En el aspecto religioso, Francia vivía la última de las contiendas religiosas entre católicos y protestantes, llamada La Guerra de los Treinta Años, la cual terminaría con La Paz de Westfalia que marcó el comienzo de la hegemonía de Francia en Europa. En el ámbito político, el cardenal Richelieu consolidaba su poder y la autoridad real haciendo uso de asesinatos políticos y de la supresión de la nobleza.
Richelieu logró también colocar de nuevo a Francia como potencia Europea, abatiendo el poder de la casa de Austria. Pudo asimismo salvaguardar a Francia del peligro que representaban los protestantes para la seguridad nacional. Dejó al morir como sucesor al cardenal Mazarino, el cual, siguiendo los pasos de Richelieu pudo resolver con notable habilidad el problema de la guerra de La Fronde y conseguir de España importantes territorios al firmar con ella la Paz de los Pirineos (la cual concertó también el matrimonio de Louis XIV con María Teresa de Austria). De esta forma, Mazarino fue capaz de dar paso al gobierno absolutista de Louis XIV.
Vida
Blaise (o Blas) Pascal, nació en Clermont-Ferrand, Francia, de familia noble en 1623. Su padre Etiénne Pascal, con objeto de atender mejor la educación de su hijo se trasladó a París.
Aunque el padre de Pascal siempre quiso que este se dedicara a las humanidades; la habilidad matemática de éste, le hizo reflexionar y se decidió a iniciarlo en la ciencia. Le fue entonces permitido asistir a las reuniones de sabios a las que su padre asistía, y a los dieciséis años había escrito ya un ensayo sobre los cónicos y tres años más tarde inventaría una máquina aritmética. Vivió ocho años en Ruán, Normandía, a donde su padre fue transferido y recibió gran influencia jansenista. Hizo repetidas pruebas sobre el vacío y la presión del aire. En 1652, murió su padre, y tres años más tarde el mismo se salvaría de morir en un accidente, lo que lo haría decidirse a dedicarse únicamente a Dios, al igual que su hermana, que se había vuelto religiosa. En 1655 se retiró a Port-Royal-des-Champs a defender a Arnauld, que había sido acusado por la Sorbona. Esto lo hizo escribiendo sus dieciocho Cartas Provinciales en las que atacaba el casuísmo de los jesuitas. Nunca se alejó de las prácticas científicas, y en este periodo cultivó el cálculo de probabilidades y la teoría de la roulette o cicloide.
En esta misma época, en el año de 1661 su hermana Jacqueline o soeur Sainte-Euphémie muere. Pascal empezó a escribir su Apología de la religión cristiana, que dejó inacabada al morir en París en 1662. Sus amigos publicarían sus notas para este libro (con muchos retoques) en 1670 con el título de Pensamientos.
Pascal fue una figura muy compleja y completa, que cultivó ciencias como la filosofía tanto como la matemática y la física.
Su prosa castiza, según varios contemporáneos, es modelo de expresión didáctica.
Sus obras incluyen el teorema que lleva su nombre y a su Essai sur les coniques (Ensayo sobre los cónicos). Con su Traité de l’equilibre des liqueurs (Tratado del equilibrio de los fluidos) y su Traité de la pesanteur de la masse de l’air (Tratado de la pesadez de la masa de aire), echó los cimientos de la estática de los fluidos.
Sus experiencias sobre el vacío y la presión atmosférica quedaron registrados en Préface pour un traité du vide (Prefacio a un tratado del vacío) y Recit de la grande experiénce (Relato de la gran experiencia) respectivamente.
En el área de las humanidades son de importancia sus dieciocho Lettres Provinciales (Cartas provinciales) y la obra que contiene sus notas al libro inconcluso de Apologie de la religion chretiénne (Apología de la religión cristiana), publicado bajo el nombre de Pensées (Pensamientos).
Por último se le deben reconocer sus méritos indiscutibles por inventar el barómetro, idear la prensa hidráulica y mejorar la máquina aritmética.
Pascal tuvo una aportación al cálculo muy concreta: la invención de la roulette o cicloide, que se define como la curva plana descrita por un punto de una circunferencia cuando esta rueda sobre una línea recta. Su descubrimiento fue registrado y descrito detalladamente en sus obras Traité générale de la roulette (Tratado general de la ruleta) y Dimension des lignes combes de toutes les roulettes (Dimensión de líneas curvas en todas las ruletas) que le fueron comunicadas a Huygliens, junto con otros muchos tratados de geometría que involucran algunos otros conceptos del cálculo. Con su descubrimiento del cicloide Pascal preludiaría el cálculo integral.
