Capítulo 1Motivo de los proverbios 1:1 Los proverbios de Salomón,hijo de David, rey de Israel. 1:2 Para entender sabiduría y doctrina, Para conocer razones prudentes, 1:3 Para recibir el consejo de prudencia, Justicia, juicio y equidad; 1:4 Para dar sagacidad a los simples, Y a los jóvenes inteligencia y cordura. 1:5 Oirá el sabio, y aumentará el saber, Y el entendido adquirirá consejo, 1:6 Para entender proverbio y declaración, Palabras de sabios, y sus dichos profundos. 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. Amonestaciones de la Sabiduría 1:8 Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre; 1:9 Porque adorno de gracia serán a tu cabeza, Y collares a tu cuello. 1:10 Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, No consientas. 1:11 Si dijeren: Ven con nosotros; Pongamos asechanzas para derramar sangre, Acechemos sin motivo al inocente; 1:12 Los tragaremos vivos como el Seol, Y enteros, como los que caen en un abismo; 1:13 Hallaremos riquezas de toda clase, Llenaremos nuestras casas de despojos; 1:14 Echa tu suerte entre nosotros; Tengamos todos una bolsa,— 1:15 Hijo mío, no andes en camino con ellos. Aparta tu pie de sus veredas, 1:16 Porque sus pies corren hacia el mal, Y van presurosos a derramar sangre. 1:17 Porque en vano se tenderá la red Ante los ojos de toda ave; 1:18 Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas, Y a sus almas tienden lazo. 1:19 Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, La cual quita la vida de sus poseedores. 1:20 La sabiduría clama en las calles, Alza su voz en las plazas; 1:21 Clama en los principales lugares de reunión; En las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones. 1:22 ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis lasimpleza, Y los burladores desearán el burlar, Y los insensatos aborrecerán la ciencia? 1:23 Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras. 1:24 Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese, 1:25 Sino que desechasteis todo consejo mío Y mi reprensión no quisisteis, 1:26 También yo me reiré en vuestra calamidad, Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis; 1:27 Cuando viniere como una destrucción lo que teméis, Y vuestra calamidad llegare como un torbellino; Cuando sobre vosotros viniere tribulación y angustia. 1:28 Entonces me llamarán, y no responderé; Me buscarán de mañana, y no me hallarán. 1:29 Por cuanto aborrecieron la sabiduría, Y no escogieron el temor de Jehová, 1:30 Ni quisieron mi consejo, Y menospreciaron toda reprensión mía, 1:31 Comerán del fruto de su camino, Y serán hastiados de sus propios consejos. 1:32 Porque el desvío de los ignorantes los matará, Y la prosperidad de los necios los echará a perder; 1:33 Mas el que me oyere, habitará confiadamente Y vivirá tranquilo, sin temor del mal. Capítulo 2 Excelencias de la sabiduría 2:1 Hijo mío, si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti, 2:2 Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia, 2:3 Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; 2:4 Si como a la plata la buscares, Y la escudriñares como a tesoros, 2:5 Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios. 2:6 Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. 2:7 El provee de sana sabiduría a los rectos; Es escudo a los que caminan rectamente. 2:8 Es el que guarda las veredas del juicio, Y preserva el camino de sus santos. 2:9 Entonces entenderás justicia, juicio Y equidad, y todo buen camino. 2:10 Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, Y la ciencia fuere grata a tu alma, 2:11 La discreción te guardará; Te preservará la inteligencia, 2:12 Para librarte del mal camino, De los hombres que hablan perversidades, 2:13 Que dejan los caminos derechos, Para andar por sendas tenebrosas; 2:14 Que se alegran haciendo el mal, Que se huelgan en las perversidades del vicio; 2:15 Cuyas veredas son torcidas, Y torcidos sus caminos. 2:16 Serás librado de la mujer extraña, De la ajena que halaga con sus palabras, 2:17 La cual abandona al compañero de su juventud, Y se olvida del pacto de su Dios. 2:18 Por lo cual su casa está inclinada a la muerte, Y sus veredas hacia los muertos; 2:19 Todos los que a ella se lleguen, no volverán, Ni seguirán otra vez los senderos de la vida. 2:20 Así andarás por el camino de los buenos, Y seguirás las veredas de los justos; 2:21 Porque los rectos habitarán la tierra, Y los perfectos permanecerán en ella, 2:22 Mas los impíos serán cortados de la tierra, Y los prevaricadores serán de ella desarraigados. Capítulo 3 Exhortación a la obediencia 3:1 Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guarde mis mandamientos; 3:2 Porque largura de días y años de vida Y paz te aumentarán. 3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Atalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón; 3:4 Y hallarás gracia y buena opinión Ante los ojos de Dios y de los hombres. 3:5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. 3:6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas. 3:7 No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal; 3:8 Porque será medicina a tu cuerpo, Y refrigerio para tus huesos. 3:9 Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos; 3:10 Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto. 3:11 No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, Ni te fatigues de su corrección; 3:12 Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a quien quiere. 3:13 Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, Y que obtiene la inteligencia; 3:14 Porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, Y sus frutos más que el oro fino. 3:15 Más preciosa es que las piedras preciosas; Y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. 3:16 Largura de días está en su mano derecha; En su izquierda, riquezas y honra. 3:17 Sus caminos son caminos deleitosos, Y todas sus veredas paz. 3:18 Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, Y bienaventurados son los que la retienen. 3:19 Jehová con sabiduría fundó la tierra; Afirmó los cielos con inteligencia. 3:20 Con su ciencia los abismos fueron divididos, Y destilan rocío los cielos. 3:21 Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; Guarda la ley y el consejo, 3:22 Y serán vida a tu alma, Y gracia a tu cuello. 3:23 Entonces andarás por tu camino confiadamente, Y tu pie no tropezará. 3:24 Cuando te acuestes, no tendrás temor, Sino que te acostarás, y tu sueño será grato. 3:25 No tendrás temor de pavor repentino, Ni de la ruina de los impíos cuando viniere, 3:26 Porque Jehová será tu confianza, Y él preservará tu pie de quedar preso. 3:27 No te niegues a hacer el bien a quien es debido, Cuando tuvieres poder para hacerlo. 3:28 No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, Y mañana te daré, Cuando tienes contigo qué darle. 3:29 No intentes mal contra tu prójimo Que habita confiado junto a ti. 3:30 No tengas pleito con nadie sin razón, Si no te han hecho agravio. 3:31 No envidies al hombre injusto, Ni escojas ninguno de sus caminos. 3:32 Porque Jehová abomina al perverso; Mas su comunión íntima es con los justos. 3:33 La maldición de Jehová está en la casadel impío, Pero bendecirá la morada de los justos. 3:34 Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, Y a los humildes dará gracia. 3:35 Los sabios heredarán honra, Mas los necios llevarán ignominia. Capítulo 4 Beneficios de la sabiduría 4:1 Oíd, hijos, la enseñanza de un padre, Y estad atentos, para que conozcáis cordura. 4:2 Porque os doy buena enseñanza; No desamparéis mi ley. 4:3 Porque yo también fui hijo de mi padre, Delicado y único delante de mi madre. 4:4 Y él me enseñaba, y me decía: Retenga tu corazón mis razones, Guarda mis mandamientos, y vivirás. 4:5 Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; No te olvides ni te apartes de las razones de mi boca; 4:6 No la dejes, y ella te guardará; Amala, y te conservará. 4:7 Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia. 4:8 Engrandécela, y ella te engrandecerá; Ella te honrará, cuando tú la hayas abrazado. 4:9 Adorno de gracia dará a tu cabeza; Corona de hermosura te entregará. 4:10 Oye, hijo mío, y recibe mis razones, Y se te multiplicarán años de vida. 4:11 Por el camino de la sabiduría te he encaminado, Y por veredas derechas te he hecho andar. 4:12 Cuando anduvieres, no se estrecharán tus pasos, Y si corrieres, no tropezarás. 4:13 Retén el consejo, no lo dejes; Guárdalo, porque eso es tu vida. 4:14 No entres por la vereda de los impíos, Ni vayas por el camino de los malos. 4:15 Déjala, no pases por ella; Apártate de ella, pasa. 4:16 Porque no duermen ellos si no han hecho mal, Y pierden el sueño si no han hecho caer a alguno. 4:17 Porque comen pan de maldad, y beben vino de robos; 4:18 Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto. 4:19 El camino de los impíos es como la oscuridad; No saben en qué tropiezan. 4:20 Hijo mío, está atento a mis palabras; Inclina tu oído a mis razones. 4:21 No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu corazón; 4:22 Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo. 4:23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida. 4:24 Aparta de ti la perversidad de la boca, Y aleja de ti la iniquidad de los labios. 4:25 Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. 4:26 Examina la senda de tus pies, Y todos tus caminos sean rectos. 4:27 No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; Aparta tu pie del mal. Capítulo 5 Amonestación contra la impureza 5:1 Hijo mío, está atento a mi sabiduría, Y a mi inteligencia inclina tu oído, 5:2 Para que guardes consejo, Y tus labios conserven la ciencia. 5:3 Porque los labios de la mujer extraña destilan miel, Y su paladar es más blando que el aceite; 5:4 Mas su fin es amargo como el ajenjo, Agudo como espada de dos filos. 5:5 Sus pies descienden a la muerte; Sus pasos conducen al Seol. 5:6 Sus caminos son inestables; no los conocerás, Si no considerares el camino de vida. 5:7 Ahora pues, hijos, oídme, Y no os apartéis de las razones de mi boca. 5:8 Aleja de ella tu camino, Y no te acerques a la puerta de su casa; 5:9 Para que no des a los extraños tu honor, Y tus años al cruel; 5:10 No sea que extraños se sacien de tu fuerza, Y tus trabajos estén en casa del extraño; 5:11 Y gimas al final, Cuando se consuma tu carne y tu cuerpo, 5:12 Y digas: ¡Cómo aborrecí el consejo, Y mi corazón menospreció la reprensión; 5:13 No oí la voz de los que me instruían, Y a los que me enseñaban no incliné mi oído! 5:14 Casi en todo mal he estado, En medio de la sociedad y de la congregación. 5:15 Bebe el agua de tu misma cisterna, Y los raudales de tu propio pozo. 5:16 ¿Se derramarán tus fuentes por las calles, Y tus corrientes de aguas por las plazas? 5:17 Sean para ti solo, Y no para los extraños contigo. 5:18 Sea bendito tu manantial, Y alégrate con la mujer de tu juventud, 5:19 Como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, Y en su amor recréate siempre. 5:20 ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciegocon la mujer ajena, Y abrazarás el seno de la extraña? 5:21 Porque los caminos del hombre están ante los ojos deJehová, Y él considera todas sus veredas. 5:22 Prenderán al impío sus propias iniquidades, Y retenido será con las cuerdas de su pecado. 5:23 El morirá por falta de corrección, Y errará por lo inmenso de su locura. Capítulo 6 Amonestación contra la pereza y la falsedad 6:1 Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, Si has empeñado tu palabra a un extraño, 6:2 Te has enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los dichos de tus labios. 6:3 Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo; Ve, humíllate, y asegúrate de tu amigo. 6:4 No des sueño a tus ojos, Ni a tus párpados adormecimiento; 6:5 Escápate como gacela de la mano del cazador, Y como ave de la mano del que arma lazos. 6:6 Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio; 6:7 La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor, 6:8 Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento. 6:9 Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño? 6:10 Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las manos para reposo; 6:11 Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre armado. 6:12 El hombre malo, el hombre depravado, Es el que anda en perversidad de boca; 6:13 Que guiña los ojos, que habla con los pies, Que hace señas con los dedos. 6:14 Perversidades hay en su corazón; anda pensando el malen todo tiempo; Siembra las discordias. 6:15 Por tanto, su calamidad vendrá de repente; Súbitamente será quebrantado, y no habrá remedio. 6:16 Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma: 6:17 Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, 6:18 El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, 6:19 El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos. Amonestación contra el adulterio 6:20 Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, Y no dejes la enseñanza de tu madre; 6:21 Atalos siempre en tu corazón, Enlázalos a tu cuello. 6:22 Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; Hablarán contigo cuando despiertes. 6:23 Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanzaes luz, Y camino de vida las reprensiones que te instruyen, 6:24 Para que te guarden de la mala mujer, De la blandura de la lengua de la mujer extraña. 6:25 No codicies su hermosura en tu corazón, Ni ella te prenda con sus ojos; 6:26 Porque a causa de la mujer ramera el hombre es reducido a unbocado de pan; Y la mujer caza la preciosa alma del varón. 6:27 ¿Tomará el hombre fuego en su seno Sin que sus vestidos ardan? 6:28 ¿Andará el hombre sobre brasas Sin que sus pies se quemen? 6:29 Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; No quedará impune ninguno que la tocare. 6:30 No tienen en poco al ladrón si hurta Para saciar su apetito cuando tiene hambre; 6:31 Pero si es sorprendido, pagará siete veces; Entregará todo el haber de su casa. 6:32 Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; Corrompe su alma el que tal hace. 6:33 Heridas y vergüenza hallará, Y su afrenta nunca será borrada. 6:34 Porque los celos son el furor del hombre, Y no perdonará en el día de la venganza. 6:35 No aceptará ningún rescate, Ni querrá perdonar, aunque multipliques los dones. Capítulo 7 Las artimañas de la ramera 7:1 Hijo mío, guarda mis razones, Y atesora contigo mis mandamientos. 7:2 Guarda mis mandamientos y vivirás, Y mi ley como las niñas de tus ojos. 7:3 Lígalos a tus dedos; Escríbelos en la tabla de tu corazón. 7:4 Di a la sabiduría: Tú eres mi hermana, Y a la inteligencia llama parienta; 7:5 Para que te guarden de la mujer ajena, Y de la extraña que ablanda sus palabras. 7:6 Porque mirando yo por la ventana de mi casa, Por mi celosía, 7:7 Vi entre los simples, Consideré entre los jóvenes, A un joven falto de entendimiento, 7:8 El cual pasaba por la calle, junto a la esquina, E iba camino a la casa de ella, 7:9 A la tarde del día, cuando ya oscurecía, En la oscuridad y tinieblas de la noche. 7:10 Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón. 7:11 Alborotadora y rencillosa, Sus pies no pueden estar en casa; 7:12 Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas, Acechando por todas las esquinas. 7:13 Se asió de él, y le besó. Con semblante descarado le dijo: 7:14 Sacrificios de paz había prometido, Hoy he pagado mis votos; 7:15 Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado. 7:16 He adornado mi cama con colchas Recamadas con cordoncillo de Egipto; 7:17 He perfumado mi cámara Con mirra, áloes y canela. 7:18 Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; Alegrémonos en amores. 7:19 Porque el marido no está en casa; Se ha ido a un largo viaje. 7:20 La bolsa de dinero llevó en su mano; El día señalado volverá a su casa. 7:21 Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, Le obligó con la zalamería de sus labios. 7:22 Al punto se marchó tras ella, Como va el buey al degolladero, Y como el necio a las prisiones para ser castigado; 7:23 Como el ave que se apresura a la red, Y no sabe que es contra su vida, Hasta que la saeta traspasa su corazón. 7:24 Ahora pues, hijos, oídme, Y estad atentos a las razones de mi boca. 7:25 No se aparte tu corazón a sus caminos; No yerres en sus veredas. 7:26 Porque a muchos ha hecho caer heridos, Y aun los más fuertes han sido muertos por ella. 7:27 Camino al Seol es su casa, Que conduce a las cámaras de la muerte. Capítulo 8 Excelencia y eternidad de la Sabiduría 8:1 ¿No clama la sabiduría, Y da su voz la inteligencia? 8:2 En las alturas junto al camino, A las encrucijadas de las veredas se para; 8:3 En el lugar de las puertas, a la entrada de la ciudad, A la entrada de las puertas da voces: 8:4 Oh hombres, a vosotros clamo; Dirijo mi voz a los hijos de los hombres. 8:5 Entended, oh simples, discreción; Y vosotros, necios, entrad en cordura. 8:6 Oíd, porque hablaré cosas excelentes, Y abriré mis labios para cosas rectas. 8:7 Porque mi boca hablará verdad, Y la impiedad abominan mis labios. 8:8 Justas son todas las razones de mi boca; No hay en ellas cosa perversa ni torcida. 8:9 Todas ellas son rectas al que entiende, Y razonables a los que han hallado sabiduría. 8:10 Recibid mi enseñanza, y no plata; Y ciencia antes que el oro escogido. 8:11 Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se puede desear, no es de compararse con ella. 8:12 Yo, la sabiduría, habito con la cordura, Y hallo la ciencia de los consejos. 8:13 El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco. 8:14 Conmigo está el consejo y el buen juicio; Yo soy la inteligencia; mío es el poder. 8:15 Por mí reinan los reyes, Y los príncipes determinan justicia. 8:16 Por mí dominan los príncipes, Y todos los gobernadores juzgan la tierra. 8:17 Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan. 8:18 Las riquezas y la honra están conmigo; Riquezas duraderas, y justicia. 8:19 Mejor es mi fruto que el oro, y que el oro refinado; Y mi rédito mejor que la plata escogida. 8:20 Por vereda de justicia guiaré, Por en medio de sendas de juicio, 8:21 Para hacer que los que me aman tengan su heredad, Y que yo llene sus tesoros. 8:22 Jehová me poseía en el principio, Ya de antiguo, antes de sus obras. 8:23 Eternamente tuve el principado, desde el principio, Antes de la tierra. 8:24 Antes de los abismos fui engendrada; Antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas. 8:25 Antes que los montes fuesen formados, Antes de los collados, ya había sido yo engendrada; 8:26 No había aún hecho la tierra, ni los campos, Ni el principio del polvo del mundo. 8:27 Cuando formaba los cielos, allí estaba yo; Cuando trazaba el círculo sobre la faz del abismo; 8:28 Cuando afirmaba los cielos arriba, Cuando afirmaba las fuentes del abismo; 8:29 Cuando ponía al mar su estatuto, Para que las aguas no traspasasen su mandamiento; Cuando establecía los fundamentos de la tierra, 8:30 Con él estaba yo ordenándolo todo, Y era su delicia de día en día, Teniendo solaz delante de él en todo tiempo. 8:31 Me regocijo en la parte habitable de su tierra; Y mis delicias son con los hijos de los hombres. 8:32 Ahora, pues, hijos, oídme, Y bienaventurados los que guardan mis caminos. 8:33 Atended el consejo, y sed sabios, Y no lo menospreciéis. 8:34 Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas cada día, Aguardando a los postes de mis puertas. 8:35 Porque el que me halle, hallará la vida, Y alcanzará el favor de Jehová. 8:36 Mas el que peca contra mí, defrauda su alma; Todos los que me aborrecen aman la muerte.Capítulo 9 La Sabiduría y la mujer insensata 9:1 La sabiduría edificó su casa, Labró sus siete columnas. 9:2 Mató sus víctimas, mezcló su vino, Y puso su mesa. 9:3 Envió sus criadas; Sobre lo más alto de la ciudad clamó. 9:4 Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dice: 9:5 Venid, comed mi pan, Y bebed del vino que yo he mezclado. 9:6 Dejad las simplezas, y vivid, Y andad por el camino de la inteligencia. 9:7 El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; El que reprende al impío, se atrae mancha. 9:8 No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; Corrige al sabio, y te amará. 9:9 Da al sabio, y será más sabio; Enseña al justo, y aumentará su saber. 9:10 El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. 9:11 Porque por mí se aumentarán tus días, Y años de vida se te añadirán. 9:12 Si fueres sabio, para ti lo serás; Y si fueres escarnecedor, pagarás tú solo. 9:13 La mujer insensata es alborotadora; Es simple e ignorante. 9:14 Se sienta en una silla a la puerta de su casa, En los lugares altos de la ciudad, 9:15 Para llamar a los que pasan por el camino, Que van por sus caminos derechos. 9:16 Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dijo: 9:17 Las aguas hurtadas son dulces, Y el pan comido en oculto es sabroso. 9:18 Y no saben que allí están los muertos; Que sus convidados están en lo profundo del Seol. Capítulo 10 Contraste entre el justo y el malvado 10:1 Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre, Pero el hijo necio es tristeza de su madre. 10:2 Los tesoros de maldad no serán de provecho; Mas la justicia libra de muerte. 10:3 Jehová no dejará padecer hambre al justo; Mas la iniquidad lanzará a los impíos. 10:4 La mano negligente empobrece; Mas la mano de los diligentes enriquece. 10:5 El que recoge en el verano es hombre entendido; El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza. 10:6 Hay bendiciones sobre la cabeza del justo; Pero violencia cubrirá la boca de los impíos. 10:7 La memoria del justo será bendita; Mas el nombre de los impíos se pudrirá. 10:8 El sabio de corazón recibirá los mandamientos; Mas el necio de labios caerá. 10:9 El que camina en integridad anda confiado; Mas el que pervierte sus caminos será quebrantado. 10:10 El que guiña el ojo acarrea tristeza; Y el necio de labios será castigado. 10:11 Manantial de vida es la boca del justo; Pero violencia cubrirá la boca de los impíos. 10:12 El odio despierta rencillas; Pero el amor cubrirá todas las faltas. 10:13 En los labios del prudente se halla sabiduría; Mas la vara es para las espaldas del falto de cordura. 10:14 Los sabios guardan la sabiduría; Mas la boca del necio es calamidad cercana. 10:15 Las riquezas del rico son su ciudad fortificada; Y el desmayo de los pobres es su pobreza. 10:16 La obra del justo es para vida; Mas el fruto del impío es para pecado. 10:17 Camino a la vida es guardar la instrucción; Pero quien desecha la reprensión, yerra. 10:18 El que encubre el odio es de labios mentirosos; Y el que propaga calumnia es necio. 10:19 En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente. 10:20 Plata escogida es la lengua del justo; Mas el corazón de los impíos es como nada. 10:21 Los labios del justo apacientan a muchos, Mas los necios mueren por falta de entendimiento. 10:22 La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza con ella. 10:23 El hacer maldad es como una diversión al insensato; Mas la sabiduría recrea al hombre de entendimiento. 10:24 Lo que el impío teme, eso le vendrá; Pero a los justos les será dado lo que desean. 10:25 Como pasa el torbellino, así el malo no permanece; Mas el justo permanece para siempre. 10:26 Como el vinagre a los dientes, y como el humo a los ojos, Así es el perezoso a los que lo envían. 10:27 El temor de Jehová aumentará los días; Mas los años de los impíos serán acortados. 10:28 La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los impíos perecerá. 10:29 El camino de Jehová es fortaleza al perfecto; Pero es destrucción a los que hacen maldad. 10:30 El justo no será removido jamás; Pero los impíos no habitarán la tierra. 10:31 La boca del justo producirá sabiduría; Mas la lengua perversa será cortada. 10:32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada; Mas la boca de los impíos habla perversidades. Capítulo 11 11:1 El peso falso es abominación a Jehová; Mas la pesa cabal le agrada. 11:2 Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra; Mas con los humildes está la sabiduría. 11:3 La integridad de los rectos los encaminará; Pero destruirá a los pecadores la perversidad de ellos. 11:4 No aprovecharán las riquezas en el día de laira; Mas la justicia librará de muerte. 11:5 La justicia del perfecto enderezará su camino; Mas el impío por su impiedad caerá. 11:6 La justicia de los rectos los librará; Mas los pecadores serán atrapados en su pecado. 11:7 Cuando muere el hombre impío, perece su esperanza; Y la expectación de los malos perecerá. 11:8 El justo es librado de la tribulación; Mas el impío entra en lugar suyo. 11:9 El hipócrita con la boca daña a su prójimo; Mas los justos son librados con la sabiduría. 11:10 En el bien de los justos la ciudad se alegra; Mas cuando los impíos perecen hay fiesta. 11:11 Por la bendición de los rectos la ciudad seráengrandecida; Mas por la boca de los impíos será trastornada. 11:12 El que carece de entendimiento menosprecia a su prójimo; Mas el hombre prudente calla. 11:13 El que anda en chismes descubre el secreto; Mas el de espíritu fiel lo guarda todo. 11:14 Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud de consejeros hay seguridad. 11:15 Con ansiedad será afligido el que sale por fiador deun extraño; Mas el que aborreciere las fianzas vivirá seguro. 11:16 La mujer agraciada tendrá honra, Y los fuertes tendrán riquezas. 11:17 A su alma hace bien el hombre misericordioso; Mas el cruel se atormenta a sí mismo. 11:18 El impío hace obra falsa; Mas el que siembra justicia tendrá galardón firme. 11:19 Como la justicia conduce a la vida, Así el que sigue el mal lo hace para su muerte. 11:20 Abominación son a Jehová los perversos de corazón; Mas los perfectos de camino le son agradables. 11:21 Tarde o temprano, el malo será castigado; Mas la descendencia de los justos será librada. 11:22 Como zarcillo de oro en el hocico de un cerdo Es la mujer hermosa y apartada de razón. 11:23 El deseo de los justos es solamente el bien; Mas la esperanza de los impíos es el enojo. 11:24 Hay quienes reparten, y les es añadido más; Y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienena pobreza. 11:25 El alma generosa será prosperada; Y el que saciare, él también será saciado. 11:26 Al que acapara el grano, el pueblo lo maldecirá; Pero bendición será sobre la cabeza del que lo vende. 11:27 El que procura el bien buscará favor; Mas al que busca el mal, éste le vendrá. 11:28 El que confía en sus riquezas caerá; Mas los justos reverdecerán como ramas. 11:29 El que turba su casa heredará viento; Y el necio será siervo del sabio de corazón. 11:30 El fruto del justo es árbol de vida; Y el que gana almas es sabio. 11:31 Ciertamente el justo será recompensado en la tierra; ¡Cuánto más el impío y el pecador! Capítulo 12 12:1 El que ama la instrucción ama la sabiduría; Mas el que aborrece la reprensión es ignorante. 12:2 El bueno alcanzará favor de Jehová; Mas él condenará al hombre de malos pensamientos. 12:3 El hombre no se afirmará por medio de la impiedad; Mas la raíz de los justos no será removida. 12:4 La mujer virtuosa es corona de su marido; Mas la mala, como carcoma en sus huesos. 12:5 Los pensamientos de los justos son rectitud; Mas los consejos de los impíos, engaño. 12:6 Las palabras de los impíos son asechanzas para derramarsangre; Mas la boca de los rectos los librará. 12:7 Dios trastornará a los impíos, y no seránmás; Pero la casa de los justos permanecerá firme. 12:8 Según su sabiduría es alabado el hombre; Mas el perverso de corazón será menospreciado. 12:9 Más vale el despreciado que tiene servidores, Que el que se jacta, y carece de pan. 12:10 El justo cuida de la vida de su bestia; Mas el corazón de los impíos es cruel. 12:11 El que labra su tierra se saciará de pan; Mas el que sigue a los vagabundos es falto de entendimiento. 12:12 Codicia el impío la red de los malvados; Mas la raíz de los justos dará fruto. 12:13 El impío es enredado en la prevaricación desus labios; Mas el justo saldrá de la tribulación. 12:14 El hombre será saciado de bien del fruto de su boca; Y le será pagado según la obra de sus manos. 12:15 El camino del necio es derecho en su opinión; Mas el que obedece al consejo es sabio. 12:16 El necio al punto da a conocer su ira; Mas el que no hace caso de la injuria es prudente. 12:17 El que habla verdad declara justicia; Mas el testigo mentiroso, engaño. 12:18 Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina. 12:19 El labio veraz permanecerá para siempre; Mas la lengua mentirosa sólo por un momento. 12:20 Engaño hay en el corazón de los que piensanel mal; Pero alegría en el de los que piensan el bien. 12:21 Ninguna adversidad acontecerá al justo; Mas los impíos serán colmados de males. 12:22 Los labios mentirosos son abominación a Jehová; Pero los que hacen verdad son su contentamiento. 12:23 El hombre cuerdo encubre su saber; Mas el corazón de los necios publica la necedad. 12:24 La mano de los diligentes señoreará; Mas la negligencia será tributaria. 12:25 La congoja en el corazón del hombre lo abate; Mas la buena palabra lo alegra. 12:26 El justo sirve de guía a su prójimo; Mas el camino de los impíos les hace errar. 12:27 El indolente ni aun asará lo que ha cazado; Pero haber precioso del hombre es la diligencia. 12:28 En el camino de la justicia está la vida; Y en sus caminos no hay muerte. Capítulo 13 13:1 El hijo sabio recibe el consejo del padre; Mas el burlador no escucha las reprensiones. 13:2 Del fruto de su boca el hombre comerá el bien; Mas el alma de los prevaricadores hallará el mal. 13:3 El que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad. 13:4 El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas el alma de los diligentes será prosperada. 13:5 El justo aborrece la palabra de mentira; Mas el impío se hace odioso e infame. 13:6 La justicia guarda al de perfecto camino; Mas la impiedad trastornará al pecador. 13:7 Hay quienes pretenden ser ricos, y no tienen nada; Y hay quienes pretenden ser pobres, y tienen muchas riquezas. 13:8 El rescate de la vida del hombre está en sus riquezas; Pero el pobre no oye censuras. 13:9 La luz de los justos se alegrará; Mas se apagará la lámpara de los impíos. 13:10 Ciertamente la soberbia concebirá contienda; Mas con los avisados está la sabiduría. 13:11 Las riquezas de vanidad disminuirán; Pero el que recoge con mano laboriosa las aumenta. 13:12 La esperanza que se demora es tormento del corazón; Pero árbol de vida es el deseo cumplido. 13:13 El que menosprecia el precepto perecerá por ello; Mas el que teme el mandamiento será recompensado. 13:14 La ley del sabio es manantial de vida Para apartarse de los lazos de la muerte. 13:15 El buen entendimiento da gracia; Mas el camino de los transgresores es duro. 13:16 Todo hombre prudente procede con sabiduría; Mas el necio manifestará necedad. 13:17 El mal mensajero acarrea desgracia; Mas el mensajero fiel acarrea salud. 13:18 Pobreza y vergüenza tendrá el que menospreciael consejo; Mas el que guarda la corrección recibirá honra. 13:19 El deseo cumplido regocija el alma; Pero apartarse del mal es abominación a los necios. 13:20 El que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será quebrantado. 13:21 El mal perseguirá a los pecadores, Mas los justos serán premiados con el bien. 13:22 El bueno dejará herederos a los hijos de sus hijos; Pero la riqueza del pecador está guardada para el justo. 13:23 En el barbecho de los pobres hay mucho pan; Mas se pierde por falta de juicio. 13:24 El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige. 13:25 El justo come hasta saciar su alma; Mas el vientre de los impíos tendrá necesidad. Capítulo 14 14:1 La mujer sabia edifica su casa; Mas la necia con sus manos la derriba. 14:2 El que camina en su rectitud teme a Jehová; Mas el de caminos pervertidos lo menosprecia. 14:3 En la boca del necio está la vara de la soberbia; Mas los labios de los sabios los guardarán. 14:4 Sin bueyes el granero está vacío; Mas por la fuerza del buey hay abundancia de pan. 14:5 El testigo verdadero no mentirá; Mas el testigo falso hablará mentiras. 14:6 Busca el escarnecedor la sabiduría y no la halla; Mas al hombre entendido la sabiduría le es fácil. 14:7 Vete de delante del hombre necio, Porque en él no hallarás labios de ciencia. 14:8 La ciencia del prudente está en entender su camino; Mas la indiscreción de los necios es engaño. 14:9 Los necios se mofan del pecado; Mas entre los rectos hay buena voluntad. 14:10 El corazón conoce la amargura de su alma; Y extraño no se entremeterá en su alegría. 14:11 La casa de los impíos será asolada; Pero florecerá la tienda de los rectos. 14:12 Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte. 14:13 Aun en la risa tendrá dolor el corazón; Y el término de la alegría es congoja. 14:14 De sus caminos será hastiado el necio de corazón; Pero el hombre de bien estará contento del suyo. 14:15 El simple todo lo cree; Mas el avisado mira bien sus pasos. 14:16 El sabio teme y se aparta del mal; Mas el insensato se muestra insolente y confiado. 14:17 El que fácilmente se enoja hará locuras; Y el hombre perverso será aborrecido. 14:18 Los simples heredarán necedad; Mas los prudentes se coronarán de sabiduría. 14:19 Los malos se inclinarán delante de los buenos, Y los impíos a las puertas del justo. 14:20 El pobre es odioso aun a su amigo; Pero muchos son los que aman al rico. 14:21 Peca el que menosprecia a su prójimo; Mas el que tiene misericordia de los pobres es bienaventurado. 14:22 ¿No yerran los que piensan el mal? Misericordia y verdad alcanzarán los que piensan el bien. 14:23 En toda labor hay fruto; Mas las vanas palabras de los labios empobrecen. 14:24 Las riquezas de los sabios son su corona; Pero la insensatez de los necios es infatuación. 14:25 El testigo verdadero libra las almas; Mas el engañoso hablará mentiras. 14:26 En el temor de Jehová está la fuerte confianza; Y esperanza tendrán sus hijos. 14:27 El temor de Jehová es manantial de vida Para apartarse de los lazos de la muerte. 14:28 En la multitud del pueblo está la gloria del rey; Y en la falta de pueblo la debilidad del príncipe. 14:29 El que tarda en airarse es grande de entendimiento; Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad. 14:30 El corazón apacible es vida de la carne; Mas la envidia es carcoma de los huesos. 14:31 El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor; Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra. 14:32 Por su maldad será lanzado el impío; Mas el justo en su muerte tiene esperanza. 14:33 En el corazón del prudente reposa la sabiduría; Pero no es conocida en medio de los necios. 14:34 La justicia engrandece a la nación; Mas el pecado es afrenta de las naciones. 14:35 La benevolencia del rey es para con el servidor entendido; Mas su enojo contra el que lo avergüenza. Capítulo 15 15:1 La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor. 15:2 La lengua de los sabios adornará la sabiduría; Mas la boca de los necios hablará sandeces. 15:3 Los ojos de Jehová están en todo lugar, Mirando a los malos y a los buenos. 15:4 La lengua apacible es árbol de vida; Mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu. 15:5 El necio menosprecia el consejo de su padre; Mas el que guarda la corrección vendrá a ser prudente. 15:6 En la casa del justo hay gran provisión; Pero turbación en las ganancias del impío. 15:7 La boca de los sabios esparce sabiduría; No así el corazón de los necios. 15:8 El sacrificio de los impíos es abominación aJehová; Mas la oración de los rectos es su gozo. 15:9 Abominación es a Jehová el camino del impío; Mas él ama al que sigue justicia. 15:10 La reconvención es molesta al que deja el camino; Y el que aborrece la corrección morirá. 15:11 El Seol y el Abadón están delante de Jehová; ¡Cuánto más los corazones de los hombres! 15:12 El escarnecedor no ama al que le reprende, Ni se junta con los sabios. 15:13 El corazón alegre hermosea el rostro; Mas por el dolor del corazón el espíritu se abate. 15:14 El corazón entendido busca la sabiduría; Mas la boca de los necios se alimenta de necedades. 15:15 Todos los días del afligido son difíciles; Mas el de corazón contento tiene un banquete continuo. 15:16 Mejor es lo poco con el temor de Jehová, Que el gran tesoro donde hay turbación. 15:17 Mejor es la comida de legumbres donde hay amor, Que de buey engordado donde hay odio. 15:18 El hombre iracundo promueve contiendas; Mas el que tarda en airarse apacigua la rencilla. 15:19 El camino del perezoso es como seto de espinos; Mas la vereda de los rectos, como una calzada. 15:20 El hijo sabio alegra al padre; Mas el hombre necio menosprecia a su madre. 15:21 La necedad es alegría al falto de entendimiento; Mas el hombre entendido endereza sus pasos. 15:22 Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; Mas en la multitud de consejeros se afirman. 15:23 El hombre se alegra con la respuesta de su boca; Y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es! 15:24 El camino de la vida es hacia arriba al entendido, Para apartarse del Seol abajo. 15:25 Jehová asolará la casa de los soberbios; Pero afirmará la heredad de la viuda. 15:26 Abominación son a Jehová los pensamientos delmalo; Mas las expresiones de los limpios son limpias. 15:27 Alborota su casa el codicioso; Mas el que aborrece el soborno vivirá. 15:28 El corazón del justo piensa para responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas. 15:29 Jehová está lejos de los impíos; Pero él oye la oración de los justos. 15:30 La luz de los ojos alegra el corazón, Y la buena nueva conforta los huesos. 15:31 El oído que escucha las amonestaciones de la vida, Entre los sabios morará. 15:32 El que tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; Mas el que escucha la corrección tiene entendimiento. 15:33 El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría; Y a la honra precede la humildad. Capítulo 16 Proverbios sobre la vida y la conducta 16:1 Del hombre son las disposiciones del corazón; Mas de Jehová es la respuesta de la lengua. 16:2 Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión; Pero Jehová pesa los espíritus. 16:3 Encomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados. 16:4 Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el día malo. 16:5 Abominación es a Jehová todo altivo de corazón; Ciertamente no quedará impune. 16:6 Con misericordia y verdad se corrige el pecado, Y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal. 16:7 Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz con él. 16:8 Mejor es lo poco con justicia Que la muchedumbre de frutos sin derecho. 16:9 El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos. 16:10 Oráculo hay en los labios del rey; En juicio no prevaricará su boca. 16:11 Peso y balanzas justas son de Jehová; Obra suya son todas las pesas de la bolsa. 16:12 Abominación es a los reyes hacer impiedad, Porque con justicia será afirmado el trono. 16:13 Los labios justos son el contentamiento de los reyes, Y éstos aman al que habla lo recto. 16:14 La ira del rey es mensajero de muerte; Mas el hombre sabio la evitará. 16:15 En la alegría del rostro del rey está la vida, Y su benevolencia es como nube de lluvia tardía. 16:16 Mejor es adquirir sabiduría que oro preciado; Y adquirir inteligencia vale más que la plata. 16:17 El camino de los rectos se aparta del mal; Su vida guarda el que guarda su camino. 16:18 Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu. 16:19 Mejor es humillar el espíritu con los humildes Que repartir despojos con los soberbios. 16:20 El entendido en la palabra hallará el bien, Y el que confía en Jehová es bienaventurado. 16:21 El sabio de corazón es llamado prudente, Y la dulzura de labios aumenta el saber. 16:22 Manantial de vida es el entendimiento al que lo posee; Mas la erudición de los necios es necedad. 16:23 El corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios. 16:24 Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos. 16:25 Hay camino que parece derecho al hombre, Pero su fin es camino de muerte. 16:26 El alma del que trabaja, trabaja para sí, Porque su boca le estimula. 16:27 El hombre perverso cava en busca del mal, Y en sus labios hay como llama de fuego. 16:28 El hombre perverso levanta contienda, Y el chismoso aparta a los mejores amigos. 16:29 El hombre malo lisonjea a su prójimo, Y le hace andar por camino no bueno. 16:30 Cierra sus ojos para pensar perversidades; Mueve sus labios, efectúa el mal. 16:31 Corona de honra es la vejez Que se halla en el camino de justicia. 16:32 Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que tomauna ciudad. 16:33 La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella. Capítulo 17 17:1 Mejor es un bocado seco, y en paz, Que casa de contiendas llena de provisiones. 17:2 El siervo prudente se enseñoreará del hijo quedeshonra, Y con los hermanos compartirá la herencia. 17:3 El crisol para la plata, y la hornaza para el oro; Pero Jehová prueba los corazones. 17:4 El malo está atento al labio inicuo; Y el mentiroso escucha la lengua detractora. 17:5 El que escarnece al pobre afrenta a su Hacedor; Y el que se alegra de la calamidad no quedará sin castigo. 17:6 Corona de los viejos son los nietos, Y la honra de los hijos, sus padres. 17:7 No conviene al necio la altilocuencia; ¡Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! 17:8 Piedra preciosa es el soborno para el que lo practica; Adondequiera que se vuelve, halla prosperidad. 17:9 El que cubre la falta busca amistad; Mas el que la divulga, aparta al amigo. 17:10 La reprensión aprovecha al entendido, Más que cien azotes al necio. 17:11 El rebelde no busca sino el mal, Y mensajero cruel será enviado contra él. 17:12 Mejor es encontrarse con una osa a la cual han robado suscachorros, Que con un fatuo en su necedad. 17:13 El que da mal por bien, No se apartará el mal de su casa. 17:14 El que comienza la discordia es como quien suelta las aguas; Deja, pues, la contienda, antes que se enrede. 17:15 El que justifica al impío, y el que condena al justo, Ambos son igualmente abominación a Jehová. 17:16 ¿De qué sirve el precio en la mano del neciopara comprar sabiduría, No teniendo entendimiento? 17:17 En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia. 17:18 El hombre falto de entendimiento presta fianzas, Y sale por fiador en presencia de su amigo. 17:19 El que ama la disputa, ama la transgresión; Y el que abre demasiado la puerta busca su ruina. 17:20 El perverso de corazón nunca hallará el bien, Y el que revuelve con su lengua caerá en el mal. 17:21 El que engendra al insensato, para su tristeza lo engendra; Y el padre del necio no se alegrará. 17:22 El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos. 17:23 El impío toma soborno del seno Para pervertir las sendas de la justicia. 17:24 En el rostro del entendido aparece la sabiduría; Mas los ojos del necio vagan hasta el extremo de la tierra. 17:25 El hijo necio es pesadumbre de su padre, Y amargura a la que lo dio a luz. 17:26 Ciertamente no es bueno condenar al justo, Ni herir a los nobles que hacen lo recto. 17:27 El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido. 17:28 Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido.Capítulo 18 18:1 Su deseo busca el que se desvía, Y se entremete en todo negocio. 18:2 No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra. 18:3 Cuando viene el impío, viene también el menosprecio, Y con el deshonrador la afrenta. 18:4 Aguas profundas son las palabras de la boca del hombre; Y arroyo que rebosa, la fuente de la sabiduría. 18:5 Tener respeto a la persona del impío, Para pervertir el derecho del justo, no es bueno. 18:6 Los labios del necio traen contienda; Y su boca los azotes llama. 18:7 La boca del necio es quebrantamiento para sí, Y sus labios son lazos para su alma. 18:8 Las palabras del chismoso son como bocados suaves, Y penetran hasta las entrañas. 18:9 También el que es negligente en su trabajo Es hermano del hombre disipador. 18:10 Torre fuerte es el nombre de Jehová; A él correrá el justo, y será levantado. 18:11 Las riquezas del rico son su ciudad fortificada, Y como un muro alto en su imaginación. 18:12 Antes del quebrantamiento se eleva el corazón del hombre, Y antes de la honra es el abatimiento. 18:13 Al que responde palabra antes de oír, Le es fatuidad y oprobio. 18:14 El ánimo del hombre soportará su enfermedad; Mas ¿quién sorportará al ánimo angustiado? 18:15 El corazón del entendido adquiere sabiduría; Y el oído de los sabios busca la ciencia. 18:16 La dádiva del hombre le ensancha el camino Y le lleva delante de los grandes. 18:17 Justo parece el primero que aboga por su causa; Pero viene su adversario, y le descubre. 18:18 La suerte pone fin a los pleitos, Y decide entre los poderosos. 18:19 El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte, Y las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar. 18:20 Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios. 18:21 La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos. 18:22 El que halla esposa halla el bien, Y alcanza la benevolencia de Jehová. 18:23 El pobre habla con ruegos, Mas el rico responde durezas. 18:24 El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; Y amigo hay más unido que un hermano. Capítulo 19 19:1 Mejor es el pobre que camina en integridad, Que el de perversos labios y fatuo. 19:2 El alma sin ciencia no es buena, Y aquel que se apresura con los pies, peca. 19:3 La insensatez del hombre tuerce su camino, Y luego contra Jehová se irrita su corazón. 19:4 Las riquezas traen muchos amigos; Mas el pobre es apartado de su amigo. 19:5 El testigo falso no quedará sin castigo, Y el que habla mentiras no escapará. 19:6 Muchos buscan el favor del generoso, Y cada uno es amigo del hombre que da. 19:7 Todos los hermanos del pobre le aborrecen; ¡Cuánto más sus amigos se alejarán deél! Buscará la palabra, y no la hallará. 19:8 El que posee entendimiento ama su alma; El que guarda la inteligencia hallará el bien. 19:9 El testigo falso no quedará sin castigo, Y el que habla mentiras perecerá. 19:10 No conviene al necio el deleite; ¡Cuánto menos al siervo ser señor de los príncipes! 19:11 La cordura del hombre detiene su furor, Y su honra es pasar por alto la ofensa. 19:12 Como rugido de cachorro de león es la ira del rey, Y su favor como el rocío sobre la hierba. 19:13 Dolor es para su padre el hijo necio, Y gotera continua las contiendas de la mujer. 19:14 La casa y las riquezas son herencia de los padres; Mas de Jehová la mujer prudente. 19:15 La pereza hace caer en profundo sueño, Y el alma negligente padecerá hambre. 19:16 El que guarda el mandamiento guarda su alma; Mas el que menosprecia sus caminos morirá. 19:17 A Jehová presta el que da al pobre, Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar. 19:18 Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanza; Mas no se apresure tu alma para destruirlo. 19:19 El de grande ira llevará la pena; Y si usa de violencias, añadirá nuevos males. 19:20 Escucha el consejo, y recibe la corrección, Para que seas sabio en tu vejez. 19:21 Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de Jehová permanecerá. 19:22 Contentamiento es a los hombres hacer misericordia; Pero mejor es el pobre que el mentiroso. 19:23 El temor de Jehová es para vida, Y con él vivirá lleno de reposo el hombre; No será visitado de mal. 19:24 El perezoso mete su mano en el plato, Y ni aun a su boca la llevará. 19:25 Hiere al escarnecedor, y el simple se hará avisado; Y corrigiendo al entendido, entenderá ciencia. 19:26 El que roba a su padre y ahuyenta a su madre, Es hijo que causa vergüenza y acarrea oprobio. 19:27 Cesa, hijo mío, de oír las enseñanzas Que te hacen divagar de las razones de sabiduría. 19:28 El testigo perverso se burlará del juicio, Y la boca de los impíos encubrirá la iniquidad. 19:29 Preparados están juicios para los escarnecedores, Y azotes para las espaldas de los necios. Capítulo 20 20:1 El vino es escarnecedor, la sidra alborotadora, Y cualquiera que por ellos yerra no es sabio. 20:2 Como rugido de cachorro de león es el terror del rey; El que lo enfurece peca contra sí mismo. 20:3 Honra es del hombre dejar la contienda; Mas todo insensato se envolverá en ella. 20:4 El perezoso no ara a causa del invierno; Pedirá, pues, en la siega, y no hallará. 20:5 Como aguas profundas es el consejo en el corazón delhombre; Mas el hombre entendido lo alcanzará. 20:6 Muchos hombres proclaman cada uno su propia bondad, Pero hombre de verdad, ¿quién lo hallará? 20:7 Camina en su integridad el justo; Sus hijos son dichosos después de él. 20:8 El rey que se sienta en el trono de juicio, Con su mirar disipa todo mal. 20:9 ¿Quién podrá decir: Yo he limpiado micorazón, Limpio estoy de mi pecado? 20:10 Pesa falsa y medida falsa, Ambas cosas son abominación a Jehová. 20:11 Aun el muchacho es conocido por sus hechos, Si su conducta fuere limpia y recta. 20:12 El oído que oye, y el ojo que ve, Ambas cosas igualmente ha hecho Jehová. 20:13 No ames el sueño, para que no te empobrezcas; Abre tus ojos, y te saciarás de pan. 20:14 El que compra dice: Malo es, malo es; Mas cuando se aparta, se alaba. 20:15 Hay oro y multitud de piedras preciosas; Mas los labios prudentes son joya preciosa. 20:16 Quítale su ropa al que salió por fiador delextraño, Y toma prenda del que sale fiador por los extraños. 20:17 Sabroso es al hombre el pan de mentira; Pero después su boca será llena de cascajo. 20:18 Los pensamientos con el consejo se ordenan; Y con dirección sabia se hace la guerra. 20:19 El que anda en chismes descubre el secreto; No te entremetas, pues, con el suelto de lengua. 20:20 Al que maldice a su padre o a su madre, Se le apagará su lámpara en oscuridad tenebrosa. 20:21 Los bienes que se adquieren de prisa al principio, No serán al final bendecidos. 20:22 No digas: Yo me vengaré; Espera a Jehová, y él te salvará. 20:23 Abominación son a Jehová las pesas falsas, Y la balanza falsa no es buena. 20:24 De Jehová son los pasos del hombre; ¿Cómo, pues, entenderá el hombre su camino? 20:25 Lazo es al hombre hacer apresuradamente voto de consagración, Y después de hacerlo, reflexionar. 20:26 El rey sabio avienta a los impíos, Y sobre ellos hace rodar la rueda. 20:27 Lámpara de Jehová es el espíritu delhombre, La cual escudriña lo más profundo del corazón. 20:28 Misericordia y verdad guardan al rey, Y con clemencia se sustenta su trono. 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, Y la hermosura de los ancianos es su vejez. 20:30 Los azotes que hieren son medicina para el malo, Y el castigo purifica el corazón. Capítulo 21 21:1 Como los repartimientos de las aguas, Así está el corazón del rey en la mano de Jehová; A todo lo que quiere lo inclina. 21:2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; Pero Jehová pesa los corazones. 21:3 Hacer justicia y juicio es a Jehová Más agradable que sacrificio. 21:4 Altivez de ojos, y orgullo de corazón, Y pensamiento de impíos, son pecado. 21:5 Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia; Mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza. 21:6 Amontonar tesoros con lengua mentirosa Es aliento fugaz de aquellos que buscan la muerte. 21:7 La rapiña de los impíos los destruirá, Por cuanto no quisieron hacer juicio. 21:8 El camino del hombre perverso es torcido y extraño; Mas los hechos del limpio son rectos. 21:9 Mejor es vivir en un rincón del terrado Que con mujer rencillosa en casa espaciosa. 21:10 El alma del impío desea el mal; Su prójimo no halla favor en sus ojos. 21:11 Cuando el escarnecedor es castigado, el simple se hace sabio; Y cuando se le amonesta al sabio, aprende ciencia. 21:12 Considera el justo la casa del impío, Cómo los impíos son trastornados por el mal. 21:13 El que cierra su oído al clamor del pobre, También él clamará, y no será oído. 21:14 La dádiva en secreto calma el furor, Y el don en el seno, la fuerte ira. 21:15 Alegría es para el justo el hacer juicio; Mas destrucción a los que hacen iniquidad. 21:16 El hombre que se aparta del camino de la sabiduría Vendrá a parar en la compañía de los muertos. 21:17 Hombre necesitado será el que ama el deleite, Y el que ama el vino y los ungüentos no se enriquecerá. 21:18 Rescate del justo es el impío, Y por los rectos, el prevaricador. 21:19 Mejor es morar en tierra desierta Que con la mujer rencillosa e iracunda. 21:20 Tesoro precioso y aceite hay en la casa del sabio; Mas el hombre insensato todo lo disipa. 21:21 El que sigue la justicia y la misericordia Hallará la vida, la justicia y la honra. 21:22 Tomó el sabio la ciudad de los fuertes, Y derribó la fuerza en que ella confiaba. 21:23 El que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias. 21:24 Escarnecedor es el nombre del soberbio y presuntuoso Que obra en la insolencia de su presunción. 21:25 El deseo del perezoso le mata, Porque sus manos no quieren trabajar. 21:26 Hay quien todo el día codicia; Pero el justo da, y no detiene su mano. 21:27 El sacrificio de los impíos es abominación; ¡Cuánto más ofreciéndolo con maldad! 21:28 El testigo mentiroso perecerá; Mas el hombre que oye, permanecerá en su dicho. 21:29 El hombre impío endurece su rostro; Mas el recto ordena sus caminos. 21:30 No hay sabiduría, ni inteligencia, Ni consejo, contra Jehová. 21:31 El caballo se alista para el día de la batalla; Mas Jehová es el que da la victoria. Capítulo 22 22:1 De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro. 22:2 El rico y el pobre se encuentran; A ambos los hizo Jehová. 22:3 El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y reciben el daño. 22:4 Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. 22:5 Espinos y lazos hay en el camino del perverso; El que guarda su alma se alejará de ellos. 22:6 Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él. 22:7 El rico se enseñorea de los pobres, Y el que toma prestado es siervo del que presta. 22:8 El que sembrare iniquidad, iniquidad segará, Y la vara de su insolencia se quebrará. 22:9 El ojo misericordioso será bendito, Porque dio de su pan al indigente. 22:10 Echa fuera al escarnecedor, y saldrá la contienda, Y cesará el pleito y la afrenta. 22:11 El que ama la limpieza de corazón, Por la gracia de sus labios tendrá la amistad del rey. 22:12 Los ojos de Jehová velan por la ciencia; Mas él trastorna las cosas de los prevaricadores. 22:13 Dice el perezoso: El león está fuera; Seré muerto en la calle. 22:14 Fosa profunda es la boca de la mujer extraña; Aquel contra el cual Jehová estuviere airado caeráen ella. 22:15 La necedad está ligada en el corazón del muchacho; Mas la vara de la corrección la alejará de él. 22:16 El que oprime al pobre para aumentar sus ganancias, O que da al rico, ciertamente se empobrecerá. Preceptos y amonestaciones 22:17 Inclina tu oído y oye las palabras de los sabios, Y aplica tu corazón a mi sabiduría; 22:18 Porque es cosa deliciosa, si las guardares dentro de ti; Si juntamente se afirmaren sobre tus labios. 22:19 Para que tu confianza sea en Jehová, Te las he hecho saber hoy a ti también. 22:20 ¿No te he escrito tres veces En consejos y en ciencia, 22:21 Para hacerte saber la certidumbre de las palabras de verdad, A fin de que vuelvas a llevar palabras de verdad a los que te enviaron? 22:22 No robes al pobre, porque es pobre, Ni quebrantes en la puerta al afligido; 22:23 Porque Jehová juzgará la causa de ellos, Y despojará el alma de aquellos que los despojaren. 22:24 No te entremetas con el iracundo, Ni te acompañes con el hombre de enojos, 22:25 No sea que aprendas sus maneras, Y tomes lazo para tu alma. 22:26 No seas de aquellos que se comprometen, Ni de los que salen por fiadores de deudas. 22:27 Si no tuvieres para pagar, ¿Por qué han de quitar tu cama de debajo de ti? 22:28 No traspases los linderos antiguos Que pusieron tus padres. 22:29 ¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delantede los reyes estará; No estará delante de los de baja condición. Capítulo 23 23:1 Cuando te sientes a comer con algún señor, Considera bien lo que está delante de ti, 23:2 Y pon cuchillo a tu garganta, Si tienes gran apetito. 23:3 No codicies sus manjares delicados, Porque es pan engañoso. 23:4 No te afanes por hacerte rico; Sé prudente, y desiste. 23:5 ¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? Porque se harán alas Como alas de águila, y volarán al cielo. 23:6 No comas pan con el avaro, Ni codicies sus manjares; 23:7 Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal esél. Come y bebe, te dirá; Mas su corazón no está contigo. 23:8 Vomitarás la parte que comiste, Y perderás tus suaves palabras. 23:9 No hables a oídos del necio, Porque menospreciará la prudencia de tus razones. 23:10 No traspases el lindero antiguo, Ni entres en la heredad de los huérfanos; 23:11 Porque el defensor de ellos es el Fuerte, El cual juzgará la causa de ellos contra ti. 23:12 Aplica tu corazón a la enseñanza, Y tus oídos a las palabras de sabiduría. 23:13 No rehúses corregir al muchacho; Porque si lo castigas con vara, no morirá. 23:14 Lo castigarás con vara, Y librarás su alma del Seol. 23:15 Hijo mío, si tu corazón fuere sabio, También a mí se me alegrará el corazón; 23:16 Mis entrañas también se alegrarán Cuando tus labios hablaren cosas rectas. 23:17 No tenga tu corazón envidia de los pecadores, Antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo; 23:18 Porque ciertamente hay fin, Y tu esperanza no será cortada. 23:19 Oye, hijo mío, y sé sabio, Y endereza tu corazón al camino. 23:20 No estés con los bebedores de vino, Ni con los comedores de carne; 23:21 Porque el bebedor y el comilón empobrecerán, Y el sueño hará vestir vestidos rotos. 23:22 Oye a tu padre, a aquel que te engendró; Y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies. 23:23 Compra la verdad, y no la vendas; La sabiduría, la enseñanza y la inteligencia. 23:24 Mucho se alegrará el padre del justo, Y el que engendra sabio se gozará con él. 23:25 Alégrense tu padre y tu madre, Y gócese la que te dio a luz. 23:26 Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos. 23:27 Porque abismo profundo es la ramera, Y pozo angosto la extraña. 23:28 También ella, como robador, acecha, Y multiplica entre los hombres los prevaricadores. 23:29 ¿Para quién será el ay? ¿Paraquién el dolor? ¿Para quién las rencillas? ¿Para quién las quejas? ¿Para quiénlas heridas en balde? ¿Para quién lo amoratado de los ojos? 23:30 Para los que se detienen mucho en el vino, Para los que van buscando la mistura. 23:31 No mires al vino cuando rojea, Cuando resplandece su color en la copa. Se entra suavemente; 23:32 Mas al fin como serpiente morderá, Y como áspid dará dolor. 23:33 Tus ojos mirarán cosas extrañas, Y tu corazón hablará perversidades. 23:34 Serás como el que yace en medio del mar, O como el que está en la punta de un mastelero. 23:35 Y dirás: Me hirieron, mas no me dolió; Me azotaron, mas no lo sentí; Cuando despertare, aún lo volveré a buscar. Capítulo 24 24:1 No tengas envidia de los hombres malos, Ni desees estar con ellos; 24:2 Porque su corazón piensa en robar, E iniquidad hablan sus labios. 24:3 Con sabiduría se edificará la casa, Y con prudencia se afirmará; 24:4 Y con ciencia se llenarán las cámaras De todo bien preciado y agradable. 24:5 El hombre sabio es fuerte, Y de pujante vigor el hombre docto. 24:6 Porque con ingenio harás la guerra, Y en la multitud de consejeros está la victoria. 24:7 Alta está para el insensato la sabiduría; En la puerta no abrirá él su boca. 24:8 Al que piensa hacer el mal, Le llamarán hombre de malos pensamientos. 24:9 El pensamiento del necio es pecado, Y abominación a los hombres el escarnecedor. 24:10 Si fueres flojo en el día de trabajo, Tu fuerza será reducida. 24:11 Libra a los que son llevados a la muerte; Salva a los que están en peligro de muerte. 24:12 Porque si dijeres: Ciertamente no lo supimos, ¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, Y dará al hombre según sus obras. 24:13 Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, Y el panal es dulce a tu paladar. 24:14 Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; Si la hallares tendrás recompensa, Y al fin tu esperanza no será cortada. 24:15 Oh impío, no aceches la tienda del justo, No saquees su cámara; 24:16 Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; Mas los impíos caerán en el mal. 24:17 Cuando cayere tu enemigo, no te regocijes, Y cuando tropezare, no se alegre tu corazón; 24:18 No sea que Jehová lo mire, y le desagrade, Y aparte de sobre él su enojo. 24:19 No te entremetas con los malignos, Ni tengas envidia de los impíos; 24:20 Porque para el malo no habrá buen fin, Y la lámpara de los impíos será apagada. 24:21 Teme a Jehová, hijo mío, y al rey; No te entremetas con los veleidosos; 24:22 Porque su quebrantamiento vendrá de repente; Y el quebrantamiento de ambos, ¿quién lo comprende? 24:23 También estos son dichos de los sabios: Hacer acepción de personas en el juicio no es bueno. 24:24 El que dijere al malo: Justo eres, Los pueblos lo maldecirán, y le detestarán las naciones; 24:25 Mas los que lo reprendieren tendrán felicidad, Y sobre ellos vendrá gran bendición. 24:26 Besados serán los labios Del que responde palabras rectas. 24:27 Prepara tus labores fuera, Y disponlas en tus campos, Y después edificarás tu casa. 24:28 No seas sin causa testigo contra tu prójimo, Y no lisonjees con tus labios. 24:29 No digas: Como me hizo, así le haré; Daré el pago al hombre según su obra. 24:30 Pasé junto al campo del hombre perezoso, Y junto a la viña del hombre falto de entendimiento; 24:31 Y he aquí que por toda ella habían crecido losespinos, Ortigas habían ya cubierto su faz, Y su cerca de piedra estaba ya destruida. 24:32 Miré, y lo puse en mi corazón; Lo vi, y tomé consejo. 24:33 Un poco de sueño, cabeceando otro poco, Poniendo mano sobre mano otro poco para dormir; 24:34 Así vendrá como caminante tu necesidad, Y tu pobreza como hombre armado.Capítulo 25Comparaciones y lecciones morales 25:1 También estos son proverbios de Salomón, los cualescopiaron los varones de Ezequías, rey de Judá: 25:2 Gloria de Dios es encubrir un asunto; Pero honra del rey es escudriñarlo. 25:3 Para la altura de los cielos, y para la profundidad de la tierra, Y para el corazón de los reyes, no hay investigación. 25:4 Quita las escorias de la plata, Y saldrá alhaja al fundidor. 25:5 Aparta al impío de la presencia del rey, Y su trono se afirmará en justicia. 25:6 No te alabes delante del rey, Ni estés en el lugar de los grandes; 25:7 Porque mejor es que se te diga: Sube acá, Y no que seas humillado delante del príncipe A quien han mirado tus ojos. 25:8 No entres apresuradamente en pleito, No sea que no sepas qué hacer al fin, Después que tu prójimo te haya avergonzado. 25:9 Trata tu causa con tu compañero, Y no descubras el secreto a otro, 25:10 No sea que te deshonre el que lo oyere, Y tu infamia no pueda repararse. 25:11 Manzana de oro con figuras de plata Es la palabra dicha como conviene. 25:12 Como zarcillo de oro y joyel de oro fino Es el que reprende al sabio que tiene oído dócil. 25:13 Como frío de nieve en tiempo de la siega, Así es el mensajero fiel a los que lo envían, Pues al alma de su señor da refrigerio. 25:14 Como nubes y vientos sin lluvia, Así es el hombre que se jacta de falsa liberalidad. 25:15 Con larga paciencia se aplaca el príncipe, Y la lengua blanda quebranta los huesos. 25:16 ¿Hallaste miel? Come lo que te basta, No sea que hastiado de ella la vomites. 25:17 Detén tu pie de la casa de tu vecino, No sea que hastiado de ti te aborrezca. 25:18 Martillo y cuchillo y saeta aguda Es el hombre que habla contra su prójimo falso testimonio. 25:19 Como diente roto y pie descoyuntado Es la confianza en el prevaricador en tiempo de angustia. 25:20 El que canta canciones al corazón afligido Es como el que quita la ropa en tiempo de frío, o el quesobre el jabón echa vinagre. 25:21 Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan, Y si tuviere sed, dale de beber agua; 25:22 Porque ascuas amontonarás sobre su cabeza, Y Jehová te lo pagará. 25:23 El viento del norte ahuyenta la lluvia, Y el rostro airado la lengua detractora. 25:24 Mejor es estar en un rincón del terrado, Que con mujer rencillosa en casa espaciosa. 25:25 Como el agua fría al alma sedienta, Así son las buenas nuevas de lejanas tierras. 25:26 Como fuente turbia y manantial corrompido, Es el justo que cae delante del impío. 25:27 Comer mucha miel no es bueno, Ni el buscar la propia gloria es gloria. 25:28 Como ciudad derribada y sin muro Es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda. Capítulo 26 26:1 Como no conviene la nieve en el verano, ni la lluvia en la siega, Así no conviene al necio la honra. 26:2 Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina ensu vuelo, Así la maldición nunca vendrá sin causa. 26:3 El látigo para el caballo, el cabestro para el asno, Y la vara para la espalda del necio. 26:4 Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, Para que no seas tú también como él. 26:5 Responde al necio como merece su necedad, Para que no se estime sabio en su propia opinión. 26:6 Como el que se corta los pies y bebe su daño, Así es el que envía recado por mano de un necio. 26:7 Las piernas del cojo penden inútiles; Así es el proverbio en la boca del necio. 26:8 Como quien liga la piedra en la honda, Así hace el que da honra al necio. 26:9 Espinas hincadas en mano del embriagado, Tal es el proverbio en la boca de los necios. 26:10 Como arquero que a todos hiere, Es el que toma a sueldo insensatos y vagabundos. 26:11 Como perro que vuelve a su vómito, Así es el necio que repite su necedad. 26:12 ¿Has visto hombre sabio en su propia opinión? Más esperanza hay del necio que de él. 26:13 Dice el perezoso: El león está en el camino; El león está en las calles. 26:14 Como la puerta gira sobre sus quicios, Así el perezoso se vuelve en su cama. 26:15 Mete el perezoso su mano en el plato; Se cansa de llevarla a su boca. 26:16 En su propia opinión el perezoso es más sabio Que siete que sepan aconsejar. 26:17 El que pasando se deja llevar de la ira en pleito ajeno Es como el que toma al perro por las orejas. 26:18 Como el que enloquece, y echa llamas Y saetas y muerte, 26:19 Tal es el hombre que engaña a su amigo, Y dice: Ciertamente lo hice por broma. 26:20 Sin leña se apaga el fuego, Y donde no hay chismoso, cesa la contienda. 26:21 El carbón para brasas, y la leña para el fuego; Y el hombre rencilloso para encender contienda. 26:22 Las palabras del chismoso son como bocados suaves, Y penetran hasta las entrañas. 26:23 Como escoria de plata echada sobre el tiesto Son los labios lisonjeros y el corazón malo. 26:24 El que odia disimula con sus labios; Mas en su interior maquina engaño. 26:25 Cuando hablare amigablemente, no le creas; Porque siete abominaciones hay en su corazón. 26:26 Aunque su odio se cubra con disimulo, Su maldad será descubierta en la congregación. 26:27 El que cava foso caerá en él; Y al que revuelve la piedra, sobre él le volverá. 26:28 La lengua falsa atormenta al que ha lastimado, Y la boca lisonjera hace resbalar. Capítulo 27 27:1 No te jactes del día de mañana; Porque no sabes qué dará de sí el día. 27:2 Alábete el extraño, y no tu propia boca; El ajeno, y no los labios tuyos. 27:3 Pesada es la piedra, y la arena pesa; Mas la ira del necio es más pesada que ambas. 27:4 Cruel es la ira, e impetuoso el furor; Mas ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia? 27:5 Mejor es reprensión manifiesta Que amor oculto. 27:6 Fieles son las heridas del que ama; Pero importunos los besos del que aborrece. 27:7 El hombre saciado desprecia el panal de miel; Pero al hambriento todo lo amargo es dulce. 27:8 Cual ave que se va de su nido, Tal es el hombre que se va de su lugar. 27:9 El ungüento y el perfume alegran el corazón, Y el cordial consejo del amigo, al hombre. 27:10 No dejes a tu amigo, ni al amigo de tu padre; Ni vayas a la casa de tu hermano en el día de tu aflicción. Mejor es el vecino cerca que el hermano lejos. 27:11 Sé sabio, hijo mío, y alegra mi corazón, Y tendré qué responder al que me agravie. 27:12 El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y llevan el daño. 27:13 Quítale su ropa al que salió fiador por el extraño; Y al que fía a la extraña, tómale prenda. 27:14 El que bendice a su amigo en alta voz, madrugando de mañana, Por maldición se le contará. 27:15 Gotera continua en tiempo de lluvia Y la mujer rencillosa, son semejantes; 27:16 Pretender contenerla es como refrenar el viento, O sujetar el aceite en la mano derecha. 27:17 Hierro con hierro se aguza; Y así el hombre aguza el rostro de su amigo. 27:18 Quien cuida la higuera comerá su fruto, Y el que mira por los intereses de su señor, tendráhonra. 27:19 Como en el agua el rostro corresponde al rostro, Así el corazón del hombre al del hombre. 27:20 El Seol y el Abadón nunca se sacian; Así los ojos del hombre nunca están satisfechos. 27:21 El crisol prueba la plata, y la hornaza el oro, Y al hombre la boca del que lo alaba. 27:22 Aunque majes al necio en un mortero entre granos de trigomajados con el pisón, No se apartará de él su necedad. 27:23 Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas, Y mira con cuidado por tus rebaños; 27:24 Porque las riquezas no duran para siempre; ¿Y será la corona para perpetuas generaciones? 27:25 Saldrá la grama, aparecerá la hierba, Y se segarán las hierbas de los montes. 27:26 Los corderos son para tus vestidos, Y los cabritos para el precio del campo; 27:27 Y abundancia de leche de las cabras para tu mantenimiento,para mantenimiento de tu casa, Y para sustento de tus criadas. Capítulo 28 Proverbios antitéticos 28:1 Huye el impío sin que nadie lo persiga; Mas el justo está confiado como un león. 28:2 Por la rebelión de la tierra sus príncipes sonmuchos; Mas por el hombre entendido y sabio permanece estable. 28:3 El hombre pobre y robador de los pobres Es como lluvia torrencial que deja sin pan. 28:4 Los que dejan la ley alaban a los impíos; Mas los que la guardan contenderán con ellos. 28:5 Los hombres malos no entienden el juicio; Mas los que buscan a Jehová entienden todas las cosas. 28:6 Mejor es el pobre que camina en su integridad, Que el de perversos caminos y rico. 28:7 El que guarda la ley es hijo prudente; Mas el que es compañero de glotones avergüenza a supadre. 28:8 El que aumenta sus riquezas con usura y crecido interés, Para aquel que se compadece de los pobres las aumenta. 28:9 El que aparta su oído para no oír la ley, Su oración también es abominable. 28:10 El que hace errar a los rectos por el mal camino, El caerá en su misma fosa; Mas los perfectos heredarán el bien. 28:11 El hombre rico es sabio en su propia opinión; Mas el pobre entendido lo escudriña. 28:12 Cuando los justos se alegran, grande es la gloria; Mas cuando se levantan los impíos, tienen que esconderselos hombres. 28:13 El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. 28:14 Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios; Mas el que endurece su corazón caerá en el mal. 28:15 León rugiente y oso hambriento Es el príncipe impío sobre el pueblo pobre. 28:16 El príncipe falto de entendimiento multiplicarála extorsión; Mas el que aborrece la avaricia prolongará sus días. 28:17 El hombre cargado de la sangre de alguno Huirá hasta el sepulcro, y nadie le detendrá. 28:18 El que en integridad camina será salvo; Mas el de perversos caminos caerá en alguno. 28:19 El que labra su tierra se saciará de pan; Mas el que sigue a los ociosos se llenará de pobreza. 28:20 El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones; Mas el que se apresura a enriquecerse no será sin culpa. 28:21 Hacer acepción de personas no es bueno; Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre. 28:22 Se apresura a ser rico el avaro, Y no sabe que le ha de venir pobreza. 28:23 El que reprende al hombre, hallará después mayorgracia Que el que lisonjea con la lengua. 28:24 El que roba a su padre o a su madre, y dice que no es maldad, Compañero es del hombre destruidor. 28:25 El altivo de ánimo suscita contiendas; Mas el que confía en Jehová prosperará. 28:26 El que confía en su propio corazón es necio; Mas el que camina en sabiduría será librado. 28:27 El que da al pobre no tendrá pobreza; Mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones. 28:28 Cuando los impíos son levantados se esconde el hombre; Mas cuando perecen, los justos se multiplican.Capítulo 29 29:1 El hombre que reprendido endurece la cerviz, De repente será quebrantado, y no habrá para élmedicina. 29:2 Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra; Mas cuando domina el impío, el pueblo gime. 29:3 El hombre que ama la sabiduría alegra a su padre; Mas el que frecuenta rameras perderá los bienes. 29:4 El rey con el juicio afirma la tierra; Mas el que exige presentes la destruye. 29:5 El hombre que lisonjea a su prójimo, Red tiende delante de sus pasos. 29:6 En la transgresión del hombre malo hay lazo; Mas el justo cantará y se alegrará. 29:7 Conoce el justo la causa de los pobres; Mas el impío no entiende sabiduría. 29:8 Los hombres escarnecedores ponen la ciudad en llamas; Mas los sabios apartan la ira. 29:9 Si el hombre sabio contendiere con el necio, Que se enoje o que se ría, no tendrá reposo. 29:10 Los hombres sanguinarios aborrecen al perfecto, Mas los rectos buscan su contentamiento. 29:11 El necio da rienda suelta a toda su ira, Mas el sabio al fin la sosiega. 29:12 Si un gobernante atiende la palabra mentirosa, Todos sus servidores serán impíos. 29:13 El pobre y el usurero se encuentran; Jehová alumbra los ojos de ambos. 29:14 Del rey que juzga con verdad a los pobres, El trono será firme para siempre. 29:15 La vara y la corrección dan sabiduría; Mas el muchacho consentido avergonzará a su madre. 29:16 Cuando los impíos son muchos, mucha es la transgresión; Mas los justos verán la ruina de ellos. 29:17 Corrige a tu hijo, y te dará descanso, Y dará alegría a tu alma. 29:18 Sin profecía el pueblo se desenfrena; Mas el que guarda la ley es bienaventurado. 29:19 El siervo no se corrige con palabras; Porque entiende, mas no hace caso. 29:20 ¿Has visto hombre ligero en sus palabras? Más esperanza hay del necio que de él. 29:21 El siervo mimado desde la niñez por su amo, A la postre será su heredero. 29:22 El hombre iracundo levanta contiendas, Y el furioso muchas veces peca. 29:23 La soberbia del hombre le abate; Pero al humilde de espíritu sustenta la honra. 29:24 El cómplice del ladrón aborrece su propia alma; Pues oye la imprecación y no dice nada. 29:25 El temor del hombre pondrá lazo; Mas el que confía en Jehová será exaltado. 29:26 Muchos buscan el favor del príncipe; Mas de Jehová viene el juicio de cada uno. 29:27 Abominación es a los justos el hombre inicuo; Y abominación es al impío el de caminos rectos.Capítulo 30 Las palabras de Agur 30:1 Palabras de Agur, hijo de Jaqué; la profecía que dijoel varón a Itiel, a Itiel y a Ucal. 30:2 Ciertamente más rudo soy yo que ninguno, Ni tengo entendimiento de hombre. 30:3 Yo ni aprendí sabiduría, Ni conozco la ciencia del Santo. 30:4 ¿Quién subió al cielo, y descendió? ¿Quién encerró los vientos en sus puños? ¿Quién ató las aguas en un paño? ¿Quién afirmó todos los términos dela tierra? ¿Cuál es su nombre, y el nombre de su hijo, si sabes? 30:5 Toda palabra de Dios es limpia; El es escudo a los que en él esperan. 30:6 No añadas a sus palabras, para que no te reprenda, Y seas hallado mentiroso. 30:7 Dos cosas te he demandado; No me las niegues antes que muera: 30:8 Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; No me des pobreza ni riquezas; Manténme del pan necesario; 30:9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quiénes Jehová? O que siendo pobre, hurte, Y blasfeme el nombre de mi Dios. 30:10 No acuses al siervo ante su señor, No sea que te maldiga, y lleves el castigo. 30:11 Hay generación que maldice a su padre Y a su madre no bendice. 30:12 Hay generación limpia en su propia opinión, Si bien no se ha limpiado de su inmundicia. 30:13 Hay generación cuyos ojos son altivos Y cuyos párpados están levantados en alto. 30:14 Hay generación cuyos dientes son espadas, y sus muelascuchillos, Para devorar a los pobres de la tierra, y a los menesterosos deentre los hombres. 30:15 La sanguijuela tiene dos hijas que dicen: ¡Dame! ¡dame! Tres cosas hay que nunca se sacian; Aun la cuarta nunca dice: ¡Basta! 30:16 El Seol, la matriz estéril, La tierra que no se sacia de aguas, Y el fuego que jamás dice: ¡Basta! 30:17 El ojo que escarnece a su padre Y menosprecia la enseñanza de la madre, Los cuervos de la cañada lo saquen, Y lo devoren los hijos del águila. 30:18 Tres cosas me son ocultas; Aun tampoco sé la cuarta: 30:19 El rastro del águila en el aire; El rastro de la culebra sobre la peña; El rastro de la nave en medio del mar; Y el rastro del hombre en la doncella. 30:20 El proceder de la mujer adúltera es así: Come, y limpia su boca Y dice: No he hecho maldad. 30:21 Por tres cosas se alborota la tierra, Y la cuarta ella no puede sufrir: 30:22 Por el siervo cuando reina; Por el necio cuando se sacia de pan; 30:23 Por la mujer odiada cuando se casa; Y por la sierva cuando hereda a su señora. 30:24 Cuatro cosas son de las más pequeñas de la tierra, Y las mismas son más sabias que los sabios: 30:25 Las hormigas, pueblo no fuerte, Y en el verano preparan su comida; 30:26 Los conejos, pueblo nada esforzado, Y ponen su casa en la piedra; 30:27 Las langostas, que no tienen rey, Y salen todas por cuadrillas; 30:28 La araña que atrapas con la mano, Y está en palacios de rey. 30:29 Tres cosas hay de hermoso andar, Y la cuarta pasea muy bien: 30:30 El león, fuerte entre todos los animales, Que no vuelve atrás por nada; 30:31 El ceñido de lomos; asimismo el macho cabrío; Y el rey, a quien nadie resiste. 30:32 Si neciamente has procurado enaltecerte, O si has pensado hacer mal, Pon el dedo sobre tu boca. 30:33 Ciertamente el que bate la leche sacará mantequilla, Y el que recio se suena las narices sacará sangre; Y el que provoca la ira causará contienda. Capítulo 31 Exhortación a un rey 31:1 Palabras del rey Lemuel; la profecía con que le enseñósu madre. 31:2 ¿Qué, hijo mío? ¿y qué,hijo de mi vientre? ¿Y qué, hijo de mis deseos? 31:3 No des a las mujeres tu fuerza, Ni tus caminos a lo que destruye a los reyes. 31:4 No es de los reyes, oh Lemuel, no es de los reyes beber vino, Ni de los príncipes la sidra; 31:5 No sea que bebiendo olviden la ley, Y perviertan el derecho de todos los afligidos. 31:6 Dad la sidra al desfallecido, Y el vino a los de amargado ánimo. 31:7 Beban, y olvídense de su necesidad, Y de su miseria no se acuerden más. 31:8 Abre tu boca por el mudo En el juicio de todos los desvalidos. 31:9 Abre tu boca, juzga con justicia, Y defiende la causa del pobre y del menesteroso. Elogio de la mujer virtuosa 31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. 31:11 El corazón de su marido está en ella confiado, Y no carecerá de ganancias. 31:12 Le da ella bien y no mal Todos los días de su vida. 31:13 Busca lana y lino, Y con voluntad trabaja con sus manos. 31:14 Es como nave de mercader; Trae su pan de lejos. 31:15 Se levanta aun de noche Y da comida a su familia Y ración a sus criadas. 31:16 Considera la heredad, y la compra, Y planta viña del fruto de sus manos. 31:17 Ciñe de fuerza sus lomos, Y esfuerza sus brazos. 31:18 Ve que van bien sus negocios; Su lámpara no se apaga de noche. 31:19 Aplica su mano al huso, Y sus manos a la rueca. 31:20 Alarga su mano al pobre, Y extiende sus manos al menesteroso. 31:21 No tiene temor de la nieve por su familia, Porque toda su familia está vestida de ropas dobles. 31:22 Ella se hace tapices; De lino fino y púrpura es su vestido. 31:23 Su marido es conocido en las puertas, Cuando se sienta con los ancianos de la tierra. 31:24 Hace telas, y vende, Y da cintas al mercader. 31:25 Fuerza y honor son su vestidura; Y se ríe de lo por venir. 31:26 Abre su boca con sabiduría, Y la ley de clemencia está en su lengua. 31:27 Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde. 31:28 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada; Y su marido también la alaba: 31:29 Muchas mujeres hicieron el bien; Mas tú sobrepasas a todas. 31:30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. 31:31 Dadle del fruto de sus manos, Y alábenla en las puertas sus hechos. |