En 1971 una docena de pacifistas canadienses y estadunidenses se propusieron detener las pruebas nucleares que Estados Unidos efectuaba en Alaska. Aparte de conseguirlo, este grupo de personas logró algo más: fundar GREENPEACE. Un cuarto de siglo después, Greenpeace se ha convertido en una organización internacional, con oficinas en 33 países del mundo. En estos años, Greenpeace ha jugado un papel significativo para despertar el interés público sobre la degradación ambiental.
Greenpeace actúa de manera directa en aquellos lugares donde se producen daños al ambiente, efectuando llamativas y audaces acciones de protesta. Greenpeace realiza también investigaciones científicas, campañas de información y denuncia de problemas ambientales, así como labores de apoyo a comunidades y grupos sociales afectados por actividades contaminantes.
Pero sea cual fuere la actividad de Greenpeace o el lugar donde la lleva a cabo, la organización se rige por tres principios básicos: todas sus acciones están basadas en la filosofía de la resistencia civil no violenta; una total autonomía de gobiernos, partidos políticos o empresas; una absoluta independencia económica, que es posible gracias a que se financia sólo con los donativos individuales de personas que comparten sus métodos de trabajo.
En México, Greenpeace comenzó a trabajar en 1993 en las áreas de contaminación atmosférica y energética, y sobre el tráfico y manejo de desechos tóxicos industriales. En esta sección encontrará una detallada cronología de los hechos más relevantes en los que ha participado Greenpeace México, asi como un perfil mas especifico de los objetivos y la forma de actuar que tiene nuestra organización.
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La vulnerabilidad de México a la variabilidad interanual del clima es muy alta. Desastres naturales como inundaciones, sequías e incendios, están causando graves daños económicos y sociales en el país. La incapacidad técnica, económica y política para mitigar los daños de manera preventiva y para enfrentar los impactos de los eventos naturales anuales, demuestran la gran vulnerabilidad de México ante los desastrosos impactos del cambio climático que ya pueden estar presentándose en territorio mexicano, asegura un estudio en preparación para Greenpeace, coordinado por la Dra. Diana Liverman. El informe titulado "Los Impactos del Cambio Climático en América Latina", indica que "es claro que la situación social de América Latina está creando condiciones de vulnerabilidad extrema al cambio climático". Señala cómo millones de personas de las naciones latinoamericanas viven de la agricultura de temporal, otros más viven en regiones donde escasea el abasto de agua y millones más habitan en hogares precarios ubicados en zonas de alto riesgo. En estas condiciones, las sequías, las inundaciones y los incendios se vuelven catástrofes extremas. El cambio climático en México Los mapas elaborados por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (PICC, organismo internacional de expertos en clima) muestran que el aumento de los gases invernadero provocarán una disminución de las lluvias, principalmente en el norte de México y el noreste de Brasil. La sequía extendida en el norte de México durante los últimos 5 años, ha significado la pérdida de decenas de miles de cabezas de ganado, de decenas de miles de toneladas de alimentos, así como la migración de campesinos y la proliferación de enfermedades y plagas. Si se toma en cuenta que el PICC considera que el cambio climático ya puede observarse, la sequía del norte puede ser uno de sus impactos ya evidentes. Los modelos elaborados para estimar el impacto del cambio climático, muestran una caída en la producción del principal grano en México: el maíz. El modelo de Princeton (GFDL) indica una reducción del 20% de la producción de maíz y el modelo Británico (UKMO) estima una pérdida de hasta un 60%.
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La capacidad de Greenpeace de llegar hasta el fondo de los problemas ambientales para señalar causas y culpables, sólo es posible gracias a la independencia política y autonomía económica de la que goza la organización; esta libertad recae en el hecho de que Greenpeace no recibe dinero de ningún gobierno, partido político o corporación. Greenpeace se sostiene exclusivamente de los donativos de la gente que comparte nuestra filosofía y formas de trabajo. En México tenemos aún mucho por hacer, para proteger el medio ambiente del país; para continuar dependemos de tu generosidad. Por medio de un donativo anual de 200 pesos mexicanos (30 dólares de EEUU) puedes formar parte del trabajo de Greenpeace. El donativo lo puedes hacer depositando directamente tu aportación en la Cuenta Bancomer N° 1229288-4, o enviando un cheque personal cruzado a nombre de GREENPEACE MEXICO, AC. No olvides informarnos de tu depósito por correo o fax, para que comiences a recibir periódicamente información sobre todas nuestras actividades. |
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