Cierran Filas los Cuadros Primarios
Un artículo del Dr Xavier
Gamboa Villafranca
Referencia bibliográfica:
Gamboa Villafranca, Xavier: “Cierran filas los cuadros primarios”, OP.
CIT. Revista catorcenal independiente, No. 3. Marzo 15-19 de 1981. México, DF.
México
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Villafranca
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Luego de
haberse llevado a cabo en Querétaro (1978), Acapulco (1979) y Veracruz (1980),
los días 4 y 5 de febrero pasados se celebró en Hermosillo, Sonora, la IV
Reunión de la República.
La
reunión fue organizada por los titulares de la Secretaría de Gobernación y de
la Coordinación de Estudios Administrativos de la Presidencia de la República.
A ella asistieron los organizadores, el Presidente López Portillo y sus
colaboradores directos, los gobernadores de los estados de la Federación, el
jefe del Departamento del Distrito Federal, así como un representante de los
presidentes municipales del país.
El
objetivo formal del evento consistió en reunir a los responsables de los tres
niveles de gobierno en un esfuerzo común de información, retroalimentación,
evaluación, detección de problemas y definición de líneas de acción a seguir.
Ello, con respecto a los ejes de la actividad que el Poder Ejecutivo –como
totalidad orgánica. Despliega y debe efectuar, en materia de crecimiento
económico, mejoramiento social y desarrollo político del país.
Indudablemente,
la reunión del cuadro primario de mando del aparato de gobierno del Estado
mexicano cobra enorme relevancia en la actualidad, dado el peculiar momento
político interno, que vive el país y la delicada coyuntura internacional. ¿Cuál
fue el objetivo real de la Reunión? ¿Qué importancia tiene? Intentemos
responder a ambas interrogantes.
Al
inaugurar el evento, el Presidente José López Portillo sostuvo que el objetivo
de la Reunión era fundamentalmente técnico: analizar y evaluar el camino andado
y, en función de ello, prever y normar el futuro. Puesto en sus propias
palabras:
“Iniciamos
el análisis y evaluación de los trabajos que las autoridades constituidas de
las soberanías del pacto federal han cumplido, y las posibilidades y
perspectivas que en los tiempos por venir aparecen en el futuro d el pueblo de
México y para servirlo”.
A
su vez, el Secretario de Gobernación, en su intervención en la ceremonia
inaugural, agregó elementos clarificadores en cuanto a las verdaderas
finalidades perseguidas por la Reunión. Afirmó que se trataba esencialmente de
saber qué y cómo hay que hacer cambios en el devenir legislativo, político,
institucional e ideológico del país:
“La
Reunión de la República no es coro de lamentaciones ni escenario para realizar
estériles discusiones o dirimir pequeños intereses; este foro refleja a la
nación en su vigor, en su derecho, en sus instituciones y en su sólida
ideología, evaluando para consolidar lo útil y modificar lo que sea necesario
para que México se eleve en la medida de nuestras más caras aspiraciones”.
En
su turno, el Coordinador de Estudios Administrativos de la Presidencia fue
todavía más claro. Para él, la Reunión tiene el objetivo de fortalecer el
federalismo, pero entendiendo por esto la fuerza con que el aparato de gobierno
debe contar, para enfrentarse exitosamente a las presiones internas y externas
que recibe:
“Actualmente,
es necesario enfrentarse al privilegio de quienes pretenden desde dentro y
desde fuera, imponer sus intereses individuales, regionales o de grupo, por
encima de los intereses superiores de la nación como un todo... Ese es el
concepto de federalismo que debemos esforzarnos por entender en el presente, y
a eso hemos venido...”
Al
clausurar la IV Reunión dela República, el Presidente López Portillo –aludiendo
a las críticas que recibió la Ley de Fomento Agropecuario- llamó a un debate
nacional en torno a si debe o no mantenerse el sistema privado de tenencia de
la tierra y así el gobierno del Estado mexicano debe continuar con su posición
de principal conductor de la historia del país, pero no en beneficio de una
sola clase.
El
lic. López Portillo aclaró su posición personal: es necesario que el Poder
Ejecutivo continúe realmente con las facultades que hasta ahora ejerce, y para
ello es imprescindible que continúen existiendo las formas mixtas de propiedad
–privada, pública y social- previstas por la Constitución General de la
República Mexicana. Textualmente:
“En
lo personal mantendré la sabia fórmula de la Revolución Mexicana, porque es el
resultado de su historia y de su experiencia política, mantiene abiertas las
posibilidades de todas las formas de tenencia y el reconocimiento de la
capacidad de sus instancias gubernamentales para hacer cumplir la función
social de todas y cada una de ellas, y mantener viva la posibilidad de nuestro
Estado- Nación como punta y flecha de nuestra historia”.
Las
cuatro intervenciones, consideradas en conjunto, permiten ubicar el trasfondo
de la celebración de la Reunión y los objetivos realmente perseguidos con su
realización. Veamos algunas tesis al respecto:
1) El objetivo de fondo perseguido al reunir, en esta
ocasión, a las más altas jerarquías de los tres niveles de Gobierno existentes,
tiene una especificidad que lo diferencia claramente de las tres Reuniones
anteriores.
2) El Jefe del Ejecutivo
Federal ha pretendido que los principales timoneles del Gobierno del
Estado mexicano reciban un mensaje político, que consta de las siguientes partes:
a) El sistema presidencialista debe mantenerse,
b) Existen fuerzas, ubicadas dentro y fuera del Gobierno,
del Estado y del país, que requieren ser combatidas racionalmente y de manera
legitimada por el aparato de gobierno
en su conjunto. Resulta imprescindible luchar contra ellas, porque están
interesadas en el ,debilitamiento: de la fuerza del Presidente de la República
;y penadas en lograr- en reducir la presencia gubernamental en la conducción de
los destinos del país,
c) La lucha
será tan ardua, y la presiones
que ya se están recibiendo son tan fuertes, que es necesario resolver a ,la
brevedad posible las contradicciones
existentes en el seno del cuadro primario de mando del aparato de gobierno. Hay
que “cerrar filas”, y ante ello no se
admitirá la menor demora y
d) El presidencialismo y el papel de rectoría del gobierno
serán mantenidos,. aún a costa de posibles modificaciones en algunas de las
restantes características básicas
del Estado mexicano. Y para que no
exista la menor duda al respecto aquí
pone el Presidente el ejemplo. ¡Llama personalmente a un debate público, que permita determinar si
existe el consenso necesario para emprender la desaparición de la propiedad
privada
(obviamente, sobre los medios de producción) en la sociedad
mexicana!
3)
José López Portillo ha querido iniciar una gran movilización interna, con el
aparente propósito de ampliar el sustento social de acción presidencial -en
particular- y gubernamental -en
general-. El asunto de la discusión sobre un aspecto de tanta importancia como
el de la propiedad privada, no puede tener un propósito esencialmente diferente
al de hacer concesiones secundarias a la derecha y a la izquierda en aras del fortalecimiento de la
institución presidencial, del papel de conducción gubernamental y de la
autonomía relativa del Estado mexicano.
4)
A nivel táctico, aparentemente el Presidente y sus asesores estiman conveniente
auspiciar el inicio de la moviIización popular, con el debate público en torno
a la persistencia de. la propiedad privada, porque consideran que es factible
irla orientando a la toma de posiciones ideológicas de cada vez más
nacionalistas, hasta culminar, -en junio de este año en el momento de la
celebración de la Reunión Norte-Sur. Para estas fechas, el nacionalismo
mexicano tendrá un apoyo mucho mayor que el que recibe en la actualidad .
5) Aparte de desempeñar la función de ámbito en que el presidente de la República ha transmitido un mensaje crucial a sus subordinados, y de punto de partida de una intensa movilización social, la IV Reunión de la República ha ocupado un lugar importante en los preparativos estatales para la sucesión presidencial. En efecto en el transcurso del acto conmemorativo de la promulgación de la Constitución de 1917, el Director General de PEMEX habló, a nombre de los tres poderes de la Unión, de los problemas fundamentales del país, de alternativas para su solución y del futuro de México. La representación de que fue investido y el contenido de los temas que trató en su discurso, dejan pocas dudas a que él es uno de los posibles candidatos que el PRI podría postular, para ocupar la presidencia de la república en el período 1982-1988.
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