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HISTORIA DE LA PROCESIÓN DEL CORPUS

Históricamente la festividad del Corpus Christi en Valencia, ha sido y está considerada como la "Fiesta Grande" de la ciudad, desde el ultimo tercio del siglo XIV hasta finales del siglo XIX, la cual la celebra llena de esplendor y solemnidad. Durante este periodo, la fama y renombre de nuestras Rocas y la fiesta del Corpus Christi se extendió rápidamente tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.

Fue en el año 1263 cuando el Papa Urbano IV instituyó la fiesta del Corpus Christi, por medio de la bula “Transiturus hoc mundo”, extendiéndola por toda la cristiandad. Su celebración quedó fijada en el primer jueves tras la octava de Pentecostés, motivo por el cual no tiene una fecha fija y su celebración varia entre el 21 de mayo y el 24 de junio (actualmente se celebra el domingo siguiente), celebrando desde esos momentos una procesión, pero de las llamadas claustrales por celebrarse dentro de las Iglesias. Dicha bula fue confirmada posteriormente por el Papa Clemente V en el Concilio General de Vienne en 1311 y por el Papa Juan XXII en 1317. Con ello, la festividad del Corpus se convirtió junto a la Pascua y la Navidad en el tercero de los grandes acontecimientos litúrgicos del año. Para ensalzar dicha fiesta el entonces obispo de Valencia entre los años (1348-1356) Hugo de Fenollet es quien el 4 de Junio de 1355 promueve de acuerdo con el cabildo catedralicio, los jurados de la ciudad, el justicia y prohombres de Valencia, la creación de una procesión que recorriese las calles de la ciudad. Ordeno que en la fiesta del Corpus Christi una “general e solemnial processó sia feta, en la cual sien e vajen tots los clergues e religiosos e encara totes les gents de la dita ciutat” .

El pregón de anuncio de esta primera procesión, consta en el Manual del Consell, fue dispuesto por los jurados el 8  de agosto de 1416, anunciando al pueblo que en honor y reverencia al Corpus, se realizara esta procesión. En dicho pregón se establecía también el recorrido de la misma y que esta debía iniciar en la catedral.

Queremos desde aquí destacar que el obispo Hugo de Fenollet durante su pontificado en Valencia bautizó en la Iglesia de San Esteban el día 23 de Enero de 1350, al hijo de Guillem Ferrer que posteriormente seria el famoso San Vicente Ferrer. También fundó la escuela mayor de canto en 1351, y que muy posiblemente fue el primer conservatorio de música creado en Valencia.

Ante dicha festividad, en dicho bando también se pedía al vecindario que limpiasen las calles por donde iba a pasar la procesión, adornasen sus casas y tirasen hierbas aromáticas como homenaje al Santísimo.

Esta procesión como tal solamente duró un año, ya que en 1356 falleció Hugo de Fenollet, y ante las amenazas bélicas del rey castellano Pedro el Cruel, se decidió que esta se suspendiese, acordándose que la festividad se celebrara alternativamente en una parroquia de la ciudad.

En el año 1372 siendo obispo de la diócesis el Cardenal Jaime de Aragón, nieto del Rey Jaime II y primo hermano de Pedro "El Ceremonioso" es cuando de nuevo resurge y es a partir de ese momento cuando la festividad empieza a tomar auge y solemnidad, añadiéndose a la fiesta la música con los instrumentos de la época, así como los bailes o danzas de las cuales hoy algunas aun perduran, así como de los numerosos gremios que existían con sus banderas y llevando una vela de ocho onzas cada una de las personas pertenecientes a cada gremio.

Tal era el esplendor de la procesión que se tienen noticias que en el año 1401 Blanca de Aragón hace que se repita. El rey Martín el Humano y la reina Juana de Sicilia acuden a presenciarla, posteriormente en 1414 durante la coronación del Rey de Aragón Fernando de Antequera desea que esta se represente en Zaragoza, en 1415 es el Papa Luna quien asiste a la misma, en 1427 después es solicitada por el Rey Alfonso el Magnánimo, en 1466 la presencia el rey Juan II de Aragón, los Reyes Católicos en 1481, posteriormente en 1501 la Reina Juana de Nápoles, nuevamente en 1528 el emperador Carlos V, en Enero de 1585 por Felipe II, en 1612 por el Rey Felipe III con motivo de sus bodas reales, el Príncipe de Angulema en 1815, Fernando VII en 1827, la reina Isabel II con su hijo el futuro Alfonso XII en 1858, en 1888 la presenció Alfonso XIII y de nuevo finalmente en el año 1893 con motivo del primer Congreso Eucarístico Nacional.
 

No siempre se ha celebrado la procesión en la tarde del jueves. Hasta 1506 se hacia por la mañana pero, en ese año se acordó que se hiciese por la tarde. En junio de 1677, el monarca Carlos II ordena que se volviera a realizar por la mañana para evitar ofensas al Sacramento. El consistorio municipal protestó por dicha medida y el 5 de julio del mismo año, otra cédula real prescribía que la procesión comenzara a las cinco y que finalizase a las nueve.

 

La presencia de las instituciones gremiales en la procesión fue constante hasta 1835. Por otro lado, tras la desamortización de Mendizábal en 1836, la supresión de muchas comunidades religiosas que antes participaban en el Corpus Christi abriría las puertas al paulatino declive de la procesión; a pesar de este vacío dejado por los gremios y por las ordenes religiosas, lo llenaron las instituciones de beneficiencia y caridad como eran el Colegio de Huerfanos de San Vicente Ferrer, Casa de la Beneficiencia, Asilo de San Juan Bautista, etc.

Con la proclamación de la II República, la fiesta se limitó nuevamente a que esta se realizase en el interior de las iglesias, haciéndose desde 1931 hasta 1935.

Acabada la guerra civil, los Ayuntamientos "de la victoria", haciendo caso omiso a lo que significaba la tradición valenciana, la centraron solamente en su parte religiosa, y quedando representada por les Banderoles, els Gegants y els Nanos, els Cirialots, los Apóstoles y los Evangelistas, así como algún que otro personaje más.

 

Finalmente es a partir de la década de los años 50 al 60 cuando un grupo de valencianos que se resisten a la perdida de la tradición en la procesión, encarnan los personajes antes citados, llegando década tras década a la formación del Grup de Mecha y a continuación la Asociación Amics del Corpus de la Ciudad de Valencia, retomando el esplendor que la Procesión del Corpus tuvo en sus inicios.