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Litera-Libre

No soy de las mejores poetas adolescentes que hay en México, pero una de mis pasiones es escribir.. y me gustaría compartir esto con ustedes...


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A tí, que te aburre ver llover..

Mírate. Por fin llegaste. Te he estado esperando. Me da gusto que hayas recibido mi carta. Quiero decirte que tenía mucha pena en entregátela. No sabía qué hacer, tengo que confesarte que tardé como quince minutos en por fin decidirme en entregártela. Yo la dejé ahí, lo que pasa es que no tenía ganas de dejártela en el buzón. Si no, no habría tenido la certeza de que vendrías a verme. Tardaste. De todos modos nunca fui muy buena para las matemáticas. Mi maestro se reiría de mí. De tu calle a la mía...tan poco tiempo si vas de prisa...No, en serio, no hables, quiero decirte algo. Si no, ni la molestia de haberte hecho venir. ¿Te acuerdas la vez que salí corriendo detrás de tí cuando llovía? Si, ese. Olías tan bien...Qué si tienes mala memoria...Abre el cajón..Si, por eso está mojada.En serio, no hables, déjame a mí. Pero mírame a los ojos....No es el momento de bajar la mirada como tantas otras veces. Qué bueno, llueve. A tí no te gusta porque no puedes hacer nada cuando llueve, ¿no? Abre la ventana que me gusta el olor a tierra mojada. Somos tan diferentes. Vamos a hacer algo para que te diviertas mientras llueve. Dame tu mano, mira, tómame de aquí, y mírame a los ojos..me hubiera gustado probar tus labios, préstame tu mano..¿ves? Sí, sangre. Nada, que las muñecas no aguantan navajas. ¡Mírame a los ojos, te digo! Véme bien, esto es para que no te aburras. Para que nunca te vuelvas a aburrir cuando llueve.

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Escritos del 25 de Abril del 2000.

Hablemos.
Para hablarnos
no ha de haber palabras.
De tus manos fluyen.
Que hablen.
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(En realidad pensé que existías...)

Sabía que estabas ahí.
Las puertas se abrían
Cosas que no había tomado
Resultaban tomadas, vacías, heladas.
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No hay marcha atrás, ya no sonrías.
No me toques, que voy perdiendo sentido
Si tus manos han de enredarme, vano afán.
Respírame cerca ,muy cerca, y háblame al oído.
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-Esta niña dejó el morral aquí...-
-Otra vez.-
-Si, ya sabes cómo es, media olvidadiza, siempre anda pensando en otras cosas..-
-Ya sé.-
-¿Estás ocupado?-
-Un poquito, en realidad no. Estaba leyendo esto, está interesante.-
-¿De qué es?-
-Películas, actores, actrices.-
-Sobretodo actrices,¿verdad?-
-Películas, actores, actrices. De todo un poco.-
-Gran variedad...¿Porqué no hablamos un rato?-
-¿De?-
-De tí y de mí. Del silencio entre palabras. Del por qué no es tiempo. Del por qué te vas. Del por qué no puedo.-
-Siempre lo mismo. ¿No cambias, verdad?-
-No. No hay medicina sin enfermedad.-
-Y no hay fin sin tu fin.-
-Ni he tenido principios.-
-Porque no ha de haber. Porque ya te dije. Ya sabes qué es, no lo quieres aceptar. Ese ya no es mi problema.-
-¿Me quieres?-
-No es eso...-
-¿Entonces?-
-Es que tú....
..me voy, el tiempo..-
-Esta niña dejó el morral aquí...-
-Sí....otra vez.-

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(SIN TITULO)

Hacía frío esa noche. Se te helaba el alma con sólo ponerte a pensar en estar a la intemperie...pero me hacía falta sentir la vida otra vez.
Entonces, abrí la ventana y dejé que el acoso del viento sacudiera mis cortirnas.. Todo se movía delante de mí. . Al soplo del aire, se abrió mi ventana...y dejó ver una sombra que parecía una silueta humana.. El contorno asemejaba al tuyo. Había pasado algún tiempo sin verte..y ahora estabas en mi balcón, igual como te recordaba..
Levanté mi cuerpo..y lo posé frente al tuyo.. Tu inmensidad desnuda se ergía ante mí ; parecía como si estuviera esperando el calor de mis manos, porque temblaste cuando te tocaron...
Miré tus ojos firmemente.. y el frío que había sentido minutos antes, desapareció al cruzarse con tu mirada..
Ardía el deseo en mi interior..tu cuerpo iba a ser mío esa noche... Plasmaría mis dedos en el lienzo de tu piel.. y aunque ninguno pronunciara una palabra...dormiría acariciándote...y soñaría contigo...
Te acercaste a mí..tu cuerpo adherido al mío... Y con tus labios dibujaste un beso en mi sorpresa... pude volver a sentir el calor de tu boca..su humedad fértil de tantas noches interminables... tu respirar en mi garganta.. era imposible dejar de besarte...si lo hacía caía y moría..., así que te besé lentamente...pero con la seguridad de quedarme contigo para siempre...
Una ola de calor sacudió mi cuerpo desnudo.. Estábamos abrazados bajo la luna. Mis manos recorriendo tu cuerpo... suavemente.. describiéndolo como se relata una noche con estrellas.. Reconociéndo mi territorio en tu piel....todo era mío...
Mi pecho sentía el latir de tu corazón..cerca..latiéndo al mismo ritmo del mío..
Mi amor por tí se estaba convirtiendo en deseo...un deseo obsesivo de nunca soltarte..de tenerte siempre así....sin que tuviera que amanecer mañana...sintiéndote cerca...teniéndote en mí...
Ahora mi mente no era lo único que te retenía..mis brazos se enredaron en tu cuerpo...y fueron tocándolo para hacerlo suyo...
Nuestras bocas se fueron fundiendo en miles de besos....besos por tu inmensidad y la mía...
Tu aliento con el mío.. subiendo de intensidad...a medida que nos acércabamos más..
Nos devoramos en la madugada, y el resto de las horas oscuras.
Relajamos nuestros cuerpos observándonos...contemplando la unión de nuestras almas.
Te habías convertido en mi razón de vivir, y en el agua de mi cuerpo, a medida que te extrañé más durante tu ausencia....
Entonces...otro calor empezó a subir iluminándonos. El sol hacía su presencia, para avisarnos que la noche había terminado.
Abrí mis ojos para reflejarme en los tuyos. Toqué el lugar vació de mi cama., en el que habías tatuado tu sudor...y estaba frió... sin sudor, sin calor, y sin tí.
Frenéticamente me levanté de la cama... las ventanas estaban cerradas.. las cortinas imperturbables...
Nada de lo que tanto disfruté había pasado... Nisiquiera mi mente se había ocupado en avisarme que nada era cierto... qué todo había sido un sueño... y que nunca habías estado ahí...


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Podría quedarme...pero unos minutos me impiden regresar el tiempo, para revivir el momento en que eclipsaste mi corazón. Tus ojos sellaron mi guarida, y me recluí cautiva de tu boca, buscando evitar que se terminara el día, porque el decir adiós no estaba entre mis planes.
No debo mirarte a los ojos, pues su brillo no me dejaría ir; y moriría lento observándote. Entendiéndote a cada milímetro que mis manos recorrieran tu piel; y probando tus labios lentamente, como miel que se agota sobre ellos.
No debo acariciarte mucho, porque tus poros significarían imánes para mi rabia por amoldarme a ellos. Por todas esas ganas que tengo de quedarme ahí...
Tomaré mi distancia..y en vez de tomarte de una vez en mis brazos solamente para mí, beso tu mejilla, y evito el resplandor de tus ojos, que aún sin verlos siento que me espinan, y que sangro desbordándome en tu boca.
Podría quedarme...
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Y aún pensando que te conozco, no es verdad.
Jamás te he visto hacer muecas, ni sé si tus mejillas se hunden al reír.
Tampoco me explico más allá de mi imaginación, si tus manos cabrán perfectamente en las mías, o si podré con ellas escuchar tu corazón.
Aunque suene iluso e inconcreto, nunca te he visto los pies, no sé como caminas ni como te mueves al hablar. ¿Serás expresivo o callado y sordo como estas letras?

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(SIN TÍTULO)

>"vuelve otra vez aparece desapareces te vas y vuelves...">

Elegí sin opción.
Si.. o no...moriría.
Me encerraste con
una puerta para abrir.
Yo misma te busqué.
Yo misma me juzgué,
y te escogí por todo,
todo lo que quería que fueras.
Pero eras, no serías.
Y aprendí a vivir así.
Soñé mi vida sin vivirla,
Y no la viví..
porque era más hermoso soñar.
Creé un mundo que no había.
Y hacerlo mejor cada vez,
me hacía más difícil respirar.
Y ahora...volviste a aquí,
todo mi mundo apareció,
y se derramó ante mis ojos.
Y nunca te esperé,
porque siempre estuviste ahí,
en el mundo que soñé
Extendiendo tu mano,
esperándome también...


-K.j.-

Pensé que no me pasaría.
Que ya no lo iba a sentir.
Que todo había pasado, que algún día llegaría mi oportunidad...
Ya me había hecho a la idea de vivir así,
sin esperar, dando sin recibir.
Porque siempre me salía todo al revés,
en vez de sonreir, lloraba..
en vez de ver, sólo esperaba..
Y ahora que estás aquí, todo dio un giro.
Sigo llorando, por que sonrío a diario.
Sigo esperando, a verte, y te veo.
De pronto todo sale bien.
Todo está bien desde que estás.
Conmigo.
Y aquí estoy,
Nunca me había pasado, y no me pasaría.
No quiero amarrarte, pero nunca quiero dejarte ir.
No quiero que te vayas, y si te vas, vete conmigo.
Mis conversaciones se terminan, y aburren a veces,
suenan repetitivas...
pero no me importa decir cuánto te quiero,
porque cada vez que lo digo, es verdad.


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SABER DEL TIEMPO

No hay porqué apresurarse.
No hay porqué querer desear el futuro,
cuando el presente se escurre
y pronto pasado se vuelve.

No hay porqué apresurarse.
no hay porqué desear que nunca pasara.
cuando lo que pasará pasa,
y se va dejándonos atrás.

No hay porqué apresurarse.
No hay porqué decir "estoy seguro".
pues no se sabe que traerá mañana,
o que habrá dejado el hoy.

No hay porqué preocuparse,
el pasado se quedo conmigo,
el presente se lleva mis ganas,
y el futuro...
el futuro ya es ahora.
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Metáfora .1.

El simple día es la metáfora.
Mientras me pregunto si estás, camino bajo el sol y su fija intención me cega; porque sabe que puedo ver, porque sabe que la idea de no hacerlo más, me atormenta.
Y vuelvo a hacerme la misma pregunta... esa que ya sabemos, y veo de nuevo al cielo adivinando mi respuesta, porque ella brilla burlándose, se jacta de que puede más que yo, y me da la negativa.
Camino con los pies descalzos, y cuando piso verde, tu mano me jala y con anticipación morbosa piso para que me duela, sabiendo que no hay mejor dulce del que viene implícito en tus palabras, sabiendo que no hay dolor más grande que caminar por estas mismas piedras.
Así duele, las nubes bailan alrededor mío, y me sonríen. Llegas, me tocas la espalda, guiñes esa mentira otra vez, pero aquí estoy para eso.
Yo misma me busqué la metáfora, y tu mismo encontraste el día.