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In Memory Of Rafael Reynosa

Rafael Reynosa : Top Left

Posted on Wed, Jun. 02, 2004

Marine from Riverside killed in Iraq was father of unborn girl

Associated Press

RIVERSIDE, Calif. - When Marine Lance Cpl. Rafael Reynosa left for Iraq several months ago, he didn't know the gender of the baby his wife was carrying.

"He wanted to have a baby girl and I just found today it's a little girl. He left without knowing what he was having, and that's ... really tough on me," his five-month pregnant wife, Dinora, told KABC-TV on Wednesday.

Reynosa, 28, of Riverside, died Saturday of hostile fire in Al Anbar Province in Iraq, the U.S. Department of Defense said in a statement.

Reynosa will be buried at Riverside National Cemetery.

The Camp Pendleton Marine was a mortarman assigned to the 2nd Battalion, 4th Marine Regiment, 1st Marine Division, I Marine Expeditionary Force.

Reynosa came from Mexico and lived in Santa Ana during his teens. He married Dinora, his high school sweetheart, and the couple moved into the first home they bought together in Riverside a few months ago.

Owning a home was Reynosa's dream.

"Once he got those keys, he's like, 'I'm already an American. I made my American dream,'" his wife said.

Dinora Reynosa said she will tell her girl everything about her father, including that he "is always going to be a hero."

Rafael Reynosa joined the Marines on April 23, 2001. He has received several awards, including the National Defense Service Medal.

---------------------------------------------- Preocupa la muerte de los soldados hispanos

Fernando Suárez del Solar; padre de un soldado caído en Irak, asegura que ‘están cayendo como moscas’; anuncian manifestación contra la guerra en Los Angeles

Jorge Luis Macías>br> Reportero de La Opinión

04 de junio de 2004

La reciente muerte de los infantes de Marina, Benjamín Rigoberto González y Rafael Reynosa Suárez, elevó a más de un centenar la cifra de hispanos caídos en la guerra de Irak, de un total de 820 estadounidenses, lo cual enervó la respuesta de pacifistas y organizaciones de derechos humanos en California, debido a las extrañas circunstancias de las muertes, muchas de las cuales han ocurrido bajo “fuego amigo”.

Al mismo tiempo, Preston Wood, coordinador de la coalición Actúa Ahora para Detener la Guerra y Acabar el Racismo (ANSWER) anunció que planean para mañana una manifestación en el centro de Los Angeles, en contra de la ocupación angloestadounidense en Irak que ha costado 116 mil millones de dólares, y por el pedido a un “inmediato” retorno de las tropas.

“Siguen enviando a jovencitos sin ningún entrenamiento a Irak”, declaró Fernando Suárez del Solar, cuyo hijo Jesús falleció al pisar una mina. “Valga la fea expresión, [los soldados] están cayendo como moscas. Ya son demasiadas muertes a causa del fuego amigo”.

Benjamín González y Rafael Reynosa, —ambos pertenecientes al Segundo Batallón del Cuarto Regimiento de la Infantería de Marina, con base en Camp Pendleton— murieron el 29 de mayo, a consecuencia de la “acción hostil”, en la región occidental de la provincia de Al Anbar.

Según sus familiares, González estaba herido y tenía una costilla rota y el pecho amoratado, pero aun así fue mantenido en la línea de combate para transportar a los prisioneros a la cárcel.

Las causas de su muerte no han sido reveladas oficialmente, aunque dos versiones distintas indican que “alguien, por accidente, le lanzó una granada” y que “probablemente recibió un balazo a traición por parte de los iraquíes”.

“Esta guerra debe de parar. El presidente Bush debería ponerse en el lugar de mi novio que ha muerto”, expresó Ana Isabel Martínez, la prometida de Benjamín. “Los soldados deben regresar. No necesitan medallas para sentirse honrados; creo que el honor más grande para ellos sería haber cambiado la vida a los iraquíes, aunque no sean ciertas las causas que dieron origen a la guerra”.

Fernando Suárez del Solar apuntó que, de confirmarse la hipótesis de que González murió tras el lanzamiento de una granada del “fuego amigo” y trabajaba aún con la costilla rota, “eso nos enseña que a este gobierno [del presidente George W. Bush] no le importa la seguridad de nuestros muchachos en Irak”.

“¡Dios mío, no es posible que nos estén destruyendo aquí mismo!”, agregó Del Solar, un fuerte crítico de la política militar estadounidense en Irak.

Según un informe del Pentágono, en la campaña militar de Estados Unidos en Irak, 22 soldados hispanos perecieron durante la invasión iniciada el 19 de marzo de 2003 y el resto después de 1 de mayo del año pasado, cuando el presidente Bush declaró que habían terminado “los principales combates”.

Hasta la fecha, en esa guerra han muerto más de 930 militares: 820 estadounidenses, 59 británicos, 18 italianos, 11 españoles, seis búlgaros e igual número de ucranianos, cuatro polacos, dos tailandeses, un danés, un holandés y un salvadoreño. Las pérdidas iraquíes, incluidos civiles, sobrepasan los 10 mil muertos.

Además, aproximadamente 85 mil hispanos o el 7% de todas las Fuerzas Armadas estadounidenses están en servicio activo, pero casi 37 mil de ellos no son ciudadanos .

Los soldados hispanos también están sobrerepresentados en las labores de manejo de armas pesadas, con el 17.7%, de acuerdo a un informe del Centro Hispano Pew, publicado en 2003.

Por su parte, Rafael Reynosa, de 28 años de edad y originario de San Gregorio, Michoacán, falleció el mismo día que Benjamín González por el “fuego hostil” iraquí.

El sueño del inmigrante mexicano era ser propietario de una casa, y su viuda, Dinora Reynosa, está en el cuarto mes de embarazo, en espera de dar a luz a una niña.

“Una vez que él tuvo las llaves en sus manos dijo sentirse realmente estadounidense. Ya soy estadounidense. Logré mi sueño americano”, declaró Dinora.

Medea Benjamín, directora y fundadora de la organización defensora de derechos humanos Global Exchange, con base en San Francisco, dijo a La Opinión que la mayoría de los soldados latinos fallecidos en Irak provenía de ciudades pequeñas del país.

“Es que en esas ciudades [como El Monte y Santa Ana], miles no tienen un buen futuro ni trabajo, o provienen de familias pobres”, afirmó Benjamín.

Coincidió con la activista Dante Zappla, que trabaja con jóvenes hispanos en la secundaria Fremont, de Los Angeles, y quien perdió a su hermano de crianza, Sherwood Baker, apenas el pasado 26 de abril.

“Los reclutadores actúan de manera agresiva con éstos jóvenes hispanos, porque saben que tienen pocas opciones de continuar los estudios superiores”, dijo Zappla.

Baker, de 30 años de edad, era un sargento del Segundo Batallón del 103 Regimiento Blindado de la Guardia Nacional destacada en Plymouth, Pennsylvania. Falleció el 26 de abril de este año, en una explosión cuando buscaba presuntas “municiones químicas” en un edificio al noroeste de Bagdad.