puedo cargar a un plotter en mi oficina, para obtener un trazado profesional

 

Programador PIC

 

Como muchos en el mundo, mi primer acercamiento al mundo de los microcontroladores fue a través de los versátiles PIC de Microchip. Aunque son poco robustos para aplicaciones industriales, donde preferiría un ATmel o un Texas, son ideales para conocer los rincones oscuros de la programación de firmware.

Motivado por la falta de recur$o$ típica de todo estudiante, preferí diseñar mis propios programadores de chips a esperar que mi Universidad me prestara uno de los suyos (la lista de espera era larga). Además quería aprender en mi casa, tranquilo, y no con un cronómetro al lado del teclado. Descargué un diseño de programador muy sencillo para PIC16F84 y PIC16F873, el cual mejoré en algunos detalles, y fabriqué en el sacrificado sistema de WCB (wired circuit board), es decir tarjetas perforadas con sus componentes arriba y un plato de tallarines (los cables) por abajo. Con todo eso y algunos chips, la etapa de ferretería estaba lista.

 

La otra parte del trabajo fue conseguir el software y compiladores. Los mismos fabricantes de los programadores, generalmente aficionados a la electrónica o estudiantes, incluyen programas sencillos para operar el programador desde un puerto serial o LPT.

Sólo me faltaba generar los códigos. Por suerte, Microchip ofrece descargar gratuitamente la suite MPLAB (editor+compilador+simulador) desde su propio sitio corporativo www.microchip.com. El problema es que MPLAB sólo permite trabajar en MPASM, el lenguaje assembler de Microchip, al menos con los chips que yo usaba. Programar en assembler es volver a los tiempos prehistóricos de la programación: todas las instrucciones son de alcance muy limitado, casi atómico, y cosas sencillas como encender un LED o leer un pin de entrada, requieren de decenas de líneas.

 

La siguiente etapa fue programar en lenguajes de mayor nivel, como Basic y C, y me dediqué a descargar varios compiladores (cracks incluidos, obvio), lo cual alivió las tareas y me permitió hacer programas más ambiciosos.