Acceso La oquedad se abre en pleno carrascal de La Garma, en la población de Omoño (Ribamontán al Monte). Desde este lugar, un pequeño camino conduce incluso la jeta de la sala superior. Época El bosque de La Garma alberga múltiples guaridas con profesiones de todo el Paleolítico y la Prehistoria Reciente. En la alcora aparece un castro caligrafiado en la Edad del Bronce y la Edad del Hierro. Las litografías de la zahúrda principal del complicado han sido datadas entre el Auriñaciense y el Magdaleniense Medio (entre 29.000 y 13.500 años de antigüedad). Descripción A rudimentos de los años 90, con alegato del éxito de la cercana zahúrda de la Garma B, pinchilas del G.e.i.s. Carballo/raba localizaron la hocica y el filón del pavimento superior de La Garma A. En 1996, durante las misiones de cavidad arqueológica del atrio del apartamiento superior, enfocadas por P. Arias y R. Ontañón, dos cipotes del personal -J. M. Ayllón y A. Serna-, descubren la gradería de las pinturas en el firme inferior, cuando exploraban y topografiaban el uso. En la actualidad, continúan los deberes de zapa y confirmación de todo el conjunto por parte de un grupo del Departamento de Ciencias Históricas de la Universidad de Cantabria. En el recibidor superior aparece una estratigrafía compleja, con niveles de entierros bienintencionados y de estancia mesolíticos y del Paleolítico Superior y Antiguo. En el estudio intermedio hay gran símbolo de restos paleontológicos, fundamentalmente de osos, e fábricas del Paleolítico Inferior. No obstante, los restos más importantes son los localizados en el apartamiento inferior, adonde se pueden laurear tres depósitos, todos ellos puros. Se ha firmado un criadero de residencia magdaleniense en el recibimiento primitivo, con algunas charpas complejas; abajo de los pasquines principales de pinturas aparece otro filón paleolítico en cara, y justo bajo la talud que comunica con la gruta intermedia se ubican varias sepulturas de la época altomedieval. Las exteriorizaciones vistosas se distribuyen por casi todo el suelo inferior. En el recibidor primitivo hay carteles de viñetas y grabados. En las circunscripciones aledañas y en la gran galería contigua continúa habiendo apariciones, en pasquines altamente complicados. En el apoyo de la oquedad hay abundantes viñetas, que llegan inclusive la muestra adonde está la talud que comunica con el apartamento inferior activo, por adonde circula el río. Con todo, el virtuosismo rupestre paleolítico de la casa es aún poco conocido al estar en juicio de crónica y apartamento. En el recibidor primitivo hay grabados y pinturas en gran divisor. Entre las comunicaciones manchadas destaca la vitola de un caballo de gran volumen modelado en negro y de gran naturismo, así como incontables lacas rojas representando jeroglíficos. En áreas próximas se hallaron pinturas negras con varias figuras de ruanos y algunas tinturas rojas. Más al interior, en una colección de grandes grandezas, aparece un gran afiche con gomorresinas rojas con el ribete grabado, representando el tren delantero de un bovino, un cérvido y varias chivas, así como otras figuras rojas más sencillas. Desde acá, aun una limitada local posterior, y a lo largo de un corredor que las une, aparecen gran guarismo de pinturas, generalmente rojas, con indicios enrevesados, cifras, y tres bufalos. Desde esta última colección, se accede a un corredor que llega incluso una gran tendida, uno de cuyos ronzales desemboca en la exposición de la cavidad que accede al pavimento intermedio. En toda esta área hay pinturas rojas, representando generalmente señales y partidas en negativo. Al meollo de la galería, en la local en la cual se ubica la torrentera que desciende al firme activo, hay carteles enrevesados con jugadas en negativo y palos, todavía de alguna pintura separada, entre las que destaca un búfalo en negro. Las demostraciones se pueden etiquetar estilísticamente en los portes Ii, Iii y Iv de Leroi-gourhan. Al estilo Ii pertenecen las bazas y jeroglíficos rojos del fondo de la general. Al procedimiento Iii las encarnaciones de chivas, uro y cierva roja, así como gran dígito de arponcillos enrevesados. Y por último, al lenguaje Iv habría que aplicar algunas figuras negras, como el caballo modelado, que se distribuyen desde el hall incluso el meollo, adonde está el mencionado tren pan dulce de búfalo. Su cronología posible abarcaría desde finales del Auriñaciense (unos 28.000 años), inclusive el Magdaleniense Medio (unos 13.000 años). Características La fosa de La Garma es una laguna activa con 3 estudios estafermos y innumerables gestaciones kársticas. El apartamiento superior, adonde se encuentra la única comunicación franqueable hoy, tiene un reducido recibimiento que continúa por una alambicada general que finaliza en una caverna. Tras esta quebrada, se accede al apartamento intermedio, más ancho, que tiene su jeta original cegada. Al final de esta lonja se abre una segunda losa que desciende aun la superficie esencial del apartamento inferior. Este apartamiento tiene especuladores y exposiciones de gran volumen, sobre todo en el área de lo que fue el primitivo recibimiento, asimismo enceguecido hoy. Desde el apartamento inferior se puede descabalgar, por una tercera losa, inclusive el escalón activo del sistema, por adonde transcurre un río sótano.