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Reforestación No debe olvidarse que todos los ambientes y comunidades vegetales son producto de un proceso muy largo de evolución biológica y que en ellos las interacciones entre plantas y animales son muy complejas. Por eso, aunque los planes de deforestar se llevan a cabo desde el siglo pasado, muchas veces, por falta de planeación, se ha cambiado la composición de bosques. Por casa árbol que se derriba, deberán plantarse 2 o más de la misma especie. En 1990 el número de hectáreas forestales fue de 40 000, lo que aún resulta insuficiente, pues el valor ecológico se alcanza entre los 10 y 15 años al llegar a su madurez.
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