Confirman nueve invasores heridos en ataques iraquíes

Nueve soldados norteamericanos resultaron heridos hoy en dos ataques contra los invasores que tuvieron lugar en la capital de Irak, Bagdad, y en la localidad de Ramadih, al oeste de esa urbe.

La radio árabe citó un comunicado del ejército estadounidense que notificó la acción que tuvo lugar en la principal urbe y que consistió en el impacto de una carga explosiva disparada contra un vehículo de combate.

Además de los dos estadounidenses heridos en el ataque murió un ciudadano iraquí ajeno al asunto, dijeron testigos del suceso.

Por su parte, el mayor norteamericano Scott Patton adelantó una versión del acontecimiento, en la cual se dejó entrever que los soldados lesionados serían tres.

Según Patton, al parecer, un cohete del tipo RPG fue disparado contra el vehículo en un área residencial a las 10:00 horas de Bagdad (06:00 UTC).

Los testigos describieron que un desconocido lanzó una granada con el blindado estadounidense, uno de sus ocupantes resultó herido en una mano y otro en un pie.

De acuerdo con esas fuentes, la reacción de la tripulación del vehículo fue disparar demencialmente en todas las direcciones, sin un blanco preciso.

Un coche que pasaba cerca fue acribillado y su chofer posiblemente muerto, pues desde donde se podía contemplar el individuo se hallaba inmóvil sobre el volante.

Poco después, medios de prensa occidentales con base en la capital iraquí afirmaron que el conductor del vehículo, un civil, pereció al recibir un balazo en la cabeza.

Respecto a ese tema, el mayor Patton rechazó hacer comentarios.

Una muestra del grado de inconformidad ciudadana con la ocupación anglonorteamericana es que los soldados debieron abandonar el blindado atacado, acto seguido vecinos de la zona le lanzaron gasolina y lo incendiaron.

Cuando el refuerzo llegó a ese sector de Bagdad, el transporte castrense aún ardía.

Mientras que en Ramadih, a un centenar de kilómetros al occidente de la capital, otro vehículo fue blanco de una granada propulsada por cohete, disparado posiblemente desde una moto.

También se hizo una referencia pública a que la explosión escuchada alrededor del móvil fue causada por una mina escondida en la entrada de la localidad, de la provincia de Al Anbar, en su momento considerada un bastión del ex presidente Saddam Hussein.

El ataque provocó heridas a seis soldados norteamericanos de la dotación del blindado, que cumplía una misión de patrulla con otro transporte.

Un vocero del Comando Central de las fuerzas invasoras informó sobre el particular ocurrido al final de esta madrugada, pero no ofreció otros detalles.