SIGNO
Tórnase el ojo sabio y la mano piadosa
cuando por el tumulto de la vida ligera
cruza una idea a modo de sutil mariposa.
(La esfinge tiene alas... Sangra la Primavera).
La verdad viene a veces cuando nadie la espera;
luego algun corazón abre la vaporosa
urna en que duerme inquieta la terrible Quimera.
Y el milagro está hecho. Y ha brotado una rosa.
Almas que aún no encontrasteis el secreto, yo os digo
que en la cáscara marga y en las miles del higo
el sabor sólo es uno es el labio el destino...
No encontraréis el agua lejos de las cisternas...
Con los ojos adentro, desde vuestro recinto
podéis mirar el mar de las aguas eternas.
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