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EL COLEGIO.

Ceferino va al colegio.

El Aprendiz de mago.

El pez que no quería ir a la escuela.

 

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Ceferino va al colegio

    Erase un osito que vivía en el pueblo con sus papás. Hasta hace poco había vivido en el bosque pero le gustaba mucho más el pueblo ya que allí tenía muchos amigos con los que jugar y lo pasaba muy divertido. Un día los niños le dijeron que al día siguiente empezaba el colegio y que ya se verían allí en vez de en la calle como hasta ese momento.

    Al día siguiente el osito cogió una mochila de su casa, se hizo un bocadillo y se fue para el colegio, como no había ido nunca no sabía que tenía que llevar, decidió ir echando todo lo que encontrara, cogió una flor, después convenció a una mariposa blanca para que se fuera con el, intento llevarse a un árbol que no pudo ir paro se llevo una rama que se le había caído, más tarde echo un lagarto enorme que se encontró, una piedra muy bonita, etc. etc.(irán diciendo lo que se les ocurra)

    Cuando llegó a la puerta de la escuela la maestra salió a recibirle y entre todos decidieron lo que podía quedarse dentro de la clase y lo que era mejor que se quedara fuera.  (Lo haremos entre todos).

                                                          Guia Didáctica "Sube y baja"

El pez que no quería ir a la escuela

    Erase una vez un pez que vivía en un río muy tranquilo, como hasta entonces había sido muy pequeño había estado siempre con su mamá que le había protegido de todos los peligros. Como ya era mayor le dijeron que tenía que ir al colegio de los peces donde le enseñarían muchas cosas útiles para la vida en el río. 

    El pez no quería ir  todos los días se escapaba para no asistir a las clases que daba un pez muy viejo y muy sabio. Una de las cosas que aprendían era a entender las señales que ponían en el fondo del río y que indicaban los peligros. Las había que indicaban el peligro de rocas sueltas que podían caer y hacer daño, otras las corrientes peligrosas, también las había que avisaban de la presencia de pescadores, etc. Como nuestro pez no iba, no las entendía, un día que estaba paseando sólo, los demás estaban en clase, vio una de ellas pero paso de largo porque no supo lo que indicaba. Era una de las que avisaban de que había pescadores en un puente cercano, el pez vio un gusano muy apetitoso y se tiro a por el, noto un dolor terrible en la boca y se puso a hacer mucho ruido, el pescador era un viejo burro que vivía cerca del río y que a pesar de ir muy a menudo, nunca pescaba nada (gracias a las señales), se puso muy nervioso y empezó a tirar del sedal mientras se asomaba a ver lo que había pescado. Muchos peces acudieron al oir al pequeño y le agarraron unos a el y otros del hilo; a una señal   tiraron todos y el pobre burro cayó al agua, no sabía nadar y empezó a hundirse, a los peces les dio pena y lo sacaron a la orilla. 

    Al pececito le quitaron el anzuelo pero no se le olvidó el susto y desde entonces no falto nunca más a clase y en cuanto al burro sólo fue a la orilla de paseo y jamás volvió a meter su caña en el río.