Este Don concede al fiel ayuda en la perseverancia,
es una fuerza sobrenatural que nos alienta continuamente
y nos ayuda a superar las dificultades que sin duda encontraremos
en nuestro caminar hacia Dios.
El ejemplo de Jesucristo, su pasión y su muerte,
debe ser para nosotros un auténtico testimonio de fortaleza
que nos ha de llevar a superar nuestra debilidad humana.