Miles de fieles acompañaron ayer el último recorrido procesional de la imagen del Señor de los Milagros por las calles céntricas de Lima, que incluyó la visita a los hospitales San Bartolomé y Arzobispo Loayza.

Previamente al inicio del recorrido el arzobispo de Lima, monseñor Juan Luis Cipriani, celebró a las 7 a.m. una misa en Las Nazarenas.

El hospital San Bartolomé, en la avenida Alfonso Ugarte, recibió a la imagen con globos, lluvia de flores, rezos y declamaciones. Luego la procesión cruzó esa avenida y avanzó hacia el hospital Arzobispo Loayza.

El ingreso al hospital, como era comprensible, fue restringido. Miembros de la hermandad, así como las cantoras, sahumadoras y los músicos recorrieron el interior del nosocomio. Enfermos, familiares, autoridades, cuerpo médico y personal del nosocomio expresaron su fe al Cristo de Pachacamilla.

Una veintena de alfombras de flores testimoniaba al paso del Señor de los Milagros, la devoción que hay en cada uno de los pabellones: rehabilitación, odontoestomatología, nefrología, cardiología, geriatría.

Durante todo el recorrido una de las cuadrillas estaba atenta para intervenir ante cualquier emergencia. Es la número 16, fundada el 5 de agosto de 1959 e integrada por 214 hermanos cuyo jefe médico es Marco Villanueva. Apoyada por unidades del ministerio de Salud y la Fuerza Aérea, cuenta también con la colaboración de 14 médicos.