EL BRINDIS BOHEMIOGuillermo Aguirre Fierro (Mexicano) El Paso, Texas 1915
Manuel BernalEn torno de una mesa de cantina, una noche de invierno, regocijadamente departían seis alegres bohemios. Los ecos de sus risas escapaban y de aquel barrio quieto iban a interrumpir el imponente y profundo silencio.
en espirales se elevaba al cielo, simbolizando al resolverse en nada, la vida de los sueños.
inspiración en todos los cerebros, y, repartidas en la mesa, copas pletóricas de ron, whisky o ajenjo.
aquel grupo bohemio, del que brotaba la palabra chusca, la que vierte veneno, lo mismo que, melosa y delicada, la música de un verso.
hallábanse más lejos del grupo, y nueva inspiración llegaba a todos los cerebros, con el idilio roto que venía en alas del recuerdo.
aquel grupo bohemio celebraba entre risas, libaciones, chascarrillos y versos, la agonía de un año que amarguras dejó en todos los pechos, y la llegada, consecuencia lógica, del "feliz año nuevo" . . .
- las doce, compañeros; digamos el "requiescat" por el año que ha pasado a formar entre los muertos. ¡Brindemos por el año que comienza! porque nos traiga ensueños; porque no sea su equipaje un cúmulo de amargos desconsuelos . . .
que la vida nos lanza, de vencer los rigores del destino, por la esperanza, nuestra dulce amiga, que las penas mitiga y convierte en vergel nuestro camino.
puesto fin con violencia esgrimiendo en mi frente mi venganza; si en mi cielo de tul limpio y divino no alumbrara mi sino una pálida estrella: Mi esperanza.
esta noche has estado y hablaste bueno, breve y substancioso. El turno es de Raúl; alce su copa y brinde por . . . Europa, ya que su extranjerismo es delicioso . ...
brindo por mi pasado, que fue de luz, de amor y de alegría, y en el que hubo mujeres seductoras y frentes soñadoras que se juntaron con la frente mía. . .
que hoy cubre de negrura mi corazón, esparce sus consuelos trayendo hasta mi mente las dulzuras de goces, de ternuras, de dichas, de deliquios, de desvelos.
brote un torrente de inspiración divina y seductora, porque vibre en las cuerdas de mi lira el verso que suspira, que sonríe, que canta y que enamora.
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Brindo porque mis versos cual saetas lleguen hasta las grietas formadas de metal y de granito, del corazón de la mujer ingrata que a desdenes me mata . . . ¡pero que tiene un cuerpo muy bonito!
porque enjuguen mi llanto sus manos que me causan embelesos; porque con creces mi pasión me pague. .. ¡vamos!, porque me embriague con el divino néctar de sus besos.
de aquellas tan humanas que hallan en todas partes acomodo, y en cada frase de entusiasmo ardiente, hubo ovación creciente, y libaciones, y reir, y todo.
por los castos amores que hacen un valladar de una ventana, y por esas pasiones voluptuosas que el fango del placer llena de rosas y hacen de la mujer la cortesana.
el del bohemio puro, de noble corazón y gran cabeza; aquel que sin ambages declaraba' que sólo ambicionaba robarle inspiración a la tristeza.
frente a la alegre tropa desbordante de risa y de contento los inundó en la luz de una mirada, sacudió su melena alborotada y dijo así, con inspirado acento:
en la que halláis consuelo en la tristeza, rescoldo del placer ¡desventurados!; no por esa que os brinda sus hechizos cuando besáis sus rizos artificiosamente perfumados.
siento por esta vez no complaceros. Brindo por la mujer, pero por una, por la que me brindó sus embelesos y me envolvió en sus besos; por la mujer que me arrulló en la cuna.
lo que vale el cariño exquisito, profundo y verdadero; por la mujer que me arrulló en sus brazos y que me dió en pedazos uno por uno, el corazón entero.
que piensa en el mañana como en algo muy dulce y muy deseado, porque sueña tal vez que mi destino me señala el camino por el que volveré pronto a su lado.
por la que con su sangre me dió vida, y ternura y cariño; por la que fue la luz del alma mía; y lloró de alegría sintiendo mi cabeza en su corpiño.
que en lágrimas desflore esta pena letal que me asesina; dejad que brinde por mi madre ausente, por la que llora y siente que mi ausencia es un fuego que calcina.
y que del cielo implora que vuelva yo muy pronto a estar con ella; por mi madre bohemios, que es dulzura vertida en mi amargura y en esta noche de mi vida, estrella . ..
profanó el sentimiento nacido del dolor y la ternura, y pareció que sobre aquel ambiente flotaba inmensamente un poema de amor y de amargura.
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