La dispersión de votos favorece a Marcelo Llanos

Marcelo Llanos. Ex Intendente de Libertador entre Febrero de 1994 y Diciembre de 1999.

Pasaron las internas. Y ahora vienen las generales. Y lo que supuestamente era una posibilidad, ahora ya es una realidad: El cuestionado ex intendente, Marcelo Llanos será candidato a la Intendencia. Así se expresó el electorado peronista en las internas. Y lo hizo, mas allá de la metodología, de manera contundente.

El resultado de la interna peronista le movió el piso a mas de un politico ledesmense. Sabido es la voluntad mayoritaria de los ledesmenses para dejar atras los fantasmas del pasado. Pero todos, o casi todos los referentes políticos reaccionaron como lo esperaba Marcelo Llanos: Asumiendo el papel de superheroe o pretendiendo erigirse en uno de ellos. Se lo paso en limpio. Cada politico en su interior tiene la aspiración de ser "el que le gane a Llanos". Ninguno se puso a pensar en otra cosa. Todos intimamente razonan en ese camino.
"Ahora nos veremos las caras. A mí no me va a ganar", fué la respuesta que se escuchó en boca de mas de un politico.

De ahí a transformarse en "candidato" hay solo un paso. Y ahí están. Dispuestos a desenvainar su discurso y protagonizar esta historia que se viene.

Y la verdad es que candidatos legitimados por una interna o por los afiliados a un partido, hay tres. Dos surgidos de una interna: Eda Romero de Bueno (UCR) y Marcelo Llanos (PJ). La otra candidata surgió de la decisión, seguramente en alguna asamblea del grupo politico que integra: Manuela Cabello de Borda (Movimiento Vecinal Independiente).

Del resto de los autoproclamados candidatos, nadie sabe quien los eligió. Estamos hablando de Cesar Argañaraz (Partido Municipal UNITE), Dario Melgarejo (PUL) o Juan Segovia (Adolfismo Ledesmense).

Para colmo de males, los perdedores de la interna peronista quedaron con tanta bronca que muchos de ellos demostraron su voluntad de ir por afuera del partido. Consensuarán un candidato?. Lo elegirán a dedo o llamarán a alguna asamblea para postularlo?.

Y si de misterio se trata, la indecisión que rodea al actual Intendente de la Ciudad, Javier Guzman (Movimiento Popular Ledesmense), quien, según sus propias palabras se encuentra evaluando su futuro. Lo que si estamos seguros es que del M.P.L. habrá un candidato, ya sea Guzmán o algún otro.

En consecuencia, la sumatoria llega a siete (7), sin contar al MORECI, al MPJ o a IZQUIERDA UNIDA que seguramente presentarán su candidato.

La consigna de todos o de casi todos es lo que en realidad pide el pueblo de Libertador, o por lo menos su gran mayoría: Que no gane Llanos. Y todos quieren ser los que lo logren.

Ahora bien, entre tantos candidatos y tantas voluntades, lo mas lógico de producirse es la dispersión del voto. Y allí, en ese aspecto, pequeño gran detalle, radica la posibilidad de triunfo de Llanos. Mientras mas candidatos se presenten, aumentan sus chances. En otras palabras, la diaspora de votos favorece a Llanos. Y esto parece no haber sido tenido en cuenta por quienes, día a día se siguen sumando a esta lista de probables candidatos, sin detenerse a pensar que, quizás ofreciendo una sola posibilidad, aumenten las chances de vencer. Un gobierno de coalición que permita la inserción de todos los sectores que integren ese frente o movimiento. Seguramente es facil pedirlo y dificil concretarlo, porque son muy pocos los politicos que haciendo una buena lectura de una elección, son capaces de dar un paso al costado y generar los espacios que permitan la conformación de un frente.

Solo el tiempo lo dirá. Si nuestros politicos se sobreponen al pecado del individualismo. O si entendieron lo que ocurrió a nivel nacional, en donde se dió esta historia. Todos contra un candidato, pero ese candidato ganó. Claro, luego había una segunda vuelta. Y entonces, se pudo revertir la historia. Acá no hay segunda vuelta. Acá, el 14 de setiembre habrá un Intendente electo. No habrá nuevas chances. Por eso, la propuesta de presentar una opción "Llanos vs. Mengano" o "Llanos vs. Perengano". Para ello, habrá que tener grandeza. Habrá que tener renunciamientos. Porque, ya lo dije, acá no hay segunda vuelta.

La historia nos dá muchisimos ejemplos. A nivel local, inclusive. Aún está fresco el recuerdo de como en 1993, tres proyectos individualistas (Guzman, Palavecino y Camaño), por pretender ser cada uno, una suerte de "vengador anónimo" fueron a una elección por separado; asi les fué. Entre los tres sumaron mas que Capellán. Pero el intendente fué Capellán. Simplemente porque no supieron, a tiempo, darse cuenta de que muchas veces es mas fructifero "aparcar hasta que amaine" y no servirle "inconciente" o "concientemente" al verdadero adversario.

Editorial | 23-Julio-2003

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