HISTORIA

Nuestra parroquia San Antonio Maria Claret de Ciudad San Cristóbal tiene pocos años de vida, por lo que su historia es muy poco conocida.  Trataremos de satisfacer esta necesidad, para que se tenga un conocimiento de su devenir.

 Su nacimiento y desenvolvimiento esta estrechamente a la vida y actividad de los Misioneros Claretianos.  De ahí que debemos conocer sus actividades para conocer también el desarrollo de nuestra parroquia.

 El Gobierno provincial de los misioneros claretianos de Centroamérica estudió la posibilidad de establecerse en Guatemala, aprovechando la coyuntura de que se le ofrecían unos terrenos en la urbanización de San Cristóbal.  Era por los años de 1972, siendo provincial el Padre Francisco Fierro y consultores los Padres Jesús Jaurrieta, Marcos Irañeta y José María Fernández.  El padre provincial viajo a Guatemala y se compraron los actuales terrenos del centro Claret.  El Padre Vicente Gil, provincial de los misioneros claretianos, se entrevista con Monseñor Mario Casariegos para ofrecerle los servicios espirituales de la consagración en la urbanización de San Cristóbal.  Al poco tiempo el Cardenal les ofrece la Parroquia.  Transcurría todo esto en los años 1976-1977.

 El padre Vicente Cerezo es destinado para hacer la fundación de una casa de los misioneros claretianos en San Cristóbal.  Vivía en la residencia de los Hermanos de La Salle y celebraba la eucaristía en granjas.  De esta manera fue preparando el terreno para comenzar la construcción de la casa y de la iglesia en los locales que la congregación había adquirido.  En este momento la urbanización tenía muy pocas cosas.  Logro unir a los habitantes y entusiasmarlos para iniciar pronto la construcción de la iglesia.  Aun hoy le recuerdan mucho por su dinamismo y simpatía.  Acontecía todo esto en el año de 1978.  Al año siguiente se le unió el Padre Pedro García quien residía en Tívoli y se dedicaba a predicar ejercicios espirituales, dirigir cursillos de cristiandad, charlas en radio.  Así se abrió el camino para futuros trabajos de los misioneros.

 En 1980 se trajeron a Guatemala los aspirantes a misioneros, bajo la dirección del Padre Rómulo Emiliani.  Residían en una casa particular en espera de la construcción de seminario.  A finales de ese año se inauguró la iglesia y la casa de los misioneros.  Se tuvieron las primeras comuniones.  Ayudó mucho en esta tarea la Señora Nora de Sagastume que con su entrega y dedicación hizo posible esta actividad.

 El Padre Carlos Barbarie es nombrado párroco en 1981.  Se forma la primera comunidad claretiana y el Padre Pedro García es nombrado Superior.  Comienza a funcionar el Filosofado y Teologazo en el actual Centro Claret, que se inaugura el 16 de Julio.  Los seminaristas se hacen cargo de la catequesis parroquial.  Se completan las bancas de la Iglesia.  Se organiza una Kermesse para unir a los habitantes de la Ciudad San Cristóbal y a la vez recolectar fondos para la Iglesia.  Fue muy bonita y hubo mucha participación.  Se proyectaba en perspectiva lo que iba a ser en el futuro esta gran comunidad cristiana.  Doña Carlota de Estrada organizó las catequesis en Valle Dorado y se comenzaron las misas dominicales en esa colonia.  Se formó el comité parroquial compuesto por Carlos y Nora Sagastume, Víctor Hugo y Angélica Gonzáles, Enrique y gloria Lemus, Lidia Cardona y Rossana de Speaker, Antonio Meza, Eduardo Brol, Adolfo.

 En el año de 1982 se comenzó a atender espiritualmente la comunidad cristiana de Campanero con visitas a las casas, formación de grupos juveniles, catequesis a los niños, promoción humana y otras actividades que potenciarían la vivencia cristiana de esos campesinos.

 Había diez y ocho aspirantes y cuatro profesos en el Centro Claret.  Los formadores eran el Padre Luis Avilés de los aspirantes y Carlos Barbarie de los profesos hasta el mes de septiembre.  Se terminó el parqueo del Centro Claret.

 En 1983 se siembra de árboles el terreno del Centro Claret.  Se construye la nueva comunidad en el mes de Diciembre: Superior y párroco, Padre Eloy Suárez, Padre Pedro Pablo García vicario, Padre Luis Fernando Zamora formador de los profesos, Padre Luis Avilés formador de los aspirantes, le ayuda al Padre José Ramón Rodríguez.  También se inicia el grupo carismático en la Parroquia. Tiene mucha aceptación y vienen de otras comunidades cristianas.

 En 1984 se potencia el antiguo comité parroquial.  Su integrantes son Enrique Lemus y su esposa Gloria, Víctor Hugo y Angélica González, Carlos y Nora Sagastume, Eduardo Brol, Lidia Cardona y Francisco Oliva.  DEINCO cede un terreno para la construcción de la Iglesia en el parque que está junto a La Salle.  Todo esto se debió a la incansable actividad y dinamismo del párroco.  No le agradó a la gente que se talaron los árboles del parque, por lo que se hubo desistir en esta empresa.  Se comenzó a atender espiritualmente la colonia de Terrazas y la construcción de la iglesia, catequesis a niños, misa los Domingos, formación de un grupo carismático que ha sido el alma de esta comunidad cristiana.  También se comenzó la construcción de la capilla de Panorama junto con una esmerada atención espiritual, se formo también un grupo de la renovación que animó cristianamente a aquella comunidad.  Carlos Funes y su esposa Ninet han sido los motores infatigables de Panorama.

 En 1985 se intensificaron los esfuerzos por conseguir un terreno para la construcción de la Iglesia.  El Padre Suárez y el comité parroquial lucharon denodadamente para hacer realidad ese sueño.  El Licenciado Enio Domínguez alcalde auxiliar interpuso sus buenos oficios para que la municipalidad de Mixco donara en calidad de usufructo una parte del parque Francés, con unos cuatro mil doscientos metros de extensión.  Sólo pusieron como condición el mantener limpio el parque.  Este gesto merece un agradecimiento muy intenso, Gracias a él, podemos tener esta hermosa iglesia.  Se tiene una intensa actividad apostólica en la parroquia, llevada a cabo por los cursillistas, carismáticos y encuentros conyugales.

 En el centro Claret se tienen las primeras profesiones perpetuas.  Son nombrados formadores los Padres Eduardo Campos de los profesos y bernardo Fernández de los aspirantes.

 En 1986 se pone la primera piedra.  Este acontecimiento llenó de satisfacción al comité parroquial y al padre Eloy Suárez y fue una justa recompensa a tantos esfuerzos.  A su vez supuso un incentivo para trabajar en la construcción de la nueva iglesia.  Seguía la acción apostólica con las actividades señaladas anteriormente.  Se añadió el retiro espiritual los primeros sábados de cada mes que alcanzó un gran éxito.  Comenzó así mismo el grupo de catecúmenos.  Se construyo la nueva comunidad, siendo nombrado superior y párroco el Padre Agustín de la Serna, el Padre Suárez quedo como vicario de la parroquia para continuar la realización de las grandes metas que él se había trazado.  El Padre Bernardo Fernández siguió como formador de los aspirantes.  El estudiante Alex Oviedo hace sus votos perpetuos.  Se consigue una gran ayuda de la fundación cristiana Alemana de Adveniat, lo que hizo que se siguiera con gran fuerza la construcción de la Iglesia.  El ingeniero Eduardo Ramírez se ofreció para dirigir la obra de la construcción.  Fue tal su dedicación que la obra avanzaba a marchas agigantadas.  No sólo no cobraba por su trabajo sino que él aportaba mensualmente una gran cantidad de dinero.