Eternamente Dormida |
estabas aquel día. Dios te llamaba en ese instante, Entonces… supe que te perdía.
¡Todo me parecía cruel, despiadado, injusto! Sentí… que no podía hacer nada, Percibir la muerte, me llevó un gran disgusto.
trataron muchos, inútilmente calmarme, Sin embargo, tu dulce y armoniosa voz, ¡Nunca!, ¡nunca volvería a llamarme!
Era demasiado tarde, era… nuestra despedida. El final se presentaba de repente, y en ese instante, me acerqué, te sentí fría al besarte, ¡Eternamente dormida!
emociones y tristezas, que pasé en tu compañía, El encanto de tu risa, la energía de tus ojos Tu dulzura y fortaleza, tu dedicación y alegría.
|
con angustia, desesperación y dolor, acudí a tus brazos, en busca de ese consuelo, en busca de ese valor en busca de ese consejo, en busca de tu amor.
Y al saber que tu consejo me ayudaría a vencer Y al saberte a mi lado llena de algarabía Todo se resolvía, todo volvía a florecer.
Pero lo que quiero decirte, quizás donde estés, lo percibas Donde te encuentres… mamá Porque el amor de una madre no se pierde jamás.
Solamente recordarte, con nostalgia, Con dolor, con un poco de ironía. A ti... mi gran amiga.
y tristemente llorar, cuando por nostalgia traigo a mi mente tu imagen de aquel día… ¡Eternamente dormida!
|