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UN MAL ENTENDIDO
Por José Miguel
Xena se encontraba cepillando a su caballo cuando miro hacia donde estaba Gabrielle ,allí no pudo evitar ver como Gabrielle se besaba con Perdicas. Esto la enfureció, aunque realmente le dolió mas la situación que de Gabrielle hacia Perdicas que la de èl sobre ella, por ello salió huyendo como una autentica cobarde.
Gabrielle se percato de hecho y rápidamente fue detrás de ella, en su busca para explicarle que tan solo era un maldito error.
- Xena yo......
- No tienes nada que decirme , me alegro por vosotros.
- Pero es que veras est todo.....
- Mira Gabrielle, si tu eres feliz ,yo lo soy.- Y se marcho sin darle la oportunidad de que Gabrielle le dijera nada dejando le, con la palabra en la boca.
- Fue una equivocación.....Xena te quiero a ti.- Pero para cuando lo dijo Xena ya estaba lejos.
Xena se fue a la taberna y después comprar un poco de cicuta se dirigió al río, allí decido escribir una carta entre sollozos:
"Cuando te hallo tan solo puedo encontrar ternura en esos bellos ojos, cuando la noche es fría deseo estar entre tus brazos. Cuando siento miedo, me siento tranquila al verte de nuevo. Me despierto y río y es porque te tengo tan cerca, porque te siento y me alegro de que todo no sea un estúpido sueño. Pero sin duda no lo es porque tu estas ahí, ojalá todo mi mundo fuera tan bonito ,pero sin duda no lo es porque cada día tengo que matar y matar. Antes hasta me gustaba disfrutar con cada gota de sangre que derramaba con mi espada, pero desde que te conocí todo eso ha cambiado ya no es lo mismo, me duele matar me duele, no tanto por mi si no por ti, porque se que cada gota que yo derramo con esta sed de sangre la derramas tu ,la derramo yo de tu cuerpo, y aunque deseo no hacerlo de momento no soy paz de encontrar la fuerza suficiente como para decir no. Se que contigo ,que con tu amor todo seria mas fácil ,sabia que lo sería, pero sin duda creo que esto todavía me supera mas ,no puedo pelear pero lo hago porque no puedo permitirme verter sufrir hacer te daño una y otra vez dejarte hundida y hundirte a ti en mi pozo ,porque cada gota que derramas es una muerte mas un puñal que yo inconscientemente clavo en mi pecho .
Nunca me enamore, nunca supe lo que realmente era amar a alguien con el corazón, sentir que la necesitas cada día, que es lo que te da el aire la energía que tu necesitas para seguir viviendo en este momento cada día es mas infernal donde los guerreros sin duda son los que dominan el mundo. Tantas veces dije de huir de escapar de esta lucha que cada maldito ida mantengo conmigo mismo, me digo que no puedo amarte que es todo una ilusión de mi mente una cosa imposible entre las dos que nunca podrá ser porque no te puedo pedir mas amor que el de una hermana o el de una amiga ,porque sin duda aunque por una remota idea tu me pudieras amar igual que yo te amo ,no puedo permitirme hacerte mas daño, así que esta es mi ultima decisión mi ultima decisión en la vida de los vivos, porque se que sin ti teniendo te lejos seria mi peor castigo, por lo menso con mi muerte sabré descansar al fin de la agonía de amar y no ser correspondido, sin duda si lees esta carta será que al final encontré el suficiente valor como para morir, o que fui lo suficientemente cobarde para no soportar ni un minuto mas tu lejanía ,el no tenerte cerca cada día cada noche y el no poderte besar tus labios como tantas veces desearía. Sin mas me despido de ti porque tu mi vida mis lasa cuando estaba herida te quiero como jamas llegue amar, por eso un adiós me da la muerte y un beso me dará la vida
Te quiere Xena."
Antes esto Xena tomo un poco de cicuta, un suave trago que la llevaría al mas allá, a otra vida a otra vida sin duda mas solitaria y sin amor. Mientras Xena tomaba esto se acerco Gabrielle quien por mas que lo intento no fue capaz de llegar a tiempo, sin duda no pudo evitar que eso ocurriera ,le quiera explicar lo que había pasado pero era demasiado tarde, Xena se encontraba tendida en el suelo con el frasco en la mano y con un pergamino recién escrito aun sin secar en su pecho. Gabrielle no lo dudo mas y cogió el pergamino y comenzó a leerlo ,mientras lo leía no pida evitar soltar unas enromes lagrimas de dolor ,no eran su ojos sin duda los que lloraban si no mas bien era su corazón quien se expresaba. Una vez termino de leer, pidió la ayuda de los dioses.
- Dioses ayúdadme.
De repente un rayo cayo cerca de un árbol que se encontraba muy próximo a las dos mujeres y sin dudarlo mas Gabrielle beso muy suavemente los labios de la mujer que estaba ahora entre sus brazos y que deseaba que realmente regresara quería decirla que la amaba y así lo hizo lo hizo my sutilmente a su oído:
- Te amo Xena regresa conmigo por favor, no me dejes ahora sola, te necesito mas que nunca que este conmigo. ¿ Me oyes? Ahora no me puedes dejar.
Después de eso Xena comenzó a despertar de un largo letargo, se encontraba entumecida y tan solo pudo ver los ojos inmensos y verdes de Gabrielle. Xena apenas podia hablar y tan solo pudo decir.
- Te amo Gabrielle y se que he muerto porque estoy en el cielo.
- Xena no has muerto, porque yo estoy viva y estoy contigo porque te amo, y nunca dejare que me vuelvas a dejar ¿ Me oyes porque te quiero?
Xena intento hablar y Gabrielle sabia que estaba demasiado débil como para hacerlo ,así que simpelmt se le dio un dulce y cálido beso en los labios.
Fin
