Esta es la romántica historia de amor de Haydeé y Aníbal. Por favor, haz una parada por su libro de Visitas y déjales un mensaje cariñoso.

A Haydeé y Aníbal: les agradezco mucho que hayan compartido sus experiencias conmigo para hacer esta página que les dedico con mucho cariño. Dios los bendiga y sigan adelante juntos, amándose como lo hacen hoy.

Cariñosss, Yaz

Mi historia de amor comenzó hace ya casi 8 meses, conocí a Aníbal de casualidad porque estaba buscando números de ICQ para añadir a mi lista, ya que apenas tenía contactos. Buscaba amistades de pueblos cercanos y me dió un listado y allí estaba el número de Aníbal. Nunca había hecho eso pero esta vez se me ocurrió y bendita la hora en que lo hice. Envié "requests" a gran cantidad de personas de pueblos cercanos, incluyendo a Aníbal. O mejor dicho, a él no tuve que pedirle autorización porque puedes añadirlo a tu lista sin que él dé su autorización, pero en cambio, él me pidió autorización y me saludó bien simpático, diciendo que ya que yo lo había añadido a su lista, le permitiera a él tenerme en la suya. Comenzamos a hablar y me pareció muy-muy-muy agradable. Se expresaba diferente, no me hablaba como el resto de muchachos con los que acostumbraba a hablar. Era bien chulo. Nos caímos súper bien desde el primer instante. Yo le envié mi foto y él a mí la suya. Yo no soy fea, así que le parecí bien y él me envió su foto y me agradó. Me pareció interesantísimo. Yo soy una mujer divorciada y tengo una hija. En esos momentos no tenía intensiones ni interés de enamorarme de nadie porque había pasado por momentos muy difíciles con mi ex esposo y estaba segura de que lo mejor era olvidarme de asuntos del corazón. Tenía mucha desconfianza, no creía que existiera nadie capaz de ser sincero y darme amor. Aníbal también es divorciado y tiene dos niños. Lo que más interesante me pareció fue su edad: 36 años. Me lleva poco más de 7 años. No es tanta la diferencia pero mis relaciones siempre habían sido con hombres de mi edad o unos años menor que yo. Aquí me estaba encontrando con alguien diferente, maduro, pero simpático, agradable y juvenil como si fuera un muchacho de 20 años. Me atraía esa combinación: la madurez mezclada con una chispa de jovialidad. Era un hombre en todo el sentido de la palabra y un caballero. Era pícaro, pero nunca se pasaba de los límites. No sé si era así con todas las chicas que conocía pero estoy segura de que la relación que surgió entre nosotros, no la tuvo ni aún la tiene con nadie más. Al principio, yo estaba insegura, me agradaba muchísimo, pensaba en él cuando no estaba conectada. En las mañanas que iba al trabajo, en todo el camino, iba pensando en él, sonriendo. Estaba comenzando a enamorarme y ni siquiera lo había visto personalmente. Siempre he sido incrédula en el amor a primera vista, cuánto más dudaba con un amor así por internet. Porque sé que uno se crea muchas ilusiones e idealiza a las personas. ¿Cómo era posible que me enamorara de una persona que conocía solamente por las cosas que escribía? Nunca lo había visto, no sabía nada de él, excepto lo que él mismo me decía pero, ¿quién me aseguraba de que todo eso fuera la verdad?

Las primeros meses siempre nos escribíamos por ICQ y cuando era hora de desconectarnos para ir a dormir, me llamaba unos minutos para darme las buenas noches, escuchar mi voz... Yo siempre le decía que era un conquistador, que casi me conquistaba pero que le faltaba por lograr un 90%. Pero el decía que lo iba a lograr. Que quería que tuviéramos una relacion seria.

Me envió otras fotos y yo no sabía a cual de esas fotos creer porque siempre se veía diferente... Confieso que en algunas de ellas no me gustó. Le pedí una vez verlo, por NetMeeting. El tenía su Quick Cam y yo no tengo, pero él estubo dispuesto a chatear conmigo y dejarme que lo viera. Me gustó mucho menos... No se por qué. No es que yo sea una persona muy interesada en el físico, porque para que lo sepan, mi ex esposo era un hombre feo, y yo lo quería muchísimo. Pero había eso que llaman "química" entre los dos, a mí me gustaba. Pero no estaba segura de que me iba a sentir atraída por Aníbal cuando lo viera, no estaba segura de si surgiría o no esa "química".

Unos meses después por fin nos mataba la curiosidad y me vino a visitar a mi casa. ¡Creo que Cupido estaba presente haciendo sus travesuras porque quedé flechada! No es un príncipe, pero era adorable. Esa noche habló y habló y habló... no paraba de hablar... contándome de todo, a veces yo le prestaba atención, otras no porque andaba por las nubes... Porque yo lo miraba muy fijamente pero mi mente andaba por otro lado... Pensando lo bello que es, que era un caballero, que era agradable, que era atractivo, que sus labios eran bellos, que cuánto me gustaría que me abrazara y me besara... Pero era la primera vez que nos veíamos así que nada de eso podía suceder. Eran sólo sueños... Cuando se fue a su casa, nos conectamos y le exprese que me agradó en cantidad, que me encantó y él me dijo lo mismo.

Las próximas ocasiones que nos vimos, era igual. Yo ilusionada, esperando que me diera un abrazo y un beso, pero nada... y yo no me atrevía a tomar la iniciativa... Por un lado, yo me sentía ya tan enamorada que no me importaba el poco tiempo de conocernos y por otro lado, esa distancia que él creó esas primeras ocasiones entre nosotros fue una de las cosas que más me cautivó. Porque siempre había soñado con encontrar un hombre que me tratara así de esa manera... Por lo general, me había encontrado con hombres que sólo buscaban tener una aventura y mientras más rápido había contacto físico, mejor para ellos, por eso nunca prosperaban porque no era precisamente lo que yo buscaba... Pero Aníbal era especial. Aníbal no buscaba en mí una aventura. Tan sólo hablando y compartiendo la pasábamos de maravillas. Si no hubiera sido por eso, no hubiéramos tenido hoy la hermosa relación que tenemos porque todo hubiera terminado al instante... Aníbal sí sabe tratar a una mujer como se merece.

Cada vez compartíamos mas y nos sentíamos más unidos... Nos llevamos muy bien y cuando surgían las diferencias, las sabíamos superar... y sí, por fin llegó el día... Ya convencidos de nuestro amor y felices... nos amamos...

Dicen que en el amor siempre hay uno que ama más y yo estoy muy consciente de que si hay alguien de los dos que ama más, esa soy yo. Pero no me canso de expresárselo, de decirle que lo quiero y lo amo, lo bello y especial que es en mi vida, que me siento muy feliz de haberlo encontrado y conocido por casualidad de una manera que jamás pensé: por medio de internet.

Hemos tenido algunos conflictos porque soy una persona extremadamente celosa y desconfiada y como sé lo bien que él sabe conquistar a una mujer y que por icq conoce muchas chicas, tengo miedo de perderlo. Qué inseguridad la mía... Todo eso él me lo ha sabido perdonar.

Pero hemos superado esas cosas, por tres ocasiones terminamos la relación: dos de ellas por mis celos y yo estaba decidida a cortar todo tipo de contacto, aunque me doliera... pero todo pasó. Nos fallamos pero nos perdonamos y hemos seguido juntos. Y estoy convencida de que son piedritas en el camino que nos hacen tropezar y caer pero tenemos que levantarnos y seguir adelante. Si superamos esas que pasamos, podremos superar muchas más...

Aníbal es tan especial y bella persona, que está grabado en mi vida de una manera que no puedo explicar. Estoy muy enamorada, lo amo, lo adoro y él lo sabe muy bien... Y se lo merece por haberme hecho tan feliz, por haberse cruzado en mi camino y por haberse metido en mi vida como lo hizo.


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