17 de Junio, 2002 Información de Unión Radio.

Comienzan maniobras para reforzar avance de la OTAN en el Cáucaso

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La OTAN y Georgia comenzaron hoy unas maniobras encaminadas a repeler un eventual ataque terrorista en el flanco este de Europa, garantizar la integridad territorial de este país del Cáucaso y proteger las rutas energéticas del Caspio.

Medio millar de soldados de 15 países abrieron unos ejercicios militares calificados como claves para los intereses de la OTAN en el Cáucaso, llave del mar Caspio y sus ricas reservas de gas y petróleo, y balcón privilegiado sobre Oriente Medio y Rusia.

Los ejercicios, comandados por un general turco, durarán hasta el 28 de junio, son los segundos de su tipo en la región e incluyen efectivos de Canadá, Grecia, Gran Bretaña, Hungría, Estados Unidos y Turquía.

En las maniobras "Cooperative Best Effort-2002" también hay militares de Georgia, el anfitrión, y de otros Estados incluidos en el programa de la OTAN Asociación para la Paz, como Armenia, Azerbaiyán, Letonia, Moldavia, Rumanía, Bulgaria y Austria.

En los ejercicios no hay representación rusa, pese al nuevo rumbo de las relaciones entre la OTAN y Moscú marcado por la cumbre de mayo en Roma, gesto interpretado como una muestra del malestar del Kremlin ante estos ejercicios.

Las maniobras se centran en Vaziani, una de las bases que poseía Rusia en Georgia antes de que esta república del sur del Cáucaso decidiera que su futuro en tan estratégica región estaba de lado de Occidente y no de su compañera de viaje ex soviético.

La elección de Vaziani no gustó en Moscú, pues hace un año, el 29 de junio, allí era arriada la bandera de Rusia e izada la georgiana, según los acuerdos de Estambul firmados en 1999 que fijaban la progresiva retirada rusa de Georgia.

Uno de los guiones que desarrollarán las maniobras imagina que la OTAN acude a defender a Georgia bajo mandato de la ONU al desatarse en este país una guerra que pierde el ejército nacional.

Este simulacro ha recordado a los rusos y sus aliados de Abjasia el conflicto que a principios de los años noventa llevó a la secesión de hecho de esta región occidental de Georgia con ayuda de Moscú, que sigue recibiendo las críticas de Tiflis por impedir la reunificación.

Estos recelos se añadieron al descontento causado en el estado mayor ruso por la llegada en abril y mayo de decenas de instructores norteamericanos para entrenar tropas de elite georgianas en la lucha antiterrorista.

El mando de estos instructores señaló a finales de mayo que el objetivo del programa, que supone la primera presencia militar continua norteamericana en el Cáucaso, es apoyar "la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Georgia".

El entrenamiento que desarrollan estos "Boinas Verdes" es "una especie de etapa preparatoria del ingreso de Georgia en la OTAN" al igual que las maniobras abiertas hoy, según Yemal Gajokidze, secretario adjunto del Consejo de Seguridad Nacional georgiano.

El presidente georgiano, Eduard Shvardnadze, en una entrevista a la Radio Nacional, alabó hoy las maniobras y subrayó que la OTAN es para Georgia un aliado creíble, "que presta y prestará ayuda para fortalecer la estabilidad regional".

Tres de los objetivos de las maniobras apuntan al logro de esa estabilidad: luchar contra amenazas terroristas en la región, garantizar la soberanía georgiana y proteger los oleoductos y gasoductos del Caspio.

EEUU ha denunciado que en el desfiladero georgiano de Pankisi, fronterizo con la rusa Chechenia, podrían ocultarse miembros de la organización terrorista Al Qaeda huidos de la campaña afgana.

Los servicios secretos georgianos han añadido Abjasia como posible escondite de integristas, de ahí el temor en Sujumi (capital de la región) de que estos pasos de la OTAN y EEUU lleven a apoyar las reclamaciones de reunificación de Tiflis.

De mayor interés para Washington y Bruselas es que maniobras de este tipo les permiten reconocer el terreno por el que un día pasará el oleoducto Bakú-Ceyhán, que se espera que desde 2004 transporte un millón de barriles de crudo diarios de los yacimientos de Azerbaiyán hasta esa terminal de crudo en el sur de Turquía.

El Bakú-Ceyhán es la mayor apuesta europea para conseguir el crudo del Caspio sin utilizar oleoductos rusos y en su tendido, que debería comenzar este año, se contraponen los intereses de Bruselas, Moscú, Washington y los países del Golfo Pérsico.

La seguridad de Georgia es también clave para la protección del suministro de gas ruso hacia Turquía y su puerto de Supsa es de momento la única salida del petróleo azerbaiyano hacia Occidente sin pasar por Rusia y por tanto vital si fracasa el Bakú-Ceyhán.

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Eleone:

Bien, el artículo ha refleja muy bien la situación. A la semana siguiente, Rusia y algunos de sus aliados también hicieron "maniobras contra el terrorismo". Serguei Ivanov se iba a una torre petrolífera y los demás tenían que "protegerlo", porque esa torre podía ser un "blanco apetecible para los terroristas". Ivanov divertido, comentaba de un modo similar a la prensa tan "inocente maniobra".