Primavera: Quede absorto cuando supe que desistias a mí, aquella época en que todo rayaba a lo burdo, lo pernicioso era un gusto, lo futil era lo máximo para tí. Yo, casi ciego y creyendo todas tus palabras; te amé. En vísperas de un furor ineluctable, dejaste volar tu imaginación, para dar razones de nuestra disgregación. Entre villana y dulce; evadiste tus sentimientos para darle paso a tu cerril venganza. Y después,las lágrimas me visitaron en tu ausencia y centelleaban por mis pómulos, mostrándole al mundo mi enorme dolor; la locura llamaba a la puerta para tomarme en sus brazos y llevarme con los insensatos, esta actitud negligente -no quiero borrar los hermosos momentos de la memoria -me dije-, pero esta actitud no duraría toda la vida, en algún instante me abandonó pero dejó rastro de su visita. -!Que estúpido! -pensé-, como puede abatirme el ánimo tremenda tontería, pero razoné por segunda vez, "es imprescindible". Ahora he enterrado tu nostalgia; eres quién en los dias de invierno me trajo calor, una tarde solitaria me alojó en su compañía, quién tiene una forma elocuente y misteriosa de apaciguar el vacío, de saciar mi sed, de ocupar el lugar inefable que todos llevamos en nuestro interior... y que decir de vivir en tu memoria, ese lugar adonde algún ánima desearía habitar; sólo para deidades, tan hermoso, tan secreto, que gran lugar... aunque en materia ya no eres mía, quiero agradecerte por enseñarme a tocar las estrellas por dentro y por darle otro sentido a mi vida, otro sentido a la vida.
