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  TU CORAZON ES EL MISMO

Por María

Se estaba librando una dura pelea,a Xena le estaba constando mas de lo costumbre vencer a aquel soldado que intentaba secuestrar a una joven, realmente el joven era muy bueno con la espada y parecía conocerla a la perfección . Xena no sabia quien era ya que su forma de pelear no le recordaba a nadie conocido, ademas el joven contaba con una capucha que le cubría el rostro, pero por su figura pudo deducir que era una persona joven pero con mucha experiencia. Tanto la dificultad que le procedía ante el corte que el joven le dio en uno de sus brazos Xena silbo llamando a Argo para poder escapar lo mas rápido posible del campo de batalla. Como pudo Xena monto en Argo el cual no se hizo de esperar y rápidamente cabalgo hasta encontrar una pequeña cueva donde pensó que estaría a salvo. Mientras tanto el joven con una de sus manos se quita la capucha y deja ver su rostro el cual esta magullado y marcado profundamente por las guerras.

- Xena te encontrare, puedes huir pero no escapar de mi.- Dijo el joven .-Hombre El dios de la Guerra ¿Que quieres de mi Ares?

- Simplemente ver que tal le estaba yendo a mi pequeño aprendiz.

- Bueno, y............ - Dijo el guerrero.

- Has estado brillante .realmente la podías haber matado y como recompensa a tu gran batalla, esto es tuyo.

Ares portaba un espada , era realmente bella, estaba realizada con el material de Efesto, con un acabados no visto antes .Ante esto se quedo el guerrero se quedo atónito.

- Bueno Luna a que esperas, cogela .- Dijo Ares con una gran sonrisa en los labios.

-¿Realmente es para mi? ?No me engañas? .- Dijo con tono de sorpresa y de reservas ante lo que ares le dijo.

- Realmente es tuya mi reina, toda tuya , porque tu te la mereces.

- Pero y ¿Que te puedo dar yo a cambio ?.- Dijo Luna.

- Ummmmmmmmmmmm, deja que piense.- Dijo Ares

Durante algunos segundos Ares permaneció observando a la guerrera, después de breves instantes la beso apasionadamente sujetando muy suavemente su cintura, Luna no se resistió ante este gesto de Ares ,todo lo contrario se acomodo muy despacio al cuerpo del guerrero. Después de varios minutos en el húmedo y prolongado beso Luna y Ares se separaron, ambos tenían un brillo especial en sus ojos, un brillo distinto al de un guerrero sanguinario. Después de unos minutos en los que ambos se desearon poseer de nuevo se rompió por fin el silencio.

- Bueno mi pequeña, debes descansar mañana se presenta una dura batalla, recuerda que Xena te estará esperando, así que será mejor que dejemos esto para cuando Xena este muerta .- Dijo Ares mientras pensaba .- "Que

pasara cuando se entere de quien es mi elegida "

- Está bien Ares será lo mejor, pero recuerda tenemos algo pendiente.- Dijo Luna con una amplia sonrisa.

- Esta bien mi reina, lo recordare. Ares entonces muy desplació pero con fuerza beso los labios de Luna y como en una nube de polvo despacio. Después de esto Luna se dirigió a uno de su casa, una lujosa casa que Ares había preparado para ella.

Mientras sucedía Xena intentaba curarse de las heridas provocadas por el guerrero, el saber quien era le intrigaba demasiado, sabia que no podía permanecer toda las noche así que tomando un poco de leña que había hallado en la cueva que se encontraba completamente seca realizó un fuego, la noche estaba frescas y el cansancio y el frío se adueñaban de su cuerpo. Como vagamente pudo tomo un poco de queso y de pan , y se recostó seguidamente en las mantas para que Morpheus se hiciera cargo de sus sueños.

Le costo mucho conseguir coger el sueño ya que la culpa se adueñaba de ella llevaba mas de una año sin apenas dormir, cada noche en vez de ir a mejor empeoraba la situación, no quería que eso le sucediera pero por mas que lo intentaba no conseguía olvidarse, la tristeza la había invadido desde que Xena perdió a su Gabrielle, y la culpa por no haberla salvado le hacia daño. Desde entonces se sentía sola, desde que ella se fue todo era distinto ,todo cambio y empeoro ,cada día era peor porque cada día la echaba mas de menos. De lo que a Xena le ocurría se daba perfectamente cuenta la Diosa Afrodita que desde hace un tiempo la vigilaba por las noches, realmente no sabia lo que había pasado, tan solo había podido averiguar que Gabrielle no estaba que algo le había hecho marcharse o desaparecer del lado de Xena.

Afrodita quería realmente intervenir y ayudarla, pero no podía ,ella debía pedirse lo no ofrecerse ella, hasta que Xena no fuera capaz de abrir su corazón a ella no podría hacer nada para salvarla. Así que sin mas Afrodita se marcho dejando a Xena ,solo en el rincón de la cueva con su pensamiento.

De repente Xena comenzó a llorar no sabia porque era realmente el motivo, pero desde entonces se sentía así, y la cosa empeoraba cada vez mas .Así que como pudo se seco las lagrimas, y pudo escuchar como una suave voz le decía al oído:

-Xena no estas sola, pide ayuda, ahí gente que te quiere.

Xena pensó que estaba enloqueciendo realmente, no podía pensar que lo que había escuchado había sido verdad quería pensar que había sido todo un fruto de su imaginación, ¿Pero y si era verdad? y si ¿Realmente necesitaba ayuda? Durante unos largos veinte minutos estuvo pensativa ,recordando cosa ,momento personas, algo que la pudiera ayudar, hasta que en un determinado unas palabras salieron de su boca:

- Afrodita te necesito, necesito de tu ayuda. Xena parecía desesperada y en su voz se reflejaba este hecho.

Afrodita que no se encontraba demasiado lejos ,por fin decidió actuar ,llevaba varios días, semanas y meses deseando que Xena pronuncia tres simples palabras. Afrodita te necesito. Así que decido no hacer esperar demasiado ya que Xena parecía impacientarse demasiado ante la tardanza de la diosa.

- Xena ya estoy aquí, espero que sea importante, tan importante como para sacarme de la cama a estas altas horas de la noche, porque sepas que esto no es nada bueno para mi cutis.- Dijo con una pequeñas sonrisa, aunque después de recapacitar sobre lo que había dicho se arrepintió, pensó que no había sido demasiado oportuna.

- Afrodita lamento seriamente haberte molestado si prefieres marcharte lo entenderé.- Dijo Xena con un tomo de desilusión.

- Tranquila Xena, ya sabes que os quiero mucho a ti y a Gabrielle y que siempre que me necesites estaré contigo, así que dime ¿Qué necesitas de mi?.- La expresión de su cara había cambiado y su tono de voz era aun mas dulce y cálido, mucho mas amigable.

 - Veras Afrodita, no se si sabrás que Gabrielle ya no viaja conmigo .- Afrodita no dijo nada simplemente se limito a afirmar con la cabeza, para dejar que Xena continuara abriendo su corazón.- desde que paso lo que paso no he sido capaz de dejar de sentirme culpable , y en cada maldita noche en la que intento dormir las pesadillas vuelven y n soy capaz de conciliar el sueño.-

Las lagrimas comenzaron a brotar de su ojos, realmente Afrodita se encontraba un poco desconcertada sabia que Gabrielle realmente había muerto, pero no sabia como y menso porque Xena se sintió culpable, antes de decir una sola palabra decidió pensar lo que iba a decir, no quería poner las cosas peor de lo que ya estaban así que muy suavemente y con una voz angelical le dijo

- Xena ¿que paso?

- Afrodita realmente son recuerdos muy dolorosos para mi y prefiero no seguir contando nada de lo sucedido aquel día.

-Xena seamos franca si me has llamado es porque necesitas que alguien te escuche y quién mejor que la diosa del amor .¿no? .-Dijo Afrodita con una simpática mueca

- Tienes razón, será mejor que empiece por el principio:

Nos dirigíamos a una villa que estaba en peligro ,unos romanos la llevaban atacando varios días. Sabia que iba ser una dura batalla, ya que los romanos poseían grandes tropas y muchos víveres y armas para aguantara bastantes días. En cambio la villa apenas contaba con víveres para aguantar una semana, nada mas llegar nos ofrecimos la alcalde a ayudar y como suele ocurrir empece mandar a la tropas que se colocaran en lugares estratégicos, organizando todo. Gabrielle se encargaba de los soldados que se encontraban malheridos y que su estado de salud era pésimo. En el mismo día recibimos un duro ataque, el cual nos produjo mas víctimas de lo normal, lo malo no fue lo ocurrido si no la forma en que ocurrió, si querer mate a un niño por la espalda, fue un fatídico error, iba vestido de soldado ,no le vi la cara se dirigía hacia los soldados armado y no supe hacer otra cosa. El problema es que Gabrielle presencio todo lo sucedido, intente explicarle que eso era normal que en la guerra no se podía ir penando a quien ibas matando, pero ella no fue capaz de entenderlo. Así que decidí no darles mas vueltas ya que la discusión fue demasiado fuerte y sabia que necesitábamos mas tiempo para reflexionar.

Reagrupamos las tropas como pudimos, decide que la mejor forma de escapar de allí era un taquee a sus víveres, por ello me lleve unos hombre conmigo para atacar sus abastecimiento de agua, el error estuvo allí, en marcharme, durante la noche mientras nosotros les envenenamos el agua, los romanos consiguieron no se como entra y capturas a unos jóvenes, en esto Gabrielle hizo de moneda de cambio para que los niños pudieran permanecer en la aldea todos menso uno, al escuchar que era mi amiga, lo romanos aceptaron, se la llevaron , en cuanto llegué a la aldea me contaron lo sucedido y marche hacia el campamento romano. Cundo llegue Gabrielle y el joven se encontraban atados, gabrielle debió defenderse porque se encontraba ensangrentada completamente la cara y las demás extremidades de su cuerpo, el joven en cambio tenia un buen aspecto, la llegar empecé a luchar contra los romanos, consiguiendo desatar a Gabrielle y al joven escapamos con la mala suerte que llegamos a una cascada, en principio pensé que podría luchar pero el joven muchacho no era un aldeano normal, mas bien era uno de los hijos de los romanos, un espía. Así que en uno de los despistes intento tirarme , ufff ,y Gabrielle se puso en medio cayendo por la cascada. Depuse que conseguí escapar de los romanos con mucha dificultades, las busque durante días sin encontrar nada mas que su camisola y su callado. Desde entonces toda las noches me culpo por haberla abandonado por no haber sido capaz de salvarla."

-Xena tu no tienes la culpa, ella eligió salvarte a ti y morir , te quería y seguro que haya donde este te quiere tanto como tu la mas a ella, y estoy completamente convencida que no querría que te culparas por lo sucedido.

Esas palabras sirvieron de aliento a Xena no demasiado pero le hizo mirar las cosas desde otro lado, Gabrielle se había sacrificado por ella, porque Gabrielle la amaba, y era cierto ella no querría verla así, entonces decido ponerse su armadura ,coger su espada he ir en busca del desconocido el pensar que Gabrielle la amaba le daba fuerzas para continuar a delante.

Afrodita sorprendida ante lo que hacia Xena no puedo evitar preguntarle

- ¿A donde vas Xena? ¿Que piensas hacer?.- Realmente Afrodita estaba preocupada por lo que Xena pudiera hacer.

- No te preocupes Afrodita, tengo asuntos pendiente que debo solucionar de inmediato, así que muchas gracias y tranquila volveré pronto.- Dijo con una sonrisa hace mucho tiempo dormida.

-Está bien Xena confió en ti ,ten mucho cuidado y en lo que necesites ya sabes me tienes.

- Gracias Afrodita.- Y diciendo esto Xena en ese mismo momento fue en busca argo y montan dolo cabalgo en busca del guerrero desconocido a galope , mientras Afrodita muy despacio desaparecía detrás de una cortina de humo.

Luna mientras estaba rastreando el terreno buscando alguna pista que la guiara a la guerrera hasta que pudo escuchar los cascos de un caballo ,por el sonido estaba claro que era el de un guerrero así que rápidamente desenfundo la espada, y en pocos minutos comprobó como Xena se situaba frente a ella. Luna no dijo nada simplemente se limito a observarla mientras Xena le decía unas pequeñas palabras:

- Como ves he vuelto, y esta vez te será difícil derrotarme.

Ambas comenzaron a lanzarse golpes uno de tras de otro ,era una dura batalla, realmente, las dos eran buenas, después de largas minutos de lucha ambas estaban exhaustas , asi que en un golpe certero Xena consigue golpear ala guerrero lo suficiente para dejarla inconsciente no muerta, al levantar la capa no puede creer lo que ve y tan solo puede decir:

- Por los dioses ¡¡tu!!

Continuara....


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