Los Problemas del Corporativismo Rural no son los Únicos: Durante 1977
se da un Fortalecimiento de la Posición de los Máximos Dirigentes de la
Maquinaria Corporativa del Estado en General que no Repercute en la Unidad de
la Misma.
Un elemento del artículo: “La
Maquinaria Corporativa del Estado en el Campo Mexicano Durante 1977”, del Dr Xavier Gamboa Villafranca.
Ir a :
Al principio de
este documento
Página del Dr Xavier Gamboa
Villafranca
Enviar
correo a:
La
presencia del Estado en el agro mexicano durante 1977 requiere, entre otras
cosas, de la transformación de los componentes de la maquinaria corporativa que
tienen ingerencia en él. Para cubrir efectivamente las funciones de control
político que a ésta le han sido encomendadas, se necesita que se reduzcan
significativamente las diferencias, tensiones y conflictos abiertos existentes
entre cada una de las organizaciones que forman parte de ella, de manera que se
forme una sola central. A su vez, la manera de lograr la unidad funcional de
los mecanismos de control depende de la medida en que se desarrolle un proceso
que permita que simultáneamente :
a) Se de el fortalecimiento del poder
político de los líderes de cada una de las organizaciones políticas
domesticadas en el campo ;
b) Se logre la consolidación de un cuadro
dirigente global, cuyas decisiones y acciones alcancen la totalidad del
ámbito reservado a ella, de manera que brinden una unidad coherente al
comportamiento político e ideológico de cada una de sus partes.
En el anterior apartado ya se ha visto que, en gran
medida, lo contrario es lo que sucede; durante 1977 más bien parecen
recrudecerse los conflictos entre líderes, y la formación de una sola central
parece estar más alejada que nunca de las posibilidades reales. ¿ Por qué sucede
esto ?
Al intentar responder a esta interrogante" es
importante no perder de vista un aspecto de primordial importancia: el que no
se alcance la unidad del control sobre el movimiento político de los
ejidatarios, comuneros, minifundistas, jornaleros, desempleados y subempleados
del agro está también determinado por factores relativamente externos al
movimiento campesino domesticado por el Estado. La maquinaria corporativa que
actúa en el medio, rural tiene su razón de ser tanto en sí misma, como en
cuanto que constituye una de las partes -y, por cierto, una parte que
durante 1977 no se manifiesta como la más importante- de la instancia destinada
a brindar bases sociales de apoyo al Estado mexicano en su conjunto. En la
medida en que esto último, es así, lo que sucede al interior del "sector
campesino" viene a ser una suerte de reflejó de lo que acontece en el
resto de los componentes de la maquinaria corporativa --.,especialmente lo que
tiene lugar en el movimiento obrero, que en más de un sentido es la parte de
mayor importancia de la misma. Durante el año que aquí se estudia, se da
efectivamente el fortalecimiento de algunos de los líderes, pero ello no parece
redundar en un mayor acercamiento al cacareado logro de la unidad del
"movimiento obrero?' en su conjunto.
Efectivamente, durante 1977 no resultan fortalecidos
ni todos y cada uno de los dirigentes, ni el aparato de control sobre los
trabajadores en su conjunto. Los que ven incrementada su fuerza política son,
particularmente, los líderes de las grandes centrales quienes, en tanto esto,
son capaces de racionalizar exclusivamente los mecanismos de dominación
ideológico-política que caen bajo su mando directo. Así, son específicamente
los máximos dirigentes de la CTM en detrimento del resto de los miembros del
Congreso del Trabajo, quienes fortalecen su posición. Estaríamos así en el caso
en que la mayor centralización económica, que surge como una de las
consecuencias fundamentales de la crisis, tiene su contrapartida en la
agudización del ,proceso de monopolización política en el sector que detenta
las posiciones de mayor importancia al interior de la maquinaria corporativa:
el "movimiento obrero". y dentro de este último, el poder se
concentra espectacularmente en la fracción que es hegemónica: la Confederación
de Trabajadores de México. Pero, justamente, al concentrarse en mayor medida el
poder y al acrecentar su capacidad de negociación política de los jerarcas de
la CTM, se obstaculiza la unidad del movimiento obrero en su conjunto. El fortalecimiento
de la dirección de la CTM, en el proceso de administración estatal de la crisis
durante 1977, está -entre otros- -determinado por los siguientes factores:
a)En la medida en que para los dirigentes de las pequeñas y medianas
centrales sea más difícil continuar eficientemente con su función de control en
el contexto de crisis, los de la CTM --por la fuerza que ya detentaban,- se
convierten en prácticamente los únicos que se pueden enfrentar "
saludablemente'- al capital privado e influenciar " adecuadamente..' al
aparato burocrático, con cierto, grado de éxito.. en lo que toca a la obtención
de algunas nuevas reivindicaciones ya la permanencia de aquellas que
previamente habían sido "logradas''. Efectivamente, los dirigentes
principales de las centrales medianas y pequeñas tienen cada día más
dificultades" durante 1977, para cumplir con su papel de representantes
del Estado en el movimiento obrero. El 27 de noviembre el secretario general de
la Confederación Obrera Revolucionaria afirmaba: "los trabajadores ya no,
soportan y cada vez están más inconformes. ..Cada día es más difícil el cargo'
de líder sindical". y tiene razón, indudablemente, el mencionado burócrata
sindical; cada día es más arduo para los dirigentes del "movimiento obrero"
el cumplir con su doble papel de encargados de la paz pública y de
representantes de los intereses empresariales. El deterioro de las condiciones
de vida así lo determina; no hay que olvidar que se llegó al punto en que, a
principios de octubre, el propio presidente del Congreso del Trabajo declaraba
que de no romperse el tope de 10 por ciento de aumento salarial, estallarían
muchas huelgas en el país (X/6/ 77) .Y, ya desde agosto, algunos perpetuándose
dentro de la propia FSTSE se apartaban grandemente de la ,postura de
"tregua" declarada por el Congreso del Trabajo, solicitando -como en
el caso del Sindicato Nacional de Trabajadores de Caminos y Puentes Federales
de Ingresos- hasta 35 por ciento de incrementos saláriales (VIII/8/77) .Al no
poder manejar la situación conforme a la manera que más interesa al Estado, los
dirigentes menores y medios ubicados en el interior de la burocracia sindical
tienen serios problemas para continuar perpetuándose en el poder (IX/5/77) .
Por otra parte, en tanto que esto sucede" los
dirigentes de la CTM se muestran plenamente conscientes de la ampliación de su
poder político y de negociación en la coyuntura de crisis, y de la manera de
proceder para incrementarlo aún más (III/27 /77) .Cuando la situación así lo
amerita, su postura puede incluso llevar formalmente al enfrentamiento con el
gran capital transnacional.
En el caso de un empresa textil en Morelos, cuyos
trabajadores estaban en huelga desde hacía cuatro meses, Fidel Velázquez
anuncia el 28 de noviembre que la CTM de toda la entidad iría a la huelga:
"La intransigencia patronal hizo que surgieran acuerdos, como declarar
públicamente la solidaridad con el movimiento de huelga de la sección 51 de
textiles; dar cinco pesos para cada trabajador cetemista de Morelos para el
sostenimiento de la huelga, a partir del sábado próximo y fijar fecha y hora de
la huelga estatal."
Que esta actitud de la CTM no es contraria a los
intereses de la fracción hegemónica del aparato burocrático es clara cuando, al
día siguiente, el secretario del Trabajo afirma:
El paro anunciado ayer en Morelos por Fidel Velázquez no es una amenaza, sino una estrategia a la que tienen derecho los líderes obreros y los abogados sindicalistas para defender a los trabajadores. ..La Secretaría del Trabajo seguirá actuando como conciliadora entre los factores de la producción donde haya conflictos Laborales y en esa función la dependencia. .. no apoyará ni a empresarios ni a trabajadores.
De igual manera los jerarcas de la CTM, conforme a
una actitud política pragmática que les es altamente eficaz -como
tradicionalmente también les ha sido-, siguen la táctica de solicitar y de no
solicitar aumentos de salarios: anuncian aumentos de salarios, después se
retractan, para volver a tomar una posición más moderada después (IV /10j77)
.Esta posición ideológica, que crea confusión en la lucha de los trabajadores,
no es otra cosa que la consecuencia del reconocimiento por los líderes de la
CTM -reconocimiento :compartido también por la burocracia pública y el capital
privado- de que la "carrera de precios-salarios" puede conducir al
agotamiento de la paciencia de los asalariados de este país ( III j 23/77 )
.Pero su posición respecto a salarios es importante porque ilustra no'
solamente la manera condicionada como se enfrentan los líderes de la CTM al
capital privado, sino también los incrementos de fuerza política que obtienen
en detrimento de la de otros dirigentes.
Para fines de julio (VII/27/77) existían indicios de
que, al interior del Congreso del Trabajo, se gestaban rupturas respecto al
grado y ritmo con que debían efectuarse las solicitudes de aumentos saláriales.
Esto es particularmente claro en lo' que respecta a la postura del presidente
del organismo, y la que era sustentada por el secretario general de la CTM; el
primero afirma la necesidad de solicitar permiso presidencial para solicitar
aumentos; el segundo establece formalmente que. un aumenta genera] de salarios
espolearía de nuevo el proceso inflacionario por lo que sería necesario que
cada uno de los sindicatos buscara aumentos de salario "en la medida de su
combatividad y de la productividad ,de la empresa" con la que estuviera
vinculado. Es la posición de la CTM la que triunfa. Al ser éste así dejan sus
dirigentes la puerta abierta para la mayor acumulación de poderío político,
pues únicamente los sindicatos de la CTM contarían, en principio, con la fuerza
necesaria para obtener aumentos saláriales más allá del tope establecido: los
sindicatos afiliados a las otras centrales del Estado difícilmente podrían
hacerlo.
El poder político de los dirigentes de la CTM se
incrementa no solamente porque son capaces de menguar el poder de los otros
líderes y del movimiento obrero corporativizado, sino también porque
incrementan la eficiencia de los mecanismos ideológicos que le brindan mayor
legitimidad ante los ojos de dirigentes intermedios y miembros de base de los
organismos que controlan directamente. En este sentido, les ha resultado
particularmente valiosa su posición nominal de relativo enfrentamiento con el capital
privado. Entre múltiples ejemplos, resaltarían los siguientes: la idea de
"democratizar" el capital de las empresas, dando ,posibilidad a los
trabajadores de ser "socios" de los
capitalistas (VII/17/77); la postura consistente en que los obreros se
"sacrificarán" en 1978 sólo si los empresarios también lo
hacen (XII/2/77) ; las manifestaciones de incredulidad a los ofrecimientos
continuos de los empresarios, afirmando, el 9 de diciembre, que el compromiso
de 1a burguesía de invertir 700 millones de pesos durante 1978 era por lo menos
el séptimo en lo que llevaba de transcurrido el año (XII/9/77) ; la negativa
formal a "manejar cifras" --con objeto de que los incrementos fueran
"realmente justos"- en torno al aumento que deberían tener los
salarios mínimos para 1978) sino hasta después de navidad, cuando los precios
alcanzarían su máximo nivel (XII/6/77).
Aunado a la capacidad de centralizar más el poder
político en detrimento del de los dirigentes de otras organizaciones del
movimiento obrero, y de manejar ideológicamente una imagen de enfrentamiento
con los empresarios que fortalecen su poder personal al interior de sus propias
organizaciones, los dirigentes de la CTM también desarrollan una posición de
presión constante al aparato burocrático, casi en su sólo beneficio. De esta
manera, logran la participación exclusiva, en representación del movimiento
obrero corporativizado en su totalidad, en la Comisión Nacional de Precios.
Esto despierta la inconformidad de otros dirigentes, pues para éstos queda
claro que ello redunda en su debilitamiento. En efecto, el 26 de octubre, el
secretario general de la CROC expresaba su desacuerdo porque en la CONAPRE no
estuvieran representadas las: 52 organizaciones que conforman al Congreso del
Trabajo, sino sólo la CTM. De igual manera, el secretario general de la CROC
afirma, al día siguiente: "En la CROC nos extraña que el Secretario de
Comercio, Fernando Solana, sólo haya mencionado a la CTM como participante de
esa comisión. Debió haberse consultado al Congreso del Trabajo, que representa
a la totalidad del movimiento obrero organizado."
Pero la presión de los jerarcas de la CTM sobre el
aparato burocrático se manifiesta también en otros sentidos. Matando tres
pájaros de un tiro -mayor eficiencia de la imagen ideológica de la CTM como
organización de defensa de los trabajadores y del "pueblo" en
general, aumento en su capacidad de negociación frente a la burocracia pública
y debilitamiento de la posición de dirigentes de otras organizaciones obreras
domesticadas- logra del gobierno reivindicaciones no sustanciales que son
ampliamente difundidas. Recuérdese que en septiembre se expidió, por parte de
la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, un reglamento que gravaría algunas
de las "prestaciones sociales" que los empresarios otorgan a los
asalariados. El 24 de octubre, Fidel Velázquez afirmaba que si no se obtenía la
anulación del reglamento al impuesto sobre la renta expedido el mes anterior,
donde se fijaban gravámenes a los fondos sindicales destinados a programas de
protección social, quedaría sin efecto el compromiso del movimiento obrero.
Ello se debía -según declaraba entonces el secretario general de la CTM- a que
nueve artículos del reglamento mencionado permitían a los empleadores
"ofrecer resistencia en la concesión de prestaciones, sobre todo en el
campo de la jubilación". Tres días después, el titular de la SHCP
precisaba que el nuevo reglamento de la Ley Federal del Impuesto sobre la Renta
no fijaba cargos fiscales a los fondos que reciben los trabajadores:
Simplemente el nuevo reglamento, que entró len vigor
,el 19 de este
mes, precisa el alcance de las
disposiciones contenidas en la ley que regula incorporando en un solo,
ordenamiento los diversos criterios, circulares y acuerdos que han conformado
las experiencias administrativas. Por otra parte establece Procedimientos para
facilitar el cumplimiento ,de las obligaciones fiscales, de los
contribuyentes.. sin que en ningún caso se fijen nuevos impuestos- ya que no se
modifican los elementos constitutos del gravamen. En tal virtud, los
trabajadores deben estar seguros de que sus ingresos no serán disminuidos bajo
ninguna circunstancia por el nuevo reglamento, pues como se indican no ha sido
modificada la Ley del Impuesto sobre la Renta.
Sin embargo, la dirección de la CTM se adjudicó para
sí el "logro" consistente en que no se gravaran las prestaciones
sociales, en monetario, de los trabajadores. El 21 de diciembre, Fidel
Velázquez afirmaba que, en entrevista Con el presidente López Portillo, la CTM
había logrado que no se retuviera el aguinaldo, ni el fondo de ahorro a los
trabajadores, para fines de pago de impuestos.
Por último, los alcances del grado de ampliación del
poder de los dirigentes de la CTM frente al aparato burocrático quedan ejemplificados
por el hecho de que) desde el 22 de septiembre, éstos demandan la 7iedistribución
del poder administrativo del gobierno: "En algunos
cargos administrativos estratégicos del área económica del gobierno se
encuentran funcionarios ligados, más allá de' lo que conviene al país, con
intereses de grupos minoritarios. .. Esta situación deberá cambiar en un futuro
inmediato, redistribuyéndose en forma equitativa el poder administrativo.:'
b) Con la reforma política y la reforma interna
del PRI, los dirigentes de las organizaciones menores del movimiento obrero
difícilmente podrán resistir los embates de la izquierda militante y verán
mortalmente mermadas sus bases de apoyo centralizándose más la fuerza del
corporativismo en la CTM.. como única organización capaz de enfrentarse a los
intentos -sólo formales aún- de democratización. Al igual que los técnicos
e ingenieros gubernamentales descubrieron hace años que lo mejor en México era
construir presas que tuvieran diversos usos simultáneos (riego., control de
inundaciones, generación de energía eléctrica, criaderos de' pesca, afluencia
turística, etcétera) ) la reforma política es una medida de "uso múltiple"
para el Estado. Entre estos usos múltiples está el de brindar legitimidad
al aparato burocrático. El 22 de diciembre el secretario de Gobernación
implícitamente afirmaba que el Estado -especialmente en México--) donde es
producto formal de una revolución, requiere de firmes bases populares: "En
México la administración no es neutra, ni el Estado carece de contenido, es un
Estado dotado, de profundo sentido social y por ello exige una
administración que no olvide las causas populares."*
* Cursivo de Xavier Gamboa.
Como coadyuvante a establecer la firmeza de las bases
sociales del Estado mexicano, surge la reforma política
-"generosamente" concedida por el presidente de la República, como
diría el 23 de noviembre el embajador norteamericano. Representa la aceptación
gubernamental del hecho de que los partidos domesticados de oposición han disminuido
tanto su eficacia como sus apoyos (XII/18/77) , hasta el punto en que las
innovaciones introducidas a las leyes tal vez acarrearán la pérdida del
"registro" de algunos de ellos (XII/21/77) .La reforma política
también constituye una medida superestructural destinada a auspiciar la
participación) abierta y controlada, de los partidos de oposición -hasta
entonces independientes del Estado- en el juego político nacional (XII/3/77)
.Por este motivo, diversos dirigentes de la maquinaria corporativa sienten que
sus intereses podrían ser afectados por la reforma política. La burocracia
dirigente de la CTM, sin embargo, no está dispuesta a permitir que la reforma
política mine su poder. Tan no está dispuesta a permitirlo, que despliega
fuerza y presiona incluso respecto al contenido que debe tener la reforma,
aprovechando así la coyuntura para lograr mayor capacidad de negociación frente
al Estado. Esto queda muy claro por los acontecimientos desatados por la
declaratoria de Fidel Velázquez, del 10 de octubre, en el sentido de que estaba
de acuerdo con la reforma política como la concebía López Portillo, pero
que sí el PRI se desviaba y el PAN o el PC llegaban al poder -lo que a sus ojos
indicaría que el PRI dejaba de ser el "rector" de la política
nacional-, la CTM y demás organizaciones del sector obrero harían su propio
partido; se formaría así un "verdadero partido del proletariado". La
amenaza de Fidel Velázquez, de formar un partido con la CTM) es secundada al
día siguiente por el secretario general de la CROC:
Si el día de mañana el PRI tuviera que
aceptar grupos que no están identificados con nuestra política, tendríamos que
dejarlo. Por ejemplo.. si la Tendencia Democrática determinara .afiliarse al
PRI-, nuestra actitud sería tajante: ellos o nosotros. ..Los trabajadores no
estarían de acuerdo en vivir en una dictadura-, aunque fuera del proletariado.
Nuestra meta es que el obrero llegue a tener el control político del país..
pero sin coartar las libertades fundamentales (X/11/77) .
La respuesta del GEN del PRI no se hizo esperar.
Aunque a título per- sonal, el secretario general del PRI afirmaba el día
siguiente de la difusión pública de la amenaza de1 jerarca de la CTM:
Tiene
razón el compañero Fidel Velázquez cuando' plantea que si llegara a darse el
caso de que ¡8[ PRI se desviara de la trayectoria revolucionaria que ha seguido
o fuese incapaz de mantenerse en el poder.. habría razones suficientes para que
las organizaciones obreras decidieran integrar otro partido político. ..No
exista ninguna posibilidad de que el PRI desvirtúe el camino ni de que la
Revolución cambie de rumbo,. Por lo cual tampoco podría ocurrir que la CTM y
demás agrupaciones del movimiento obrero formen un partido ajeno al que siempre
han apoyado y fortalecido con su fuerza militante.
Con esto se aclara el asunto' del conflicto aparente
entre Fidel Velázquez y el CEN del PRI, pero' queda abierta otra gran dimensión
de análisis: el de la reforma interna del PRI.
En primer lugar, ¿ qué es 10 que causó tal
declaración de Velázquez ? ¿ Es ello producto de que Fidel Velázquez
ambicionara la presidencia del PRI ? Éste no parece haber sido el caso;
declaraciones y actuaciones del líder de la CTM permiten entrever que éste
tiene, como tal" la fuerza que requiere y que para la función que desempeña
no le es necesario el acceso formal a la presidencia del CEN del Partido. El 26
de noviembre aparece la siguiente versión periodística de una entrevista a
Velázquez ; "Se le preguntó a Fidel Velázquez si aceptaría la presidencia
del PRI, a lo que contestó: 'yo no me hago ilusiones, no vivo de ellos; vivo de
realidades, además yo no' soy político, soy sindicalista".
Su juego, pues, parece más bien ir por otro lado. En
la superficie, las amenazas a que aquí se alude aparecen como producto de la
opinión de Velázquez de que el PRI venía "eliminando" a los
"sectores" en la toma de decisiones, con lo que la fuerza de la CTM
disminuiría: "Se sostenía que los sectores, como tales, no podrían participar en las decisiones,
sino sólo los individuos, pero la cuestión está aclarada
satisfactoriamente" (Fidel Velázquez, X/11/77).
Ésta es sólo la superficie de la causa, porque en
realidad, dentro del proceso de "democratización interna" del PRI, el
haber creado un procedimiento de selección interna que desplazara el centro de
decisiones en cuanto a la selección de candidatos de "elección
popular", de los círculos dirigentes del PRI a la asamblea, es sólo
formal, ya que los delegados a las asambleas "llevan la consigna" de
los máximos líderes. Parece ser que, en el fondo, de lo que se trata es de la
defensa de las formas de "militancia" al interior del movimiento
obrero paraestatal" emprendida por los dirigentes de la CTM como medio
para tener un factor más que coadyuvara a su fortalecimiento; como una medida
para que, en tanto principal referente de la reforma política global al
interior de la maquinaria corporativa, la reforma interna del PRI no debilitara
su posición de hegemonía dentro del movimiento obrero corporativizado, sino
que, al contrario, la acrecentara.
La reforma política está efectivamente destinada a
servir para traer legitimidad al aparato burocrático y para hacer posible una
participación controlada de la izquierda; sin embargo también sirve para
adecuar las características del funcionamiento de la maquinaria corporativa a
las necesidades de la administración de la crisis durante 1977. Tal y como ha
sido afirmado por el presidente del CEN del PRI, el 24 de noviembre, las
modificaciones a la maquinaria corporativa del Estado mexicano siempre han estado
en función de las necesidades de dominación impuestas por el desarrollo del
capitalismo en el país :
Cada vez que nuestro partido se ha transformado, en realidad ha dado una respuesta política a los problemas esenciales de las crisis por las que, en cada caso, transitaba el país. De este modo el partido robusteció.. una y otra vez, la capacidad para cumplir con su papel histórico dentro del sistema revolucionario mexicano.
Al afirmar lo anterior, el presidente del GEN está
diciendo que la reforma interna del PRI no es otra cosa que la recomposición
interna del partido ante los desajustes, manifestados agudamente de 1968 en
adelante, en el sistema de dominación que se crea de 1914 a 1934, que culmina
de 1935 a 1940 y que es utilizado prácticamente sin cambios hasta finales de
los años sesenta.
La maquinaria corporativa tiene, según reconocimiento
casi expreso realizado por sus máximos dirigentes, la función de coadyuvar a
los objetivos de la Alianza para la Producción, a través de: mantener la legitimidad
popular, hacer posible la continuidad gubernamental y mantener la estabilidad
política. Dicho por el presidente del GEN del PRI :
Nuestro partido tiene no solamente la función de obtener la supremacía electoral que permita la continuidad pacífica de los gobiernos revolucionarios. Hemos de actuar como un organismo de acción política permanentemente capaz de mantener a las instituciones del país firmemente asentadas sobre la base del más amplio consenso popular posible. Cuando afirmamos que el partido ha cumplido y seguirá cumpliendo la función histórica de mantener la estabilidad política del país, estamos muy lejos de asumir como objetivo el inmovilismo o el estancamiento. Al contrario, sostenemos que esa estabilidad es sólo- un medio para hacer posible el avante revolucionario e independiente del país.
Y precisamente para cumplir su función de
estabilizador político, el PRI tiene que robustecerse mediante la realización
de una reforma interna que tienda a fortalecer a cada uno de los
"sectores" que lo integran. El 25 de noviembre el presidente del
GEN-PRI afirma:
El PRI tiene no solamente la función de ,obtener la supremacía electoral que permita la continuidad institucional de los gobiernos revolucionarios, sino también la de permitir que la ideología que impulsa sus acciones, y que es el espíritu del dinamismo político de todo el sistema, conlleve a la transformación profunda e integral de la sociedad. Para ello, el Partido se convierte en el protagonista, dentro del campo político, de la lucha en favor de los intereses de las clases sociales que lo integran, las cuales se agrupan en sus tres sectores. Por eso nuestra capacidad futura para responder a los restos del cambio político dependerá del fortalecimiento de lo sectores obrero.. agrario y popular" cuyos derechos y aspiraciones son la fuente y el destino de nuestra lucha revolucionaria.
Así, si algo queda claro con el "conflicto" Fidel Velázquez-Sansores Pérez, es que los líderes de la GTM, en tanto fracción hegemónica en el interior del movimiento obrero, no están dispuestos a permitir que la reforma política, en general, y la reforma interna del PRI, en particular, minen su actual fortaleza política; no se muestran complacientes con esta posibilidad, aun cuando ello se intente en nombre de la legitimidad popular, de la estabilidad política y de la continuidad gubernamental. Aceptarán ambas cosas -reforma política y reforma interna- en la forma en que efectivamente han sido concebidas por la fracción hegemónica de la burocracia pública: para su fortalecimiento y mayor centralización del poder corporativo. Anotando un punto más a su favor, logran que en la elaboración de los documentos que normarán la transformación interna del PRI participen sus representantes directos, junto con los de la CNC, CNOP y los sectores juvenil y femenil.
El "conflicto:', pues, resulta funcional para el
Estado en su conjunto. Sirve para hacer que los altos dirigentes del PRI cobren
conciencia de los riesgos que implica la reforma interna del PRI; ni más ni
menos, el debilitamiento de sus bases internas de apoyo, altamente
identificados con elementos de dirección-personas en los sindicatos y centrales
incrustados en él, especialmente en el caso de la CTM. Por esta razón, el CEN
pone tanto esmero en la preparación de la Asamblea del PRI, en la que
discutirán las modificaciones en la estructura del Partido. El presidente del
CEN del PRI afirma" el 3 de diciembre:
Primero se especuló que la asamblea del PRI podría
ser en agosto (de 1977)
, luego en diciembre o hay quienes dicen que en marzo hay otros dentro del
partido que opinan que en junio, Julio o agosto ( de 1978) ° Nosotros
debemos obrar con plena responsabilidad. tenemos que hacer un trabajo bien
hecho y vamos a convocar a la asamblea cuando estemos preparados con todos los
elementos suficientes y para que la asamblea resuelva libremente cuáles son los
cambios fundamentales que tenemos que hacer en nuestros documentos básicos y en
la estructura del partido.
c) En el contexto de la crisis y la reforma
política y la reforma interna del PRI son casi exclusivamente aprovechadas por
los dirigentes de la CTM para robustecerse porque tienen acceso a los
mecanismos adecuados para ello. En primer lugar, la posibilidad de que los
líderes de la CTM, en detrimento del resto de los miembros directivos del
Congreso del Trabajo, fortalezcan su posición, se debe al hecho de que éstos
son prácticamente los únicos que a través de sus representantes directos pueden
obtener la aprobación del Congreso de la Unión a sus decisiones. Aquí hay que
tener en mente que la diputación cetemista fue rica en iniciativas de ley en el
periodo ordinario de sesiones del Congreso. Algunas fueron las siguientes :
i) La propuesta de modificación al artículo
50. constitucional, en donde la generación de riqueza tendría carácter social y
el Estado garantizaría el derecho de los mexicanos al trabajo (XI/3/77) ;
ii) La iniciativa para introducir en la
legislación laboral un sistema que vinculara los precios, los salarios y las
utilidades de las empresas, "a fin de que los salarios tengan la misma
movilidad que los precios, y las utilidades de los empresarios no rebasen los
límites de la costeabilidad" (X/10/77) ;
iii) La introducción de los
"Contratos-ley", por rama de la industria, como medio para igualar
situaciones contractuales y eliminar competencia entre empresarios de una misma
rama ( IX /10 /77 ) .
Aun cuando estas iniciativas fueron
"congeladas" (no se presentaron para su aprobación) durante el
periodo ordinario de sesiones del Congreso, la posibilidad de presentar
iniciativas de ley en la Cámara de Diputados que cuenten con elevadas
probabilidades de ser aprobadas, está virtualmente fuera del alcance para el
resto de los dirigentes del movimiento obrero corporativizado.
En segundo lugar, la CTM es la organización que más
conexión tiene con el movimiento obrero internacional no revolucionario. A
mediados de diciembre (XII/17/77) se hablaba de la inminente constitución de la
Organización Americana del Trabajo, auspiciada por la norteamericana AFL-CIO.
Al igual que ésta, la CTM es miembro de la ORIT; con la formación de la OAT, se
acrecentaría su poder interno y" hasta cierto punto, se
internacionalizaría la forma domesticada e inofensiva conforme a la cual ha
luchado contra las transnacionales en el país. Esta posibilidad sería
difícilmente superada por cualquier otra organización del movimiento obrero
corporativizado del país.
En tercer lugar, son los dirigentes de la CTM los
únicos con la fortaleza necesaria para enfrentarse a los excesos de una
burguesía cuya acción política no solamente es creciente, sino engreída. Es
engreída porque para los grupos más importantes de la burguesía, es
"pirata" todo, sindicato que no está totalmente controlado por sus
empresas; todo, aquel que no es "blanco"; el que hace
"abuso" de la huelga, El 4 de diciembre el director del Centro
Patronal de Nuevo León expresaba su preocupación por el incremento que, a su
parecer, estaba tomando, este tipo de sindicalismo,: "Todo, indica que
empieza a prevalecer el abuso [de la huelga] por parte de la CTM, en apoyo de
intereses transitorios y mezquinos que a largo plazo ocasionarán un desastre
mayúsculo."
Su acción política es creciente, entre otras razones,
porque las tradicionales organizaciones de lucha de la burguesía intentan
deshacerse de la influencia que hasta la fecha han tenido por parte del
gobierno. Por ejemplo, los comerciantes acusan al dirigente de los pequeños
comerciantes de ser representante del gobierno y de pretender seguir las
consignas marcadas por el aparato burocrático en las elecciones de la nueva
mesa directiva de la CONCANACO que tendrían lugar durante 1978. El presidente
de la CANA. CO de Ciudad Obregón afirma :
El Vicepresidente de la CONCANACO desde
hace varios años trabaja en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y es
en ésta dependencia, o en las oficinas del PRI.. donde recibe las consignas.
..Ante la proximidad de elecciones de nuevos dirigentes para la CONCANACO -se
efectuarán en febrero-" Rodríguez Salazar está haciendo escándalo para
llamar la atención. Pretende con ello darle valor a su voto y al de las cámaras que
manipula.. para así poder vender esos votos al mejor precio posible y al mejor
postor.
El que la acción de los
líderes de la CTM se levante relativamente contra esta actitud política de la
burguesía, en el contexto de crisis de 1977, y que -por lo tanto- son la
fracción al interior del "movimiento obrero" que más pueden brindar
apoyo al aparato burocrático, se manifiesta por el hecho de que su máximo jerarca
declara, a mediados de mayo, que los obreros sólo apoyan las "efectivas
medidas del sector público y no las ineficaces medidas que los empresarios
anuncian que tomarán" (V /14/77). Pese a que formalmente los líderes
domesticados de la CTM indiquen lo contrario, lo cierto es que su forma real de
actuación permite percibir que no conciben, en realidad, que las relaciones
entre burguesía y maquinaria corporativa del Estado sean las mismas en tiempo
de crisis aguda que cuando ésta no se encuentra presente (V /7 y 8/77) .Al
reconocer de hecho esta diferencia, éstos tienen la capacidad de aprovechar las
múltiples medidas planteadas para sortear la crisis, para su propio
fortalecimiento,. Por ejemplo, en el caso del petróleo, los máximos dirigentes
de la CTM encuentran ahí un campo fértil para la expansión y concentración de
su fuerza política, previo el desarrollo de la lucha en pos de ella. Tómese, en
este sentido, la siguiente declaración del 26 de septiembre :
Joaquín
Hernández Galicia-, ((La Quina-".. el líder petrolero sindical todo-
poderoso en ,el norte del país-, desplaza paulatinamente al dirigente Sergio
Martínez Mendoza en la zona, del sureste.. la más importante por sus
yacimientos de hidrocarburos. Grupos selectos de obreros incondicionales a
Hernández Galicia llegan a esta región desde vos mermados campos petroleros del
norte. Su misión consiste en hacer proselitismo para que en las asambleas se
adopten resoluciones que beneficien indirectamente a su jefe. Entre tanto.. una
pugna interna divide a las secciones bajo control formal de Martínez Mendoza..
porque sus líderes pretenden desplazarlo del mando regional. ..El país está
dividido en tres zonas administrativas. ..En cada una. ..hay un líder obrero
máximo.. que se convierte en el cacique mayor. En el norte es Hernández
Galicia-,. en el centro-, áscar Torres Pancaro [sustituto del
asesinado-feriberto Kehoe Vincent], y en ,el sur.. Sergio Martínez Mendoza.
Un enlistado tentativo de
los determinantes del hecho de que los dirigentes de la CTM se fortalecen, en detrimento
de la de otros líderes del movimiento obrero estatal, estaría incompleto si no
se mencionara el hecho de que los primeros establecen durante el año un
mecanismo destapado a brindar la fuerza económica de la que hasta entonces
carecían: el banco obrero (XI/ 14/ 77).
Ir a :
Al principio de
este documento
Página del Dr Xavier Gamboa
Villafranca
Enviar
correo a: