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Disclaimer: Xena, Gabrielle y Joxer son propiedad de MCA/Universal Pictures y de Renaissance Pictures. Este Fan Fiction está de acuerdo con el subtexto. Prohibida su reproducción parcial o total sin permiso previo. Cualquier comentrio o permiso, hágalo a Ivy_Xen@hotmail.com


LA DECLARACION

Escrito por Poison Ivy

Como en tantas ocasiones, Xena y Gabrielle iban por el camino jugando "Quién soy". Era un día tranquilo, sin ningún maleante a la vista que detuviera su marcha. Caminaban pausadamente, con Argo trotando feliz detrás de ellas.

-¿Eres de Grecia?- le pregunto Gabby a Xena, un tanto desesperada por no poder encontrar la respuesta después de tanto tiempo. -No- contesto Xena, riéndose entre dientes al darse cuenta que Gabrielle no daría con su personaje. -¡Está bien Xena! Me rindo. Llevo una hora tratando de adivinar quien es! ¡Dímelo de una vez!...- dijo Gabrielle dándose por vencida.

-Gabrielle, no puedo creer que no hayas adivinado! ¿La palabra "Idiota" no te dice nada?- dijo Xena, riéndose. Se detuvo y miro a su compañera. La luz del sol en su cabello rubio y ese aire pensativo mientras trataba de pensar en la respuesta le agradaron a Xena. ¡Bueno! Ultimamente hasta los gestos más elementales de Gabby le parecían agradables a Xena.

"Creo que estoy empezando a tender hacia la ternura", penso Xena algo asombrada.
-¿En que piensas?- pregunto Gabby dandose cuenta de la forma en que Xena la miraba. Sus palabras sacaron de sus pensamientos a Xena, que tratando de recuperar la compostura dijo: -¿Eh? No, en nada, en nada. Anda, debemos apresurarnos a llegar a la aldea, ya casi anochece.-
Después de dar unos pasos, a Gabrielle se le encendió el rostro:
-¡Ah! ¡Ya se! ¿Como no se me habia ocurrido? ¡¿Quien mas que Joxer?! Digo, idiota, Joxer, vienen siendo casi lo mismo!, ja, ja, ja- dijo, mientras daba vueltas alrededor de Xena. Ella empezó a reír de buena gana, sintiéndose dichosa de que ese ser tan inocente y lleno de vida estuviera con ella...

Llegaron por la noche a la taberna de la aldea, donde pidieron algo de comer. Mientras cenaban, Gabby, con un pícaro gesto, le dijo a Xena :

-Oye, ¿No te parece guapo el chico de aquella mesa?-
-¿Quien? ¿Ese? ¡Por favor!- contesto Xena, con un marcado gesto despectivo. Se dio cuenta de que las palabras de Gabby habían removido algo en su interior, y una ligera rabia habia salido a flote.
-¡Bueno! ¡No era para tanto! ¿Que te ocurre últimamente, Xena? Has estado un poco extraña, ¿Que te pasa?- Pregunto Gabrielle.

Xena la miro, vio ese gesto de preocupación tan característico de su compañera, ese mismo gesto que le provocaba...algo.
-No me pasa nada; vámonos a dormir. Estoy cansada.-, contesto, como queriendo restarle importancia al asunto, y aunque Gabrielle se dio cuenta de que algo pasaba, no dijo nada y la siguio escaleras arriba, donde se encontraba el pequeño cuarto.

-Bueno, creo que tendremos que dormir en la misma cama, si a esto se le puede llamar asi...-dijo Xena. Claro que ya habia dormido muchas veces con Gabrielle, pero esta vez tenia una cierta ansiedad que no sabia que era.
-No hay problema, ¡Pido el lado derecho!- dijo Gabby, alistandose para dormir. Xena hizo lo mismo, un poco turbada. Cuando se metieron a la cama, Gabrielle le deseo buenas noches a Xena, y al poco rato ya estaba profundamente dormida

Pero Xena no podía dormir. Se quedo largo tiempo pensando, pensando en cuanto la había ayudado Gabrielle, en como con su candor la había hecho cambiar tanto. Se pregunto que habría sido de ella si no la hubiera conocido, y también se dio cuenta que, a pesar de todo, la amaba mas que a cualquier persona en el mundo. ¿Cuánto era posible amar a una amiga?

Entonces cayo en cuenta de algo: Ese amor de amigas, había pasado a un plano superior. Eso que sentía últimamente, ese sentimiento calido que sentia cuando la miraba, era amor. Y esos pequeños arranques de enojo cuando ella miraba a alguien mas, no eran mas que simples y llanos celos.
Xena se quedo sorprendida. Claro, siempre hubo algo latente entre las dos, pero se quedo pasmada al darse cuenta de que no era otra cosa de amor, y no precisamente de amigos.

Se volvió a ver a Gabrielle, que estaba profundamente dormida. Si, definitivamente la amaba, amaba su forma de ser, sus expresiones, la amaba en este momento en que estaba dormida! Entonces, Xena se inclino y le dio un suave beso a Gabby, quien no se despertó.
Xena se volvió a acostar, asimilando aun las cosas, cuando un pensamiento le cruzo la mente: ¿Y si Gabrielle no sentía lo mismo por ella?...

Al día siguiente, las cosas siguieron normales, salvo una que otra sonrisa o roce de manos inesperado que Xena le daba a Gabrielle, cosas que la tomaban por sorpresa. Pero vaya que le agradaban...
Habían pasado el dia tan tranquilo como el anterior, y por la tarde se detuvieron a la orilla de un lago. Contemplaban la hermosa vista, cuando Xena rompió el silencio:

-Gabrielle...-
-¿Si, Xena?- Nerviosa y titubeante (Algo rarísimo en ella) Xena miro a Gabrielle, y dijo:
-Gabrielle, hemos pasado muchas cosas juntas...-Se detuvo, aun indecisa.
-Así es, muchas cosas...- dijo Gabrielle, mirándola con el rostro radiante. Eso le puso mas difícil la situación a Xena, quien tomando el valor de una vez por todas, dijo:
-Muchas cosas. Sabes que te amo mas que a nadie en el mundo, lo sabes, ¿Verdad?- dijo, tomandola por los hombros.
-Claro que lo se, Xena. Yo también te amo, no sabes de que forma...- Contesto Gabby, acariciándole la mejilla a Xena.
-Eso, tu no sabes de que forma te amo... Oh, mi querida Gabrielle, todo este tiempo hubo algo, pero apenas descubrí que te amo...En todos sentidos.-
Xena aparto los ojos de Gabrielle, un tanto apenada, pero inmediatamente volvió a verla. Gabrielle la miraba con un gesto de comprensión y una sonrisa en la cara.
-Xena, ¿No te has dado cuenta de que lo mismo he sentido siempre por ti?- El corazón de Xena dio un vuelco: ¿Acaso era posible? No cupo en si de felicidad cuando escucho a Gabby decir:
-Te ame de esa forma desde el primer momento en que te vi, y a pesar de todas las cosas que han pasado, siempre seguí haciéndolo. Pero...Nunca me atreví a decírtelo, no sabia como ibas a reaccionar-.
-Oh Gabrielle!...- Xena estaba feliz, aun no lo podía creer.

Entonces se acerco a su amada amiga, y le dio un tierno beso, en medio de aquella esplendida tarde de otoño... .

FIN .


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