YO TE RECUERDO, MADRE


Madre de mi alma, siempre llorando,

recuerdo el beso de tu querer;

el beso santo que rebozando

que amor y vida me diste ayer

placer y gloria dulce sonrisa

tierno murmullo me dio tu amor,

hoy solo juego con las cenizas

de aquellas flores de tu balcón.


¡Oh madre mía que mundo bello

entre tus brazos siempre soñé!

Hoy triste vago con fatal sello

por negra senda yo seguiré.

Madre, mis noches de crueles horas,

veo el retrato de nuestro ayer

y al ver doradas bellas auroras

que hoy son oscuras, no sé que hacer.


Triste, recuerdo, cuando era niño,

tras de la flores corriendo fui

y entre las rosas con gran cariño

mi tierno beso madre te di.

Hoy todo a muerto, todo ha cambiado

triste recuerdo, horas de amor

tu abandonada, yo abandonado

tú agonizando, muriendo yo


Yo soy la sombra que va de errante

por la pampa mustia y sin flor;

tú eres la madre, que delirando

llorando logra darme dolor.

El cruel destino, madre de mi alma,

que nos separa sin compasión.

¡Tu siempre lloras sin hallar calma;

yo tengo muerto ya el corazón!


Canta Agustín Magaldi Coviello a dúo con Pedro Noda