Implica también que Ud. RECIBE A JESUCRISTO COMO SU SEÑOR. El viene
a sua vida como dueno y Señor. Hay un trono en su corazón, y ese
lugar le corresponde con todo derecho. El es quien lo ha creado; El lo ha
rescatado y ahora desea ocupar el lugar que le pertenece en el trono de
su corazón.
Y finalmente, implica que Ud. SE ARREPIENTE DE SUS PECADOS. Esto significa no
solamente sentirse mal por haber hecho cosas que a El no le agradan, sino estar dispuesto a dejarlas y seguirle
en lo que El le indique, según su voluntad revelada en Su Palabra (la Biblia).
Ahora, si ésto es lo que realmente desea...