Disclaimers: Los personajes de Xena y Gabrielle y otros de la serie pertenecen a Renaissance Pictures/MCA Universal, esta historia tiene el fin de entretener y no tiene fin de lucro.
Relación amorosa entre dos mujeres.
Cualquier opinión o critica constructiva a: xena_angy@yahoo.com
¡ HE PERDIDO MI LUZ ¡
SEGUNDA PARTE DE "LA PEOR DE MIS CULPAS "
Por Xena Futura.
UNA PESADILLA
Aun estaba oscuro en aquel valle, la fogata luchaba por su supervivencia, pero la brisa que se remolineaba sobre ella la ahogaba, hasta que finalmente se apagó. Todo quedó en penumbras, era como ver dentro del hocico de un lobo. Gabrielle estaba acurrucada en sus mantas, hacia frío y no tenía más remedio que taparse de pies a cabeza. De pronto percibió un ruido sospechoso entre los arbustos, alguien se aproximaba sigilosamente, no cabía duda.-¿Xena?...--Movió a la guerrera para despertarla sin tener resultado.
Pronto tomó su báculo y se internó en los árboles, era una penumbra total como nunca había visto. En menos de un abrir y cerrar de ojos sintió que alguien la tomó por detrás tapándole la boca con una mano, una grotesca mano, y quitándole su báculo de manera brusca, le dijo al oído :
-Hola. Gabrielle. Vine a buscarte. Después de aquella noche inolvidable he venido por más-- Gabrielle no podía dar crédito a lo que estaba escuchando, su asombro fue aun mayúsculo cuando pudo ver a su atacante. ¡¡¡¡Se trataba de Minius!!!!. Tenía una sonrisa completamente diabólica con mirada de rabia y odio. Fácilmente arrancó la falda de la bardo, ella impotente y al borde de desfallecer, intentó liberarse sin éxito.....
-Nooooo, otra vez noooo!!! Xenaaaa!!!-- gritó desesperada
Gabrielle se incorporó brusca y agitadamente, miró a su alrededor, la fogata aun estaba encendida. Argo estaba tranquila a un lado, todo estaba callado y en absoluta tranquilidad. Miró a su lado y ahí estaba...la mujer que le había robado el corazón, aquella mujer tan íntegra, llena de fortaleza y valentía estaba aun dormida. Pronto se percató de que aquel horrendo ataque era tan solo una pesadilla. Se miró las manos y estaban temblorosas y llenas de sudor, al igual que todo su cuerpo. Cuando al fin se sintió segura de que todo estaba bien, se recostó en sus mantas quedando con la vista hacia Xena, la cual se podía apreciar que dormía plácidamente. La contempló algunos segundos que fueron suficientes para que sus ojos se llenaran de lágrimas.
--¿Porqué Xena?. ¿Por qué ocurrió asi?. Sé que debí haberte hecho caso pero entiéndeme, me perturbé por tu ausencia no supe que hacer. Ahora me mata tu frialdad, hace días que no me tocas, necesito tus besos, tus muestras de cariño. Xena, no sé cuanto tiempo soporte sentirte tan lejos de mi-- Gabrielle dijo quedamente estas palabras con las mejillas y los ojos empapados. Parecía que el subconsciente de la guerrera atendía aquella declaración, pues inmediatamente se dibujó una expresión de tristeza y enojo en el rostro de la guerrera y bajo el sueño se giró dándole la espalda.
Gabrielle sintió el fuerte frío en su cuerpo, tuvo que aguantárselo entre sus mantas y sus propios brazos, pues los de la guerrera esta vez no estaban dispuestos a cubrirle como era costumbre. Cerró los ojos e intentó dormir.
EL PESAR DE XENA
Ya estaba bastante avanzada la mañana, Argo estaba cepillada, Xena esperaba a que se cocinaran unos suculentos pescados. Miró hacia donde aun descansaba Gabrielle y se preocupó un poco porque no había despertado, estaba pensando cerciorarse si se encontraba bien cuando se percató de un movimiento entre las mantas de la bardo, así se dió cuenta de que nada malo le ocurría. La miró por unos instantes, su mirada era fija y neutra no podía expresar gran cosa. Caminó hacia la orilla del lago y se sentó en una roca. Cerró sus ojos y un recuerdo la atormentaba. La escena donde yacía el maldito de Minius a lado de su amada Gabrielle y ella en la cama desnuda tan indefensa.
--Por los Dioses!!!-- Exclamó sollozando-- Yo debí estar ahí, debí saberlo. ¿Por qué Diablos no me dejó matarlo?. ¿Por qué Diablos me siento molesta? No debí fallarle de esa manera, me siento avergonzada-- La guerrera permaneciendo sentada posó su mirada en el lago, su rostro con una expresión de resentimiento y vergüenza.
-Casi se queman los pescados-- Escuchó una voz detrás suyo
-Oh! A eso iba, por supuesto que no los había olvidado-- Rápidamente limpió unas lágrimas que no pudo retener y se giró a ver a Gabrielle.
--¿Xena, estas bien?-- Le preguntó agachándose, mirándola muy de cerca
-- Estoy estupenda-- Dijo con aparente seguridad y bruscamente se incorporó provocando que Gabrielle se tambalease estando en cunclillas. La joven rubia tuvo la misma sensación de rechazo, mordió su labio inferior, se incorporó y decidida fue tras Xena.
-Xena. ¡¡¡Ya basta!!!. No puedes seguir tratándome de ese modo--
-¿De que hablas?.- -Preguntó tratando de disimular lo que era obvio.
-Tu bien lo sabes, han pasado ya varios días que estas así. Me evades, a la hora de dormir te vas casi hasta el otro extremo del valle. Casi no me diriges la palabra, caminas como si lo hicieras sola. Para ti ya no existo!!!!. Si crees que hice algo malo dímelo, porque exactamente no lo sé...... Tu sabes que no fue culpa mia, Minius......
-¡¡¡¡No me menciones a ese bastardo. ¿Me oyes?!!! No quiero hablar más de eso, no por ahora-- Dijo exaltada dándole la espalda.
-Entonces ¿Cuando?- Gabrielle la tomó del brazó y la giró.
-No lo sé. Hay muchas cosas que debo pensar, pero necesito tiempo-
-¿Qué tipo de cosas?--
-Ya te dije que no quiero hablar más del asunto-
-Xena, si no lo aclaramos todo de una vez por todas jamás volverá a ser como antes. Tu has dicho que hay cosas que no deben pensarse demasiado. Me tratas mal y ni siquiera sé exactamente porque lo haces, es como si me culparas de todo. Y debo reconocer que hay veces que en verdad me siento culpable--
-Aun no entiendo porque no dejaste que matara a ese infeliz. Tengo dudas que nunca antes había tenido, te dije que no confiaras en él y como siempre no escuchaste--
-Dijiste que tenías dudas....¿Cuáles son?--
Xena intentó reflexionar un poco, pero solo consiguió en su mente aquella imagen tan desgarradora e imperdonable para ella misma, la lleno de ira y tristeza. Y tratando de ocultar su propia culpa respondió:
-¡¡¡¡Una de ellas es que creo que te sentiste bien al estar en esa cama!!!!-- Fue todo lo que la guerrera pudo decir . Su rabia, culpa y celos le nublaban la mente sin dejarla razonar.
-¿Qué has dicho? ......- Musitó Gabrielle. --No puede ser. ¿Xena, como puedes creer eso?. Imaginé cualquier cosa pero.....--
-Te dije que no preguntaras. Estoy aturdida porque sé que debí evitarlo, tengo una mezcla de sentimientos que no puedo entender. Cuando te miro quisiera ir a matar a ese desgraciado. En mis sueños veo como te cubre con su cuerpo, como te toca y lo peor de todo es que veo que le correspondes...-
- Me estas haciendo daño Xena. ¿Cómo puedes pensar eso?-- Gabrielle solo recibió como respuesta la profunda mirada de Xena, similar a la expresión que tiene la guerrera cuando esta a punto de combatir. Los ojos de la bardo se nublaron y la voz se le quebró cuando comenzó a decir:
- No puedo creer que dudes. Dejé mi casa por ti, maté a mi hija porque dijiste que era lo correcto, todo lo he hecho porque yo sí he creído en ti. No es justo que dudes de mi después de todo eso y menos que quieras culparme por lo que sucedió. Tu sabes porque no quise que lo mataras, lo sabes--
-El tormento de los Dioses en cada sueño me quema el corazón. Solo, solo déjame pensar ¿quieres?-
-Por ahora sé que no soporto que me sigas tratando de este modo..... - El silencio invadió por unos segundos y Gabrielle prosiguió:--¿Xena? ...... Me voy, si quieres tiempo para pensar entonces lo tendrás--
En ese momento la guerrera sintió como si se hundiera una daga en el corazón. Aún le daba la espalda a Gabrielle, cerró los ojos y respondió:
-Bien. Mi actitud no va a cambiar pronto y tienes razón al decir que no mereces este trato. Así que es mejor que te vayas--
Sin saber exactamente el porque de todas esas palabras, la guerrera se encontraba en una maraña de sentimientos. Gabrielle con los ojos llenos de lágrimas, tomó sus cosas y comenzó a tomar su ruta. De pronto se detuvo y dijo fuertemente pero sin girarse:
-Si de algo te sirve..... "Te amo Xena"-- La bardo siguió su camino con la esperanza de que hubiera alguna respuesta, pero nada. Solo agachó la cabeza y se alejó.
Cuando la guerrera asumió que Gabrielle ya estaría lejos, también emprendió su camino, en sentido opuesto.
LA REFLEXIÓN
Habían pasado 40 amaneceres desde que Gabrielle se fue. Aunque la guerrera trataba de mantenerse ocupada, era inevitable pensar en ella. Luego de haber salvado una villa Xena decidió alejarse y estar completamente sola para pensar en lo sucedido. La noche comenzaba a caer y decidió campar....Prendió la fogata, dió de comer a Argo y acomodó sus mantas para dormir. Se recostó y al mirar a su lado sintió un vacío terrible....
--Por los Dioses... He sido tonta al disfrazar mi vergüenza con celos estúpidos. Después de todo fue mi culpa, yo debí saber exactamente lo que sucedería. Gabrielle: te necesito tanto como estas estrellas necesitan la luz. Yo siento que estoy perdiendo la mía. Pero... como ir a buscarla con este sentimiento de culpa que todavía siento, le fallé por segunda vez y eso nadie me lo va a quitar de la cabeza-- La guerrera miraba las estrellas, pensando en la sonrisa de Gabrielle, en su nobleza, en su corazón y amor puro. Pronto pudo perderse en un profundo sueño.
--Mira mis manos, tiemblan así por ti, siento el encanto de una noche en tus brazos; dame al fin de tu amor, de tu corazón, que ya es hora de ser felíz. Lléname de amor, te necesito. Si supieras cuanto te amo y el lugar que ocupas en mi corazón. Si supieras cuanto te extraño y cuanto añoro sentir tu calor; eres el motivo que me hace vivir. Eres parte de mi y no puedo aguantar este amor que poco a poco me quiere matar. Si supieras cuanto he llorado al verme en mi habitación tan lejos de ti.... --
--¿Gabrielle???- Xena abrió los ojos, exaltada. Había soñado a Gabrielle diciéndole esas palabras. De inmediato, tomó sus cosas, preparo a Argo y decidida fue a buscar a el amor de su vida.
--Cuando murió Hope, al separarnos ella se refugió con las amazonas. Allá iré-Se alejó a toda velocidad.
Casi amanecía cuando llegó a territorio amazona.
--Ephiny.... que gusto verte-
--¿Qué pasa Xena? ¿Todo esta bien? ¿Dónde esta Gabrielle?-
--¿¿Qué??. ¡¡¡No me digas que ella no esta aquí!!!-
--Pues así es. Dime ¿¿¿Qué sucede???-Preguntó la reina amazona, preocupada.
--Es un poco largo de contar y no tengo tiempo ahora. Iré a buscarla a casa-
--Dinos si la encontraste-Gritó Ephiny
--¡¡ Lo haré!!-
LA INTRIGA DE ARES
Gabrielle estaba en su tierra natal: Potedia; pidió a sus padres que la dejarán ahí por unos días, ellos aceptaron. Se encontraba sacando agua de un pozo. De pronto....
-Hola Gabrielle-
La joven se giró y se encontró frente a Ares.
-Ah! Eres tu. ¿Qué quieres?- Le preguntó dándole la espalda nuevamente
-¿Es así como recibes al Dios de la guerra?. Cuantos guerreros darían su vida por verme en persona, y tu solo dices un "¿Qué quieres?"--
-No me sorprende verte. No estoy de humor para conversar y menos contigo. Además dijiste que había guerreros que les sorprendería verte, yo no soy una guerrera-
-Creo que te equivocas -
-¿Qué?-
-No has pensado lo que será de tu vida?. Es decir, la gente tiende a hacer cambios, a dedicarse a su verdadera vocación. Tu tienes un gran potencial y has aprendido mucho de Xena ¿Cierto?-
-¿Qué quieres decir?- Gabrielle pregunta interesada
-Ahora que Xena y tú se han separado. ¿Qué será de ti?. Le has dado todo. Y ni siquiera tienes su confianza, ya lo viste con el incidente de "aquella" noche. No confía en ti. Cree que tu sedujiste a Minius, le has dicho un millón de veces que no es tu culpa, sin embargo, no recibes nada de ella. ¿No sería mejor que le mostraras tu fortaleza? ¿Que le muestres que tu puedes hacerlo mejor?--
-No entiendo de que hablas-
-.Lo entiendes perfectamente- Ares mira a Gabrielle con cierta atracción
-Estas loco. Ya te dije que no soy una guerrera--
-No olvides que eres una Princesa Amazona, bueno, hablamos de Amazonas, peor es nada, por algo se empieza-
-Yo solo espero a que Xena recapacite y me busque, solo le estoy dando tiempo para que salga de esa actitud, sé que reflexionará y todo será como antes- Dijo Gabrielle tratando de convencerse
-Ah! Si?. Digamos que ella te perdona pero tú....... ¿La perdonarás?-
-No tengo nada que perdonarle. Simplemente cometí un error, ella me advirtió-
-Mi ingenua Gabrielle. El amor que le tienes te ciega, no te deja ver más allá. No es la primera vez que te ocurre algo similar. ¿Recuerdas a Dahak?-Preguntó Ares de forma intrigante
-Eso ya pasó. Estuvimos confundidas, nos perdonamos por lo sucedido y nuestro amor triunfó como lo hará ahora-
-Ah! ja....... ¿Sabes porqué se perdío durante el combate en Memphis?. No te dijo acaso lo que sucedió la misma noche en la que tú estuviste con Minius?--
-No hubo tiempo para hablar de eso-
-No hubo tiempo o ¿No quiso hablarlo?. Gabrielle, Xena disfrutó de la misma droga que tú y esa misma noche ella estuvo conmigo. ¿Sabes? Fue estupendo, debo decir que no ha perdido el toque, es igual que cuando peleaba para mi-
-No te creo- Comentó Gabrielle bastante enfadada
-Bien, míralo tu misma- Ares señaló hacia el pozo, y sobre el agua hizo que se reflejara la imagen en donde Xena yacía en la cama con el pecho descubierto y su vestido rojo desgarrado y Ares besándola.
-Por los Dioses..... Xena!! - Gabrielle exclamó entre dientes-
-No todo es miel sobre hojuelas. ¿Cómo puede ella pedirte fidelidad, sin darte lo mismo?. Ahora ella esta indignada por lo sucedido y mírate tú sintiéndote culpable. No pierdas más tu tiempo y has tu propia vida. Demuéstrale que puedes hacerlo mejor...... Bien, yo solo quise ayudar--
Ares desapareció entre el resplandor peculiar. Gabrielle quedó ahí, atónita, con los ojos inundados y completamente confundida, decepcionada, herida y muy resentida. Solo pasó unos minutos tratando de pensar, parada ahí, sin poder concretar nada y completamente destruida por dentro. Un gran resentimiento se apoderó de ella, secó sus lágrimas y se dirigió corriendo a su habitación. Ahí estaba su hermana Laila y le comentó lo que había sucedido, mientras escribía algo en un pergamino.
-¿Cómo puede hacerte eso? Y yo que creí que era una buena mujer, pensé que en verdad te amaba. Lo siento Gabrielle. Ahora ¿que piensas hacer?-
-Ares tiene razón, haré mi propia vida - Dijo Gabrielle sollozante
-Pero, ¿estas segura de que es lo que quieres hacer?-
--De lo que estoy segura, es que ya no puedo seguir esperándola sintiéndome culpable, no merece más mis lágrimas, ni mi amor. Solo hazme un favor ¿Quieres?. Si ella se para por aquí, dale este pergamino ¿Si?. Me voy--
-¿A donde?-
-A retomar mi trono, estoy segura de que les dará alegría verme-Dijo Gabrielle tratando de mostrarse dura, pero su tristeza era muy evidente. Dispuesta y llevando consigo lágrimas, se fue de casa.
EL DOLOR
En Potedia se acercaba Xena a todo galope. Pronto se detuvo en una humilde casa. Nerviosa se acercó a la puerta, con la completa seguridad de que encontraría ahí a su hermosa Gabrielle, es más, podría ser que fuera ella misma quien le abriera la puerta. Tomó un poco de aire, sentía que su corazón le latía tan fuerte que parecía salirse de su lugar. Segundos después de que llamó a la puerta, Laila apareció.
--¿Qué buscas aquí?-Preguntó enfadada
--Quiero ver a Gabrielle. Por favor Laila llámala ¿Quieres?-
--Aunque quisiera no puedo hacerlo. Ella no está aquí y me pidió que no te dijera a donde fué-
--¿Qué?. Vamos Laila, dime donde está-Preguntó ansiosa la guerrera entrando a la casa, comenzando a buscar y llamar a Gabrielle....
--¡¡ Ya te dije que no está aquí!!. Dejó esto para ti, creo que no son buenas noticias... Nunca debiste hacerle daño a mi Hna. Xena. Ella es buena y no merece que la trates así. Ahora, te pido que salgas de casa. A mis padres no les agradará verte-
La guerrera tomó el pergamino y sin decir palabra alguna salió, tomó a Argo y caminó hacia unos árboles.
Temerosa desenrolló el pergamino y comenzó a leer:
"Xena: Para cuando leas este pergamino yo estaré muy lejos, estoy en un lugar que ni siquiera te imaginas. Supe lo que sucedió contigo y Ares esa misma noche y no sabes como me has decepcionado, nunca lo creí de ti. ¿Cómo pudiste tratarme tan mal por algo que no propicié siendo que tú hiciste lo mismo?. En estos días conocí a alguien que me ha hecho recobrar la alegría y sabes? Fue fácil olvidarte. Dejemos las cosas como están y por favor no me busques porque esta vez no me encontrarás"
Gabrielle
Pronto la guerrera estaba hecha un mar de lágrimas, con las manos temblorosas y una tristeza indescriptible, arrugó el pergamino...
--Por los Dioses!!! Gabrielle, no puedes pensar que Ares y yo....no fue así. -Xena se hundió en su tristeza, montó su caballo y se alejó.
LA NUEVA DESTRUCTORA
En medio de una guerra bastante furiosa, unas mujeres caían sobre una avanzada de espartanos. Era increíble ver, las sangrientas tácticas, la forma de meterse en el campo de batalla y ganar. De entre todos los heridos una mujer rubia de baja estatura, montada en su caballo daba un grito de triunfo, los pocos espartanos que quedaron vivos huyeron.
-- Reina Gabrielle ¡!! .Quiero decir ..... Reina Mileska. Todo sucedió como lo planeaste. Tenias razón , si cercábamos por ambos lados no tendrían salida ¡!!!!-Dijo efusivamente una amazona joven.
--Así es... todo resultó excelente-- Era extraño ver esa expresión en su cara. Su mirada no podía expresar nada más que una aparente seguridad basada en un odio incontenible, un odio que había crecido en tan solo unos días. Y dirigiéndose a la Amazona dijo: Es la última vez que me vuelves a decir "Gabrielle" de acuerdo??? ¡!! --
-- Lo siento reina Mileska-
--Amazonas!!!. Esto termino aquí. Larguémonos de este apestoso lugar- Ordenó la reina de las amazonas: Mileska.
Ephiny miraba a lo lejos lo cambiada que estaba Gabrielle. Se veía tan decidida, tan orgullosa, tan fuerte físicamente, tan llena de ira y resentimiento. Eso le estaba preocupando, porque antes que todo Gabrielle es su amiga y no le estaba agradando nada el cambio que estaba teniendo, pues todo lo hacía con el afán de destruir, de vengarse, de humillar. Se acercó a Gabrielle.
--Gabrielle!!!. Te encuentras bien?-
--¿Porqué la pregunta?-
--Últimamente te he sentido muy..... bueno..... te he sentido como ......-
--¿Cómo Xena?-Preguntó la reina amazona en tono sarcástico.
--Sï. Has cambiado mucho desde que llegaste con nosotras, hasta tu nombre cambiaste. No solo regresaste por tu trono, sino que estás llevando a las Amazonas a un plano en donde no nos veíamos jamás. Estamos siendo reconocidas como un ejército, eso te lo debemos a ti. Pero......-
--¿Pero?-
--No sé si es así como quieres estar. Te agradecemos el cambio que has hecho por nosotras. Talvez este sea tu destino, talvez no. Me preocupo por ti. Eres mi amiga. -
--Lo sé Ephiny. No te preocupes, si este no es mi destino, entonces alguien vendrá y me lo hará saber. Si lo es, entonces seguiremos como hasta ahora-
--¿Puedo hacerte una última pregunta?-
--Dime-
--¿Aun la amas?-
Gabrielle detuvo su caballo de manera brusca, cerró sus ojos por unos segundos.
--¿¿Fui imprudente con mi pregunta Gabrielle??. Si es así no respondas si no quieres-
--Dijiste que eres mi amiga y sé que lo preguntas por esa razón..... la respuesta es: "sí, aun la amo y la extraño como no tienes idea, pero este es un secreto entre tú y yo. ¿Está bien?"- Respondió Gabrielle mirando fijamente a Ephiny.
--Entiendo-
Pronto las Amazonas se retiraban, dirigiéndose a su aldea.
LA PERDIDA DE JUICIO
--Tabernero!!!. Una más!!! -- Se dejaba escuchar una insistente e imperativa voz.
--Xena... ¿¿¿No crees que ya has bebido demasiado???-Preguntó el tabernero
--¡¡¡Limítate a servirme si no quieres ver tu corazón en una bandeja!!!-Exclamó Xena bastante furiosa y ebria.
--Esta bien, esta bien. Solo no te alteres. Aquí esta tu bebida guerrera, disfrútala-Dijo bastante nervioso-
La guerrera recibió su copa y la bebió rápidamente...
--Una más ¡!!-Volvió a ordenar. Las sensaciones que experimentaba eran deprimentes. Todo giraba a su alrededor siendo que días atrás ella giraba en torno a todo. Sabía que había perdido el juicio por completo, sin embargo dentro de ella aun quedaba un sitio de lucidez que le ayudaría a cualquier emergencia. Una mujer miraba a lo lejos a la guerrera, le llamaba mucho la atención su comportamiento que no era nada digno de ella. En seguida llamó al tabernero, y comenzó a hacerle una serie de preguntas.
--¿¿Dices que lleva meses así??-
--Así es, llega al atardecer y se va casi cuando cerramos. Yo le tengo aprecio porque me ha salvado varias veces de unos ladrones. Y Cuando gente mala viene aquí preguntando por ella, yo no digo nada, no está en condiciones. Usted entiende verdad???---Claro que si, pero no temas que yo no le haré daño-
--Le diré algo..... Muchos opinan que esta así desde que viaja sola de nuevo. Ella y su compañera se separaron después de una batalla en Memphis. Nadie sabe que pasó, solo que poco después de eso Xena se perdió en todo esto-
--Una compañera, ¿eh?-La mujer dejó unos denarios en la mesa y salió de la taberna
--Tabernero!!!! Donde estas maldito???.Sírveme una más ¡!!-Gritaba Xena. Y el hombre se apresuró a atenderla
La guerrera pensaba:
--Gabrielle!!!. No he podido encontrarte. ¿Dónde te has metido?. ¿Te escondes de mi? Si tan solo pudiera verte y explicarte que no es verdad, yo no ......no. --Sollozó quedamente. Su alma y corazón estaban destrozados. Sentía que su vida se le estaba yendo en unas copas, que su cuerpo no tenía fuerza ya para seguir buscando. En cuanto terminó con la última copa, ya avanzada la noche, tomó a Argo y vagó por el bosque.
--No puedo creer que este tan lejos de ti y que mi vida se esté perdiendo. Puedo ver que yo sin ti, no soy mas que una guerrera perdida en su oscuridad y amor por ti. Te extraño. Te necesito Gabrielle. Si yo pudiera el tiempo rectificar .... No dejaría que dudaras de mi, ni yo de ti. Si no llegas pronto, yo me perderé en mi miseria, por amor, no me dejes en esta oscuridad, déjame tomar tu mano otra vez, dame una oportunidad. Déjame sentir tu piel-- Al cabo de este recital, la guerrera se dejó caer sobre una tierra húmeda y fría. Perdida en las sensaciones del licor, se durmió sin la más mínima precaución.
LA HOSPITALIDAD DE UNA DESCONOCIDAReposando en una cama, con una manta húmeda en su frente y otra seca cubriendo su cuerpo; estaba la guerrera luciendo un hermoso atuendo de pieles. Apenas asomaban los rayos del sol por una obertura de la habitación. Abrió sus ojos tratando de orientarse un poco.
--Has despertado-Una dulce voz se dejó escuchar.
La guerrera interceptó aquella voz. Y a unos metros de ella estaba de pie una mujer alta, rubia, de cuerpo atlético y unos hermosos ojos aceituna que denotaban dulzura. Aunque Xena no lo sabía, esa mujer había estado en la misma taberna la noche anterior, era aquella a la que había llamado su atención.
--¿¿¿Quien eres tu???. ¿¿¿¿Qué hago yo aquí????. Por los Dioses, mi cabeza - Se quejó la guerrera llevándose una mano a su frente.
--Necesitas descansar Xena. Pasaste la noche con una fiebre terrible, eso y la bebida es lo que te provoca el dolor-
--Veo que me conoces--
-- Solo descansa, te traeré algo de comer. Por favor quédate aquí-Dijo la rubia mujer acercándose a Xena ayudándola a recostarse. La guerrera no puso resistencia a tal acción y aunque no muy confiada trató de relajarse.
--Espero no importunarte ......eh....... -
--Danisha, me llamo Danisha-
--Hermoso nombre-Sonrió la guerrera
--¿Sabes Xena?. Te ves mas hermosa cuando sonríes- Danisha comentó con seguridad
--Eso crees??. Es una lástima porque últimamente no sonrío mucho-Respondió en tono frustrante
--Por favor permanece aquí, no tardaré-
--Creo que por el momento no me moveré de aquí. Solo respóndeme una cosa, ¿¿quieres??-
--Dime-
--¿¿Que lugar es este??-
--Esta es mi aldea, Goros. Talvez no hayas escuchado de ella. Recién la fundamos un grupo de jóvenes que llegamos del oeste, después de que un loco guerrero asesinó a los mayores dejándonos a todos huérfanos. Aquí nos establecimos decididos a comenzar de nuevo. Nos mantenemos en forma, tu sabes, no queremos pasar por lo mismo-Aclaró Danisha mostrando su espada.
--Entiendo-
--Dejemos la charla, una suculenta comida te espera-- Dió la media vuelta y salió de ahí.
La guerrera se sintió como en casa. Aquella hermosa joven era tan dulce en su tono de voz y el trato con la gente. Sus hermosos ojos aceituna mostraban un alma sincera y noble, la guerrera no pudo evitar recordar a Gabrielle, pues la mujer que le dio hospitalidad se le parecía en cierta manera. Xena solo se limitó a suspirar y cerró los ojos.
EN TIERRA AMAZONA.....
--¿Porqué quieres que ataque ese lugar?. ¿Qué puedo yo obtener de unos jóvenes inútiles?-Preguntaba la reina de las amazonas: Mileska
--Mira Gabrielle, Quiero decir: Mileska. A esos chicos de Goros, solo les gusta jugar al guerrero. Son insignificantes y no dignos del Dios de la guerra. Enfoquémonos a extender el reinado amazona en ese lugar. En un futuro sería un excelente lugar estratégico y por supuesto un territorio más ganado. Yo sé lo que te digo. ¿¿Acaso me he equivocado en algo??. - Pregunta con voz seductora Ares, el Dios de la guerra.
--Esta bien, debo suponer que saldremos victoriosos-
--Como has cambiado, debo reconocer que me atrae mucho ese fuego que hay en ti, ese anhelo de ser la mejor - Ares toma del rostro a Gabrielle, la mira; la reina de las amazonas capta sus intenciones.
--Hicimos un acuerdo Ares; nada de relaciones personales, solo negocios-
--Bien, bien. Como quieras. Cuando regrese habrás terminado con ese sucio lugar-El Dios de la guerra desaparece
--Ephiny!!! -- Llama la reina de las amazonas
--¿¿Sucede algo??-- Llega apresurada la amazona
--¿Ves este lugar en el mapa?-
--Sí, es Goros, una ciudad recién fundada-
--Así es, les durará poco el gusto-
--Gabrielle, ahí solo hay jóvenes y algunos niños-
--Exacto. Los quiero fuera de ahí. Será territorio amazona-
--Pero, Gabrielle.......-
--Manda un mensaje de mi parte ordenando que tienen tres días para marcharse y quien no obedezca, morirá --Dijo tajante, interrumpiendo a Ephiny
--¿¿Donde está la niña que por primera vez entró a tierra amazona??. Sé que estas muy dolida por lo que sucedió con Xena, pero el odio no es el camino-
Mileska le dió la espalda a la amazona y se limitó a ordenar:
--Has lo que te digo, si no quieres que te encierre......Ahora!!! -
--Como desees, Mileska- La amazona se retiró un poco desconcertada y triste por el radical cambio de la que antes era Gabrielle.
EL MENSAJE
En Goros, una charla se daba con mayor fluidez....
--Delicioso desayuno. Hacía mucho tiempo que no comía así. Cocinar no es asunto mío - Comentó la guerrera terminándose el último bocado.
-- Ella.....¿ Cocinada bien?--
La pregunta paro en secó a la guerrera, y con dificultad tragó el bocado.
--¿A......a quién te refieres?-
--Su nombre es Gabrielle, cierto?-
--¡¡¡¡Gabrielle???? . Dime, la conoces???!!!!. ¿¿¿Qué sabes de ella???- Xena preguntó bastante alterada, sacudiendo de los hombros a Danisha provocando que el plato donde comía cayera haciéndose añicos.
--Tranquilízate Xena. No la conozco, lo único que sé, es que perdiste tu camino después de que ella y tú se separaron. No sé nada de ella, lo siento--
La guerrera trató de tranquilizarse y de nuevo se recostó en cama.
--Vaya!! Creo que todos ya lo saben-Dijo con cierta molestia
--Me sorprende el cambio que has dado. Desde que escuché de ti siempre quise conocerte. No sabes como te admiro y me da mucha pena que estés así -
-- Bueno, supongo que te he decepcionado--
--No, no lo has hecho. Al contrario, me pregunto ahora, que clase de mujer puede amar con tanta intensidad entregándolo todo, echando su vida por la borda por un amor perdido; pero eso no es todo, estamos hablando de una mujer que antes tuvo un pasado terrible, donde solo había sangre y muerte y ahora es tan capaz de amar así de esta manera. ¿No es sorprendente? --
--No, yo no lo veo sorprendente -
--¿Estas arrepentida de amar así?-
-- De lo que estoy arrepentida es que precisamente por el monstruo que fuí, estoy como estoy ahora. La perdí a ella porque pensé con mi ira y no con el corazón -
--¿Quieres contarme?-
--¿En verdad quieres saber?-Preguntó la guerrera suavizando su voz, mirando a los ojos a la bella mujer. Unos segundos pasaron mirándose, "Dioses como me recuerda a ella" . Decía para sí misma la guerrera. Sin darse cuenta ambos rostros se estaban acercando, los labios estaban apunto de hacer contacto.
--Danisha ¡!!. Danisha!!! - Unos gritos se dejaron escuchar a las afueras de la habitación. La joven se separó de Xena con cara de frustración.
--¿Qué sucede?-
--Recibimos este mensaje. Es de la reina Mileska, del imperio amazona-
--¿Imperio?-Pregunta Xena con extrañes.
--Tiene meses que las amazonas dieron un completo giro. Antes se pensaba que solo luchaban para que respetaran sus ideales, pero ahora las cosas han cambiado. Desde que la reina Mileska regresó por su trono, las amazonas arrasan con todo lo que hay a su paso.-
--¿Regresó por su trono?-Pregunta intrigada la guerrera-Yo conocí a las amazonas y nunca oí hablar de ninguna tal Mileska--
--Eso dicen, que después de mucho tiempo reclamó su trono y eso ha beneficiado a las amazonas en gran manera. Lo último que se sabe es que vencieron a un ejército espartano-
--¡¡¡¿¿Ejército espartano???!!!. Déjame ver el mensaje-Xena comienza a leer sorprendida: --"La reina de las Amazonas, Mileska, ordena que todos ustedes abandonen dentro de los próximos tres días la aldea de Goros. Quien ignore este mensaje, será muerto." -
--Por los Dioses.!!!!-Exclama asustado un joven aldeano
--Un momento, algo no anda bien -- Dice la guerrera moviendo la cabeza, incrédula -- Conozco a las Amazonas, esta no es su forma. Hay alguien que las está manipulando a su conveniencia. Iré a ver que sucede --
--¿Xena?. Te sientes mejor?.- Danisha pregunta de manera dulce a la guerrera mientras vestía su armadura.
--Me siento bien, nada que no pueda controlar. Gracias a tus cuidados-
--Fue un placer servir a la princesa guerrera. Por favor cuídate-Esa última frase llenó de ternura a Xena, e inesperadamente vió el rostro de Gabrielle en el de Danisha. Sin poderlo controlar, las dos se acercaron y Danisha le plantó un beso, dejándole los labios húmedos a la guerrera.
Sin decir nada, la guerrera partió en Argo que había sido cuidada y alimentada por los jóvenes.MIRADAS CRUZADAS
Era el atardecer cuando Xena se acercaba sigilosamente a caballo a tierra amazona. Estar ahí era como estar en un verdadero Imperio; los aldeanos tenían razón al llamarle así, pues todo estaba muy cambiado desde la última vez que Xena visitó a las amazonas. La guerrera recordó que le debía una explicación a Ephiny acerca del paradero de Gabrielle, pero el dolor que tenía en su corazón la hizo olvidar aquello. La guerrera percibió unos movimientos a su alrededor, bajó de su caballo e hizo la señal de paz de las amazonas. En eso, Ephiny apareció.
--¿Xena?. Por los Dioses, ¿Eres tú??. Donde te habías metido??-De inmediato unas amazonas se acercaron para hacerle frente a la guerrera, la tomaron desprevenida y le asestaron golpes por todas partes. La guerrera trató de liberarse de aquello sin tener éxito, pues algunas amazonas la golpearon por la espalda.
--Amazonas ¿¿¿que hacen???. Es Xena, nuestra amiga-Gritó Ephiny con desesperación. Una de ellas respondió:
--Nuestra reina Mileska, nos ha dado ordenes secretas-
--"¿Ordenes secretas?" . ¿De que hablas?-
--Mileska nos dijo en tu ausencia que si Xena se aparecía por aquí, la aprehendiéramos y la lleváramos con ella para enjuiciarla como traidora-
--Ah! Ya veo. Gabrielle tiene que ver en todo esto-Pensó Ephiny mientras veía caer desmayada a la guerrera.
--¡Gabrielle..... Tenemos que hablar!! -- Ephiny tomaba ventaja siendo la primera en llegar con la reina amazona.
Cuando la Reina se giraba a ver que sucedía, en ese instante las amazonas dejaban caer al piso el cuerpo de una mujer.
--¿Qué es esto?-Preguntó Mileska
--Te traemos a una traidora de las amazonas, como tu la llamaste-En eso Xena recuperaba la conciencia y levantó la cabeza
Su visión se tornaba borrosa..... el rostro de la reina no era muy claro, entonces se levantó y se frotó los ojos. La reina estaba atónita al mirar quien era la prisionera. Pronto la vista de Xena se perfeccionó.
--¡¡¡Xena!!!!-Dijo entre dientes la reina amazona, sin poder ocultar su asombro
--¡¡¡¡¿¿Ga....Gabrielle??!!!!-Exclamó la guerrera con tal confusión
--Déjenos solas ¡!!! - Ordenó enérgicamente la reina amazona
--Como ordenes Mileska-Dijo una de ellas al salir.
--Mileska??. Gabrielle.....¡¡¿¿Qúe es esto??!! -- Se miraron por unos segundos, ambos cuerpos se contenían para no irse a estrechar uno con el otro. Xena sintió como de pronto su corazón latía con mucha fuerza, los latidos los tenía hasta la cabeza. Su alegría se dejó ver a través de sus ojos, al mirar a la luz de su alma de nuevo parada ahí, frente ella. Gabrielle se mordía los labios tratando de esconder su asombro y su alegría al volver a ver aquella por la que se había convertido en lo que es.
--Esto, mi fracasada guerrera, es mi verdadero yo-
--¿Qué dices?. Debes estar bromeando. ¿Porqué te llaman Mileska?.¿Dónde has estado todo este tiempo?-- Interrogó la guerrera acercándose a la reina
Mileska sacó su espada y apuntó al cuello de Xena.
--Las preguntas las hago yo ¡!!!. Y no te me acerques-
--¿Qué es lo que te pasa?. Sé que Ares te engañó respecto a mi, él es el único que pudo decirte lo que sucedió esa noche-
-- Sí, lo sé todo. Sé el tipo de mujer que eres, que me traicionaste y que a pesar de ello tu exigías lealtad y fidelidad de mi parte sin darme tu lo mismo--
-Tienes que creerme. Ares te engañó, las cosas no fueron como piensas. Sabes que yo te amo -
--Sí claro, me amas tanto que caíste en las redes con tu adorable Dios de la guerra. Dejaste que me fuera y que sufriera sintiéndome culpable por todo, esperando a que un día llegaras por mi-
--Yo he sufrido lo mismo que tú Gabrielle. He estado buscándote todo este tiempo. Dijiste en el pergamino que habías encontrado a alguien más. Sé que eso no es verdad, solo lo dijiste porque estás dolida-
--Dolida... yo??. Debes estar bromeando-
--Yo sé que me amas Gabrielle y yo te necesito tanto que ..... -
--Tú siempre tan segura de ti, no?. Ahora te equivocas al decir que yo te amo porque no es verdad -
--No, tú me amas, lo sé. Pude sentirlo cuando me miraste otra vez después de tanto tiempo, tus ojos te delataron-
--Cállate ¡!! Deja de decir tonterías. Por ahora solo quiero que me digas que Diablos haces aquí -
-- Cuando tu mensaje llegó a Goros yo estaba ahí y me preocupó la tiranía que mostraba esa reina Mileska--
--Y por supuesto veniste a proponer un trato, ¿No?. Pensaste que podrías evitar un ataque porque las amazonas son tus amigas, ¿cierto?. Pues esta vez no sucederá así, porque no pretendo hacer ningún trato contigo -
--Gabrielle ¡!! . El lugar que pretendes atacar esta habitado de solo jóvenes y niños que quedaron huérfanos. ¿Pretendes quitarles su hogar solo por tener una tierra más?. Por favor reflexiona, así no eres tú -
--¿¿¿Tú que sabes acerca de cómo soy??? - Pregunta exaltada
--Porque sé de quien estoy enamorada. Porqué te conozco y porque sé que alguien te hizo esto -
--Así es... fuiste tú -
--No puedes culparme a mi de este cambio tan radical que has tenido, de lo que te has convertido-
--¡¡ Y tú no puedes culparme de que Minius se halla aprovechado de mi ¡!! -- Gritó la reina de las amazonas
--Perdóname Gabrielle, yo no quise culparte de eso. Es solo que me sentía frustrada, avergonzada por no saber exactamente lo que pasaría. Sentí que te fallé una vez más y de la misma manera. Solo disfracé mi vergüenza con celos estúpidos -
--Y lo hiciste muy bien, Creemelo -
Ambas se miraban fijamente, Xena tenía los ojos húmedos, clamaba un contacto de Gabrielle, los labios le temblaban luchando por evitar las lágrimas. Sin embargo Gabrielle, mostraba una mirada más dura, su enojo y resentimiento eran visibles.
--Bien, no tiene caso hablar del pasado, lo que importa es el presente - Dijo Gabrielle
--¿Este es el presente que quieres?.- La guerrera preguntó con voz temblorosa
--Yo lo he elegido y no puedes hacer nada para cambiarme. Ya no te amo y punto. Quiero Goros y lo tomaré..... ¡¡¡Se acabó!!! -
--¿Es tu última palabra?-
--Así es -- Respondió tajante -- Te dejaré libre porque no quiero volver a verte nunca más. En tres días atacaré si no se marchan de Goros -- Añadió la reina de las amazonas al mismo tiempo que abandonaba aquella habitación
--Gabrielle, Gabrielle ..... Gab...-- La guerrera dejó de insistir
La reina de las amazonas se dirigió a su habitación personal. En cuanto se encerró, corrió hacia su cama hecha un mar de lágrimas.
--¡¡ Te odio Xena, te odio por haber traicionado mi amor. Te odio por encontrarme y te odio por saber que aún te amo ¡!! -
Pasaron unos minutos cuando tocaron a su puerta .
-- ¿Gabrielle?. Estas bien? - Tocaba Ephiny con insistencia. Gabrielle se levantó y le abrió la puerta
-- ¿Qué ocurrió?. Acabo de ver a Xena, está deshecha por tu comportamiento, claro, es comprensible. Gabrielle, ella te ama, deberías creerle, ella no te engañó, yo estoy segura de eso. Mírate Gabrielle, estas sufriendo--
-- No me hables más de eso. No quiero saber de nada. Si la dejé en libertad es porque no quiero volver a verla nunca más ---- Pero sabes que volverá --
--Si lo hace....... entonces la mataré. Creeme Ephiny, lo haré -- Ephiny se quedó atónita a tal declaración
EL ARRIBO A GOROSLos días transcurrieron y el plazo se venció. El ejército amazona se alistaba en una mañana bastante fría, todas estaban listas para recibir órdenes de su reina quién ya tenía todo planeado.
--Pagarán con la muerte de su líder, por haber desobedecido. ¿Cómo dijiste que se llama? - Preguntó la Reina a una amazona
--Danisha, es una mujer rubia, alta y de cuerpo atlético - respondió
--Sí, esa, ridículo nombre. ¡¡¡En marcha ¡!! -
Todos en Goros estaban nerviosos, pero aún así decidieron quedarse a pelear por la tierra que es suya. Los niños fueron llevados a un lugar secreto para su protección. Aunque Xena no conocía del todo bien las estrategias de Gabrielle, estaba preparada. La ventaja que tenía sobre ella, era que seguramente Gabrielle haría lo que Xena, después de todo fue de ella de quién aprendió.
-- Xena, no tienes que hacer esto. Si tu me lo pides, haré que mi gente se marche de aquí. Lo haría por ti. No quiero que te enfrentes a ella, tu la amas-Dijo Danisha
-- El hecho de que la ame no significa que le permita hacer esto. Dentro de ella sabe que lo que hace está mal, pero creo que se ha contagiado de la enfermedad que yo tuve hace muchos años. No puedo permitir que siga dañando a la gente - Dijo la guerrera con cierta tristeza
-- No puedo creer que Mileska y Gabrielle sean la misma persona; ¿Como pudo cambiar así? --
-- Es mi culpa, yo provoqué todo esto --
-- No tienes que culparte de todo. Recuerda que un alma llena de culpas es un alma infeliz ---- Yo comencé a ser infeliz cuando la perdí --
-- Y ¿Porqué no intentas recuperarla? --
--Porque creo que la mujer de la que estoy enamorada , ya no existe más -- Declaró la guerrera con voz quebrada, casi a punto de llorar, pero como siempre evitó las lágrimas
-- Si yo fuera Gabrielle....... --
--Si fueras Gabrielle, ¿qué? -
--Te creería y regresaría contigo --
--¿Sabes que me la recuerdas mucho?. Esos ojos aceituna, esa mirada dulce....... --
-- Y.... ¿ Acaso tu sabes que yo moriría por ocupar tu corazón como lo hace ella? - Dijo Danisha con ternura, mirando a los ojos a la guerrera. Su mirada lo decía todo.
De nuevo, sin poder controlarlo, el rostro de Gabrielle apareció en el de Danisha. La guerrera se perdió a tal imagen, tomó a la joven del rostro y la besó en los labios apasionadamente, su lengua se abría paso a los labios húmedos de la bella rubia. Para la guerrera era completamente excitante sentir la lengua de la joven tocando la suya, su respiración comenzó a agitarse y sus manos trataban de perderse debajo de las ropas de Danisha. Xena trató de engañarse a si misma pero su corazón sabía exactamente que aquello era un error, Danisha también lo sabía pero aún así se perdió en los brazos de "su guerrera" .
De pronto, Xena se detuvo.
--Lo siento Danisha. Fue un error -
--No sabes como rezo a los Dioses para que este tipo de "errores" ocurran a menudo - Comentó en tono triste -- A pesar de saber cuanto la amas, tengo en mí la esperanza de que tenga mi oportunidad, sin embargo, también deseo que seas feliz sin importar el modo --
--Eres una gran chica -- Dijo la guerrera dándole un tierno beso en la frente. En ese momento un joven aldeano entró precipitadamente a la habitación.
--Xena ¡!! Xena ¡!!. Las amazonas se acercan ¡!! - Gritó alterado
--Bien, hagan como les dije. Llegará solo un número reducido de amazonas -
-- ¿Estas segura de que tu amiga Ephiny nos ayudará ? -- Interrogó Danisha
-- Cuento con ello. Si todo funciona como lo planee entonces solo quedaremos Gabrielle y yo, cara a cara --
-- Por favor Xena, no cometas un error. Escucha a tu corazón --
--Lo haré -- Ambas se miraron con ternura --Andando ¡!!! -Exclamó la guerrera
Mientras, las amazonas se acercaban rápidamente a Goros.
--Ephiny ¡!! Lleva a las chicas a cazar jovencitos desobedientes. Ustedes cuatro vengan conmigo -- Ordenó Mileska a un reducido grupo de amazonas.
Ephiny estaba a la cabeza de casi todo el ejército amazona. Le habían ordenado cercar el lugar por ambos lados, sin dejar salir a nadie, mientras la reina con la ayuda de unas cuantas amazonas, buscarían a Danisha para darle muerte.
Ephiny dirigió a las amazonas hacia una choza subterránea secreta, secreta porque solo ella y Xena sabían donde la habían construido los habitantes de Goros.
--Amazonas deténganse ¡!! --Ordenó
Cuando todo el grupo se detuvo, Ephiny se paró junto a un árbol del cual colgaba una cuerda bastante gruesa, se enredó en ella como si quisiera jalar el árbol y dijo:
--Recuerden amazonas que si es necesario romper las reglas por un amor o por una amiga, hay que hacerlo-Al decir esto, tiró de la cuerda con todas sus fuerzas y todo el grupo, excepto ella, fue a dar hasta el fondo de la choza, quedando atrapadas. Ephiny volvió a tirar de la cuerda y el piso se cerró de nuevo.
Xena esperaba impaciente en la entrada principal de la aldea, estaba ella sola. Pronto vió como se acercaban unos jinetes, suspiró con alivio al darse cuenta que solo eran 5, tal y como lo había planeado.
--Te estaba esperando Gabrielle -- Dijo con seguridad pero sin intenciones de pelear
--Donde está Ephiny??? -- Preguntó la reina muy desconcertada. Las cuatro amazonas se miraron entre sí.
--Me está haciendo un favor-Respondió la guerrera
--Debí saber que esa maldita me traicionaría. ¡¡¡¡Amazonas ataquen ¡!!!!!-gritó con furia
Las amazonas estaban decididas a cumplir la orden de la reina, pero se detuvieron en seco, al percatarse que detrás de Xena salían un gran número de aldeanos, todos armados, les tocarían de 10 a cada amazona, una situación imposible.
--Esta batalla ya no les concierne amazonas. Esto es entre Gabrielle y yo -- declaró la guerrera
--No intervengan.......la princesa guerrera quiere pelear conmigo y le daré gusto --
Los aldeanos y amazonas se hicieron a un lado.
--Gabrielle, no estoy armada puedes verlo. No quiero pelear, quiero hablar-
--No tengo nada que hablar contigo Xena ¡!!! Saca tu maldita espada y acabemos con esto-
--Ya te dije que no voy a pelear contigo--
Gabrielle hizo caso omiso, bajó de su caballo, sacó su espada y se fue sobre la guerrera. Esta esquivó varias veces el acero, primero del lado derecho, luego del izquierdo, se agachó pasándole el filo casi por los cabellos. Gabrielle emitió una sonrisa de maldad como nunca antes la guerrera había visto.
--Creo que te has vuelto lenta Xena -- Dijo Gabrielle al ver que del hombro derecho de la guerrera emanaba un poco de sangre.
--Y parece que tu aprendiste algo, pero no es suficiente, aún --
--¿Estas retándome???-Preguntó la reina bastante enfadada
--No, estoy afirmando --
Gabrielle lanzó un cuchillo que sacó rápidamente de entre sus ropas, para la guerrera fue fácil detenerlo. La reina tiró una patada al estómago de Xena , asestando con tal brutalidad que la guerrera se dobló del dolor.
--Lo que tu quieres es una pelea conmigo Gabrielle y no te la voy a dar -- Dijo sin mover un dedo para defenderse
--Cállate!!!!! -
Dió un puñetazo en pleno rostro de la guerrera, uno más debajo de un ojo de donde al poco rato brotó sangre. Dió media vuelta y plantó su bota nuevamente en la cara de la guerrera provocando que se fuera de bruces. Estando en el suelo la golpeó varias veces en la cabeza con la parte trasera de su espada. Le tiró varias patadas en las costillas y en el rostro. Xena sangraba ya en abundancia. Los aldeanos miraban con pavor la escena, temían que si Xena era derribada la reina no tendría piedad de ellos.
--Te odio Xena ¡!! Por los Dioses que te odio ¡!!! --
Xena no sabía que era lo que más la estaba lastimando, si los golpes de Gabrielle o sus palabras.
--Nooooo. Déjala ¡!!!! --
Se escuchó una voz desesperada. Danisha salía corriendo detrás de unos árboles.
--Mira a quien tenemos aquí -- Comentó Gabrielle con maldad
--Danisha...... te dije que te quedarás en el escondite. No puedes estar aquí - Dijo la guerrera intentando levantarse
--Por favor Gabrielle, ya no le hagas daño. Xena te ama, ella no te engañó --
--Quién diablos eres tu para meterte en esto?????...... Ah! Ya entiendo ahora ella es tu nueva Gabrielle, no es así Xena????-
--Danisha, vete por favor -
--No, no Xena...... las cosas se deben arreglar de otro modo, mira nada más como te golpeó...... -
La reina amazona mira con coraje y celos como Danisha cuida de Xena, como se le acerca y se preocupa por las heridas de su rostro. Cegada por los celos y aprovechando que las dos discuten, sacó su arco rápidamente y apuntando hacia Danisha tiró a matar.
--Cuidado ¡!!-Se oyeron varias voces
Xena abrazó a Danisha y la giró rápidamente. Las dos se dejaron caer de rodillas, la mirada de Xena denotaba dolor y se dejó caer hacia delante. Fue ahí cuando todos pudieron ver, que la flecha se había incrustado en su espalda.
--Xena.....Xena..... respóndeme...... -- Pedía Danisha con lágrimas en los ojos
Gabrielle sacudió la cabeza, tiró su arco y se quedó atónita. No podía asimilar lo que sucedía. Su mente estaba aturdida y confusa. Se quedó unos instantes parada, completamente ida. Los aldeanos enardecidos fueron sobre ella y las otras amazonas. Rápidamente subieron a sus caballos y huyeron.
AFRODITA
Lejos de ahí.........
--Es una pena que esto haya pasado-- Dijo Ares en tono burlón. Se encontraba junto a la más hermosa de todas las Diosas: Afrodita.
-¿Cómo puedes tener ese corazón tan duro? -
-Soy el Dios de la guerra hermanita ¿Que esperabas?-
-Yo no creo que un amor así se haya destruido tan fácil, así que no cantes victoria-
-Te ruego que no metas tus narices en esto. Deja las cosas como están y no trates de reparar nada. Me he encargado de que ambas pierdan la confianza y que sean presas de sueños de hechos que no tuvieron lugar. Si no tuve a una, tendré a la otra. Te veo luego-- En un resplandor azulado y blancuzco el Dios de la guerra desapareció.
-Mmmmm, ¿Qué habrá querido decir con "hechos que no tuvieron lugar"?. Presiento que nada es como parece. Veamos....... - Afrodita comenzó a reproducir en un espejo, la noche en que Gabrielle y Minius estaban solos, prestó atención a cada detalle.
--Auh! Lástima que a ese hombre le hayan quitado lo mejor, que desagradable-Dijo la Diosa presenciando el momento en que Xena enterró su daga en el miembro de Minius.
--Mmmmm, creo que me perdí de algo-Comentó tratando de salir de sus pensamientos lujuriosos, y como si se tratase de una cinta regresó al comienzo de todo, esta vez prestando mayor atención.
La Diosa miró con atención justo en el momento cuando Minius estaba a punto de poseer a Gabrielle, fue ahí cuando llegó un guerrero y lo evitó. Poco después llegó Xena y peleó con Minius. Entonces la conclusión es ...........
--Ah.... Yes!!! Lo tengo!!. Sabía que todo era un engaño. Lo siento Ares, pero creo que les debo algo a esas dos mortales llenas de amor -- Se dijo la Diosa para sí retirándose del lugar
Mientras en Goros, Danisha ya había retirado la flecha de la espalda de la guerrera pero esta seguía sangrando abundantemente.
--Xena, creo que la flecha afectó órganos internos.....No sé que hacer para que deje de sangrar-
--Quiero, que te cuides mucho Danisha, tienes mucho potencial y eres una gran chica. Siempre te recordaré y me hubiera gustado enamorarme de ti; habría sido hermoso - Balbuceó la guerrera cerrando los ojos lentamente
--Xena!!! Xena no por favor. No te dejes vencer.....Por los Dioses ......-
La guerrera sintió que su alma se desprendía de su cuerpo, iba perdiendo las fuerzas gradualmente.... Pero de pronto todo cambió, pues tuvo una sensación extraña. Abrió los ojos y estaba sobre una hermosa cama cubierta de seda rosada. Alrededor muchas flores y estatuas de una Diosa muy particular.....
--Bienvenida Xena --
--Afrodita..... ¿Qué hago yo aquí?. Debería estar rumbo a .....a tártaro, supongo - Dijo insegura
--No, no estas muerta pero lo estarás si no te libras de tus culpas y si no recuperas el amor --
--No entiendo-
--Sí, a Gabrielle. Si quieres seguir viviendo debes recuperar el amor, debes dejar de sentirte culpable por lo que pasó. La herida de esa flecha fue mortal, tu única salvación es que creas en Gabrielle y que ella crea en ti --
--Ella no me escucha y no creo que lo haga. Además tu sabes que fue culpa mía todo lo que sucedió, de principio a fin --
--Ahí esta tu error, debes librarte de todo eso!!!. Debes confiar en el poder de tu amor y sacar de ella el poder del suyo. Te mostraré algo-Afrodita señaló hacia un cristal y en el plasmó el momento de aquella noche con Minius
--Afrodita porque haces eso????-Exclama la guerrera enfadada mirando hacia otro lugar
--No dejes de mirar Xena. Debes creer.......debes creer.....-
La guerrera sin saber porque, levantó la mirada y observó la escena.
-- Donde está el momento donde Minius hizo.... es que, como fue??? -
--La verdad es que nunca sucedió Xena. Ese hombre tuvo varias interrupciones y no pudo consumar el acto. No pasó nada -
-- Todo este tiempo culpé y me sentí culpable por algo que nunca pasó. Y lo peor de todo que toda la transformación de Gabrielle se debe a .....simplemente a nada ¡!!! -- La guerrera se quedó sorprendida......
--Solo se te concede una oportunidad para arreglar todo. Tienes que devolverle la confianza a Gabrielle y convencerla de que nada pasó con Minius y que nada tuviste que ver con Ares. Esta vez sin armas y sin nadie que intervenga. Si lo haces, todo lo que sucedió estos últimos meses será borrado de sus mentes, excepto de la tuya. Y todo volverá a la normalidad, como si nunca hubiera pasado-
--¿¿¿¿Te refieres a que Gabrielle jamás habría sido una guerrera deseosa de poder???. Y ....Danisha, no me recordará???-
--Todo será borrado, todo. Desde este momento despídete de todo lo que conociste en estos últimos meses.... -
--Gracias Afrodita-Dijo la guerrera al cerrar sus ojos.
--Soy la Diosa del amor...... no? -
Xena se sintió renovada, tomó un respiro y abrió sus ojos. Danisha todavía la tenía en sus brazos.
--Xena ¡!!!. Regresaste ¡!! -
--Creíste que era fácil deshacerse de mi no?--
--Tu herida ya no sangra, pero, ¿Cómo es posible??? - Interrogó con lágrimas de emoción
--Tengo que encontrar a Gabrielle--
--En cuanto miró que caíste huyó, los chicos estaban furiosos y fueron tras ella -
--Danisha, escucha...... quiero darte las gracias por todas sus atenciones y por ser la mujer que eres. Nunca te olvidaré-
--Significa que es la despedida ¿???-
La guerrera se quedó callada por unos instantes y al fin respondió:
--Lo es, pero lo olvidarás muy pronto-
--¿Qué quieres decir con eso???-
--Yo me entiendo. Tengo que irme, no tengo mucho tiempo-
--Esta bien - Dijo Danisha en tono resignante-Lucha por tu amor Xena-- Añadió
Xena se acercó a la joven y le dió un tierno beso en la boca
--Cuídate Xena-la joven musitó
EL PODER DEL AMOR
Gabrielle estaba sentada en una roca, a la orilla de un lago. Se miraba en el reflejo del agua tratando de saber quien era en realidad. Se deshizo de la armadura que llevaba puesta y del atuendo de reina amazona. Todo lo arrojó al agua. Su cuerpo quedó envuelto con su habitual top verde y su faldilla.. Miró sus manos y en su mente se reflejaron todas aquellas imágenes de todo lo malo que había hecho, pero sobre todo, el pensamiento donde Xena había sido muerta por ella . Saliendo del shock rompió en llanto.
--No llores más Gabrielle. Eso no remedia nada -
La rubia se giró y quedó sorprendida al ver a Xena parada frente a ella
--Pero...... si tu estas muerta ¡!!!!!. Yo te maté ¡!!! Te vi caer herida mortalmente ¡!!!-
--El amor me salvó Gabrielle. Sé que le podemos dar fin a toda esta agonía del corazón. Tu y yo podemos rectificar nuestros errores, comenzar de nuevo ----Comenzar de nuevo yo???. Pero como??? Tu no has podido hacerlo, ahora yo soy igual que tú. -
--Gabrielle, tu y yo nos pertenecemos y para siempre estaremos juntas --
--Aún después de todo lo que te hice???-
--Gabrielle, eso es cosa del pasado, si nos equivocamos fue porque somos seres humanos y cometemos errores, lo hacemos a diario. Pero si en verdad amamos a una persona entonces la perdonaremos las veces que sea necesario, al final tendremos lo que queremos. No importa los errores que tu cometas, yo te amo y sé que me amas, así que perdonaré cuantas veces sea necesario-
--Pero ya no es igual, después de todo lo que pasó, jamás volverá a ser igual. Desde que Minius hizo...-
--Eso ya no importa Gabrielle.......¿Te importa a ti?-
--No lo sé --
--Respecto a Ares, te juro por la memoria de mi hermano Liceus que nunca pasó nada. Él te engañó, nada pasó en verdad, reaccioné a tiempo..... al igual que tu --
--¿Qué quieres decir?? -
--Porqué Minius nunca hizo, bueno jamás fuiste suya......Debes creerme -
--¿Cómo lo sabes? -
--Solo lo sé. Por favor creeme, por amor creeme ¡!!!!-
--La desaliñada rubia trataba de abrirle paso a todas las palabras de la guerrera. Quería entenderla, quería creerle, trataba de buscar dentro de su corazón, pero era difícil después de todo lo sucedido.
--Gabrielle........¿¿¿Aun me amas, verdad???-L a guerrera preguntó ansiosa por una respuesta. Sus ojos brillaban por las lágrimas y todo su cuerpo estaba estremecido.
Gabrielle levantó la vista hacia Xena, la comisura de sus labios comenzó a temblar, ambas estaban al borde de las lágrimas. El destello azul de los ojos de Xena se fundía con el hermoso destello aceituna de los ojos de Gabrielle, era como si sus miradas volvieran a fusionarse. Todo se quedó en silencio mientras permanecían de ese modo.
Los labios de Gabrielle por fin se abrieron.....
--Te eché mucho de menos Xena ¡!!!-le dijo efusivamente mientras se abalanzaba a sus brazos
--Yo también te eché mucho de menos, imagino lo que has sufrido todo este tiempo pero te lo recompensaré -
--Lo sé .... --Gabrielle permanecía con la cabeza recargada en el pecho de Xena
Levantó la cabeza y dijo sonriendo:
--La respuesta a tu pregunta es: claro que te amo, jamás dejé de hacerlo --
Y terminó de decir esto con un beso apasionado, un beso deseoso de amor. Justo cuando sus labios se unieron, un destello a su alrededor se dejaba ver y tuvieron una sensación de alivio.
--Xena.... -- Dijo Gabrielle un poco desconcertada
--¿Si?-
--¿¿Porqué me duele tanto la cabeza??- preguntó con su tono tierno muy particular, ya nó con el tono frívolo y directo que había adquirido durante su posición de reina amazona.
--¿Te duele la cabeza?-
--Si, en serio-Dijo tiernamente mientras se llevaba las manos a la frente
--Dime Gabrielle..... responde esto.....¿Qué hiciste ayer? --
--¿De que se trata?. ¿Acaso crees que me pegué en la cabeza y perdí la memoria o algo así?-
--Solo respóndeme --
--Ehm....Bueno..... ayer...... ayer..... Es curioso....creo que no lo recuerdo.... ¿Xena? ¿Porqué no lo recuerdo?-Pregunta aun más inquieta
--Talvez porque.........Te golpeaste la cabeza???-Dijo sarcástica la guerrera
Las dos se miraron divertidas y dieron tremenda carcajada
--Has vuelto Gabrielle ¡!!!!! - exclamó efusivamente la guerrera
--En serio?? Se supone que fui a algún sitio???-
--Te amo!!!! Te amo tanto ¡!!!! -- Gritó, mientras la colmaba de besos
--Xena... ¿Sucede algo?--
--Sí....... Sucede que soy la mujer más feliz del mundo por tenerte a mi lado-
--Cualquiera lo estaría por tener a alguien como yo. ¿No es cierto?--
--No seas engreída--
--Estaba bromeando-Dijo emitiendo una sonrisa y abrazando por el cuello a su guerrera -- Te amo Xena!!!!
--Y yo a ti Gabrielle, jamás lo dudes pase lo que pase -
--Descuida, no voy a hacerlo. Te lo prometo -
La guerrera trató de adaptarse pronto, es decir, comportarse como si nada hubiera pasado. Reconocía que era difícil no hablar de todo eso, nada de Goros, nada de la feroz amazona en la que se convirtió Gabrielle, nada de la mujer que le brindó su amor incondicionalmente: Danisha. Lo que en ese momento le importaba a la guerrera era ver feliz a Gabrielle, así que decidió hacerlo desde aquel instante.....La tomó del rostro, la miró con ternura y la beso como si tuviera siglos de no hacerlo, humedeció sus labios, los mordisqueaba, pasaba su lengua sobre ellos, disfrutaba del exquisito sabor a miel de la boca de su hermosa Gabrielle.
Ambas emprendieron de nuevo su camino, tan juntas como siempre tan unidas como nunca ...
FIN
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