LOS HOMBRES DE LA LIMPIEZA
El monumento a la noche de Chernóbil. Por lo muerto y lo sin vida.... escrito en piedra para toda la vida.
Estos camiones contra incendios nunca volvieron a sus estaciones, y los bomberos que transportaban nunca volvieron a sus hogares. Ellos fueron los primeros en la escena, pensando que era un incendio como muchos otros. Ellos no sabían a lo que realmente se enfrentaban.
Los bomberos fueron reclutados o forzados a ayudar en labores de limpieza o la eliminación de las consecuencias del accidente.
Como gobierno totalitario, La Unión Soviética proveyó muchos soldados jóvenes para ayudar con la limpieza del accidente de Chernóbil, pero no les proveyó a muchos de ellos con ropa protectora adecuada, ni siquiera les dio ninguna explicación del peligro que eso involucraba.
Cerca de 650,000 hombres ayudaron en las labores de limpieza del desastre Chernóbil en el primer año. Entre ellos incluidos aquellos que construyeron el contenedor sobre el destruido reactor # 4; Ese contenedor es llamado El Sarcófago.
Foto: Hombres de Limpieza rumbo a Chernóbil.
Soldados en la parte superior de la unidad # 3 recogen trozos mortales del grafito radiactivo después de la explosión y los depositan en la caldera del núcleo del reactor destruido.
Inicialmente intentaron utilizar aparatos mecánicos, pero los mecanismos se inhabilitaban por la alta radiación y lo complicado de trabajar entre la ruina; después enviaron millares de soldados como robots biológicos.
El trabajo sobre la azotea fue el trabajo más corto de todos, y duraba solamente dos minutos. A muchos soldados se les ofreció la opción de “completar el tiempo efectivo de servicio" requisito necesario para su retiro del ejército. Unos podían tardar dos años en una lluvia infernal de balas, cohetes y de bombas en Afganistán, mientras otros podían tardar dos minutos en una lluvia tranquila, silenciosa e invisible de rayos gama en la azotea de la unidad # 3.
Ruinas del Reactor # 4
