Descripción del lugar:
  La estancia se encuentra a unos dos kilómetros de la ruta que conduce a la ciudad de Rafaela. El campo está surcado en su parte norte por un arroyo llamado "Las Prusianas".
.Este arroyo arrastra gran cantidad de residuos industriales, provenientes de una curtiembre y de una fábrica de explosivos. Además, presenta en una de sus márgenes un espeso monte de espinillos.
.El testigo se hallaba ubicado entre el monte y el citado arroyo, a unos 20 metros de la orilla.

Descripción del hecho:
.Debido a que el campo había sido recientemente adquirido, se debían tomar todos los recaudos necesarios a los efectos de resguardar la seguridad del cultivo y del ganado, y la posibilidad de utilizar el arroyo como aguada natural para los animales.
.Es así como en las primeras horas de la mañana del día 13 de Febrero, llega al campo acompañado del mediero y de un veterinario de la ciudad de Santa Fe. Con gran dificultad penetran en un sector donde el monte es muy espeso y se sitúan a un costado del arroyo en donde se dividen; el mediero revisa los alambrados, el veterinario sigue el curso del rio a los efectos de encontrar una aguada natural para la hacienda. El testigo, dado su cansancio decide esperar su regreso.

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.Una vez solo, siendo aproximadamente las 12,15 hs se sienta a descansar y beber un poco de agua. En ese instante observa hacia el arroyo, a unos 25 metros de distancia, una figura aparentemente humana; se para y camina unos pasos para observarlo mejor, quedando sorprendido e inmovilizado al percatarse que no se trataba de un ser humano.
.Invadido por una paz y armonía casi perfectas, el testigo pierde la noción del tiempo y advierte que el ser tenía una apariencia totalmente humana. Su vestimenta consistía en un traje enterizo como el de un esgrimista, de color blanco metálico, adherido al cuerpo, pies, manos y cabeza, sin llegar a taparle el rostro, a la altura de las rodillas, hombros, cuello, codos y cintura, presentaba 3 anillos a modo de articulaciones, aparentemente para facilitar su movilidad; este atuendo se complementaba con una mochila similar a la de los astronautas, sin más detalles apreciables, excepto por una prolongación que emergía de la parte inferior derecha de dicha mochila, en cuyo extremo aparece una especie de apéndice, a modo de "palo de golf", según palabras del propio testigo, además observó que esta suerte de manguera se introduce en el arroyo para presuntamente absorber agua. Para llevar a cabo esta tarea el ser debe inclinarse levemente; al finalizar la operación la manguera se retrotrae.
.Luego el ser gira hacia su derecha, con "movimiento mecánico", quedando así de frente al testigo; comienza a desplazarse, dando pasos cada vez más elásticos y suaves, en su trayectoria llega a situarse a unos 10 metros del testigo; este observa que además de su extraña forma de desplazarse, lo hacía como si fuese sobre un colchon de aire, los pastos se aplastaban y se abrían a su paso.
.El testigo destaca en repetidas oportunidades que a pesar de la proximidad a la que observa el ser no logra distinguir su rostro, como tampoco si lleva guantes en sus manos, por lo que no puede diferenciar las características de las mismas. Lo más llamativo para el testigo es la indiferencia del ser a pesar de su proximidad.
.Luego se introduce en el espeso monte de espinillos, los que se comportan de igual forma que los pastos, abriéndose a medida que avanza y cerrándose al pasar. Es importante destacar no solo esta extraordinaria anomalía sino también las características de esta vegetación que al ser resistente y con espinas, causarían normalmente algún tipo de desgarro en su ropa como así también heridas de consideración, hecho que según el testimonio no ocurrió.
.Un detalle que no debemos olvidar es que el testigo reiteradamente señaló que en ningún momento percibió anomalías como ser luces, ruidos, objetos o naves.
.Luego de lo ocurrido, al regresar el mediero y el veterinario que se habían separado para revisar el alambrado perimetral, uno, y una posible aguada natural, el otro, el testigo no les comenta nada de lo que acaba de ocurrirle, pero si les inquiere sobre si han observado algo extraño desde el lugar en donde se encontraban, el veterinario le responde que desde la aguada notó que los animales huían precipitadamente hacia el sur, es decir hacia el lado opuesto al encuentro. Concordando con el silencio absoluto notado por el mediero y el testigo.
.Esta no es la única observación de un fenómeno de este tipo; ya que antes de la adquisición del campo por parte del testigo, este reporta haber avistado una nave esférica sin protuberancia alguna, de color plateado como una esfera de "ruleman", según sus propias palabras. Este avistaje ocurre pasado el mediodía con el sol brillando a pleno y su luz reflejando en dicha esfera; a mediados del mes de Octubre del año 1979, es observado por el veterinario, el mediero y el anterior dueño del campo.
.Con posterioridad al caso LAS PRUSIANAS, del 13 de Febrero de 1980, hay otro encuentro del tercer tipo, en el cuál el testigo es un menor de edad y disminuido mental. Este dice haber presenciado el aterrizaje de una nave esférica con luminosidad propia, blanca y muy brillante, que al principio no le dejó ver formas definidas, luego observa que descienden seres de características similares al ser del arroyo.
.Según dibujos realizados por el propio testigo, aparentemente estos recogían muestras de minerales y vegetales.
.Con posterioridad a los hechos, el menor quedó con graves disturbios mentales.
.Hechos como este e inclusive efectos fisiológicos sobre animales, disturbios magnéticos sobre elementos electrónicos, calcinación de vegetales, efectos posteriores en los testigos, carga electrostática en los mismos, y todo esto sumado al miedo de los empleados del campo que literalmente "huían" del lugar, aludiendo lo extraño que era todo por allí.
.Siguiendo los pasos lógicos en la presentación de un caso, ahora le tocaría el lugar a la conclusión de los hechos, pero esto se nos hace sumamente difícil debido a que los avistajes y encuentros no son sólo los mencionados sino que van más allá de un simple contacto con lo desconocido. Hay silencios que dicen mucho, testigos que quizás necesitan tiempo para decidirse a hablar de íntimos acontecimientos que sin duda sumarán evidencias sobre la realidad de un fenómeno latente y en permanente evolución, y aunque no lo querramos ver forma parte de la vida diaria de los hombres.
.Seguirán los prejuicios y las excusas, pero el fenómeno siempre se encargará a golpe de evidencias de recordarnos su presencia. Dependerá de nuestra apertura mental y la tenasidad de los investigadores para entender este llamado que parece perderse en el tiempo y sin embargo con otros nombres se renueva todos los días.