17 de marzo

Bogotá, sábado 9 de marzo de 2002
EL TIEMPO

Chasco de ‘El Nacional’ de Caracas por entrevista ficticia contra Chávez

El diario ‘El Nacional’, el de mayor circulación de Venezuela y uno de los más influyentes en el país, sufrió en la pasada edición dominical una de las mayores vergüenzas de su historia por cuenta del enfrentamiento que sostiene con el presidente Hugo Chávez Frías. Publicó con gran despliegue una entrevista imaginaria con un intelectual francés.

La nota apareció de tercera en primera página. Era una entrevista con Ignacio Ramonet, director del prestigioso periódico ‘Le Monde Diplomatique’, en la que el francés se viene lanza en ristre contra la revolución bolivariana y ridiculiza al mandatario venezolano.

La entrevista, supuestamente hecha por un periodista mexicano llamado Emiliano Payares Guzmán y tomada de la reputada revista digital ‘Venezuela Analítica’, no habría pasado de ser un ataque más a la figura del presidente venezolano si no es porque Ramonet, uno de los más férreos opositores a la globalización y defensor de Chávez, aseguró no conocer al periodista y no haber dicho absolutamente nada de lo que se publicó.

Y, para completar, Ramonet recordó que en noviembre pasado, en la Universidad de París, en la Sorbona, había hecho un elogio del presidente venezolano ante más de mil espectadores y, aseguró: "No he cambiado mi opinión".

Indignado, le escribió a Miguel Henrique Otero, director de ‘El Nacional’: "Este es un caso de superchería mediática total (...) Estamos ante un embustero que se ha burlado de usted y de sus lectores y que ha construido una falsa entrevista, totalmente imaginaria. Existen leyes, además de las éticas, que condenan tal comportamiento irresponsable y delictivo".

Pero sorprendió aún más la carta que el mismo día hizo llegar a la redacción del diario el autor de la falsa entrevista, que dijo ser, además, estudiante de postgrado de la Universidad de Princeton (Estados Unidos).

"No soy bolivariano ni mucho menos. Sólo realizo un estudio sobre la falta de rigurosidad de la prensa del Caribe. He enviado una entrevista totalmente inventada (...) con la ilusión de ser sometida a un riguroso estudio sobre su autenticidad. Como me lo temía (...) la prueba nunca le fue realizada por el representante de ‘Venezuela Analítica’. Sólo mando el ‘mail’ como comprobación del poco profesionalismo imperante".

El periódico tuvo que rectificar y reconocer que había "publicado el producto de una infamia": "Se trata de una rectificación necesaria ante nuestros lectores, quienes valoran la credibilidad que nos antecede, como para publicar mentiras sin ton ni son", dijo el diario.

El episodio agita aún más el debate sobre el trato que los medios de comunicación de Venezuela le están dando a la información sobre el gobierno de Hugo Chávez. El mandatario ha criticado en varias oportunidades el profesionalismo de los medios en la oposición y ha asegurado en repetidas ocasiones que algunos periódicos, entre ellos ‘El Nacional’, son ciegos a los logros de su revolución bolivariana.

Detalles de la entrevista

La entrevista falsa interroga a Ramonet sobre globalización. Estas son las preguntas que hace sobre Chávez:

También podría decirse que el Presidente venezolano es un eco callado de muchas personas.

No lo creo. Su caso es diferente. En principio, el señor Hugo Chávez carece de revolución. Carece de un cuerpo intelectual respetable y eso hace que su nave siempre vaya a la deriva. Cuando ganó las elecciones, me pareció que lo que se avecinaba iba a ser algo realmente importante. Sin embargo, se le ha escapado de las manos. Chávez lo está haciendo realmente mal. El populismo lo venció, como tanto sucede en estos casos.

Pero no puede negar que Chávez también tiene sus lecturas. Dicen que cita a Kant y a Robespierre.

También me consta que cita un librito de autoayuda llamado ‘El oráculo del guerrero’. Incluso, he visto videos en donde canta boleros santiagueros, mientras despliega su plan económico, si es que lo tiene. Creo que esos hechos, ciertos y comprobables, me ahorran dar mi opinión al respecto.

ISMAEL ENRIQUE MEDINA
Corresponsal de EL TIEMPO
CARACAS


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